PortalGuarani.com
Inicio El Portal El Paraguay Contáctos Seguinos: Facebook - PortalGuarani Twitter - PortalGuarani Twitter - PortalGuarani
ALFREDO BOCCIA PAZ

  ANTES Y DESPUÉS DEL SÉPTIMO DÍA 2012 - 2013 - Blogs de ALFREDO BOCCIA


ANTES Y DESPUÉS DEL SÉPTIMO DÍA 2012 - 2013 - Blogs de ALFREDO BOCCIA

ANTES Y DESPUÉS DEL SÉPTIMO DÍA

Blogs de ALFREDO BOCCIA

ULTIMAHORA.COM

 

 

 

 

LA MANSEDUMBRE SUBE AL ÓMNIBUS

Publicado por: Alfredo Boccia/  Domingo 27 Enero 2013

 

Hace muchos años se escuchaba hablar del "síndrome del ómnibus" para explicar lo excesivamente apocados y sumisos que solemos ser los paraguayos a la hora de expresar nuestra protesta. Se decía que si un chofer de ómnibus conducía de manera irresponsable y algún pasajero protestaba en voz alta, los demás guardarían un vergonzoso silencio y, en vez de apoyarlo, lo tratarían de desubicado y lo invitarían a bajarse y a tomar un taxi.

Llegué a pensar que este extraño comportamiento, tan diferente al de los rioplatenses, mucho más proclives a exigir sus derechos estentóreamente, había cambiado algo. Sin embargo, en estos días los funcionarios de la Setama que fiscalizaban a los ómnibus chatarras vieron su trabajo obstaculizado por los propios pasajeros que los agredían verbalmente y repudiaban al ciudadano que había efectuado la denuncia.

No estoy sugiriendo que la docilidad de los usuarios explique por sí sola la espantosa calidad de nuestro transporte público. Me queda claro que este servicio es la mejor prueba de que la privatización no es una solución para los problemas públicos. En manos privadas, pero regulado por un Estado débil y corrupto, el transporte colectivo paraguayo es uno de los peores de la región. A un puñado de corsarios del negocio -que se hacen llamar empresarios del transporte- les basta con asociarse con algunos políticos tan corruptos como ellos, alquilar los dictámenes de unos cuantos jueces y comprar el número suficiente de parlamentarios, para tener como rehén a toda la ciudadanía.

La inversión privada regulada por instituciones débiles suele terminar en esto. Es bueno recordar esto cuando nos dicen que una empresa multinacional como Rio Tinto Alcan no producirá daños ambientales porque será controlada por el Estado. Si dos docenas de empresaurios transportistas se meten a los tres poderes del Estado en el bolsillo, imagínese lo que podría hacer una megaempresa como aquella.

La soberbia impune de quienes se cargaron el proyecto Metrobús, de quienes desprecian el derecho ciudadano a un transporte digno, de quienes desconocen lo que significa la responsabilidad social empresarial, está gráficamente resumida en la respuesta de César Ruiz Díaz, presidente de Cetrapam, a uno de sus críticos: "Si te pica, rascate". Ese es el talante y el nivel del líder del gremio de los intocables.

Ellos saben que estas medidas y controles suelen ocurrir al calor del proselitismo electoral. Muy pronto los políticos necesitarán sus servicios y todo volverá a la normalidad. Ellos no son un problema. La gente, sí. A lo único que le temen es a la ira de los mansos. Por suerte, estos siguen sufriendo del síndrome del ómnibus.

 

 

A ESTA ELECCIÓN LE FALTA ¡OH!

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 19 Enero 2013

 

Hace unos años le pregunté a Humberto Rubín qué le parecía un nuevo programa de entrevistas que se emitía por uno de los canales de televisión. Su respuesta fue: "Es bueno, pero le falta ¡Oh!".

Habrá visto mi cara de interrogación, pues enseguida me explicó lo que significaba la expresión.

Según él, en el periodismo radial y televisivo no basta con que el conductor haga preguntas interesantes. También debe ser capaz de romper la linealidad del diálogo, crear la sensación de que en algún momento sucederá algo inesperado, atrayente. Algo que interrumpa lo previsible, que sorprenda, que haga que se produzca el ¡Oh! en el oyente o espectador, y lo deje prendido al programa.

La frase me vino a la memoria porque tengo esa misma sensación sobre esta campaña electoral.

Más allá de la engañosa pirotecnia de acusaciones, todo parece seguir un ritmo demasiado probable, presumible. No se avizora en el horizonte una situación novedosa, una revelación escandalosa, una alianza sorpresiva que pueda cambiar el rumbo que hoy tienen las candidaturas.

Sé que es riesgoso hacer predicciones tanto tiempo antes de que la gente concurra a las urnas, pero es imposible subestimar la realidad de que el Partido Colorado llegará unido y sin desangramientos internos significativos. Su innata voracidad por el poder será el combustible de la mística con la que enfrentará la campaña. No hago juicios de valor, solo consigno una constatación de peso.

Enfrente, su tradicional rival enfrenta dos problemas terribles. El primero, el lastimero espectáculo de no poder dar por terminadas sus pugnas electorales internas, lo que dejará un tendal de dirigentes en huelga de brazos caídos. Y el segundo, insoluble, es que ya no tienen a nadie más con quien aliarse. Ya lo sabe: una alianza amplia suele ser un requisito sine qua non para vencer a la ANR.

Cierto es que ha crecido el electorado independiente, pero este es un sector inestable. Una parte de esa ciudadanía cuestiona la conducta liberal durante el golpe parlamentario. Es la gente que la izquierda podría haber aprovechado para convertirse en tercera fuerza del país. Eso sí sería algo novedoso y auspicioso. Pero también lo sabe: la izquierda llegará fragmentada. Así que ocurrirá lo previsible, el Unace mantendrá su tercer lugar. Pese a haber sufrido bajas, sigue manteniendo una gran disciplina.

Este escenario parece demasiado conocido. Si no ocurre algo que cambie la inercia actual, a esta elección le seguirá faltando ¡Oh!

 

 

DEL CONCEPTO CORRECTO A LA FORMA CRUEL

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 12 Enero 2013

 

Federico Franco no indultará a ningún preso. Pese a la tradición anual que ampara dicha condonación, se trata de una indiscutible atribución constitucional. No está obligado a hacerlo.

Aunque contemplado en la legislación de casi todos los países, el indulto es siempre polémico. Si bien permite suavizar la rigidez de la ley en casos concretos, es una fórmula que puede atentar contra la división de poderes al permitir que una autoridad no judicial corrija una resolución procesal. Se puede discutir el concepto, pero no la legalidad del acto. Eso no impide la crítica a la forma en que se ejerció ese derecho.

El proceso de selección de los candidatos al indulto es largo y complejo. Desde varios meses antes una comisión interinstitucional nominada por el Ejecutivo estudia los perfiles de los mismos. Participan representantes de la Pastoral Penitenciaria, de organismos de Derechos Humanos, de la Defensoría del Pueblo, de la Dirección de Institutos Penales del Ministerio de Justicia y Trabajo, de la Supervisión de Institutos Penales de la Corte Suprema de Justicia, del Centro de Defensa del Menor, del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social, así como pastores de varios centros de reclusión. Su trabajo se despliega en todas las instituciones penales del país a través de múltiples entrevistas y evaluaciones.

Unas seiscientas personas iniciaron el proceso de selección. Habían cumplido más de la mitad de su pena y habían demostrado contar con una contención familiar que facilitara su reinserción a la sociedad. Ninguna de ellas había sido condenada por secuestro, narcotráfico, homicidio doloso o coacción sexual ni había sido reincidente. El trabajo de esta comisión es bueno, pues en los últimos cuatro años hubo 260 indultos y solo cuatro reincidencias.

A fines del año pasado la Corte Suprema revisó la lista y la depuró aún más. Los nombres definitivos fueron enviados al Ejecutivo para la resolución final. A esta altura la ilusión de los presos -y, sobre todo, de sus familiares- había crecido justificadamente. Hubo parientes que vinieron de la Argentina para reencontrarse con un padre o un hijo. Hubo un interno de Tacumbú que vendió su cantina, con la cual sobrevivía en la cárcel. Hubo quienes regalaron sus pertenencias, seguros de recobrar su libertad. Peor aún, hubo niños y niñas venidos del interior con la ilusión de abrazar a su madre.

La tardía e inesperada decisión de Federico Franco arrasó con la esperanza de centenares de personas. Y eso no se hace. El poder no autoriza a jugar con los sentimientos de la gente. Menos si proviene de alguien que dice profesar la compasión cristiana. Lo hubiera advertido desde el inicio, antes de que se generen tantas expectativas. Por eso, aunque el fondo de la medida sea incuestionable, la forma de ejecutarla fue innecesariamente cruel.

 

 

EL INDULGENTE DOBLE RASERO

Publicado por: Alfredo Boccia| Sábado 05 Enero 2013

 

Buena parte de la prensa juzgó al gobierno de Fernando Lugo con inflexible dureza. Exceptuando a los que hicieron militancia ideológica, azuzando una paranoia anticomunista que los hechos concretos jamás justificaron, ese es el papel que se espera de la prensa.

Los errores de Lugo fueron señalados crudamente, hasta las fronteras del acoso mediático. Eso no es lo criticable. Nunca es sano que el periodismo sea muy amigo del poder. Pero tampoco es sana la incongruencia. Para hechos similares, la censura despiadada antes ejercida, se transformó en muchos casos en condescendiente y fugaz crítica al gobierno siguiente.

Recordará usted que casi linchan a la ministra de Salud de Lugo, Esperanza Martínez, por haber autorizado gratificaciones anuales a sus directores por metas alcanzadas. Hubo quien pidiera su cabeza, por corrupta, obligándola a muchas explicaciones. Pues bien, hace unas semanas, se descubrió que la cúpula de la Secretaría del Ambiente (Seam) se autoasignó bonificaciones millonarias por cuatro meses de trabajo. Algunos de los montos son superiores a los 30 millones de guaraníes.

¿No lo leyó? No me extraña. La noticia apareció discretamente y se evaporó con elegancia.

En su declaración de bienes, Federico Franco reconoce que su patrimonio aumentó siete veces en poco tiempo. Nada menos que un 748% más de lo que tenía al asumir, cuatro años antes. Al hacerse público el documento hubo una urgente declaración de prensa, donde Franco adujo un simple error de llenado. "Pongo a Dios como testigo", dijo. Y eso bastó para que no existan repreguntas ni molestas insistencias.

¿Cree usted que Lugo la hubiera sacado tan fácil?

El EPP sigue matando policías, quemando tractores y moviéndose con tranquilidad. Durante cuatro años Lugo fue acusado de inoperancia y complicidad con la guerrilla. El entonces vicepresidente Franco había asegurado que él los traería "del jopo". Pues bien, lo que para Lugo era motivo de juicio político, para Franco es apenas tema para algunas líneas en las páginas policiales.

El jefe de Comunicación de la Presidencia, Javier Sánchez, escribió en su Twitter que existen muchos periodistas "fateritos y alquilados. Jaikuapa los perros. ¿O estoy mintiendo?". Antes, había hecho declaraciones escandalosamente homofóbicas. No fue noticia, pese a su investidura. ¿Se imagina usted las reacciones que habría si los protagonistas hubieran sido Rubén Penayo o Augusto Dos Santos, encargados de prensa de Lugo?

Hemos elevado el doble rasero a la categoría de arte. Pero falta cierto disimulo.

 

 

 

EL QUIEBRE DE LA IZQUIERDA

Publicado por: Alfredo Boccia| Sábado 29 Diciembre 2012

 

Salvo que la sensatez reaparezca a corto plazo -eventualidad improbable, pero no imposible- la izquierda paraguaya enfrentará las próximas elecciones partida en tres pedazos. El fracaso de la iniciativa de Kuña Pyrenda de lograr una unidad de las fuerzas progresistas ha hecho que el fantasma de la decepción recorra vastos sectores ciudadanos -y aquí incluyo a miles de afiliados a partidos tradicionales- que la veían como lógica e indispensable.

Este inexplicable suicidio electoral no obedece a insalvables diferencias ideológicas. ¿No fue acaso capaz la izquierda de aliarse con un partido conservador para llegar al poder en el 2008? Las causas de la fractura hay que buscarlas en el interior de la propia izquierda. No encontrará allí vertientes radicalmente opuestas en la metodología ni altisonantes pugnas de liderazgo. Pero tampoco encontrará grandeza de espíritu. La división, en el fondo, obedece a la ubicación de sus dirigentes en las listas parlamentarias. El resto es un falso follaje argumental que disimula el impresentable sectarismo.

No es casual de que se reconozca que a lo máximo que se aspira es al tercer lugar. Saben que hasta eso es irreal, si se ofrecen tres opciones separadas. En realidad, eso es lo de menos, lo que importa es el número de bancas que se puedan ocupar. Pero no con un criterio amplio que aspire a contrarrestar a las bancadas mayoritarias, sino con el pequeño, de que sean "nuestras" bancas, aunque sean menos de las que se podrían conseguir unidos.

Esta actuación de la izquierda deleita al bipartidismo conservador porque les asegura por varios años un inamovible statu quo, fue apenas inquietado por la irrupción de Fernando Lugo. Estarán menos preocupados por el desgaste de sus ideas y su anacrónica forma de administrar lo público. Pero decepciona a demasiada gente que volcó esfuerzos y esperanzas en la construcción de una alternativa más inclusiva, dialogante y democrática. Es gente que, luego de lo ocurrido el 22 de junio, esperaba una propuesta convocante.

Lejos de eso, como viviendo en un termo, sus dirigentes se enfrascan en furiosas agresiones por las redes sociales, demostrando cuánto les falta crecer en madurez para convertirse en actores políticos de peso. Este error histórico de la izquierda será pagado con más años de más de lo mismo.

La política paraguaya necesita el contraste de sectores progresistas frente al hegemónico discurso de la derecha. ¿Habrá que estrellarse contra el muro de la realidad para diagnosticar la ceguera?

 

 

JALIL, EL TEMERARIO

Publicado por: Alfredo Boccia| Sábado 22 Diciembre 2012

 

La parcialidad de la investigación era más que presumible. Había que acomodar lo de Curuguaty a la versión oficial. Al fin y al cabo, con el cuento de que Lugo había alentado la violencia campesina, se habían cargado un presidente electo democráticamente. Por eso, el fiscal elegido fue Jalil, colorado, hijo de Bader, amigo de Blas N., el primigenio invasor de esas tierras.

Tierras que el fiscal insiste en llamar Campos Morombí y no Marina Kue, dando por sentado que eran propiedad del exsenador Riquelme, pese a la ausencia de títulos sobre ellas. Hasta allí, nada que no fuera previsible.

Lo que no estaba en los planes era que los resultados de la "investigación" presentada fueran tan pererî, tan incompletos y contradictorios y que ofrecieran tantos flancos de crítica. En Curuguaty hubo once campesinos y seis policías muertos. El fiscal Jalil parte de una idea preconcebida y decide no investigar a los policías. Sostiene que estos fueron emboscados por los campesinos y que reaccionaron para repeler la agresión. Esto puede o no ser cierto, pero hay que probarlo. Lo absurdo, lo impresentable, lo que anula el supuesto análisis fiscal es renunciar a averiguar la manera en que se produjeron esas once muertes.

El informe del fiscal Jalil se vuelve aún más dramáticamente incompleto cuando otras investigaciones sugieren que siete de ellas pudieran haber sido fruto de ejecuciones arbitrarias a civiles heridos o ya entregados. También hay denuncias de tortura, omisión de auxilio y tratamiento inhumano a por lo menos nueve campesinos heridos.

La posibilidad de abuso de la fuerza policial nunca le interesó al fiscal Jalil. Lo suyo era demostrar la idea con la que inició la "investigación": la masacre fue la parte final de un plan urdido por campesinos radicalizados. Poco le importó que a su hipótesis le faltaran pericias balísticas y forenses serias y exhaustivas. O que muchas preguntas quedaran sin respuesta. Como esta, por ejemplo: ¿Y la culpa de Lugo? Jamás apareció, ni siquiera en la telepática (Guido Rodríguez dixit) presunción del fiscal.

El fiscal Jalil ha sido temerario en sus conclusiones. Tanto, que ha puesto en aprietos al Ministerio Público, acosado por críticas ciudadanas. Tanto, que deja incómoda a la Justicia, que deberá basarse en su surrealista informe para condenar a los campesinos imputados. Tanto, que deja sorprendido al Gobierno, que esperaba contar con algo más sólido para justificar el golpe parlamentario.

"Fue una antología del disparate", dijo Federico Franco al referirse a la intención de Lugo de crear una Comisión de Notables que investigara de forma paralela lo ocurrido en Curuguaty. Me pregunto qué dirá ahora que tiene en sus manos esta antología de la irresponsabilidad, que lo expone a más críticas internacionales. Supongo que esperaba algo más de Jalil. Quizás menos temeridad y más argumentos jurídicos.

 

 

LOS LIBERALES ANTE LOS 900.000

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 15 Diciembre 2012

 

La marea de electores que movieron los colorados en sus internas del domingo pasado los ha henchido de triunfalismo. A cuatro meses de abril, ya se sienten ganadores. Tienen razón para estar contentos: movilizaron a casi 900.000 votantes. Fueron tantos que los liberales se vieron obligados a hablar del tema. Dijeron que los datos de la participación habían sido inflados artificialmente, que no había filas frente a las mesas y que la cantidad de votantes se disparó en las últimas horas de la tarde.

