ITAPÚA: ENTRE EL PRIMER MUNDO Y LA EXTREMA POBREZA
JUAN AUGUSTO ROA
El nuevo escenario político que se plantea en nuestro país, con la emergencia de un Gobierno de signo distinto al que tuvimos por más de 60 años, es una excelente oportunidad para la ciudadanía de ensayar un nuevo tipo de relacionamiento con el poder; despojada de la inercia causada ponla sucesión de actores políticos apegados a un sistema viciado de clientelismo, prebendario y corruptor. Viejas e irresueltas demandas sociales, postergadas por décadas, esperan una mirada diferente de quienes dirigirán los destinos de la nación por los próximos cinco años.
El departamento de Itapúa es un buen laboratorio donde ensayar políticas para superar las marcadas diferencias socio-económicas, fenómeno que se extiende a toda la geografía nacional, pero que aquí se observa con especial intensidad, pues coexisten en un mismo y reducido espacio geográfico, modelos de vida extremos: desde quienes viven en un nivel de Primer Mundo, y quienes sobreviven en condiciones de extrema pobreza.
Este modelo es causa de fenómenos notables del presente modelo económico: desplazamiento humano forzoso, migración intensa, aumento de los cordones de pobreza alrededor de los centro urbanos, con una serie de efectos "colaterales" como el de la niñez abandonada, la trata de personas, la prostitución, entre otros males.
En Itapúa se pueden encontrar municipios con los más altos índice de ingresos per cápita, que contrastan brutalmente con distritos pobres y abandonados, donde ni siquiera disponen de un puesto de salud mínimamente equipado para responder a las necesidades, o caminos transitables en todo tiempo. Por caso, el distrito de Alto Verá, uno de los más extensos del departamento con más de 1.100 kilómetros cuadrados, donde se concentra la mayor población indígena del departamento, es uno de los más pobres de la zona.
Esto se repite en municipios donde conviven sectores que se debaten en la extrema pobreza, con eficientes unidades productivas que exportan al mercado mundial.
EL CASO YACYRETÁ Y ENCARNACIÓN
La problemática regional exige un análisis por separado de los distintos factores que hacen a la realidad del departamento. En Encarnación el tema Yacyretá es ejemplo de problemas sociales provocados por la falta de políticas claras y patrióticas de los gobernantes, y cuyos efectos siguen sin resolverse.
Con una población cercana a los 100.000 habitantes, Encarnación es la ciudad donde se registra el mayor desplazamiento humano de que se tiene conocimiento como consecuencia de la construcción de la hidroeléctrica de Yacyretá.
Este emprendimiento, surgido para satisfacer las necesidades energéticas argentinas y responder a expectativas de lucro de poderosas empresas constructoras y el capital financiero internacional, provoca una serie de consecuencias sociales, económicas y hasta culturales e históricas que están lejos de ser resueltas.
Un ejemplo concreto es el caso de la industria cerámica y olera artesanal, donde miles de trabajadores y pequeños empresarios fueron afectados en su fuente de sustento económico, y para quienes no se conocen planes de reinserción económica.
La historia y la identidad de la ciudad sufren un impacto irreversible con la desaparición de prácticamente todo su patrimonio histórico urbanístico bajo toneladas de tierra y arena en lo que será el nuevo perfil de la ciudad sobre el río. El desarraigo que ocasiona el desplazamiento urbano posiblemente no tenga solución, pero tampoco se observan esfuerzos por minimizarlo en las personas afectadas.
El emprendimiento hidroeléctrico binacional no sólo es leonino en perjuicio de los intereses nacionales, sino que está reputado como fuente de corrupción en todos los ni veles. Es de público conocimiento que se convirtió en una poderosa usina de recursos económicos para alimentar el clientelismo político y el prebendarismo. Un desafío del nuevo Gobierno es impulsar una investigación profunda y vigorosa.
El comercio informal de frontera, modalidad que nace con las denominadas "paseras", constituye una actividad económica que está estrechamente ligada a la historia de las vecinas ciudades de Encarnación y Posadas (Argentina). Esta actividad otorga ocupación a miles de familias en ambas orillas del río, y es un buen canal de comercialización para productos hortícolas y manufacturas de la región.
