De la serie LEONARDO DA VINCI
Técnica: Platos esmaltados, año 1985
OSVALDO SALERNO
Foto: Archivo del CAV/ MUSEO DEL BARRO
OSVALDO SALERNO
ENTRE CÍRCULOS, ENCUENTROS Y CONTRAPARTIDAS
Quiero que tengas la lucidez como para comprender
que un cruce no es un trayecto,
que un hito no es una historia,
que vadear un río no es remontarlo.
Cartas personales de Osvaldo Salerno
¿QUÉ ES UN HOMBRE sino la mitad de un círculo que ha sido partido en dos? La antigua meditación no ha llegado más que a formalizar el irrefrenable impulso del hombre por encontrar su otra mitad, completarse, unirse en el primer y último punto que lo vuelve geométricamente perfecto.
La vieja moneda romana en busca de su contrapartida, la ilusión adolescente de la media naranja o el eterno encastre de los dedos cada vez que se juntan las manos, son los guardianes del secreto. ¿Cómo puede un hombre comunicarse con otro a través del tiempo y a través del espacio? Seguramente hay un punto donde el encuentro, simplemente, se produce, sólo reservado a los cultores de coincidencias interiores más allá o más acá de la anécdota y el registro histórico.
Miguel Ángel, Rafael, Leopardo... los del célebre Cinquecentto, que elevaron su medida humana hasta las estrellas con perfecta irreverencia, llegan hasta nosotros por senderos azarosos pero siempre previsibles en su forma: la reproducción.
Esta vez esa reproducción, o ese "reflejo" de sus pulsos gráficos, llegan a Asunción a través de la sensibilidad de Osvaldo Salerno, que presenta una serie de variantes sobre los bocetos de los maestros italianos. El artista instituyó la superficie del encuentro poético donde habrían de convivir "el gesto inicial de la creación" de los renacentistas con sus propios designios, junto a las palabras de hombres de este mismo tiempo, poemas fragmentados, o sencillas cartas personales. Pergaminos troquelados por el tiempo, espejos de agua o de papel que descifran interrogantes, bocas que esfuman deseos y cordeles que se sueltan liberando palabras son las formas elegidas. "Es el encuentro de dos hombres de un papel a otro; de un espejo a otro; de un tiempo a otro; de un espacio a otro". Así define Osvaldo Salerno su trabajo. La unión ha sido consagrada -bien podremos apreciar mañana en Galería Fábrica- en cada uno de los cincuenta platos perfectamente circulares, unión confirmada y ratificada por la vieja sentencia latina que dice: "Cuando se comparte un trozo de mármol, una tabla o un pergamino, todos los signos allí inscriptos quedan, por igual, sujetos a condominio".
El Diario-Noticias, Revista,
Asunción, 03/ 03/ 85, pp. 12-13.
Fuente: Página 34 del libro COLECCIÓN PRIVADA, ESCRITOS SOBRE ARTES VISUALES ( EN PARAGUAY ). Edición y proyecto fotográfico: ADRIANA ALMADA, Fotografía: Gabriela Zuccolillo, Martín Crespo, Juan Carlos Meza, Ángel Yegros y Hérib Duarte – Editado con el apoyo del FONDEC, Asunción-Paraguay, Diciembre 2005. 325 pp.
ENLACE INTERNO A ESPACIO DE VISITA RECOMENDADA
(Hacer click sobre la imagen)