Sin poner la mano en el fuego por los colorados -cuya prodigiosa creatividad para el fraude es reconocida en el mundo-, no creo en esta acusación. Cargar las urnas con votos implica acuerdos muy amplios y simultáneos de apoderados, miembros de mesa y veedores. Es casi imposible de hacer, pues el agregado de papeletas afecta las posibilidades de candidatos muy dispares. Debe recordarse que por el sistema D'Hondt una banca parlamentaria o departamental puede definirse por un puñado de votos. Por otro lado, ese porcentaje de participación -45%- es congruente e incluso inferior al de las dos últimas elecciones internas presidenciales coloradas.

Hay que reconocer que 900.000 es una cifra impresionante, aunque deben hacerse algunas precisiones. En sus últimas internas los colorados juntaron solo 70.000 votos menos que el pasado domingo. Y al año siguiente perdieron la elección por goleada. Peor aún: desde entonces, aseguran que afiliaron a 400.000 nuevos colorados. ¿Qué pasó con ellos? ¿Por qué no fueron a votar?

Y, por último, hay un dato estadístico a tener en cuenta: los colorados tienen más votos en sus internas que en las elecciones generales. En las internas del 2002 hubo casi 10.000 votos más que los que obtuvo Nicanor Duarte al año siguiente. En las últimas elecciones se produjo la gran fuga de votos: más de 200.000 colorados que participaron en la interna del año anterior no votaron por Blanca Ovelar.

De todos modos, 900.000 es una multitud. Es temprano para saber si Horacio Cartes retendrá todos los votos del domingo pasado. No encuentro, por ahora, demasiados motivos para pensar que no. Intuyo que los liberales piensan igual, de ahí su nerviosismo.

Mañana deberán igualar esa demostración de fuerza. O, si no, el lunes estarán hablando de que los votos liberales no alcanzan para vencer a Cartes. Deberán sumar votos ciudadanos, votos independientes, votos progresistas, todos los votos. Será entonces cuando la aventura de junio empezará a tornarse una pesadilla.

 

 

LOS PRIMEROS EN ZARPAR

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 08 Diciembre 2012

 

Los colorados serán los primeros en lanzarse al mar del regreso. ¿Regreso a qué? Es una pregunta con múltiples respuestas. ¿Regreso a la institucionalidad democrática? Depende, porque la realización de elecciones no reparará los daños del golpe parlamentario de junio, pero será una suerte de blanqueo ante la comunidad internacional.

¿Regreso al viejo país, ese que conocemos tanto? Sí, casi seguro que sí. Y si ganan los colorados será aún más parecido a aquel que guardamos en la memoria. Y para volver a ganar, los colorados zarpan primero, con ventaja sobre los liberales, que hasta hoy lamentan que aquel engendro llamado urnas delivery haya resultado tan desastrosamente.

La primera impresión es que los colorados llegan a estas internas relativamente íntegros. La campaña no despertó odios irreparables -ni la creatividad de los publicistas- por lo que, salvo un empate trágico, en abril estarán todos unidos. Cuando eso ocurre es muy difícil ganarles.

El problema de los colorados será mover a su gente. Han gastado más plata que en ninguna otra campaña. Han afiliado a casi medio país, pero muchísimos ni siquiera están enterados de que integran su padrón. Y otros no votarán porque hay una degradación notable de la estructura histórica de la ANR. Fíjese usted que uno de los candidatos no era colorado hace dos años y jamás votó en elecciones generales. Señal de los tiempos. Será un tema sobre el que seguramente hablaremos mucho en los próximos años.

Hay tantos candidatos para el Parlamento que ha perdido sentido seguir hablando de listas sábana. El sistema D'Hont distribuirá los cargos de manera tan plural que solo los primeros de cada lista tendrán chances de entrar.

Casi ningún debate, pocas ideas nuevas y programas pobremente desarrollados dieron el tono de la campaña. El coloradismo new age se mira al espejo y se descubre muy parecido al anterior. El futuro tiene cara de pasado. Están cerca de volver, sin suficiente llanura. Sin suficiente mea culpa, arrepentimiento ni contrición. Y, en algunos aspectos, están peor. Antes, no les sería tan fácil a los empresarios entrar a la política con tan pocos rasguños.

Mañana a la noche, proclamado el vencedor, todos los colorados serán uno. La vieja Lista 1. La que conocemos tanto. Entonces, abril les parecerá un futuro muy cercano. Un futuro con cara de pasado. Justo lo que a ellos les encanta...

Luego, zarparán los contrincantes. Algunos sin novedades y con tendencia a la baja, como Unace y Patria Querida. La izquierda, dividida en una pugna tan estúpida como inverosímil. Y el PLRA, con una interna desabrida y la urgencia de encontrar votos ciudadanos amnésicos de lo ocurrido en junio. Es decir, todos separados. Y, cuando eso ocurre, es difícil ganarles a los colorados. Por eso hay que mirar con atención lo de mañana. Puede ser el preanuncio de lo de abril.

 

 

EL BLASFEMO EN EL RAUDAL

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 01 Diciembre 2012

 

Atrapado en un raudal de dimensiones amazónicas, maldije la decisión de haber salido de casa y opté por la prudencia: estacionar en una calle algo menos amenazante. Resignado a esperar que bajen las aguas, solo me restaba escuchar la radio y hundirme en sórdidas meditaciones. ¿Será esta la tormenta por la que oraban algunos fanáticos cristianos para que se suspenda el show de Lady Gaga? En ese caso, o el Todopoderoso entendió mal o hubo algún tipo de retraso en el envío del pedido.

Qué loca está la gente -pensé- para mezclar un concierto de música con la religión. Empecé a dudar de mí mismo cuando un locutor comentó la homilía caacupeña del presbítero Blas Arévalo, quien aseguró que "esos artistas extranjeros contradicen nuestra condición cristiana y nos muestran la cara del diablo". Se trata de un cura, me dije. Suelen estar bien informados.

¿Y si, en una de esas, tienen razón?, cavilé, mirando de reojo el ascendiente nivel del agua que corría por esa calle pretendidamente segura. En ese momento de debilidad, me arrepentí de haberme sumado a las burlas de lo que posteó en su twitter el intendente Arnaldo Samaniego: "La imagen de la Virgen de Caacupé que se encuentra en la Municipalidad de Asunción comenzó a derramar lágrimas". ¿Quién era yo para elucubrar motivos profanamente cachondos que explicaran el llanto de la Virgencita en su visita al recinto municipal? ¿Será un castigo divino a mi irrespeto celestial? Si es así, la vengadora tromba de agua me llevará directo en unos minutos al desaguadero más cercano.

Tampoco debí reírme del video que mostraron en la tele del profesor de Ypacaraí que anunciaba a sus alumnos que faltaban tres meses para el apocalipsis. El hombre no estaba perturbado, estaba en lo cierto. ¡Si habré sido idiota! Esta tormenta es un preanuncio de lo que viene, recapacité, inútilmente prendido al volante de un auto con el motor apagado y que parecía empezar a flotar.

Con razón Víctor Bogado dijo que su candidatura al Senado es obra de Dios. Todos parecen tener contacto con Él, menos yo. Tanta gente no puede estar equivocada, me lamenté. Fue entonces cuando me percaté que me estaban tocando la bocina los autos de atrás. La lluvia había amainado hacía rato y el raudal perdía fuerza.

No me importa, pensé. Qué se jodan, yo de aquí no me muevo hasta que todo esté completamente seco. Ellos no podían saber que Alguien me había perdonado la vida. Jamás volveré a cometer el delito de blasfemia, en grado de pensamiento. Lo prometo.

 

 

NO SE PUEDE CONFIAR NI EN LOS AMIGOS

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 24 Noviembre 2012

 

Hasta hace un tiempo las cosas estaban claras. La multinacional Monsanto era considerada por la izquierda y las organizaciones campesinas como una plaga ecológica. Sus semillas genéticamente modificadas creaban una gravosa dependencia tecnológica, condenaban a la desaparición a las variedades nativas y podrían ser dañinas para la salud. En cambio, la derecha y los productores sojeros endiosaban a la empresa y minimizaban estas críticas.

Un día las cosas cambiaron. Me desconcierta leer que los exportadores de soja hayan iniciado una furiosa rebelión contra la Monsanto, acusándola de abusiva.

Resulta que la soja que fabrica Monsanto está modificada de modo a resistir a un poderoso herbicida -el glifosato fabricado por la propia empresa-, que arrasa con todas las demás plantas. Pero todos quienes usen esta soja tienen que pagar royalties por los derechos de autor y comprar año a año las mismas semillas. Semillas que, además, infiltran plantaciones vecinas. Y aquí radica el gran negocio de la Monsanto. Las regalías a pagar son de 4,4 dólares por tonelada de soja. Con una producción de ocho millones de toneladas por zafra, son unos 35 millones de dólares. Por el cobro de royalties en el producto final, Monsanto gana diez veces más de lo que obtiene con la venta de semillas.

Los sojeros descubrieron ahora es que la patente feneció hace dos años y, por lo tanto, ya no hay nada que pagarle a la empresa. Al contrario, es ella la que debe devolver un montón de dinero cobrado indebidamente. El antecedente inmediato es un histórico juicio en el Brasil, en el que un grupo de productores de Río Grande do Sul logró que Monsanto devuelva pagos efectuados a la empresa durante los últimos años. Hablamos de miles de millones de dólares.

La Justicia brasileña dictaminó que la tasa cobrada era ilegal e injusta, y que las patentes de la semilla de soja "Roundup Ready" ya habían expirado. Nada más natural, pues, que los sojeros paraguayos imiten el camino y los argumentos de sus colegas brasileños. Más de un centenar de productores han anunciado que en esta zafra ya no pagarán a la Monsanto y que recurrirían a las instancias judiciales. No todos están de acuerdo en esto, pues hay una compleja trama de intereses y privilegios que gremios y cooperativas tienen en la cadena de agroexportación. Pero queda claro que la Monsanto ya no puede confiar en nadie. Hasta los sojeros la atacan.

Supongo que la multinacional hubiera preferido enfrentar a los de siempre. Al fin y al cabo, con los campesinos no había arreglo, eran enemigos ideológicos. Pero estos traidores de ahora costarán más caro. Tienen bufetes de abogados e influencias en las cámaras, en los despachos judiciales, en las redacciones.

¿Terminará Monsanto añorando los viejos buenos tiempos, en que solo era atacada por los campesinos y sus rotosos amigos?

 

 

Y ahora, ¿quién hará el trabajo sucio?

Publicado por: Alfredo Boccia| Sábado 17 Noviembre 2012

 

Los periodistas esperan con regocijo la elaboración de las listas partidarias al Parlamento. Es el momento en el que los excluidos se dejan llevar por la frustración y hablan. Con la bronca emerge la sinceridad. Esa efímera rendija del despecho permite echar una mirada a los interiores ocultos -sospechados, pero rara vez develados- de las logias políticas. Por un instante, las pestilentes transacciones de su intimidad se hacen visibles.

Para el caído es el final abrupto del amor, de los juramentos de lealtad eterna, de la admiración enfermiza al líder. Este, de un día al otro, dejará de ser el faro iluminador para convertirse en execrable traidor, en repugnante malagradecido, en el súmmum de todas las perversiones.

Hoy esta dura circunstancia le ha tocado a un prototípico parlamentario oviedista. ¡Qué digo!, un prototípico parlamentario paraguayo, con las excusas pertinentes a las excepciones. Ya lo sabe usted, el diputado José López Chávez.

Hace años que su abyecta sumisión a la voluntad de su general lo lleva hacia las peligrosas cornisas del ridículo. A su obsecuencia al líder ha sumado creativos aportes propios, como sus arranques de homofobia histérica, su proyecto de bajar la imputabilidad a los doce años, su iniciativa de ofrecer a los Estados Unidos una base militar en el Chaco y su propuesta de sacar dinero del presupuesto de salud y educación para comprar armamentos. Inolvidable la frase con la que la sostuvo: "¿Acaso nos vamos a defender con jeringas y libros?".

Sin aviso previo, Oviedo le ha bajado el pulgar. De pronto, aparece ante él un futuro desolador. Ya no será diputado y la prensa lo mirará con el mismo desinterés de antes. Lo espera la sudorosa rutina de los pasillos judiciales. Volverá a ser un ciudadano común y corriente. Por eso ha caído en fugaz verborragia. No le durará. Como la mafia, el partido tiene sus códigos de silencio.

Pero, al pensar en el pagaré de 800 millones que tuvo que entregar para ser diputado, el dolor pudo más. Reveló que el costo subió ahora a 1.800 millones. Reconoció que debió defender lo indefendible y que "si llegara a contar el 10% de lo que sabe, ardería Roma". Suficiente para percibir el tufo delincuencial que emana de estos representantes del pueblo.

López Chávez se pregunta quién hará ahora el trabajo sucio. Juega a ser cándido. Sabe que una legión de voluntarios se ofrecerá a suplantarlo. Y no hay derecho al escándalo. Como él, cada uno de ellos habrá llegado allí con el voto que le seguimos dando.

 

 

LA IZQUIERDA DIBUJA SU PEOR ESCENARIO

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 10 Noviembre 2012

 

Volvió nomás la pesadilla. Aquella poblada por antiguos sectarismos, legendarias mezquindades y una oscura incapacidad de interpretar el deseo de las bases. La unidad, clamada desde diferentes sectores populares y por referentes artísticos y culturales, es hoy una ilusión rota. La izquierda se empecina en no desprenderse de aquellos vicios que en el pasado la enanizaron electoralmente, manteniéndola en las sombras de lo testimonial.

Lo sucedido tendría que haber servido de experiencia. La victoria electoral del 2008 se consiguió gracias a un candidato carismático y una campaña abierta hacia la ciudadanía. No olvido los votos del PLRA, solo que centro el análisis en el espectro progresista. Como profecía autocumplida, la izquierda ha dibujado su peor escenario.

El ideal hubiera sido el de tener a un candidato carismático, capaz de captar votos de un electorado no necesariamente izquierdista, pero indignado por lo sucedido en junio, y listas parlamentarias unificadas y encabezadas por Fernando Lugo.

Igual sería probablemente insuficiente frente al tradicional bipartidismo paraguayo, pero podría ser un avance político monumental para la izquierda. Sólidas bancadas parlamentarias, beneficiadas -y no fragmentadas- por el sistema D'Hondt, un programa común y una hoja de ruta futura similar a la que hicieron el PT brasileño, el Frente Amplio uruguayo o la Concertación chilena. En un país con tantas desigualdades y hegemonizado por una derecha ultraconservadora, es natural que prendan ideas socialistas y socialdemócratas.

Casi nunca hay atajos en el crecimiento de la conciencia popular. Lugo fue uno de ellos. Pero, en general, se avanza paso por paso, acumulando fuerzas y experiencias. Una izquierda que se presenta dividida, con dos candidatos y dos listas parlamentarias, despilfarrando votos al río y despreciando la inteligencia ciudadana, la de los independientes, la de los indignados, la de los resistentes, no avanza, retrocede.

A poquísimas semanas de las elecciones y por fuera del Frente Guasu, Mario Ferreiro, bien posicionado en las encuestas, necesita la figura aglutinante de Fernando Lugo en sus listas. Dentro del Frente Guasu, Fernando Lugo necesita un candidato que capte votos extrapartidarios. El doctor Aníbal Carrillo, por quien guardo un enorme afecto y respeto, originados en muchos años de militancia en común, que me dieron pruebas de su integridad personal, no es, sin embargo, una figura electoralmente subyugante.

Porque, no olvidemos, hablamos de una coyuntura electoral. Las mismas elecciones que, cinco años atrás, llevaron a Lugo al poder. La izquierda apenas tiene tiempo para intentar cambiar este sombrío escenario y demostrar que está a la altura de las expectativas de buena parte de la ciudadanía.

 

 

SUBOFICIALES Y MÉDICOS: FATALMENTE PREDECIBLES

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 03 Noviembre 2012

 

Suboficiales de Policía involucrados en todo tipo de delitos: Bandas armadas, violaciones, violencia doméstica, femicidios e infanticidios. Esos han sido titulares frecuentes de las crónicas de los últimos meses. ¿En manos de quiénes está la seguridad ciudadana?

Todo se inicia con la mediocre formación que reciben los futuros suboficiales. Hace unos años, la Policía tenía una gran carencia de efectivos. Como solución, se abrieron numerosas escuelas en varios lugares del interior y se aceleró el tiempo de aprendizaje. Llegó a haber trece academias policiales en las que, en menos de nueve meses, culminaban sus estudios uniformados que salían a las calles.

Estas academias carecían de infraestructura, tenían un pobre nivel académico y eran poco o nada supervisadas por el Estado. El resultado era fatalmente previsible, aunque hubo que esperar unos años para comprobarlo: policías poco preparados, sin vocación y fácilmente tentados por la actividad delictiva.

La rectificación comenzó el año pasado. Las escuelas se redujeron a tres, el periodo de estudio se alargó a dos años y los cursos fueron mejor supervisados. También se dará un mayor peso a los test psicotécnicos de los postulantes. Este no es un dato menor: en el último, hubo 354 reprobados de algo más de 2.000 aspirantes a suboficiales. Es previsible que con estas medidas las cosas mejoren en el futuro.