Su condición de informal, sin embargo, es fuente de corrupción en los organismos de control y causa de humillaciones a que son sometidas madres sostenedoras de hogar. Pese a las promesas de los gobiernos sucesivos de buscar mecanismos y reglas de juego claras que la regulen, sigue siendo una asignatura pendiente.
EL PROBLEMA DEL CAMPO
La problemática campesina y el desplazamiento provocado por el avance de la "sojización", generan controversias. Existen sectores que observan en el modelo agro exportador la fórmula para generar divisas al país y fuente de desarrollo económico.
Es indudable que la exportación genera ingresos. El éxito de este modelo agro exportador explica que en los últimos 10 años el cultivo de soja tuvo una expansión extraordinaria, y de las 960.000 hectáreas que se cultivaban en 1996, en el 2007 se tuvo un registro de 2.429.794 hectáreas, según datos de Capeco.
Para el periodo 2007/2008 la superficie de cultivo de soja experimentó un aumento: llegó a 2.644.858 hectáreas según el Instituto Nacional de Biotecnología (INBIO), con una producción global de 6.805.722 toneladas. En esta "torta", Itapúa tiene una participación de 576.046 hectáreas sembradas (sólo superada por Alto Paraná, con 754.000 hectáreas), y una producción de 1.411.313 toneladas, según la misma fuente.
La expansión del rubro tiene efectos "colaterales" innegables, como el impacto en el ambiente, la deforestación, que en los últimos años aminoró sustancialmente pero continúa imparable, y hasta la amenaza a lo que las comunidades campesinas definen como "soberanía alimentaria", esto es, aquellos rubros que constituyen la base de la alimentación y la supervivencia de las familias.
La bonanza económica de la soja, que sitúa al Paraguay entre los principales países del mundo como productor y exportador, no obstante no se refleja en una mejoría de condiciones de los sectores menos favorecidos, fundamentalmente en el área rural, donde campean la pobreza y las necesidades más, el nuevo Gobierno debe resolver la ecuación de una distribución más equitativa de la riqueza generada sin matar la gallina de los huevos de oro. Según las Naciones Unidas, nuestro país tendrá en el 2008 unos 140.000 nuevos pobres extremos debido al aumento de precios en los alimentos, una paradoja en un país que exporta millones de toneladas de soja, para balanceados de animales en algún país asiático.
Otro problema a resolver, muy ligado al anterior, es la imparable migración campesina, especialmente de los jóvenes. Salvando las distancias, recorrer el sector rural es como ver el Paraguay post Guerra del 70, cuando sólo quedaron mujeres, niños y ancianos, con el agravante de que hoy no quedan mujeres, porque han emigrado a España.
Si bien el fenómeno de la migración es histórico en nuestro país, especialmente durante los últimos 50 años en que la meca era Buenos Aires, en los recientes 10 años se produjo una verdadera diáspora, con la salida masiva de jóvenes a la Argentina, EE.UU., España. Los reportes de paraguayas ligadas a casos de explotación sexual, principalmente en este último país citado, son una dolorosa e inocultable realidad.
Otro desafío de este Gobierno será superar los "complejos" con que se aborda el tema del "avance" brasileño en territorio paraguayo con el florecimiento de la soja, fenómeno que se explica en el desplazamiento que sufrieron a su vez agricultores brasileños del sur del Brasil, producto de la propia expansión de su frontera agrícola.
Indudablemente, el colono introdujo tecnología, una forma de trabajo organizada y empresarial que permitió el desarrollo económico de la región Este del país, y prueba de ello es la existencia actualmente de varios distritos "brasiguayos" donde, sin que esto sea interpretado como xenofóbico, sólo falta que sea izada la bandera brasileña.
OCUPACIONES CAMPESINAS
El problema de la tierra tal vez constituya el tema que exigirá un gran esfuerzo de liderazgo de Fernando Lugo. Esta cuestión está ligada con la forma prebendaria y corrupta con que se aplicaron las supuestas "políticas agrarias" en el pasado.
