Portal Guaraní - EL QUE CON NIÑOS SE ACUESTA... - Por JESÚS RUIZ NESTOSA

SALAMANCA, España. ¿Qué pecado habremos cometido los paraguayos para merecernos la clase política que tenemos? Dudo que a lo largo de toda nuestra historia independiente el país haya pasado por una crisis tan profunda de valores y la corrupción haya llegado a los niveles presentes. Somos en Sudamérica, el país más corrupto por atrás de Venezuela. Así pues, ocupamos el escalón número dos del podio y hemos ganado medalla de plata. Vayamos pues a por la de oro que condiciones no nos faltan.

Me he preguntado si es mera casualidad que en un mismo momento hayan saltado a la luz los escándalos de corrupción que envuelven al expresidente Horacio Cartes y a la exdiputada Cynthia Tarragó. El primero está requerido por la justicia brasileña por lavado de dinero y la segunda acaba de ser apresada en los Estados Unidos por el mismo delito después de una larga operación encubierta realizada por el FBI. Tan tonta resultó esta señora que apenas se le acercaron los agentes, haciéndose pasar por narcotraficantes, se le soltó la lengua, les aseguró que en Paraguay se podía conseguir cocaína y marihuana a muy buen precio y que el país era ideal para el lavado de dinero porque “no estaba en el ‘radar’ del gobierno de los Estados Unidos”. También les aseguró que formaba parte de una red que cobraba el quince por ciento de la suma lavada y que el porcentaje se podía disminuir si la suma era realmente importante. Con políticas y diputadas de esta naturaleza, para qué queremos enemigos.

El caso de Cartes es un tanto diferente por haber sido presidente de la República y porque cuenta con medios económicos considerables. En su caso, sus seguidores salieron en tropel a defenderlo asegurando ya, con fe envidiable, que es inocente de todo cuanto se le acusa. Es inocente, sí, pero su abogado le recomendó que no salga del país. Dice que “por las dudas”. ¿En qué quedamos, es inocente o no? Mientras que el presidente de la Cámara de Diputados, Pedro Alliana, aseguró que todo se trata de una conspiración por parte del gobierno de Bolsonaro para crear una cortina de humo que oculte los desaciertos del actual presidente Mario Abdo Benítez. Y en otro momento aseguró que “es indiscutible que Cartes tiene fueros parlamentarios, pero no los necesita porque va a demostrar su inocencia acá y en el Brasil”. Una duda, señor Alliana, o sea que si es culpable ¿se escudará en esos fueros o no?

Entiendo que Alliana se sienta obligado con Cartes que en un momento dado le salvó la vida enviándolo al Brasil a tratarse problemas de salud. Entiendo, también, que se vea en la necesidad de defenderlo. Pero por favor, que diga por lo menos algo inteligente que no lo vamos a creer, desde luego, pero que por lo menos no nos haga pasar vergüenza por opinar de este modo el presidente de una de las cámaras.

Casi en la misma línea se encuentra el senador Juan Darío Monges que refiriéndose a los casos de Cartes y Tarragó dijo que “el Partido Colorado no se ve debilitado por ninguno de los casos, ya que es una institución que no depende de lo que ocurra con sus individualidades”. Entonces ¿es el partido político un ente abstracto en el que nada ni nadie puede hacer mella? El partido es la suma de individualidades sin las que no puede existir, ni actuar, ni desarrollarse. Por lo tanto, lo que hacen sus individualidades, les guste o no, tienen que ver con esa institución llamada “partido”.

Pongámonos serios y afrontemos nuestras responsabilidades, que el que con niños se acuesta, amanece mojado.

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