Ahora, permítame hacer una comparación algo forzada, aunque pertinente. En los últimos años hubo un irresponsable descontrol parlamentario en la creación de nuevas universidades. Como consecuencia de ello tenemos hoy unas veinte facultades de medicina distribuidas por todo el país. Muchas de ellas carecen de infraestructura, tienen un pobre nivel académico y son poco o nada supervisadas por el Estado. Funcionando en tinglados improvisados, sin bibliotecas, laboratorios ni prácticas clínicas suficientes, es fatalmente previsible que próximamente tengamos médicos insuficientemente preparados. También serán noticia en las crónicas periodísticas. Es solo cuestión de esperar.

El investigador Antonio Cubilla asegura que el Paraguay no tiene condiciones para tener más de cuatro o cinco facultades. La Academia de Medicina del Paraguay ya ha advertido del riesgo que se viene. La pregunta es: ¿qué es más peligroso: policías o médicos mal formados? En el primer caso ya se ha hecho algo. En el segundo, nada.

 

 

LA SEGUNDA MUERTE DEL PEREZOSO

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 27 Octubre 2012

 

Enigmática y curiosa, la vida del perezoso gigante. Recorría nuestras planicies hace millones de años en una indolente búsqueda de alimentos que no dejó rastros en este territorio con tierra y clima poco propicios a la fosilización. Por algún motivo, desaparecieron hace diez mil años. No hubiéramos sabido mucho más si no fuera porque uno de ellos se refugió y murió en una caverna de caliza cercana a lo que después sería la localidad de San Lázaro.

Y allí quedó, inmóvil en su primera y prolongada muerte, ignorando que el destino le tenía reservado un lugar histórico. Diez mil años después, ese perezoso aparecería magníficamente conservado para revelar a la ciencia los secretos de su extinguida existencia en el Paraguay.

Y allí empezaron sus problemas, el Paraguay. Lo que los científicos celebraron como un fantástico tesoro paleontológico, para otros fue simplemente un tesoro del que había que sacar provecho particular. Los dueños de la propiedad donde estaba la gruta dijeron que solo permitirían la extracción del fósil si se les otorgaba la licencia ambiental para explotar el yacimiento de calizas.

Las autoridades municipales de Vallemí sostuvieron que era un patrimonio del pueblo y no pensaban donar a nadie el preciado perezoso. Pensaban exponerlo en el salón municipal. Los científicos interesados en conservar la pieza fueron amenazados. Recurrieron entonces a las autoridades, solo para encontrarse con una burocracia más lenta que el propio perezoso. La ministra de Cultura no mostró demasiada iniciativa para proteger el hallazgo. La de Defensa les negó un helicóptero para trasladarlo. El intendente local estaba enfrascado en interminables negociaciones sobre la propiedad del vertebrado plesistocénico.

Mientras, los investigadores pegaban gritos de auxilio, como el de Víctor Filippi, quien hace varios meses levantó un emocionante video en YouTube (Fósil de Catonyx cuvieri) en el que se observan las dificultades para acceder al lugar y los cuidados que tuvieron para desenterrarlo.

Hasta que ocurrió lo previsible. De tanto esperar, al perezoso le llegó su segunda muerte. Esta fue peor, por bárbara e idiota. Los restos fósiles fueron destruidos y robados. El perezoso no podrá contarnos la historia de su especie, pero está revelando al mundo la catadura de la nuestra, la de los seres humanos. Curioso, ¿no? Tanto él como nosotros parecemos marcados por la misma indolencia.

 

 

EL SOBRECOGEDOR OCÉANO VERDE

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 20 Octubre 2012

 

Recorrer la ruta 6, que une Ciudad del Este con Encarnación, es siempre una experiencia inquietante. Paralela a la margen derecha del Paraná, la ruta atraviesa una de las regiones más prósperas del país. En las radios FM se escuchan hegemónicamente programas evangélicos en portugués y música sertaneja. A ambos costados el panorama es uniforme: un inmenso océano de soja que se pierde en el horizonte.

Santa Rita es una ciudad con un ingreso per cápita superior a los 10.000 dólares anuales. El dinero se ve en la profusión de bancos y financieras, en los comercios de venta de semillas y maquinarias agrícolas, en los locales de venta de automóviles. Y allí, a metros del centro urbano, soja hasta en los patios de las casas. Es la soja que hace crecer nuestra economía y nos permite tener esos índices macroeconómicos tan espléndidos. Es la imparable soja que no se detiene en ninguna frontera agrícola y se devora pastos, montes, vacas, otros cultivos, pueblos, tradiciones y familias campesinas.

El aspecto sobrecogedor de esos interminables campos de un verde repetitivo y monótono es la ausencia de gente. Es el detalle humano que falta en el paisaje. Enormes cosechadoras hacen el trabajo de esa gente que abandonó miles de viviendas rurales y vino a engrosar los cinturones de pobreza urbanos.

A los pocos que se quedan tampoco les va bien, con los bosques devastados, sus cultivos destruidos y su salud periódicamente fumigada. "Los que viven rodeados del sojal tienen muchos problemas de depresión", me decía un amigo médico de la zona. "La soja se engulló sus ámbitos de confraternización y diversión". El pujante modelo agroexportador responde a una lógica que prioriza el crecimiento económico sobre la sustentabilidad ambiental. No se reflexiona lo suficiente sobre este hecho. No es lo mismo lograr un crecimiento sostenido que un desarrollo sustentable.

¿Qué pasará de este país cuando todo se haya convertido en una alfombra verde, en un inmenso desierto de soja? Porque su voracidad no tiene límites. Ahora ha hecho metástasis en el Chaco. ¿Qué catástrofes ecológicas nos deparará el futuro? Vaciado el campo y con la propiedad de la tierra cada vez más concentrada, se produce también una erosión del espacio social y cultural. La mano tosca del latifundio dibuja un escenario que empobrece los rasgos identitarios, la historia natural, la ancestral diversidad del mundo rural.

En eso pensaba mientras recorría la ruta 6. ¿La agobiante uniformidad del territorio infiltrará también nuestros saberes colectivos? Desde la radio, un pastor brasileño anunciaba en tono convulso la cercanía del apocalipsis, lo que no ayudaba a mi tranquilidad.

Decidí escuchar música y no pensar. Chitãozinho e Xororó hicieron menos dura mi travesía por el mar de la soja.

 

 

NI PIERDE NI SE MUERE

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 13 Octubre 2012

 

Buena parte de los analistas y políticos caseros daban por hecho de que el cáncer no le permitiría llegar a las elecciones. Y que, de todos modos, estas serían su fin. O que, al menos, las sospechas de fraude serían tantas que el escándalo invalidaría su triunfo. Y, sin embargo, allí lo tienen, con más del 55% de los votos en comicios con altísima participación ciudadana y su legitimidad reconocida por los observadores internacionales y el propio candidato perdedor.

Acostumbrados como nos tienen a denostarlo como el "dictador bolivariano" o el "gorila caribeño", supongo que la decisión del pueblo venezolano les debe haber dejado estupefactos. ¿Es un país de ignorantes o somos nosotros los intoxicados por la visión interesadamente parcial de muchos informadores?

El fenómeno político liderado por Hugo Chávez merece un análisis despojado de anteojeras ideológicas. Venezuela es un país que, como otros, atraviesa por problemas. Su deuda pública y su inflación son altas, su moneda se debilita, su economía es poco diversificada y la violencia es creciente. Chávez, con escaso apego a las formas democráticas, ha sido acusado de intromisión en las políticas internas de otros países, de restricciones a la prensa y de utilización política del aparato del Estado. ¿Cómo es posible entonces que un dictador populista y autoritario gane una vez más las elecciones?

Habría que empezar por reconocer los impresionantes avances sociales que permitieron que Chávez se conectara con millones de pobres, abandonados por cuatro décadas de corrupción e insensibilidad de gobiernos anteriores. Con la erradicación del analfabetismo y los enormes programas de salud, educación y vivienda, las clases más menospreciadas y humildes encontraron en Chávez una puerta abierta hacia la participación y el protagonismo social.

Los petrodólares, antes acaparados por oligarquías financieras privadas o extranjeras, fueron utilizados hacia el interés general. Desde que asumió Chávez el PIB anual per cápita pasó de 4.000 a casi 11.000 dólares y la pobreza extrema bajó del 23 al 8 por ciento. Venezuela es hoy el país con menor desigualdad de América Latina. No lo dice el PMAS, lo dice la ONU.

Entender estos datos elevaría el nivel de la discusión. Llamar "populismo" a todo lo que se oponga al neoliberalismo la achata. Y también la reduce sostener que nuestras "democracias" con miles y miles de excluidos es la panacea a alcanzar.

 

 

EL DIARIO PLAGIADO Y LA CENSURA

Publicado por: Alfredo Boccia| Sábado 29 Setiembre 2012

 

La aparición en internet de noticias sorprendentes y delirantes en un sitio web con logo y formato del diario ABC Color produjo una conmoción en las redes sociales. Se trataba de una plataforma -abcolor.me- parecida a la del periódico y que había sido creada por desconocidos con el objetivo expreso de publicar noticias falsas. En pocas horas, el sitio fue visitado por más de 25.000 internautas que se sumaron entusiastamente a la tarea de crear noticias imposibles.

Quienes no le vieron la gracia a esta parodia fueron los del diario verdadero. Denunciaron el plagio a la fiscalía y lograron -de facto- que dos compañías telefónicas privadas bloquearan el acceso al dominio cuestionado. Aquí emergen dos situaciones que tienen que ver con lo inusual del caso. Los fiscales se encontraron con una legislación sobre delitos informáticos repleta de lagunas y las telefónicas, con una avalancha de críticas de enojados usuarios, lo que las obligó a desbloquear el sitio algunas horas después, aduciendo un error de procedimiento interno.

El diario ABC tiene el derecho de proteger su propiedad intelectual e iniciar un sinuoso camino jurídico contra los responsables de los delitos de suplantación de identidad, abuso de imagen y violación del copyright. Pero lo que aquí nos interesa es el bloqueo decidido por las operadoras. Al impedir que sus usuarios accedan al contenido de un sitio -sin que medie una acción jurídica- infringieron flagrante y unilateralmente el derecho ciudadano a la información. Y eso tiene un nombre: censura. Es lo que suele ocurrir en regímenes totalitarios o teocracias fundamentalistas. Solo que, en este caso, la libertad de expresión fue dañada no por una medida estatal, sino por empresas privadas.

La decisión de bloquear un sitio rompe la neutralidad de la red. No son las empresas de telefonía móvil las que pueden decidir qué sitios pueden ser visitados y cuáles no. Eso es potestad, en todo caso, de la Justicia. Si las leyes son anacrónicas y no garantizan suficientemente la propiedad intelectual del diario ABC, pues hay que actualizarlas. Mucho más grave es el estado de indefensión en el que se encuentran centenares de miles de usuarios ante la censura. La libertad de expresión transita hoy por sendas novedosas, pero sus principios fundamentales no cambiaron desde la época en que en nuestro país un dictador clausuraba diarios.

Mientras, hay que saber leer lo que nos dicen las redes sociales. Hay un mundo periodístico mucho más desenfadado, colectivo e interactivo que se divierte ante los intentos de detenerlo.

 

 

NUNCA QUISIMOS IR A ESA CUMBRE

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 22 Setiembre 2012

 

No estaremos en Cádiz. Ha venido un funcionario español con la poco agradable misión de decirle a este gobierno que no está invitado a la Cumbre Iberoamericana de noviembre. Así de directa y argel ha sido la cosa. Una decisión tan brutal no tiene antecedentes en estas cumbres. La OEA podía excluir a Cuba, pero la Cumbre era otra cosa. Diría más, no recuerdo otra situación de igual fricción en las relaciones entre Paraguay y España desde nuestra independencia.

Mascullando humillación, Federico Franco tiró la toalla. No puede exigir la salida del país del embajador español. Lo único que le faltaría al Paraguay es sumar más aislamiento a su soledad internacional. Además, España es uno de los países que más nos aporta en cooperación.

Ante la evidencia de que somos indeseables, cambiaron los discursos "soberanos". Imposible seguir exigiéndole a Franco que se plante de todos modos en la Cumbre y cuente sus verdades. Queda el recurso de despreciar la utilidad de estas reuniones. Y en esta senda, no faltarán razones. Estas conferencias de jefes de Estado responden a la intención de España de insertarse en un espacio político, enraizado en un pasado compartido, desde el cual ejercer cierta influencia. Pero en realidad, nunca han servido para gran cosa. La crónica de estas cumbres registra una sucesión de "cordiales fracasos" y su interés viene decayendo. En la anterior, realizada en Asunción, hubo once ausencias. Su propia continuidad a mediano plazo está en duda.

Todo esto, sin embargo, no oculta la realidad de que hemos recibido una inédita bofetada diplomática. Ante la información de que Argentina, Bolivia, Ecuador, Uruguay y otras naciones podrían faltar si Federico Franco se presentaba, España hizo primar sus intereses. La Cumbre de Cádiz no puede tener ausentes importantes y es primordial que Cristina Kirchner asista. La crisis los obliga a persistir en el reclamo de una compensación económica por la expropiación de Repsol.

Para minimizar el efecto de nuestra exclusión, toda la ira se dirige contra Cristina. Pero la decisión es mucho más colectiva. Aunque Paraguay no esté, es probable que Cristina invente una excusa de última hora para no ir. Pero aún: si Cristina anuncia antes que no irá, tampoco será invitado Paraguay.

En el fondo se trata de eso: la gravedad del golpe blando de junio es mejor apreciada desde afuera que desde adentro. Y eso no se arregla repitiendo que aquí no pasó nada. Los embajadores no volvieron y estamos tan aislados como Stroessner en los últimos años de su dictadura.

Desesperado por escenarios internacionales, Federico Franco apuesta todo a la Asamblea de la ONU. Cuando le toque hablar, habrá varias delegaciones ausentes. Por ahora, no estará en Cádiz y solo le resta apelar a la fábula de la zorra y las uvas. No tenía luego ganas de irse allí.

 

 

DIFAMACIÓN Y JUSTICIA DIVINA

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 15 Setiembre 2012

 

A falta de otros temas, la polémica de esta semana se centró en el contenido de un libro publicado hace dos años. Lo curioso no radica tanto en la inverosimilitud de los gravísimos hechos relatados ni en la detallada precisión con la que se describe a la familia involucrada. Lo que convirtió en noticia al episodio fue que tanto la autora del libro -Verónika Wiens- como su esposo son figuras reverenciadas del ámbito evangélico y político del país.

Más allá de las consideraciones jurídicas derivadas del hecho de omitir la denuncia de una situación supuestamente criminal, lo escandaloso del caso se da por la interpretación que hace de la muerte de una joven. "Sabíamos que Dios es justo, pero nunca nos percatamos de cuán justo es hasta que, años más tarde, después de haber perdido su alto rango político, a esta familia le asesinaron a una de sus hijas. Con Arnoldo lloramos y entendimos que Dios es justo".

Atribuir a un acto de justicia divina la muerte de un ser humano es propio de un fundamentalismo irracional. De ser así, habría que buscar alguna colectiva culpa de los haitianos para explicar el terremoto que hace unos años devastó su país. Por eso es entendible el enojo y el dolor de la familia Cubas Gusinky ante semejante afirmación. Aunque hayan pasado dos años de la publicación, el peso de la palabra escrita sigue vigente.

Pero, casi simultáneamente, la prensa recordó unas declaraciones radiales de la señora Mirtha Gusinky de fines de julio de 2010, cuando fue abatido Severiano Martínez, uno de los guerrilleros del EPP sindicado como presunto secuestrador de Cecilia Cubas. "Yo no le deseo la muerte a nadie, pero creo en la justicia divina y pienso que Dios hizo ayer justicia". Aunque hayan pasado dos años, los archivos de prensa hacen que las palabras pronunciadas sigan vigentes.

Una vez más, se hacía mención a la justicia divina. ¿Intervino Dios en ambas muertes o solo en una de ellas? ¿En todo caso, en cuál? Me parece más prudente olvidar la participación celestial en situaciones tan dolorosas y atribuir su ocurrencia a causas terrenales que la justicia de este mundo debe dirimir.

Si tuviera parte en este embrollo judicial, sería el propio Dios el que debería entablar una querella por difamación y calumnia. Describirlo como un ser superior vengativo y sanguinario -pese a algunos pasajes del Antiguo Testamento que le son francamente desfavorables en ese sentido- afecta la imagen del Dios compasivo y bondadoso trabajosamente construida a lo largo de dos mil años. No lo mezclemos en esto. Sería un juicio que Él ganaría.

 

 

MAMBO MENTAL Y SEGURIDAD NACIONAL

Publicado por: Alfredo Boccia| Sábado 08 Setiembre 2012

 

Cuando asumió Federico Franco nadie pensó que la seguridad nacional fuera una de sus preocupaciones. Pero la ola de nacionalismo histérico con la que la derecha nativa respondió al aislamiento diplomático dio paso a las más disparatadas propuestas de rearme militar.

A las declaraciones risibles de algunos se sumó el rebrote de la idea de sellar una alianza con Estados Unidos, ofreciéndoles una base militar en el Chaco. Esta curiosa interpretación de la soberanía nacional refleja un profundo desconocimiento de los intereses norteamericanos en esta parte del continente. Es absurdo pensar que irritarían a socios comerciales como Brasil y Argentina con el objeto de defender a un país pequeño y estratégicamente inocuo. Repiten la miopía de los militares argentinos que, tres décadas atrás, invadieron las Malvinas soñando con un ilusorio apoyo de Washington.