No se puede negar la existencia de oportunismo, especialmente oportunismo político, detrás del problema, pero en todo caso esto no es sino consecuencia de la desidia con que la problemática fue abordada hasta la actualidad. La falta de voluntad política, de coraje político, y las influencias de factores de poder económico, impidieron la investigación de propiedades que, cuanto menos, tienen dudoso origen. Muchas de las tierras cuestionadas, y en algunos casos ocupadas por campesinos, están dentro de este rango.
Para nadie es un secreto que durante la "reforma agraria" aplicada durante los '70 y '80, miles de hectáreas fueron distribuidas entre militares y políticos del régimen entonces imperante. La corrupción y el oportunismo derivaron en grandes negociados con tierras que en teoría estaban destinadas a campesinos, tierras que posteriormente fueron vendidas a inversores extranjeros, que atraídos por tierras vírgenes y baratas compraron extensiones incluso con asentamientos campesinos e indígenas en su interior.
INDÍGENAS
En parecida situación se encuentran las comunidades indígenas de Itapúa, pobres entre los pobres, y marginados entre los marginados. Existen unas 22 comunidades o asentamiento indígenas de los cuales cerca de 10 están en conflicto con particulares que disponen de títulos de propiedad. Muchas de estas comunidades en conflicto fueron "vendidas" junto con la tierra en la que están asentadas desde tiempo inmemorial.
Este sector de la población, por otra parte, es marginado del circuito y la realidad económica de la región, pese que tiene un potencial valioso que aportar a la preservación y recuperación de los recursos naturales.
SEGURIDAD, CORRUPCIÓN, IMPUNIDAD
El departamento de Itapúa, y su amplia frontera con la Argentina a través del río Paraná, tiene ganada fama de ser uno de los puntos del tráfico de drogas en la región. Las rutas del narcotráfico conectan con suma facilidad las zonas de producción de marihuana, en el norte del país, a través de Itapúa, con los mercados en la Argentina, Chile y Brasil. También en el departamento de Itapúa existen zonas de producción y procesamiento de marihuana que operan con relativa facilidad.
Este negocio prospera en un ambiente de impunidad gracias a la protección de elementos dentro de las filas de los organismos de seguridad, y la de políticos que tienen en el tráfico de drogas una buena fuente de financiación del modelo prebendario y clientelista de hacer política, y para el incremento de su poder económico.
Problemas cormo falta de atención a la salud pública, en distritos que no cuentan siquiera con un médico en sus puestos de salud; la práctica de madres paraguayas que acuden a hospitales argentinos para dar a luz, o padres de familia que envían a sus hijos a escuelas del vecino país, cruzando a diario el río Paraná en precarias canoas de remo, son aspectos que hacen a una realidad cotidiana cuyas respuestas no deben hacerse esperar.
Muchos de estos problemas no se originan en la falta de recursos económicos, sino en la asignación y utilización inadecuada de los recursos existentes, en la corrupción.
El largo brazo de la corrupción es uno de los principales factores que llevaron a nuestro país al actual estado de postración en que se encuentra, por lo que una gestión honesta, transparente, en la que se propicie la independencia judicial para investigar los hechos, pasados y presentes, es un desafío a asumir, tal vez uno de los más serios y complejos.
CIRUGÍA MAYOR
Enumerar los muchos y variados problemas que requieren atención urgente y eficaz, excede las posibilidades de esta síntesis. Este rosario de dificultades, sin embargo, no es lo único que encontrará el Gobierno entrante. Particularmente en Itapúa existe una infraestructura productiva que bien aprovechada, con justicia social y equidad, pueden revertir las condiciones de pobreza, inequidad y marginación que imperan.
Itapúa dispone de un potencial económico y humano de privilegio. Una estructura educativa que puede ser mejor aprovechada, escuelas agrícolas que hasta ahora sirvieron más para alimentar el clientelismo político y la corruptela que para la formación de miles de jóvenes campesinos que se debaten entre seguir los pasos de pobreza, precariedad y marginalidad de sus padres, o emigrar en busca de las oportunidades que les son negadas en su propio país.
Finalmente uno de los desafíos más serios que enfrentará Lugo es conducir ese liderazgo propio que le permitió acceder al poder con la suficiente inteligencia y equilibrio como para no dejarse atrapar por la inercia que sin duda buscará mantener el statu quo imperante.
