ALEJANDRO CUBILLA, compuso una polka en homenaje a su madre, doña Buenaventura, con quien siempre mantuvo una relación muy estrecha. Según cuenta el maestro, "Ña Buena", como la llamaban todos en el Barrio de la Chacarita, fue una mujer extraordinaria que transmitió a sus hijos la buena educación y les enseñó a realizar todas las tareas de la casa, para que siempre hicieran un buen papel en la sociedad. Ella fue quien lo acompañó en todas las etapas de la vida, apoyándolo en sus luchas sociales y en la carrera musical.
AIMESEMA NENDIVE CHE SY
(Dedicado a mi querida Madre, Doña Buenaventura Cano de Cubilla)