Para peor, al ritmo de una polémica por semana, su ministra de Defensa se las ha arreglado para aumentar los dolores de cabeza presidenciales. Sus frases agresivas del tipo "hay que prepararse para la guerra si queremos vivir en paz", sus poco sustentables videos sobre la intromisión del canciller venezolano Maduro, su cara de "yo no fui" cuando se desenterró el odiado arreo por falta de la "baja" militar y la discusión pública sobre la validez de su supuesto doctorado hubieran sido suficientes para que a un ministro de Lugo el Parlamento le pidiera su renuncia. Eso no ocurrirá y Federico tampoco lo hará pues ese es un cupo del Unace, y ella llegó al cargo por sugerencia de la Primera Dama.

Si de cara a al exterior la cosa estaba confusa, el último atentado del EPP pudrió la situación interna. La guerrilla del norte sigue activa y parece gozar de buena salud. Fue un problema para Lugo, a quien acusaban de no tener voluntad de aniquilarla. Siempre me pareció difícil encontrar las supuestas ventajas que obtendría Lugo alentando las acciones de la guerrilla. Pero lo que me queda claro ahora es que el EPP vació de discurso al gobierno de Franco.

A fines de diciembre del 201, en una de sus ácidas críticas al entonces presidente, Federico afirmaba que quería llegar a la presidencia "para traerlos del jopo a los del EPP y entregarlos a la justicia". ¿Qué decir ahora cuando la violencia llega a niveles inusuales? A Lugo, por algo así, le estarían pidiendo juicio político por complicidad. A Franco no, pero ya no importan sus argumentos justificadores.

Es hora de exigir más seriedad en el tratamiento de los temas de seguridad. Menos mambo mental y más profesionalidad serían deseables. Con algunos tanques y aviones más no seremos más respetados. Las mismas causas que dieron surgimiento al EPP siguen intactas. Necesitamos discutir una política de Estado que contenga menos orden cerrado y más modernidad y democracia. Lo demás es palabrerío kachiãi.

 

 

LA CONVICCIÓN HACE QUE EL CHANCHO VUELE

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 01 Setiembre 2012

 

Se le atribuye a Luis María Argaña la afirmación de que, en política, en tres días puede volar un chancho. Lo recordó anteayer el político colorado Julio César Velázquez, regocijado con la vuelta de Lilian Samaniego a las carpas de Cartes. Tan contento estaba que olvidó que hace cuatro meses aseguraba que su candidatura respondía a un plan urdido por Lugo.

Supongo que no podía decir otra cosa, ante el festín que se estaba dando la prensa con los archivos de las declaraciones que los nuevos aliados se habían dedicado poco tiempo atrás. Lilian había acusado a Cartes de financiar la campaña de Lugo, de autoritario, de pretender comprar a todo el partido, además de atribuirle sutilmente el mote de "narcocoloradismo", acuñado por el Pepe Mujica. Por su parte, Cartes la trató de desagradecida, de tener una actitud miserable y de llegar a la presidencia de la ANR gracias a él. En lo que ambos coincidieron es en tratarse mutuamente de representar un modelo político del pasado.

En eso no estoy de acuerdo. Representan un estilo muy actual. Antiguo, quizás, pero plenamente vigente. Y es por eso que no pienso agobiarlo con reflexiones pueriles sobre la falta de coherencia y el oportunismo de los políticos. Eso no puede sorprender. A lo sumo habría que endilgarles la imprudencia de no cuidar los adjetivos elegidos para denostar al enemigo de hoy, sabiendo que podría ser el aliado de mañana. De ese modo, sonarían menos ridículas las posteriores demostraciones de amor. Cuando Lilian, por ejemplo, dice que se unió a Cartes por convicción, está cometiendo un delito de abuso de la paciencia pública, en grado de tentativa.

No está mal que antiguos adversarios se unan coyunturalmente. Eso es inherente a la política. Al mismo tiempo que Cartes, Zacarías Irún intentaba convencer a Lilian, aunque su oferta fue, obviamente, menos sustanciosa. Pero hasta para eso, hay cierta etiqueta de uso común que debería respetarse. De lo contrario, como decía Argaña, cada tres días un nuevo chancho emprendería vuelo, mandando al diablo las trayectorias personales, la ideología y los programas políticos que, se supone, diferencian a un candidato de otro.

A propósito, el cerdo volador más famoso fue el enorme globo inflable construido en 1976 por la banda británica Pink Floyd para promocionar su álbum Animals. El chancho, repleto de helio, se soltó de sus amarras y creó una fenomenal confusión al flotar sobre aeropuertos, granjas y carreteras, obligando a que la Fuerza Aérea movilice helicópteros y aviones militares.

Siguiendo la teoría de Argaña, si un evento similar ocurriera en el Paraguay, sería considerado como una imagen costumbrista de un paisaje bucólicamente repetido.

 

 

EL PROLONGADO ESTUPOR DE LA IZQUIERDA

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 25 Agosto 2012

 

Descubriéndose de nuevo en la llanura, de modo abrupto y mucho antes de lo pensado, la izquierda paraguaya es presa de un estupor del que no logra salir. Lleva dos meses de letargo, durante los cuales va dejando escapar las pocas aristas positivas que dejó el golpe parlamentario que la desalojó del poder.

Si cada crisis es también una oportunidad, la de junio tuvo la suya. La izquierda, que había llegado al gobierno gracias al providencial atajo de Fernando Lugo, lo perdió de modo abusivo y poco racional. Eso la convirtió en legítima víctima de una maniobra del conservadurismo, lo que le hubiera permitido sintonizar con el sentimiento de indignación que recorre a buena parte de la ciudadanía. No era impensable que tal cosa sucediera, pues se suponía que la experiencia de estos cuatro años vertiginosos -repletos de errores pero también de logros inéditos- les habría dado un sentido de identidad que superara sus ancestrales intolerancias infantiles.

Esa era -sigue siendo- la única posibilidad del progresismo de responder a las exigencias de esta coyuntura. Al fin y al cabo, si el socialismo no aprovecha la circunstancia de que la sociedad paraguaya esté más polarizada que nunca por motivos ideológicos, ¿cuándo lo hará?

Dos meses después, su incapacidad de reaccionar es palmaria. Envueltos en un paralizante vaho de intransigencia y falsos debates, dejan pasar los días como si tuvieran todo el tiempo del mundo para presentar sus ideas a unas bases populares expectantes de la ruta a seguir. Divididos en dos subgrupos de nombres tan poco socialistas como originales -G11 y G9- no aceptan ningún método válido para elegir al candidato a presidente.

La popularidad de uno de ellos, Mario Ferreiro, ha desequilibrado la discusión. Objetan su falta de militancia interna, su origen extrapartidario y su escasa experiencia política, cuando, en realidad, están más preocupados por los lugares que ocuparán en las listas parlamentarias. Es por eso que ante la prensa los argumentos parecen tan triviales e imprecisos: se necesita más debate, lo prioritario es el programa, hay que definir mejor el modo de elección, los plazos son flexibles, etcétera.

Puestos a dilatar y montados en el silencio de Lugo, se encaramaron de una hipótesis de cumplimiento imposible: su reelección. Toda la derecha sonreía satisfecha ante lo fácil que sería desmantelar semejante hipótesis. Ganaron dos semanas, pero van perdiendo el apoyo de mucha gente que los sigue viendo tan sectarios y cortoplacistas como antaño. La izquierda tiene la obligación de mostrar a los observadores del mundo -que, créame, nos siguen mirando con interés y extrañeza- que ha madurado y es capaz de ofrecer un proyecto esperanzador.

Se les acaba el tiempo de estar a la altura de las circunstancias. Para lo testimonial ya hubo suficiente en las últimas décadas de nuestra historia.

 

 

LAS PESADILLAS DEL CANCILLER

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 18 Agosto 2012

 

No quisiera estar en los zapatos del canciller. El cargo que todo diplomático aspira se ha convertido en penosa carga pública. Ninguna embajada del vecindario le atiende el teléfono, pero eso no es lo peor. No puede viajar a ningún lado y si aparece en un lugar público es escrachado. Pero tampoco eso es lo peor.

Lo realmente humillante es tener que dar la cara para intentar explicar lo que en verdad quiso decir Federico cuando propuso hacer un referéndum sobre nuestra salida o no del Mercosur. Fue un blooper de dimensiones oceánicas, por ser completamente inconstitucional. Y, encima, no lo dijo una vez, sino dos: en una radio y en un acto público. Si no estoy yo, ¿no hay nadie que pueda asesorarlo?, se habrá preguntado el rabioso canciller.

Pobre canciller, no hay nada que él pueda hacer para revertir el aislamiento en el que nos metió la aventura parlamentaria y, sin embargo, le exigen milagros. Hasta sus antiguos aliados de la prensa se están exaltando. Ahora lo tratan de timorato y dubitativo. Quieren medidas soberanamente radicales. Quieren rupturas, quieren gritos de independencia.

El canciller -que conoce de estos asuntos- debe estar pensando que son unos insensatos. Nuestro futuro fuera del Mercosur es bastante negro. Recurrir a La Haya podría llevar más de una década. Igual, en el Parlamento lo tratan de tibio. Una injusticia, pues parecen no enterarse de que la Cancillería es ninguneada hasta por funcionarios de las aduanas de Foz de Yguazú y Posadas.

El canciller debe estar hastiado. Ya ni siquiera le importa lo que decida el Congreso sobre el protocolo de ingreso de Venezuela al Mercosur. Que hagan lo que quieran, debe pensar, total Chávez ya está adentro y nosotros afuera.

La verdad, ser canciller así no tiene gracia. Lo han expulsado de la Asociación Latinoamericana para los Derechos Humanos por "prestar su nombre para intentar revestir de legitimidad a un gobierno nacido de una maniobra política reprobable". Es demasiado. Justo a él, que defendía dichos derechos en foros internacionales durante el stronismo.

Debe tener ganas de marcharse a su casa, el canciller. Tampoco lo puede hacer, pues se le adelantó Hugo Saguier Caballero, embajador ante la OEA, quien ha decidido dedicarse a menesteres más sanos. No quisiera estar en los zapatos del canciller. Todavía le queda un largo año de soledad.

 

 

 

¿QUÉ HAY EN LAS SIETE CAJAS?

Publicado por: Alfredo Boccia| Sábado 11 Agosto 2012

 

Reconozco que estoy comprendido en las generales de la ley, pues soy amigo de los directores de la película y mi esposa colaboró con la producción.

Dicho esto, quiero compartir una de las emociones más agradables que haya vivido en los últimos tiempos. Estuve en el preestreno de Siete Cajas, el filme de Tana Schémbori y Juan Carlos Maneglia, presentado al público luego de un largo itinerario de esfuerzos colectivos, de paciencia de orfebre y unas ganas capaces de arrollar cualquier obstáculo.

Había escuchado las anécdotas y los dramas vividos por el equipo en las grabaciones nocturnas en pleno Mercado 4. Con un presupuesto suficiente las escenas se hubieran filmado en un set que reprodujera la estructura de las casillas y puestos de venta. Pero como eso no existía, hubo que hacerlo allí mismo, mimetizándose e interactuando con los habitantes de ese mundo casi irreal que transita sus pasillos. El equipo de filmación se incorporó a ese paisaje urbano con la misma naturalidad que muchos vendedores se incorporaron como extras a la película.

Esa acertada mezcla de actores veteranos y novatos y un numeroso contingente técnico auguraba un resultado fantástico. Mis temores de un optimismo excesivo se desvanecieron en septiembre del año pasado cuando Siete Cajas ganó el primer premio en el Festival San Sebastián en la categoría Cine en Construcción. Este trofeo permitió darle una calidad estética aún mayor al largometraje, aunque retrasó su presentación.

Y ahora, por fin, asistí a este thriller vertiginoso, atrapante y, a la vez, divertido.

Creo que sentí lo mismo que todos: una mezcla de orgullo, emoción y regocijo al ver que una película nacional puede ser de gran nivel sin renunciar al insuperable sabor local. Lo mejor es la identificación que uno siente con personajes que se mueven en lugares conocidos y hablan en ese idioma tan parecido al castellano, con el que nos comunicamos los paraguayos.

Siete Cajas no da respiros, pero tampoco tiene golpes bajos. El suspenso se rompe impensadamente con salidas hilarantes y la banda sonora del grupo de rock Revolber se acopla perfectamente a la acción.

Los dos principales protagonistas tienen una actuación soberbia. En la mitad del filme la sala estalló en aplausos al reconocer al recientemente fallecido Beto Ayala en el breve pero impagable papel de un travesti del mercado. Y, luego, la propia Tana -tal como acostumbraban hacer Alfred Hitchcock y Stephen King- aparece fugazmente en el papel de una médica de urgencias.

En un país golpeado por sus avatares políticos y sociales, estos éxitos obtenidos con presupuestos bajos merecen celebrarse. Una pléyade de cineastas jóvenes -héroes y heroínas del talento- nos demuestra que es posible otro Paraguay. En cuanto al contenido de las siete cajas, ya se imagina que no lo contaré. Usted no me lo perdonaría.

 

 

PERLAS DE LA CONTRARREFORMA AGRARIA

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 04 Agosto 2012

 

A Fernando Lugo se le ha criticado por no cumplir su promesa de impulsar una reforma agraria. La lentitud de los cambios fue la característica de sus cuatro años de gobierno. La desigualdad en el campo siguió, hasta que explotó en Curuguaty.

En menos de un mes la conducción de Federico Franco ha dado muestras de tener una hoja de ruta y la decisión de cumplirla a rajatabla. Lo notable es que apunta en dirección exactamente contraria. Veamos las primeras perlas de esta verdadera contrarreforma.

Franco prometió atender el pedido del gremio sojero de que se derogue la franja de seguridad fronteriza. Se trata de una ley que prohíbe que un extranjero sea propietario de tierras ubicadas a menos de cincuenta kilómetros de la frontera. Todos los países de la región tienen leyes similares. La del Paraguay ni siquiera afecta a aquellos asentados antes de 2005, pero los sojeros argumentan que solo sirve para propiciar ocupaciones de campesinos "sin tierra".

El Senave, organismo estatal que controla la calidad de las semillas, habilitó una variedad de algodón transgénico de la multinacional Montsanto que la administración anterior había rechazado. Se anuncia una desrregulación de las fumigaciones.

Nada sorprendente, pues las gallinas están al cuidado del zorro. El nuevo jefe del Senave es accionista de Pacific Agrosciences, una empresa dedicada a la venta de agroquímicos, situación incompatible con su cargo.

Franco solicitará una ley que permita la venta a precio de mercado de las tierras destinadas a la reforma agraria. Sostuvo que "los ricos deben pagar dicho precio para que el Estado pueda favorecer a los pobres". Solo que los pobres se quedarán sin tierras estatales donde producir alimentos y el Indert se convertirá en una simple inmobiliaria.

De hecho, el Indert ya ha anunciado que dejó sin efecto la mensura judicial de las tierras de Ñacunday. Es decir, el Gobierno renunció a aclarar la situación real de 257.000 hectáreas. Como tampoco existe la intención de gravar con impuestos al agronegocio, se puede asegurar que caminamos hacia una mayor concentración de la tenencia de la tierra. El Estado renuncia a limitar los abusos de un modelo productivo que excluye a la enorme mayoría campesina.

Si por no hacer la reforma, explotó Curuguaty, ¿qué podrá ocurrir si avanza esta contrarreforma?

 

 

¿POR QUÉ SE VAN TAN PRONTO?

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 28 Julio 2012

 

Con distancia de pocas horas, tuvimos dos pérdidas dolorosas. Nos ha dejado Celso Bazán, un iteño entrañable, insuficientemente valorado por su comunidad y la ciudadanía en general. La posteridad, sin embargo, lo recordará como un modelo de paraguayo que cruzó con digna tenacidad una época de indiferencia y desprecio al trabajo cultural.

Pese a sus dificultades físicas, el profesor Bazán se pasó las últimas cuatro décadas educando a niños pobres a través de la música. Creó en Itá una escuela, a la que le puso el nombre de Herminio Giménez y en la que centenares de chicos y chicas aprendieron a ejecutar guitarra culta, violín, viola, violonchelo, contrabajo, trompeta, clarinete, flauta traversa, trombón y saxofón. Eran estudiantes que hoy están diseminados en orquestas del país y el exterior y han reproducido su escuelita de música en varias ciudades del interior.

Me apropio aquí de un texto escrito por el maestro Luis Szarán: "Cada tarde al regresar a su pueblo -y como era el único en todo Itá que realizaba esa tarea- enseñaba a sus vecinos, niños y adolescentes, todo lo que aprendía en la Escuela Municipal de Canto de Asunción. Ese Conservatorio de Música, iniciado bajo una planta de mango, fue creciendo año tras año con la ayuda de sus parientes y amigos. Celso es el ejemplo más profundo de que no existen barreras para la superación. Como un hechicero, convirtió sus muletas en un mágico instrumento de amor y paz".

Y también se nos ha muerto Emilito. El enorme poeta y crítico literario de la promoción del setenta, Emilio Pérez Chaves, era un referente indispensable de la mejor historia de la Academia Literaria del Colegio San José, de las revistas Criterio y Época y de los ensayos y escritos de la última generación paraguaya que creyó en la cultura como arma revolucionaria.