Abordar los problemas con el coraje político suficiente para aplicar "cirugía mayor" en los casos necesarios y que en otros consistirá en medidas impopulares, o decisiones que lo enfrentarán a fuertes grupos de poder fáctico.
Acaso el mayor capital con que cuenta el nuevo Gobierno para enfrentar tantos y tan serios desafíos es el deseo de cambio de un pueblo que apostó por la posibilidad de construir un país más justo, honesto y libre de las ataduras de la miseria, la ignorancia y la corrupción.
FUENTE:
LOS DILEMAS DE LUGO – ANÁLISIS INÉDITOS
COLECCIÓN SOCIEDAD Y POLÍTICA
de EDITORIAL EL LECTOR,
Director editorial: Pablo León Burian.
Coordinador editorial: Bernardo Neri Farina .
www.ellector.com.py
Asunción-Paraguay 2008
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PRESENTACIÓN
La Editorial El Lector ha reunido a una docena de periodistas y escritores, agudos observadores de la realidad nacional, para analizar el escenario que encontrará el Presidente Fernando Lugo al asumir la primera magistratura del país luego de su impactante victoria electoral del 20 de abril del 2008.
LUIS BAREIRO, periodista de ABC Color, Canal 13 y Radio Cardinal; EDWIN BRÍTEZ, columnista y editor de la sección Internacionales de ABC Color, ANDRÉS COLMÁN GUTIÉRREZ, analista y referente esencial del diario última Hora; NATALIA DAPORTA, especialista en temas educativos en ABC Color; Marta Escurra, editora de la Revista Dominical de ABC Color; BERNARDO NERI FARIÑA, periodista y escritor; LUIS MARÍA FLEITAS, ingeniero agrónomo y colaborador de ABC Color en temas energéticos y ambientales; PEDRO GARCÍA, nombre insoslayable en el periodismo deportivo y redactor de última Hora; ALCIBÍADES GONZÁLEZ DELVALLE, maestro del periodismo nacional, columnista y editor del Suplemento Cultural de ABC Color; ROBERTO PAREDES, periodista y escritor; FRANCISCO PÉREZ-MARICEVICH, escritor, MABEL REHNFELDT, periodista de investigación de ABC Color, conductora de programa en Radio 1° de Marzo, y JUAN AUGUSTO ROA, corresponsal de ABC Color en Itapúa, fueron convocados por esta editorial para escribir el presente libro que será una contribución sumamente valiosa no sólo para Fernando Lugo, sino también para toda la ciudadanía.
En estos textos inéditos, elaborados exclusivamente para este volumen, hay una gran carga de experiencia y un profundo conocimiento de lo que pasa en el país y de lo que percibe la ciudadanía respecto al singular cambio que comenzamos a vivir el 20 de abril del 2008.
Este es otro notable emprendimiento bibliográfico que enorgullece a la Editorial El Lector.
No es un título más. Es nada menos que una visión ecuánime y honesta desde la prensa, desde la responsabilidad profesional de doce figuras del periodismo paraguayo reunidas para analizar el paso de una situación a otra, e investigar los conductos factibles para el cambio real que tanto anhelamos y que esperamos se plasme por fin. – PABLO LEÓN BURIÁN. EDITOR
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ÍNDICE
· POBREZA, DESEMPLEO, TIERRA E INVERSIÓN PÚBLICA - LUIS BAREIRO
· LUGO Y LA INSTITUCIONALIDAD DE LA REPÚBLICA - EDWIN BRÍTEZ
· ¿QUIÉN LE PONE EL CASCABEL A LA MAFIA EN LA TRIPLE FRONTERA? - ANDRÉS COLMÁN GUTIÉRREZ
· EL ESCENARIO EDUCATIVO: CAOS, INEFICIENCIA, CORRUPCIÓN - NATALIA DAPORTA
· CONTRAPODER: NI PRENSA AMIGA NI ENEMIGA - MARTA ESCURRA
· LA REFORMA AGRARIA Y LA CRISIS MUNDIAL DE LA COMIDA - BERNARDO NERI FARIÑA
· ENERGÍA Y MEDIO AMBIENTE - LUIS MARÍA FLEITAS
· EL DEPORTE MERECE PELOTA - PEDRO GARCÍA GAROZZO
· ¿CUÁNTAS SERÁN LAS SORPRESAS PARA LUGO? - ALCIBÍADES GONZÁLEZ DELVALLE
· FORTALEZAS Y DEBILIDADES DE FERNANDO LUGO - ROBERTO PAREDES
· LA CULTURA COMO REALIDAD POLÍTICA Y SOCIAL - FRANCISCO PÉREZ – MARICEVICH
· MIL Y UN DÍAS DE CORRUPCIÓN. PEQUEÑA GUÍA PRÁCTICA PARA LUCHAR CONTRA ELLA - MABEL REHNFELDT
· ITAPÚA: ENTRE EL PRIMER MUNDO Y LA EXTREMA POBREZA - JUAN AUGUSTO ROA
IDEAS FUERZA DE ESTE LIBRO
EPILOGO
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EPÍLOGO:
Decía Jorge Luis Borges que los libros no debieran tener prólogo sino epílogo, pues nadie analiza una obra antes de leerla. En ese contexto va este cierre.