Emilio era de corazón bueno y mente brillante. Despreocupado de los asuntos que angustian a sus congéneres y de una ingenuidad inimputable, era capaz de obsequiarnos una conversación vivaz, repleta de citas clásicas y una mirada mordaz y creativa sobre la situación política. Había dejado de escribir, pero no faltaba a los lanzamientos de libros, en los que su robusta estatura le impedía pasar desapercibido.

La última vez que lo vi se me ocurrió preguntarle por qué no había aparecido ningún otro escritor paraguayo después de Roa Bastos. Su respuesta fue lacerante: "Porque no hay más exilio. Mirá, socio, todos los creadores en prosa, poesía y música que tuvimos en el último medio siglo cimentaron su obra fuera de esta isla. Desde que se fue Stroessner ya nadie sale". Emilio mitigaba su ironía con una sonrisa amplia y contagiosa.

¿Por qué se van tan pronto los paraguayos indispensables? ¿Por qué los otros, esos que pueblan nuestras pesadillas cotidianas, ni se resfrían?

 

 

LA IGLESIA PARAGUAYA Y LA CRISIS POLÍTICA

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 21 Julio 2012

 

Cuando muchos ciudadanos no terminaban de entender los vertiginosos acontecimientos del pasado junio, un rayo esclarecedor surgió en el firmamento moral de la nación. La jerarquía católica, representada por el nuncio apostólico Eliseo Ariotti, se apresuraba en difundir la bendición eclesial al nuevo Gobierno. Monseñor, sobreactuando en fotos, misas y declaraciones, fue uno de los únicos representantes de la comunidad internacional en reunirse con Federico Franco. Era, también, el rayo vengador del Vaticano contra los desaires de Fernando Lugo.

Los años de entrenamiento seminarista en la disciplina de la discreción no impidieron que algunos obispos exteriorizaran su regocijo ante el cambio ocurrido.

Fueron los primeros en pedirle a Lugo que renunciara, ofreciendo argumentos a los senadores que los necesitaban para sostener "los hechos de público conocimiento" que justificaran el juicio político exprés.

Ni una sola mención a la ruptura de nuestro frágil proceso democrático ni a la congelada inequidad social ni a la necesidad de llamar a una urgente reunión de la Conferencia Episcopal Paraguaya. Monseñor Claudio Giménez llegó a afirmar alegremente que Lugo "estimulaba la lucha de clases", sin aportar el menor dato objetivo que lo probara.

Muchos días después los obispos tuvieron una "autocrítica" sobre su actuación sesgada y anunciaron -tal como lo hizo casi invariablemente la jerarquía católica en cada uno de los golpes de Estado latinoamericanos- una campaña de "pacificación social".

Esta vez les arruinó el libreto el obispo de Ciudad del Este, Rogelio Livieres, quien no pudo contenerse ante los micrófonos y acusó a Lugo de adoctrinar a monjas, enviar a jóvenes a Venezuela y Cuba y convertir a las capillas en comités políticos. Ni Sabino Augusto Montanaro se hubiera animado a tanto...

Pero como los fieles, laicos, monjas y curas paraguayos se consideran hijos de Dios y no ciudadanos del Estado Vaticano han empezado a contestar desde los cimientos mismos de esa Iglesia a una actitud de sus jefes que no representa el sentir de todos. No están "resignados", como afirmó el obispo Giménez. Muchos de ellos están impotentes o indignados. La Pastoral Social Nacional califica lo sucedido como un golpe de Estado. También repudian el posicionamiento obispal los coordinadores diocesanos y el Secretariado Nacional de la Pastoral Social, la Conferencia de Religiosos y Religiosas, organizaciones parroquiales del interior y varias órdenes sacerdotales y entidades católicas.

Desde la mitad de los años setenta del siglo pasado, cuando una parte del clero rendía honores a Stroessner y otra parte apoyaba la resistencia a la dictadura, la Iglesia no había pasado por una división tan profunda.

La jerarquía ha ido más allá de lo prudente. Los obispos deberían hacer una profunda y humilde reflexión.

 

 

PAREN UN POCO LA MANO

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 14 Julio 2012

 

Creí con sinceridad que habíamos hecho progresos notables en materia de tolerancia y respeto a las opiniones ajenas. Estas dos décadas de convivencia democrática habrían servido aunque sea para eso, intuía.

Bastaron unos pocos días -los que siguieron a la destitución de Lugo- para que asistiéramos a una embestida furiosa de las ideas más fascistas y retrógradas que, por lo visto, subyacen con buena salud en nuestra sociedad. Esta oleada de derecha ha envalentonado a muchos, hasta el punto de descuidar la máscara seudodemocrática que estaban obligados a portar.

Eso pensé al escuchar al senador José Manuel Bóbeda aseverando que los dos principales enemigos del pueblo paraguayo eran el marxismo leninismo y el matrimonio gay. Luego de unas cuantas elucubraciones jurásicas, llegó a la fácil conclusión que el luguismo representaba ambas cosas.

O cuando el diputado José López Chávez, luego de desplegar un ultranacionalismo enfermizo, reconoció que solicitó a generales norteamericanos la instalación de una base militar en el Chaco. El parlamentario imploró a los Estados Unidos que envíe sus marines a hacerse cargo de una parte de nuestro territorio para darnos seguridad y ofrecer ayuda humanitaria a los pobladores. Es un nacionalista de lo más curioso, este buen señor.

En las redes sociales es posible encontrar comentarios que reivindican al ex ministro del Interior de Stroessner, Sabino Augusto Montanaro, y que lamentan que no esté aquí para observar esta nueva victoria sobre el izquierdismo internacional. Llevados por este arrebato de histeria soberana, los concejales de Ciudad del Este proponen retirar un busto del libertador Simón Bolívar como represalia por los agravios de Hugo Chávez. ¿No hay nadie capaz de decirle a estos obtusos que deberían bajar un cambio?

El ubicuo Alfredo Jaeggli pide la suspensión de dos de los tres senadores que representan a la izquierda en la Cámara. ¿Hay que acallar todas las voces? Pedro Fadul pierde su habitual moderación y comenta la Asamblea de la OEA en su muro de Facebook de este modo: "curepa de m... que habla en representación de Argentina. Si seeeráannn hijoooss de p... estos imbéciles! ¡Claro! Todo apoyado por Lugo y su izquierda tarova...".

En medio de tanta militancia periodística, de tanto deschave ideológico, hay que concluir que no avanzamos tanto como yo había intuido. Pero tampoco hay que volver a Neandertal. Paren un poco la mano...

 

 

LA CUARTA LEY DE LA DIALÉCTICA

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 07 Julio 2012

 

En estos días participé de un seminario internacional sobre la Operación Cóndor en Brasilia, organizado por la Cámara de Diputados del vecino país.

Los brasileños -con cierto atraso con respecto a los países de la región- han instalado una Comisión de Verdad y se vuelcan a descubrir lo sucedido en el pasado reciente. El evento fue oportuno para reencontrarme con los más importantes investigadores de la memoria histórica sudamericana, uno de los temas que me apasionan.

Fue inevitable que en las charlas informales surgieran preguntas del tipo ¿hubo un golpe de Estado en Paraguay? ¿Por qué? A mí, más que contestarles, me interesaba saber qué pensaban ellos -periodistas, sociólogos, historiadores-, todos bien informados en cuestiones políticas, desde una visión más alejada de las pasiones que hoy enfrentan a la sociedad paraguaya.

El contexto general que tienen del Paraguay es el de un país con una histórica vocación autoritaria, con una democracia joven y frágil que no pudo dar solución a los problemas derivados de la desigualdad y la pobreza y con una derecha terrateniente y retrógrada. Las opiniones sobre Lugo variaban según el mayor o menor peso que cada interlocutor otorgaba a los escándalos que jalonaron su vida y a su falta de cintura política. En lo que había unanimidad era en que no se lo podía acusar de ser socialista ni de haberse sumado al polo bolivariano. Lo de Paraguay, lo dijo alguien, era solo un progresismo retardado.

La desconfianza sobre los motivos que llevaron a la destitución de Lugo se centra en la imagen de enorme corrupción que tiene el Parlamento y en la sujeción de los partidos tradicionales a los intereses de los verdaderos poderes fácticos del país.

No les extrañó que las Fuerzas Armadas se hayan mantenido prescindentes durante la crisis.

El neogolpismo ya no las necesita como en la década del setenta, por lo menos en las democracias menos sólidas, como la de Honduras y la de Paraguay. Hoy los golpes son más amables, tienen un barniz de legalidad y ya no derraman tanta sangre. Pero los intereses que los mueven siguen siendo los mismos.

El daño producido a una institucionalidad -que ya era gelatinosa antes de lo ocurrido- se aprecia en la tapa de la revista Carta Capital, que trae la foto de Lugo con la frase: "En lo del vecino es más difícil recibir una multa de tránsito que destituir un presidente".

Dejaron, sin embargo, un resquicio al optimismo. Sostienen que hay procesos sociales que no podrán ser contenidos. Al respecto, el periodista uruguayo Samuel Blixen recordó una anécdota de los años en que era preso político durante la dictadura. Decía él que los compañeros se preguntaban por qué habían fracasado, teniendo la razón. Entonces les habló de la poco conocida cuarta ley dialéctica de Marx: se trata de un retroceso transitorio del avance. Algunos tardaron en enterarse de que la ley no existía.

 

 

EL CONSERVADURISMO PARAGUAYO

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 30 Junio 2012

 

La crisis actual ha dividido de manera profunda a la sociedad paraguaya. Solo en las décadas del treinta o el cuarenta del siglo pasado hubo conflictos políticos con un sesgo ideológico tan marcado. Fue la resolución dramática de una extraña singularidad nacional: un presidente que se decía socialista, al frente de un país con una matriz social y política extremadamente conservadora.

No fue una crisis partidaria, pues en uno de los polos del conflicto están agrupados por lo menos cinco partidos políticos y, en el otro, una difusa constelación de pequeños partidos de izquierda y organizaciones sociales. Fue una crisis ideológica, en la que a la coalición conservadora se sumaron poderosas fuerzas externas, como los gremios empresariales, la jerarquía católica y buena parte de la prensa comercial.

Esto contrasta con una realidad soterrada: la enorme desigualdad social que puede llevar a una espiral de violencia en el campo. Recuerde que fue en Curuguaty donde detonó la conmoción pública que aprovecharon los oportunistas políticos para cargarse al gobierno de Lugo.

Esa visión conservadora, incapaz de comprender los cambios que se están produciendo, explica el clima de guerra fría y anticomunismo visceral que observamos. Se ha reflotado un lenguaje prehistórico que tiene reminiscencias de Alejandro Cáceres Almada y La voz del coloradismo. Volvemos a escuchar "zurdaje", ideologías foráneas, idiotas útiles, izquierda nunca más y otros oxidados términos que descalifican como "bolivariano" todo lo que se mueva y lo asimila a lo delincuencial.

La derecha prefirió sacarse al Lugo que tenían atragantado desde 2008 que medir el daño institucional que provocarían. Tenían un dolor ideológico, puesto que no podían acusarlo de haber afectado sustancialmente sus negocios. Al contrario, muchos de ellos tuvieron más ganancias en los años de Lugo que durante los gobiernos colorados. Varios de los nuevos ministros aseguraron que seguirán la línea de sus predecesores. Igual, Lugo era insoportable, era socialista.

Ahora, ¿en serio lo era? A veces lamento que no lo haya sido de verdad. Lugo solo abrió caminos incipientes para que el Estado se vuelque un poco más hacia lo social, hacia los excluidos. Eso fue inédito, pero no puede calificarse de socialismo.

El conservadurismo nativo está ahora sorprendido del duro juzgamiento que la comunidad internacional tiene sobre lo que hicieron. Están desinformados, dicen. En su propia mirada, chata y anacrónica, bastará con apelar al indómito león guaraní para enfrentar a la Triple Alianza y los legionarios paraguayos.

Con puro nacionalismo y códigos políticos del siglo antepasado pretenden responder las demandas sociales del más desigual de los países de Sudamérica. Pobre Paraguay, tan pobre y tan conservador.

 

 

POBRE PARAGUAY

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 23 Junio 2012

 

El proceso político paraguayo ha recibido en estos días una inexplicable puñalada.

La trabajosa construcción de la democracia avanzó penosamente durante las dos décadas de una transición tutelada por militares y hegemonizada por el Partido Colorado. La alternancia pacífica en el poder significó, por eso, un paso inédito en nuestra historia. Empezábamos a acostumbrarnos al ritmo natural de cambiar presidentes cada cinco años por vía electoral.

Hasta hace unos días eso no estaba en discusión y los partidos se ocupaban de sus campañas electorales internas. Hasta que ocurrió la masacre de policías y campesinos en Curuguaty.

Ese suceso inesperado, que conmocionó a la ciudadanía, tenía las características de una acción planificada. Hasta ahora, nadie tiene en claro quiénes y con qué fines ordenaron la matanza. Tampoco hay el menor indicio de la participación de Fernando Lugo en el hecho.

Como sea, la ANR decidió impulsar un juicio político al presidente. Hasta allí, parecía una mera estrategia electoral con el fin de desgastar su imagen al final de su mandato. El increíble efecto dominó que ocurrió en las horas siguientes se inscribirá en la historia del más sórdido oportunismo nacional. La aventura en la que se han embarcado los partidos políticos que se sumaron al juicio político es un ejemplo paradigmático de la primacía de intereses sectarios sobre el interés de la nación.

Como carecían de causales racionales que justificaran una medida tan extrema, optaron por hacerlo a toda prisa. El libelo acusatorio causa vergüenza ajena de tan risible, no cuidaron los mínimos formalismos legales y atropellaron el respeto a los plazos prudenciales para la defensa. Lo hicieron los colorados, pero también los liberales, hasta entonces aliados de este Gobierno. Una traición llevará a uno de ellos a una efímera presidencia. De todas las ocasiones históricas en que el liberalismo llegó al poder, esta es la más innoble. Patria Querida sumó sus votos, ratificando su creciente sesgo ultraconservador. Y, para mi sorpresa, también lo votó Desirée Masi, quien algún día tendrá que explicar a sus hijos por qué lo hizo.

Por voluntad de sus parlamentarios -los mismos que, hace dos semanas, eran repudiados por corruptos-, el Paraguay se sumerge en un tiempo de incertidumbre y turbulencias. Lo hacemos en un momento de estabilidad económica que no conocíamos en muchas décadas y a nueve meses de las elecciones. Pagaremos el alto costo de ser calificados de republiqueta impredecible por la comunidad internacional.

Nos derechizamos, es cierto, pero también nos hondurizamos. Los cancilleres de Unasur han observado "in situ" este arrebato político que podrá caber en la Constitución, pero jamás en la comprensión de los sensatos.

Bueno es guardar este dato: el golpe de Estado -igualmente institucional- de Honduras produjo una caída de casi el 6% de su PIB anual. Hacia eso nos encaminamos con irracional entusiasmo.

 

 

CINCO MINUTOS DIARIOS DE ESTUPIDEZ

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 16 Junio 2012

 

El escritor Elbert Hubbard sostenía que todos tenemos derecho a cinco minutos de estupidez al día. Y que la sabiduría consiste en no rebasar ese límite. Esta semana hubo tres ejemplos de lo difícil que puede resultar contener al desequilibrado que todos llevamos adentro. Los líos judiciales y las vergonzosas disculpas públicas hubieran podido evitarse con una mínima reflexión previa.

A partir de un rumor -que resultó ser falso- un grupo de "protectores de perros" decidió realizar un operativo nocturno para rescatar los canes que una familia coreana proyectaba comer. Irrumpieron con violencia en la casa de una pareja de ancianos y les robaron sus mascotas. Pero lo más grave sería lo que captaron las cámaras de televisión: una increíble catarata de insultos xenófobos. En este menester se lució una joven de aplastante vulgaridad que trató al dueño de casa como "perro de mierda". Curioso en una "defensora de perros", ¿no?

El escándalo obligó al grupo a declarar ante la Fiscalía, a devolver los perros y a resarcir los daños. Con un tonito de voz mucho más ajustado a las reglas de urbanidad, pidieron perdón público.

Otro caso: un joven hincha olimpista fue asesinado a balazos en Fernando de la Mora, en un episodio que se sigue investigando. Una persona identificada en Facebook como Davichu Azulgrana Ayala sorprendió con posteos que celebraban lo sucedido. "Seguimos festejando la muerte del olimpero puto" y "Ahora son 4 millones menos 1, jaja, de a pokito vamos a matar a todos los puercos", eran algunos de sus mensajes, que rezumaban estupidez en estado puro.

La reacción fue asustadora. Tanto, que Davichu tuvo que bloquear su cuenta de Facebook y reabrirla solo para emitir un mensaje de disculpas a la familia del fallecido. De nuevo, el estilo había perdido arrogancia: "No soy lo que piensan, soy un hincha común y corriente". Igual, será investigado por la Fiscalía.

El último ejemplo: César Burián, presidente de la Asociación de Músicos del Paraguay, defendía hace unos meses una polémica ley del músico en el programa televisivo de Héctor Riveros. Fue refutado por el cantante Alberto de Luque, a quien Burián no tuvo mejor idea que descalificar diciendo: "Sos un disparatado porque se dice que Mens sana in corpore sano, y vos tenés el cuerpo enfermo". Se refería al accidente de tránsito sufrido por Alberto de Luque que le había costado la amputación de una pierna. Burián fue echado del programa, repudiado por sus colegas músicos, llevado a la Justicia y, en estos días, tuvo que retractarse públicamente de sus infelices dichos.

¿Qué nos estará pasando? ¿Por qué tanta violencia? ¿Será el calentamiento global? Andamos superando la dosis tolerable de los cinco minutos diarios.

 

 

LAS CINCO REGLAS DEL ENGAÑO

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 09 Junio 2012

 

La abrupta inauguración de la Avenida Costanera dejará para el recuerdo la imagen simbólica y sobrecogedora de la fila de autos de los senadores que huían.

Era la segunda vez en menos de una semana que los representantes del pueblo se retiraban presurosos por temor a sus representados. Hasta allí, todos de acuerdo.

Pero luego ocurrieron los ataques vandálicos contra locales partidarios y el estudio jurídico Tuma. Eso es repudiable. Y no porque creamos en un pacifismo a ultranza al estilo Gandhi, sino porque es una equivocación estratégica.

La violencia ofrece argumentos a políticos y partidos necesitados de un libreto. Estos maestros de la manipulación -como ya se habrá dado cuenta- aprovecharán los excesos de la protesta para victimizarse y denunciar sórdidos complots contra la sagrada institución parlamentaria.

Esa es justamente la primera regla de la engañosa defensa: hacer creer que las críticas no son contra algunos senadores haraganes y sinvergüenzas sino que, en realidad, se busca la destrucción de los partidos políticos y la democracia. La segunda consiste en instalar la idea de que la violencia no se debe al descontrol de algunos exaltados, sino a un plan fríamente calculado en oscuras oficinas gubernamentales.

El vandalismo permite dirigir las culpas hacia otro lado.

La tercera regla es deslegitimar a las cabezas visibles de la protesta. Por eso, apenas ocurridos los ataques, Maximiliano Urbieta, uno de los organizadores del After Office Revolucionario, fue el principal acusado, pese a la ausencia de evidencias contra el mismo.

La cuarta regla es infaltable: la prensa es la responsable. No es que la gente esté muy enojada, lo que pasa es que está influenciada por el ambiente hostil creado por algunos medios. Los fines son, como siempre, difusos e inconfesables.

La última regla es disimular el miedo. Estas protestas ciudadanas comenzaron inesperadamente y nadie puede asegurar cómo continuarán. Son imprevisibles e incontrolables pero, mientras se pueda, hay que demostrar entereza. Eso explica las bravuconadas escuchadas en la última sesión del Senado. Esos discursos del tipo "no voy a cambiar de opinión porque trescientas personas ignorantes se manifiestan" o "¿por qué no bajan al ruedo y se candidatan ellos?" contrastan con aquella patética imagen de la huida colectiva de la que hablamos al inicio.

No hay que caer en el error de la violencia innecesaria. Hay que controlar la rabia y entender que el vandalismo convierte en víctimas a los culpables del enojo colectivo. Y que estos son muy hábiles para la manipulación. No los dejemos en paz, pero tampoco les demos el gusto de ser violentos.

 

 

EQUIVOCADO, GRACIAS A DIOS

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 02 Junio 2012

 

Nunca fui bueno para predecir comportamientos colectivos. Recuerdo que, hace años, escribí una columna titulada "¿Dónde están?", en la que sentenciaba que los jóvenes eran apáticos y desinteresados de los asuntos nacionales. Fue pocas semanas antes del Marzo paraguayo, la más impresionante marea juvenil de protesta que haya visto este país.

Ahora me veo obligado a reconocer que hace unos meses escribí el comentario "Nuestras calles no tienen indignados", en el que expresaba que si los diputados tuvieran miedo a la indignación ciudadana no se animarían a tanto despilfarro del dinero público. Pero -pontificaba yo- la ola mundial de los indignados tardará en llegar a las calles del Paraguay. Me equivoqué una vez más. Gracias a Dios.

El fenómeno planetario llegó sin aviso previo. Bastó que la ciudadanía asaltara la calle en pequeña multitud para dar un susto memorable a los políticos. Fue una de las mejores noticias para la famélica democracia paraguaya. ¡Qué día aquél! Tenía la poesía de algunas miles de gargantas gritando "¡hijos de puta!" en una noche de palabrotas liberadas y temblores que se adivinaban.

No eran tantos, pero, sin líderes a quienes acusar, sin ómnibus ni banderas partidarias, con el kuerái a flor de labios, preanunciaban que podrían ser muchos más y que escapaban a todo control político tradicional. Por eso metían miedo. Por eso casi todos los parlamentarios prefirieron desaparecer. Los pocos que intentaron guardar la compostura ensayaron respuestas ridículas como: "Esto fue organizado por el luguismo para destruir a los partidos políticos y suspender las elecciones" o "solo son un grupito de conservadorcitos acomodados que no conocen la necesidad de trabajo de la gente". Ellos también estaban equivocados. Gracias a Dios.

Ellos, los que se habían acostumbrado a pagar nimios precios políticos por sus abusos, descubrieron de golpe la vergüenza del escrache, la incomodidad de sentirse sórdidos y odiosos, el temor de no ser reelectos. Empezarán a tener más cuidado, intentarán recomponer su imagen frente a la ciudadanía. Y este es el punto al que quería llegar.

Como no es legal matarlos y, si lo hiciéramos, igual serían reemplazados por otros, propongo un trato que lograría reconciliar a los políticos con la ciudadanía. Hay un poder del Estado aún más corrupto que el Parlamento: el Judicial. El reemplazo de los ministros de la Corte Suprema atornillados ilegalmente a sus cargos por juristas probos y respetables sería un buen comienzo para reformarlo. El juicio político inmediato sería una manera magnífica de congraciar a los parlamentarios con la multitud que hoy los escracha.

Sería una salida buenísima, pero no creo que ocurra. No, jamás. Aunque, ya lo sabe, soy pésimo para las predicciones políticas. Gracias a Dios.

 

 

ODA AL OPERADOR

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 26 Mayo 2012

 

El operador -cualquiera sea su sexo, origen u ocupación previa- es ante todo un sobreviviente. Ha logrado vivir de la política, pero en uno de sus peldaños más bajos, más difíciles. Es un trapecista de la vida que conecta al candidato con sus votantes. En esa delicada interfase, no puede fallar ni al uno ni a los otros, pues su profesión estaría en peligro.

Eso. Un buen operador es, ante todo, un profesional. Como los buenos referís de fútbol, desoirá los llamados de su corazoncito y cumplirá su labor con lealtad. Con lealtad a quien le esté pagando, sea del partido que fuere. Esto explica que casi el 15% de los electores del padrón nacional estén afiliados a dos o más partidos.

Nadie se convierte en operador de la noche a la mañana. Tendrá que garantizar resultados, demostrar que maneja su cuadra, su barrio, su sector, su institución. Es decir, arrastrar votos hacia el candidato que él indique. Estos costos, que antes se limitaban a la campaña proselitista, hoy exigen un presupuesto para todo el año. El Estado es el único que puede pagarlos, mediante el Tribunal Superior de Justicia Electoral, institución que distribuye sueldos a los operadores de acuerdo a enigmáticos y cambiantes cupos por parlamentario. La gracia está en que los mismos sean contratados y no funcionarios permanentes. Si no tuvieran que renovar los contratos cada tres meses los casos de infidelidad política serían mayores.

El equilibrio entre el poder de la Justicia Electoral y las necesidades de los parlamentarios solo se logra por el temor a la mala imagen que ambos tienen ante la opinión pública. Es allí cuando el operador rentado es tildado de haragán e inútil. En realidad, el pobre es un sobreviviente.

Mantener a esos operadores se ha vuelto tan esquizofrénicamente indispensable que muchos diputados se atrevieron a enfrentar los escraches y las críticas con tal que el Estado les siga pagando. De buena parte de ellos no esperábamos nada, pero es inexplicable que Blanca Lila Mignarro nos quiera tomar del pelo. O que la esposa del vicepresidente de la República vote por conservar a sus operadores asalariados, mientras su esposo sataniza la decisión de Diputados. ¿Quién entiende al llanismo? ¿Cartes admitirá las bofetadas de algunos de sus diputados? ¿Víctor Bogado necesita hasta ese punto de operadores? En fin, ya lo ve. En medio de tanta impostura, el operador político es apenas un sobreviviente. Los delincuentes públicos de verdad están en la Cámara Baja y el Tribunal Electoral. Apuntemos bien. Recordemos sus nombres. No los votemos nunca más.

 

 

 

BESOS QUE AGRIETAN MUROS

 

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 19 Mayo 2012

 

Por tercer año consecutivo un grupo de jóvenes, desafiando prejuicios, se reunió en el centro de Asunción para una ceremonia simbólica que horroriza a muchos, ofende a algunos y divierte a otros. La llaman Besatón y con ella recuerdan el Día Internacional contra la Homofobia. Tal como suele ocurrir, hubo incidentes, aunque los de este año fueron de poca monta. Nada más que algunos insultos y forcejeos y una denuncia presentada en la Fiscalía contra Somos Gay, la organización que convocó al evento. De todos modos ningún fiscal mostró interés por el caso. A diferencia de años anteriores, no hubo políticos que intentaran impedir la manifestación.

En el Besatón del Bicentenario el concejal colorado Yamil Esgaib, luego de arrancar afiches que promocionaban el evento, presentó una minuta que establecía multas más altas a quienes exhiban "materiales pornográficos y obscenos en la vía pública". La Federación de Asociaciones por la Vida y la Familia (Fedavifa) consideró que los afiches eran "una falta de respeto a los próceres y al Bicentenario". En el 2010, el que se había opuesto había sido el diputado oviedista José López Chávez, considerando al acto como "calamitoso para la moral, pues instala una conciencia de degeneración".

Algo está pasando con el Besatón. Las crónicas periodísticas dicen que hubo cerca de 200 personas, más del doble de la asistencia del año pasado y diez veces más que la tímida veintena de pioneros del 2010. Al mismo tiempo, las repercusiones histéricas también son más raras. Eso no significa que no existan, basta leer los comentarios de los lectores a las noticias sobre el evento para comprobarlo. Se trata de un tema que divide opiniones y despierta las reacciones más extremas. Pero algo va cambiando. Al lado del griterío homofóbico y cavernícola, se leen también reflexiones más respetuosas, más tolerantes.

¿Será que el Besatón está empezando a lograr sus objetivos? No lo organizan con el simple ánimo de provocar a la sociedad conservadora y bienpensante sino para llamar la atención sobre una discriminación cultural que no considera a los gays y lesbianas iguales ante la ley y la vida. Se trata, en definitiva, de una cuestión de derechos humanos. Una cuestión en la que la visión de muchas naciones ha venido cambiando en las últimas décadas. Tanto que hace veinte años sería impensable que figuras como Barak Obama e Hillary Clinton dijeran lo que hoy dicen sobre los derechos de gays y lesbianas.

Muchos de esos cambios se fueron produciendo a golpes de visibilidad, a fuerza de choques culturales, de los cuales el Besatón es solo uno de ellos.

Es que el primer paso para acabar con la discriminación es lograr volverse visibles. Aunque eso pueda parecer ofensivo y atize el miedo a lo diferente.

Pero esas provocaciones también abren cerebros y corazones, agrietan muros mentales. Esos besos escandalosos nos recuerdan que, aunque diferentes, somos iguales.

 

 

EL ÚNICO IDIOMA QUE ENTIENDEN

Publicado por: Alfredo Boccia| Sábado 05 Mayo 2012

 

Lo sucedido en la Cámara de Diputados ilustra el modo en que funcionan ciertas cosas. Fue aprobado por unanimidad el proyecto de ley sobre el impuesto a la renta personal (IRP) que ahora pasa al Senado. Pese a que el mismo fue aligerado en varios aspectos -como la ausencia de obligatoriedad de la declaración jurada patrimonial- esta media sanción parlamentaria es un hito clave de una larga lucha.

Este proyecto venía siendo rechazado desde hacía más de seis años. De nada habían servido las explicaciones de que es un impuesto justo, pues quien tiene más, paga más; que contribuye a la formalización de la economía; que permite redistribuir la riqueza; que la carga tributaria de nuestro Estado es la más baja de la región y que el Paraguay era el único país de América Latina sin vigencia del IRP.

Con creativos argumentos, una mayoría de parlamentarios negaba sistemáticamente sus votos a los proyectos presentados. Eran excusas que omitían sus verdaderos dos motivos: primero, el IRP obligará a una mayor transparencia sobre el origen de los ingresos de las personas. Influyentes grupos económicos y funcionarios públicos que reciben dinero de fuentes inconfesables eran el soporte de la negativa. Y, segundo, no deseaban que el gobierno de Lugo se beneficie de un mayor ingreso tributario. Este punto fue expresamente reconocido por Lilian Samaniego, presidenta de la ANR.

En definitiva, el problema no era técnico, sino político. Y los políticos solo le temen a la presión ciudadana. Mientras no la sientan, se animan a todo. Pero les aterrorizan las movilizaciones en contra, los insultos masivos en las redes sociales, los titulares de prensa. Es decir, a todo aquello que pudiera restarles votos e impedir su reelección.

Esa presión proveniente de la gente tardó años en instalarse debido a la debilidad del movimiento social y del excesivo poder de la plutocracia. Pero fue creciendo de a poco, a medida que se fue entendiendo que el IRP establecía una mejor justicia tributaria y mayor inversión social. En estos años fueron sumándose a la iniciativa organizaciones no gubernamentales, gremios empresariales y numerosos formadores de opinión. Hasta que, finalmente, se constituyó en una amenaza a la imagen política de un número suficiente de parlamentarios.

En esta línea debe ser entendido el cambio de postura de los diputados del cartismo -lo que terminó arrastrando a todos los de la ANR, pese al mandato partidario- de la bancada oviedista y de los liberales renuentes. Oponerse al IRP se había vuelto impopular. Este es el idioma en el que hablan los políticos de casi todo el mundo. Lástima que en Paraguay cueste un poco que la gente se haga escuchar. Si el hastío colectivo fuera más sonoro, ni la Corte Suprema se atrevería a tanto desparpajo ni el Tribunal Superior de Justicia Electoral contrataría a tantos planilleros.

 

 

LA LETAL MENTIRA BLANCA

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 28 Abril 2012

 

Por un sesgado cromatismo lingüístico, una mentira blanca (white lie) es una mentira piadosa. Algo falso que se dice más con la intención de evitar una ofensa que de engañar. Es una mentirilla benevolente que intenta hacer más digerible una verdad y evita fricciones innecesarias. La usamos al decir a un enfermo que se lo ve mejor, cuando es lo contrario. O al contarles a los niños historias de Papá Noel.

Los filósofos han discutido sobre las mentiras blancas. Las posiciones varían desde el absolutismo de Kant, para quien no mentir es una ley moral inviolable, hasta los menos estrictos, que aceptan situaciones en las que puede aprobarse una verdad engañosa. El ejemplo clásico es el de San Atanasio, quien remaba en un río cuando los que lo perseguían le preguntaron "¿dónde está el traidor de Atanasio?", a lo cual respondió tranquilamente, "no está lejos".

En lo que hay acuerdo es que cuando se oculta algo para obtener provecho personal, la mentira deja de ser blanca. Y cuando proviene de un alto magistrado de la Justicia que brinda información falsa a un órgano del Estado para beneficiarse del consiguiente engaño a la ciudadanía, la mentira es una monstruosidad institucional. Sindulfo Blanco no fue consciente de la gravedad de su confesión.

Por eso dejó atónito a Guillermo Domaniczky -el periodista radial que lo entrevistaba- ante la inesperada perla. "Yo mentí, confieso que mentí, pero fue una mentira de salvación", dijo. Días después intentó arreglarlo, pero ya era tarde. "Fue un lapsus cálami", aseguró. Volvía a equivocarse, pues esa locución latina significa error involuntario al escribir y lo suyo había sido un tropiezo al hablar, es decir, un lapsus línguae. Reconoció que su "cabeza no anda muy bien", lo cual debe ser cierto, dado lo confuso de algunos de sus argumentos: "yo había dicho lo que él dijo que yo dije en el 2004". Como sea, lo que el ministro Blanco logró es atraer toda la atención sobre él, para felicidad de los otros ministros, igualmente mentirosos.

El Senado perdió este capítulo de la crisis que generó. Pero logró reavivar la percepción colectiva de que reformar la Justicia es prioridad. El hartazgo se nutrió de historias de enriquecimiento ilícito, protección a narcos, tráfico de influencias e increíble morosidad en los fallos. Los miembros de esta Corte que se atornillaron a los cargos saben que se irán en poco tiempo, es necesario para que la ANR -único partido que les apoya- comprenda que seguir negando sus votos al juicio político puede tener costos electorales calamitosos.

Pero hasta que eso ocurra, ellos seguirán allí, sin la menor intención de renunciar, dispuestos a dar batalla por el dudoso privilegio de integrar la Corte Suprema de Justicia con peor imagen pública del último cuarto de siglo. No hablemos de ética porque, para eludirla, siempre hay alguna mentirilla blanca.

 

 

La sudamericanización del Primer Mundo

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 21 Abril 2012

 

Algo le pasa al primer mundo. Se están sudamericanizando. Están haciendo cosas que, según ellos, solo las hacíamos nosotros, los sudacas. Bastan tres ejemplos de esta semana para que me entienda.