Las ideas expuestas aquí tienen la cualidad de ser puras, no contaminadas con ninguna segunda intención ni sesgadas por intereses personales, políticos, ideológicos o dogmáticos. Pueden ser equivocadas, cómo no. Pero con seguridad, son sinceras.
Estos escritores son periodistas de alma, de oficio y de profesión. Son gente acostumbrada a escuchar a la gente, y por ello su propia percepción está nutrida por la percepción diversa de un público diverso. Y eso enriquece su conocimiento de la realidad.
He aquí una ventaja del periodista sobre el político. Éste, en su legítima búsqueda del poder, generalmente pierde la noción de la verdad al encerrarse en sus propias obsesiones y sus particulares intereses, o al tratar de acomodar la realidad a su privativa concepción de los hechos, con lo que su visión queda distorsionada y alejada de las necesidades ciudadanas.
Quienes concebimos, elaboramos y editamos este libro, unimos nuestro anhelo de país al que creemos es el de la inmensa mayoría de los paraguayos y las paraguayas. Hay un Paraguay que debemos construir juntos. El Paraguay serio, institucionalizado, libre, habitado por ciudadanos y no por súbditos, confiable, predecible, eficaz, honesto, culto, respetable, respetuoso y respetado; productivo, creativo, optimista, exigente consigo mismo; proactivo ante el futuro, soberano y digno; altivo en su identidad particular y solidario en su inserción en el mundo. Un país donde la excelencia sea una constante aspiracional y concreta, donde la eficiencia se haga tradición, donde hacer bien las cosas sea una costumbre cotidiana.
Este Paraguay es el opuesto al que tenemos hoy. Un Paraguay donde priman los deshonestos, los sinvergüenzas, los mediocres, los incapaces, los ineptos, los traficantes de maletines y de influencia; los políticos voraces, los violadores de la Constitución, los vendedores y compradores de conciencia, los coimeros y los coimeados, los estafadores, los criminales que se roban la leche, la galleta y los libros de los niños; los que se enriquecieron a costa del empobrecimiento de la educación, la salud y la dignidad de la ciudadanía; los funcionarios públicos convertidos en potentados sin pudor; los que hurtan los medicamentos de los hospitales públicos, los que cobran y pagan por caminos que no existen, los que malgastaron nuestras riquezas naturales, los que mercaron con la soberanía nacional.
El 20 de abril del 2008 hubo un voto ciudadano consciente y maduro, que eligió el cambio. Si el gobierno electo no inicia el proceso evolutivo para revolucionar el contexto actual del país, simplemente cometerá un acto de traición a la confianza de la gente.
Pero hay otro aspecto insoslayable. Ningún cambio radical se dará en el Paraguay, si paraguayos y paraguayas no adoptamos la condición de ciudadanía, es decir, la de seres conscientes, racionales, cumplidora de sus obligaciones y preservadores de sus derechos, miembros plenos e igualitarios de una comunidad nacional.
Al mismo tiempo de exigir al Gobierno, exijámonos nosotros. Asumamos nuestra responsabilidad particular en el ámbito en que nos toque actuar. Así será más fácil reconstruir el Paraguay. - BERNARDO NERI FARINA. Coordinador editorial