Caso 1: el rey de España, don Juan Carlos, se fractura la cadera durante un safari en Botsuana. Si no fuera por el accidente, los españoles no se enterarían de sus vacaciones ni se hubiera publicado la, hoy impúdicamente célebre, foto de su majestad frente a la presa abatida: un elefante. El monarca aceptó la invitación de un millonario árabe para cazar un animal en vías de extinción y por cuya supervivencia trabajan entidades ambientalistas. Para más inri -por usar una expresión típicamente española- el rey es presidente de honor de la más prestigiosa de las mismas: la WWF.

La estupefacción mundial ante esa conducta volvió a poner en discusión la necesidad de que en este siglo existan aún las anacrónicas monarquías hereditarias. Antes, actos tan procaces solo ocurrían en republiquetas sudamericanas gobernadas por dictadores lascivos y poco cultivados.

Caso 2: un número considerable de miembros del servicio secreto norteamericano, destinado a proteger la integridad del presidente Obama en la Cumbre de las Américas en Cartagena de Indias, contrata a igual cantidad de prostitutas para una noche de juerga desenfrenada en el hoy impúdicamente célebre Hotel Caribe. Para el imaginario colectivo de sus compatriotas, esos hombres de traje negro, anteojos de sol y minúsculos micrófonos eran el paradigma de seguridad, inteligencia y confidencialidad del titular de la Casa Blanca.

Ahora resulta que la guardia pretoriana que había jurado proteger con su vida la del presidente se divertía en noches de salsa, ron y sábanas caribeñas. Antes, semejantes escándalos libidinosos eran patrimonio de la comitiva que acompañaba a los presidentes de América del Sur.

Caso 3: en el vestuario del estadio del Bayern Munich, de Alemania, le robaron tres pares de botines a Cristiano Ronaldo y varias prendas deportivas a otros jugadores, antes del inicio del partido semifinal de la Liga de Campeones. El vestidor es tan lujoso como una boutique, se prepara horas antes del partido, tiene cámaras de seguridad y es inexpugnable para periodistas, simpatizantes o dirigentes no autorizados. A más de preguntarse por qué Cristiano necesita tres pares de zapatos para un partido, Europa se indigna por robos que ni siquiera ocurren más en los estadios del Paraguay.

El primer mundo ya no es lo que era. Y nosotros tampoco. Hoy, hasta podríamos enseñarles como salir de crisis económicas catastróficas. No somos tan distintos. Sudamericanizados como están, bueno sería que empiecen por borrar el tonito despectivo.

 

 

PUGNA PARALELA AL VOTO DELIVERY

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 31 Marzo 2012

 

Adivinar quién ganará este domingo se ha vuelto más difícil que nunca. Lo único seguro es que el tozudo cuarto candidato, Herminio Ruiz Díaz, no será el ganador. Entre los otros tres, la cosa parece estar pareja. No habrá bocas de urna, pues no existirán lugares fijos de votación. Resta el recurso de confiar en las encuestas previas, pero ese es un camino resbaloso.

Es que los encuestadores se enfrentan con un universo de votantes de lo más complicado, en el que se mezclan en proporciones distintas afiliados liberales, colorados que no votaron en las últimas elecciones y electores independientes. Para peor, es casi imposible que la aleatoria recolección efectiva de votos por cuadra en todos los distritos del país reproduzca con fidelidad la distribución diseñada en los papeles.

Hay una dificultad extra: en elecciones normales, la mayor parte de los indecisos terminan por no acudir a votar, pero el domingo votarán todos, pues es la urna la que llegará a su casa. Como pocos entienden qué es lo que se elige, todas las encuestas tienen un porcentaje alto de personas que "no saben/no responden".

Así y todo, los encuestadores se han animado a hacer predicciones. Lo malo es que no coinciden entre sí. El más prudente fue Francisco Capli, quien pronosticó un triple empate técnico entre los tres principales aspirantes liberales. Según el sondeo, Blas Llano encabeza la intención de votos con un 29,4%. En segundo lugar viene Federico Franco, con 27,7%; y en tercer lugar, Efraín Alegre, con 25,4%.

Taka Chase, por su parte, también dio ganador a Llano, con un 33,9%. Bastante más atrás vienen Franco, con 24,1%; y tercero, Efraín Alegre, con 20,1%.

Sin embargo, días después, Ati Snead dio a conocer sus resultados, en los que el amplio ganador es Alegre, con 35,3% de los votos. Llano llega apenas al 27,7% y Franco, a 22,0%.

Esta encuesta coincide bastante con la de GEO, que también otorgó un margen importante a Efraín Alegre, a quien le da una intención de voto del 34,4%. En este análisis, el segundo es Franco, con 21,9%; y tercero, Llano, con 19,7%.

Es decir, de cuatro encuestas, dos dan ganador a Blas Llano y dos a Efraín Alegre. Eso no parece afectar el optimismo de Federico Franco, quien expresó que "lastimosamente, las encuestas en las que estamos primeros no se publican en la prensa". Se publiquen o no, los encuestadores paraguayos no olvidan que uno de sus mayores fiascos históricos se dio precisamente en una interna liberal. En diciembre de 2007, todas las encuestas predecían una cómoda victoria de Federico Franco por más de 15 puntos sobre Carlos Mateo. Al final, Franco obtuvo la candidatura a la vicepresidencia de la República por un ínfimo puñado de votos.

Ya lo ve, mañana no solo sabremos quién es el candidato liberal, sino también cuál de las empresas encuestadoras queda con la credibilidad menos arañada

 

 

TOMA DE REHENES Y ACTITUD PERIODÍSTICA

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 24 Marzo 2012

 

El asalto con rehenes ocurrido hace unos días alcanzó su punto cumbre cuando un periodista logró mantener una conversación al aire con uno de los captores. Sin dudas, la primicia radial y televisiva fue un éxito de audiencia. Por fortuna, luego de 17 horas de negociaciones, los rehenes fueron liberados sanos y salvos, y los secuestradores apresados.

Este final feliz opacó una autocrítica sobre el papel de la prensa en este tipo de sucesos. Fue la queja del comisario Antonio Ruiz, jefe de Orden y Seguridad de San Pedro, la que reflotó un debate adormilado en los medios. El policía contó que las entrevistas con los canales frustraron la negociación en curso, haciendo que se prolongue la situación de crisis.

¿Qué hubiera pasado si a raíz de la intervención periodística alguien terminaba muerto? En esas horas llenas de tensión el súbito protagonismo mediático brindado irreflexivamente puede llevar al secuestrador a decisiones violentas que acaben con la vida de alguno de sus cautivos.

No corresponde a la prensa negociar con un delincuente. Es un trabajo de la Policía, que para eso cuenta con personal adiestrado en mediación en situaciones extremas. La negociación la hacen los que saben. El periodista no está preparado para dialogar con un asaltante jugado al extremo y con la vida de seres humanos dependiendo de las imprevisibles ideas que cruzan su cerebro. El periodista no debe reemplazar al policía, así como el rating no justifica poner en riesgo la vida de personas.

Asaltos de este tipo son nuevos en Paraguay. Pero son frecuentes en Argentina y Brasil, donde hubo casos polémicos en los que la prensa trató con la ligereza de un reality show casos en los que intervenciones televisivas o radiales temerarias interfirieron negociaciones, agravaron situaciones o permitieron a los secuestradores contar con datos precisos sobre lo que pensaba hacer la policía. Antes de caer en los golpes de efecto sensacionalistas, los responsables de la cobertura deberían pensar que, probablemente, lo que se emite está siendo visto por los familiares de los rehenes y por los propios delincuentes. Deberían preguntarse cómo se sentirían si uno de los rehenes fuera su hijo. O pensar, por ejemplo, que al describir el operativo policial se está ofreciendo información valiosa a los captores.

A partir de dichas experiencias, varios foros de periodistas han redactado guías éticas en las que se establece que los negociadores expertos deben ser el único canal de diálogo con los delincuentes. Los periodistas deben resistir la tentación de contactar con ellos o los rehenes. No están entrenados en las técnicas de negociación y cualquier palabra o pregunta inapropiada podría poner en riesgo la vida de alguien. La propia llamada podría complicar los esfuerzos de los negociadores. Ninguna noticia justifica poner en riesgo una vida. Hay límites éticos y ciudadanos que ni siquiera la primicia autoriza a traspasar.

 

 

ES EL MOMENTO DEL GRAN PACTO

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 17 Marzo 2012

 

¿Cuántas veces escuchó decir que el Paraguay necesita diseñar políticas de Estado de largo plazo que superen los enfrentamientos coyunturales? Seguramente el mismo número de veces que comprobó que esa frase nunca sale del discurso porque jamás es el momento apropiado.

Pues sepa que este es un momento irrepetiblemente ideal para sentar las bases del tan necesario pacto político y social. Este gobierno entra en la última parte de su mandato y no tendrá mucho tiempo para beneficiarse de sus resultados. Y nadie puede asegurar de qué signo será el que lo suceda. Es un tiempo propicio, por ejemplo, para que los partidos políticos se comprometan en llamar a una Asamblea Constituyente a fines de 2013 y acuerden los principales puntos de la reforma.

Nada impide que se establezcan ahora consensos amplios sobre temas claves como una inversión vigorosa y creciente en educación, una reforma fiscal y planes de reducción de la pobreza. Pero esto no ocurrirá jamás si dependiera solamente de los políticos. No tendrían tiempo ni interés. Un pacto de esta envergadura debe ser empujado por la participación activa de la ciudadanía.

La buena noticia es que ayer se ha dado un paso clave en ese sentido. Se ha lanzado el consejo que diseñará el Equipo Nacional Estrategia País (ENEP), un espacio de diálogo social que buscará trascender las coyunturas políticas, electorales y los intereses sectoriales. Lo integran personas de los más diversos ámbitos de la sociedad civil, representativas de los sectores campesinos, sindicales, empresariales, culturales, académicos y de los pueblos indígenas, además de cinco ministros del Poder Ejecutivo y representantes de los poderes Judicial y Legislativo.

No se está inventando algo nuevo, sino copiando experiencias de varios países del mundo. Instituciones similares al ENEP se convirtieron en un factor importante de su desarrollo social y económico al incentivar la participación de la sociedad en la construcción de políticas públicas con visión prospectiva. Es decir, anticipar los hechos para elegir la respuesta más efectiva y de menor costo. Brasil logró rescatar de la pobreza extrema a más de 20 millones de personas gracias al diálogo inclusivo y amplios acuerdos que orientaron la planificación de políticas públicas claves.

Paraguay también puede hacerlo y el ENEP es el instrumento. Una iniciativa de este tipo no tendrá mucha prensa, pero puede convertirse en uno de los legados más importantes de este gobierno.

Ojalá esa verdadera selección nacional del capital humano paraguayo esté a la altura de las circunstancias y no se deje vencer por los obstáculos, la indolencia y el conformismo. Coleccionamos ejemplos de iniciativas parecidas que se evaporaron en el tiempo. Casi un cuarto de siglo después del fin de la dictadura nos merecemos demostrar que nuestra democracia puede construir un país más serio.

 

 

ALGO HIZO MAL WIENS

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 10 Marzo 2012

 

Si Arnoldo Wiens deseaba llamar la atención de la prensa, lo consiguió. Lo notable es que lo hiciera anunciando el fin de su efímera candidatura. Y justo cuando su imagen venía subiendo en las encuestas. Las últimas mediciones le daban entre 12% y 14% de intención de votos. Wiens era un inesperado outsider con acciones en alza. A su imagen pública televisiva sumaba su profesión de pastor evangélico. Esta es una fórmula que jamás falla en Latinoamérica y Wiens no fue la excepción.

Lo siguieron muchos. La mayor parte de ellos gente bien intencionada, poco dispuesta a votar a candidatos de antecedentes dudosos y que veía en Wiens valores éticos novedosos en la ANR. También lo apoyaron algunos oportunistas -¿qué candidato está a salvo de ellos?-, locos por alcanzar un cargo legislativo.

Lo notable es que luego de la renuncia de Wiens, las quejas amargas se escuchan por igual entre los bienintencionados y los oportunistas. Algo habrá hecho mal el pastor para que todos estén disconformes. Veamos algunas explicaciones.

Un primer problema es la mentira. Los políticos mienten, un pastor no. En el imaginario popular, eso tiene un costo político mucho mayor. Y Wiens había asegurado múltiples veces que su candidatura iría hasta el final. Juró en cien discursos: "Pese a lo que se diga, no descabalgaré". Y sus adherentes se reventaban las manos de tanto aplaudir. Ahora renunció y ni siquiera lo hizo por una vicepresidencia. Le prometieron ser senador.

El otro problema es lo sorpresivo. Uno puede bajarse de una candidatura -alguna vez me pasó- pero los motivos, el mecanismo y las consecuencias deben ser informados, discutidos y consensuados hasta con el último de los simpatizantes que brindaron su apoyo. De lo contrario queda una molesta sensación de engaño, de traición, de decepción. Wiens renunció de modo tan sorpresivo que ni siquiera su principal dirigencia estaba enterada.

Unos días antes, Wiens había anunciado que Eduardo Petta sería uno de sus senadores. Y Petta dijo que aceptaba el ofrecimiento porque "estaba podrido de los políticos mentirosos". En el mismo estado de estupefacción están ahora su exjefe de campaña, Julio César Cáceres, el exfutbolista Julio González Ferreira y el exministro Derlis Céspedes. La impresión que queda -no digo que esa haya sido su intención- es que, mientras el líder asegura la senaduría, el resto queda a la deriva.

Definitivamente, fue poco elegante la entrada de Wiens al cartismo. No tenía por qué apurarse, pues la campaña será larguísima. Pero sucumbió ante la necesidad de Cartes de un golpe de efecto que neutralice el daño de la salida de Calé y la inminente de Lilian.

La mayor parte de su movimiento no lo acompaña y está en desbandada. Con el paso del tiempo, el aporte de Wiens parecerá poco. ¿Cumplirá entonces Cartes su promesa de nombrarlo senador?

Si no lo hace, será un mal negocio perfecto. Aquel en el que todos los participantes quedan disconformes.

 

 

UNA BROMA DE GASTÓN CHEVALIER PARÍS

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 03 Marzo 2012

 

Hay dos personajes del intelecto paraguayo que siempre llamaron mi atención, pues nunca pude entender cómo dejaron que el lodo pestilente del sectarismo político opacara su indiscutible talento creativo. Uno, es Mario Halley Mora y, el otro, Ezequiel González Alsina. El primero, secretario de redacción y, el segundo, director, del diario Patria, vocero de la Asociación Nacional Republicana (ANR) durante la dictadura.

Desde allí se justificaban bárbaras acciones represivas del régimen.

En páginas que destilaban odio, se arrojaba a los perros la honra de centenares de ciudadanos mientras eran torturados en las mazmorras policiales.

Halley Mora nunca intentó disimular su afinidad con el stronismo. "Estuvimos allí, en el mismo pozo los dos", declaró alguna vez. Pero los antecedentes de González Alsina eran más curiosos. En su juventud había sido un escritor libertario y de izquierda. Firmaba sus artículos con el seudónimo de Gastón Chevalier París. Antes de convertirse en la pluma lúcida del fascismo gubernamental había escrito Un canto a Pablo Neruda, saludando al gran poeta y luchador chileno. Un día, como si ese pasado solo hubiera sido una broma, repudió a todas sus amistades de la época y se convirtió en el escriba más creativo de la dictadura.

Nunca fue enjuiciado, pues falleció pocos meses después del golpe de febrero de 1989. Poca gente se acuerda de él. Y mucho menos de Gastón Chevalier París. Sin embargo, más de dos décadas después, su fantasma reaparece.

Es que, entre otros cargos, también fue consejero de Itaipú. González Alsina fue uno de los negociadores del Tratado de 1973, que contenía cláusulas leoninas a favor del Brasil. Y en los 18 años siguientes jamás levantó la voz para oponerse a la fenomenal deuda espuria cargada a la entidad binacional.

Ahora, las autoridades de Itaipú han decidido rever un reclamo ya rechazado en dos ocasiones anteriores. Su asesor jurídico, Diego Bertolucci -paradójicamente, defensor de varios presos políticos de la dictadura siendo abogado del Comité de Iglesias-, dictaminó que debe pagarse a la viuda -pese a que el casamiento se realizó en Argentina, mientras don Ezequiel seguía casado con su primera esposa en Paraguay- cuatro millones de dólares.

Aunque se afirme que la suma es menor, sindicalistas de Itaipú aseguran que cuando se le agreguen los otros beneficios retroactivos e intereses que, con seguridad, serán reclamados, se llega a dicha cifra.

Este zarpazo a las arcas jubilatorias no solo es un injusto despropósito, sino que es una burla a las víctimas de las décadas de infamia difundidas desde los editoriales de Patria.

Hace tres años falleció doña Fredesvinda Vall, viuda del talentoso colorado Epifanio Méndez Fleitas. Después de 35 años de persecuciones y exilio, recibía una pensión graciable de 400.000 guaraníes. Dinero que le alcanzó justito para pagar la ambulancia que la llevó a la clínica en la que moriría.

Si esta historia no tuviera tanto olor a fato, diría que se trata de la última y macabra broma de Gastón Chevalier París.

 

 

HABLE DON TRANQUILO, NO SE CALLE

Publicado por: Alfredo Boccia | Domingo 19 Febrero 2012

 

Todo en él parecía de bajo perfil, empezando por su nombre. Era el rey de la soja, es cierto, pero transmitía una imagen de abuelo apacible y laborioso, que hizo fortuna trabajando la tierra y apostando al futuro del Paraguay. Un país que, a esta altura, consideraba como suyo. Exitosa y tranquila, la vida de don Tranquilo.

Quizás fue por eso que durante el conflicto con los carperos su nombre fuera poco recordado. Ocuparon más espacios en la prensa las actitudes prepotentes de aquellos. Esa violencia coyuntural permitía que los voceros del latifundio disimularan la violencia estructural que está en el fondo del conflicto: la enorme desigualdad en la distribución de la tierra. El ejemplo paradigmático de ese absurdo social es Tranquilo Favero, propietario de un millón de hectáreas.

Con parte importante de la prensa a su favor, con las frases denigrantes hacia las mujeres pronunciadas por el líder carpero Victoriano López, la estaba sacando barata, don Tranquilo. Razón de más para quedarse en el molde, para no hablar. Pero no, él decidió hacerlo. Fue una de las peores decisiones que haya tomado en su vida.

Raro en él, un hombre de decisiones tan prudentes. Raro en alguien que conoce bien el lío de la globalización.

Quizás pensó que sus declaraciones a un medio brasileño no serían leídas en el Paraguay. Y dijo lo que dijo. Que añoraba al gobierno de Stroessner, que con dinero todo podía comprarse y que con los carperos no se dialoga, se les responde con palos. Por si faltara algo, se igualó a Victoriano López, al apelar a una metáfora machista y justificadora de la violencia hacia la mujer.

Allí se acabó la tranquilidad de don Tranquilo.

Partidos, gremios, sindicatos y asociaciones de mujeres expresaron su indignación. Lo han criticado hasta los más férreos defensores de la propiedad privada y la producción sojera. Lo declararon persona no grata de Asunción. En el Senado plantearán que se le retire la ciudadanía. Lo denunciarán en la Fiscalía. Organizan un escrache frente al edificio de sus empresas. Él, acostumbrado a escuchar lisonjas, ha tenido que soportar ser tratado de capanga y caradura.

Es que sus frases, llenas de desprecio hacia el país que generosamente le permitió amasar la fortuna que tiene, son indefendibles.

Tranquilo Favero, luego de este revelador lapsus linguae, ya no será mirado del mismo modo que antes. Su imagen ha adquirido perfiles menos tranquilizadores, pero más cercanos a la realidad. Quizás eso nos permita discutir el origen del mayor conflicto social paraguayo, hasta hoy irresuelto. La crisis que hoy eclosiona en Ñacunday y que mañana resurgirá en otros puntos del territorio no es la lucha entre campesinos haraganes y productores agroexportadores. Hay verdades y engaños de ambas partes.

Por eso es bueno que don Tranquilo siga hablando. Para derribar estereotipos, para que lo conozcamos mejor.

 

 

LILIAN GRACIELA, EN SU HORA CLAVE

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 11 Febrero 2012

 

Hija prototípica de la política colorada, Lilian Graciela vive horas decisivas. Proveniente de un líder histórico de la seccional 12 del barrio San Vicente de Asunción, estaba signada a seguir los pasos de su padre. Es que don Ignacio Emérito Samaniego domina su territorio desde la década del setenta, cuando la ANR compró el terreno destinado originalmente a plaza, por la irrisoria suma de 10.000 guaraníes. Este conjugó su actitud de servicio hacia la gente del barrio con serviciales apoyos a los sucesivos gobiernos colorados. Fue fanático de Stroessner y de todos los presidentes colorados que lo sucedieron.

Don Ignacio abandonó sus antiguos oficios cuando fue nombrado en cargos importantes de la administración de Estado. Lo que también le permitió abandonar sus preocupaciones económicas. Quiso que sus hijos estudiaran e hicieran política. Gustavo es ingeniero civil; Arnaldo, economista, y Lilian, química farmacéutica. Como es de rigor, todos ellos comenzaron su carrera política en la seccional y ocuparon importantes cargos en la administración del Estado. Lo que también les permitió abandonar sus preocupaciones económicas.

Lilian construyó perseverantemente su estatura política. Ha sido reelegida senadora y, luego de la derrota del 2008, asumió interinamente la presidencia de su partido, cargo en el que mostró una notable capacidad de aglutinar las distintas fuerzas internas, lo que permitió la extraordinaria recuperación colorada en las elecciones municipales. Compartió méritos con Horacio Cartes, mecenas de muchos de los candidatos. Y, ya unida a él, fue proclamada como presidenta de la ANR, en una victoria electoral que el cartismo asumió como propia.

Solo que Lilian había adquirido un peso específico que pensaba hacer valer. Y, desde Honor Colorado, no fue del todo bien tratada. Dos hechos coyunturales fortalecieron su posición autonomista. El primero fue la salida de Calé Galaverna y, el segundo, la inesperadamente alta intención de votos que las últimas encuestas adjudican a Lilian Samaniego, sin que haya lanzado su candidatura.

Si a eso se suma el estilo despectivo con el que Cartes trata a sus colaboradores con quienes tiene conflictos, la rebelión de Lilian se explica mejor. Cartes humilló a Calé cambiando el lugar de un almuerzo, sin avisarle. Y a Lilian, invitándola a una reunión en su casa, diez minutos antes y a través de un tercero.

Lilian le hizo sentir la majestad del poder. Poder que ella hoy tiene en la ANR y del que Cartes es un aspirante. "Si quiere hablar conmigo, que venga a mi despacho", respondió. Y Horacio acudió, consciente de que su candidatura podría desplomarse del todo si pierde a la vez a Calé y Lilian.

Quién diría, Lilian Graciela es hoy árbitra -si se dice miembra, se puede decir árbitra- del futuro de la ANR. Si así fuere, y sin juicios de valor, la suerte del Partido Colorado dependerá de la decisión de una colorada prototípica.

 

 

LA BISAGRA HISTÓRICA DE FEBRERO DEL 89

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 04 Febrero 2012

 

Pasan los años y va quedando en claro que el 3 de febrero de 1989 figurará en los libros de historia como una de las fechas más significativas del siglo XX paraguayo. Es la histórica bisagra entre la más larga de las dictaduras y el mayor periodo ininterrumpido de libertad desde nuestra independencia.

23 años después, aquel viejo Paraguay solo permanece en la memoria de quienes lo vivimos. Aquel país de la asfixia gris, de la obsecuencia kitsch, de la prepotencia impune, ya casi no se recuerda. Prevalece una mirada edulcorada que describe un país más seguro y con menos problemas.

¿Cómo transmitir a los jóvenes la mediocridad agobiante de aquella época? ¿Cómo decirles que la gelatinosa democracia que tenemos es la hija parida por dos generaciones disfuncionales, intoxicadas por más de tres décadas de cadena oficial de emisoras, de la Voz del coloradismo, de discursos oficiales, de anticomunismo cerril, de prensa acallada, de miedo sistemático?

Un miedo colectivo tan difícil de explicar a quienes se volvieron adultos hablando sin temor de todo y con todos. Durante el stronismo teníamos un país mucho más tonto y desinformado que el de hoy. Había temas de los que no se hablaba. De los que no se escuchaba nada en la prensa, ni en el colegio ni en el bar ni en la familia.

Esta es la democracia que han podido construir los actores políticos de la transición con los pobres instrumentos cívicos heredados de la dictadura. Por eso nuestra transición fue ridículamente larga. Tutelada por militares y organizada por stronistas sin Stroessner, nació sin memoria referencial de algún otro periodo cercano de institucionalidad democrática y, por ende, sin ciudadanía crítica ni experiencia previa. Y, con recursos humanos improvisados, se fue construyendo a los tumbos, jalonada por intentos fallidos, frustraciones y lentos avances.

Para peor, por el camino hubo ausencias sin aviso, cuyos aportes hubieran sido útiles pero que se diluyeron, vaya uno a saber por qué. Como la de aquel sindicalismo unido, fuerte y con valores morales de los últimos años del stronismo. Como la de los universitarios organizados, pensantes e influyentes con quienes contábamos hasta que la FEUP se derritiera. Como la de líderes políticos visionarios, austeros e incorruptibles, que se fueron extinguiendo a medida que progresaba la transición.

Aquí estamos, 23 años después. En un país pobre y desigual, con instituciones frágiles y en el que persiste la impunidad. Pero, al mismo tiempo, un país más plural, con libertades públicas, menos prepotencia y mayor ciudadanía.

Permítanme defender esta democracia de cuarta. Hemos hecho bastante mal algunos deberes, pero ninguna mirada al pasado ofrecerá nada mejor. El 3 de febrero fue una bisagra histórica entre un país chato y monocorde, y otro lleno de conflictos, pero pleno de potencialidades.

 

 

UNA SEMANA DE FRASES

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 28 Enero 2012

 

Las frases pronunciadas en estos días por dos de los líderes carperos ocuparon buena parte del espacio informativo sobre el conflicto de Ñacunday. Victoriano López explicó que las mujeres lavan ropa y se prostituyen para pagarle su pasaje. Eulalio López dijo que los hijos de brasiguayos nacidos en el país no son paraguayos puros.

Estas expresiones machistas y xenófobas generaron indignación en las redes sociales. Me sumo al repudio a frases tan idiotas. Lo malo es que trasladan la atención hacia lo anecdótico y esconden el problema de fondo. La metodología de los carperos es -por decir lo menos- desprolija y prepotente. Esa violencia episódica rebaja a un segundo plano una violencia estructural mucho más grave: la brutal desigualdad en la tenencia de la tierra.

Por eso, las declaraciones del dirigente campesino Luis Aguayo, entrevistado por Radio Cardinal, traen una ráfaga de racionalidad al debate. Con una trayectoria tan larga como coherente en la lucha campesina, dejó algunas frases que merecen ser compartidas. Dijo Aguayo: "Cuestionamos el método elegido, pues no se puede mezclar el rol del Estado con el de los movimientos campesinos; ninguno puede suplir el rol del otro. Eso crea una confusión, ya que se mete al Brasil, lo que congela la lucha original. Y el problema originario es la corrupción y, sobre todo, la impunidad. Hasta hoy, nadie fue castigado en el Indert".

También criticó a la dirigencia carpera: "El dirigente debe ser racional, debe tener cierta formación y moral. La lucha social, de por sí criminalizada, pierde fuerza con estas declaraciones que les dan argumentos a los que se oponen a la lucha campesina. Se echa más leña al fuego, se alimenta el discurso de los que dicen que somos haraganes, violentos. Se pierde la esencia del valor del campesino como sujeto y actor de la tierra y la producción y la potencialidad de la agricultura familiar campesina".

"Esta colabora con la producción nacional y genera muchos más empleos por hectárea que la agricultura mecanizada. Las organizaciones campesinas históricas hemos creado un clima de estabilidad e institucionalidad. Ni los grandes productores, los que intentaron descuartizarnos, pueden decir que bloqueamos la producción en este proceso. Disminuimos la confrontación sin renunciar a nuestras reivindicaciones. Las ocupaciones son una medida estratégica, útiles solo cuando se agotaron las medidas legales. El Paraguay no tuvo nunca reforma agraria. El 95 % de los 1.200 asentamientos que existen en nuestro país son producto de las ocupaciones de tierra. Pero estas medidas requieren planificación, de contrario la sociedad hoy nos condena. No basta ser guapo, destruyendo las plantaciones. Guapo es respetar la naturaleza, la racionalidad y la convivencia".

Fue una semana de frases. Pero entre las estúpidas del comienzo y las de Luis Aguayo, me quedo con éstas.

 

 

LOS HOSPITALES PÚBLICOS NO SON MERCADOS

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 14 Enero 2012

 

A comienzos de los años 90, nos visitó un querido profesor español de hematología. Lo invitamos a ver algunos pacientes de la especialidad en el Hospital de Clínicas. Aquella no fue una buena idea. No por la recorrida de enfermos, que fue excelente y bien humorada, sino porque nunca más se me olvidó la cara de asombro que ponía el español mientras entraba al hospital.

Es que para hacerlo, debimos cruzar una abigarrada multitud de vendedores de tortillas, marineras, milanesas y todo tipo de olorosas fritangas.

Tuvo que pasar por encima de un perro que dormía plácidamente, indiferente a los ruidos del bullanguero mercado prehospitalario y esquivar una jarra de agua vaciada en la vereda por una robusta mujer.

"Es algo exótico", fue lo único que comentó, educadamente.

Pero lo peor aún estaba por venir, pues los colegas del IPS también lo invitaron a la misma actividad en su Hospital Central. Lo de Clínicas resultaba una despensa de barrio frente al shopping popular que descubrió allí. Además de alimentos, se podían comprar ropas, zapatillas, enseres domésticos, productos de limpieza y hasta juguetes en casillas desordenadas que, ya entonces, ocupaban todo el espacio de las veredas.

El tour por la medicina pública paraguaya continuó con el recientemente inaugurado Hospital Nacional de Itauguá, que contaba con una entrada custodiada por guardias de seguridad. El inmenso patio estaba protegido por una altísima valla de alambres, precedida de un profundo foso. Del lado de afuera los vendedores, del lado de adentro los acompañantes de pacientes. Nuestro profesor vio allí una muestra de la creatividad comercial nativa. Un elaborado sistema de piolas y roldanas hacía pasar de un lado al otro un canasto que, de ida llevaba chorizos, empanadas o chipas y, de vuelta, traía el dinero de los compradores.

Lo ocurrido en estos días con el desalojo de los vendedores informales que cercaban Emergencias Médicas me trajo a la memoria aquel primer viaje del maestro al Paraguay. Volvió varias veces más, ya sin sorprenderse de que los hospitales públicos mostraran esa cara externa de subdesarrollo y suciedad.

No tiene por qué ser así. Hay una población flotante en los hospitales públicos que necesita comprar alimentos e insumos básicos. Hay trabajadores dispuestos a venderles lo que demandan. Pero ¿por qué todo debe hacerse sin que se respeten las normas, de modo antihigiénico e improvisado? Con sentido social, pero sin populismo, hay que dar a Emergencias Médicas un aspecto más acorde al de principal hospital de urgencias del país. Y hacer lo mismo con el de IPS, pero ya.

Hace cerca de un siglo que la humanidad descubrió que los hospitales no son lugares apropiados para grandes mercados.

 

 

¿CON QUIÉN SE ALIARÁN LAS IZQUIERDAS?

Publicado por: Alfredo Boccia | Sábado 07 Enero 2012

 

Si logra unirse de nuevo, el archipiélago de las izquierdas conseguirá un peso político respetable. Pero, electoralmente ese conglomerado es un continente relativamente pequeño. En el 2013 no tendrán a alguien como Lugo, que galvanice voluntades y posiciones. Si lo hubieran encontrado, hablarían en otro tono.

No lo tienen. Les queda, pues, aliarse o resignarse a no ganar. No todos consideran que esta última opción sea desastrosa. Total, les queda todavía emprender el largo camino de construcción de una articulación consistente y duradera. El mismo camino que recorrieron previamente las izquierdas exitosas de la región. Pero, es probable que la irresistible seducción del poder los empuje a una alianza, aunque deban aceptar un segundo plano. Al solo efecto del análisis, sigamos por esta senda.

Si se alían, lo harán con los liberales. Si pudieran elegir, preferirían a Blas Llano. Definitivamente, no habrá alianza con Federico Franco. Digamos que este hizo méritos durante más de tres años para ganarse el odio de la izquierda. Siendo vicepresidente, lo apostó todo a su extraño papel de jefe de la oposición. Con fórceps, podrían aceptar a Efraín Alegre.

En pocas semanas los liberales pondrán en práctica sus curiosas urnas delivery. Si gana Llano, la alianza con la izquierda será segura. Solo que las encuestas previas no le son favorables. Poco grata, la política. Justo a él, el gran ideólogo del renunciamiento partidario que llevó a Lugo al poder, no consigue votos cuando, esta vez, tocaría a un liberal estar al frente de la alianza. Si gana Federico, ni pensar en la izquierda. El PLRA se acercará, en todo caso, al Unace. Si gana Efraín podrá haber alianza, pero no como quiere el Frente Guasu. Alegre se sentiría a gusto hablando con sectores mucho más moderados, como el partido de Rafael Filizzola y, quizás, Patria Querida.

Hoy, eso es un problema, pues hay dos sectores que, a criterio de la izquierda, no califican para una alianza. Y uno de ellos es justamente Patria Querida. No se ven cerca de alguien como Carlos Soler, que a fuerza de una insistente presencia mediática ha teñido a su partido de un conservadurismo demasiado exaltado. Antes, PPQ parecía de centro; hoy se ha corrido muy a la derecha.

El otro es Unace. La verdad que esta alianza evidenciaría una psicopatía política grave. ¿Una alianza electoral entre los dos extremos del espectro ideológico? Aunque usted no lo crea, el Partido País Solidario -de Carlos Filizzola- ha expresado que no lo descarta. Iluso, yo, que creía que ya nada me sorprendería.

Frente a la desventaja de no tener a otro Lugo como candidato, las izquierdas ostentan la ventaja de poder desdramatizar la falta de una alianza y la consiguiente derrota. El PLRA, en cambio, o se alía y gana, o vuelve a recorrer la misma historia que conoce desde 1940.

 

 

LA GENERACIÓN DEL BICENTENARIO

Publicado por: Alfredo Boccia | Domingo 01 Enero 2012

 

Eso somos, así nos recordará la historia en medio siglo más. Somos los privilegiados que pudimos ser testigos de los festejos populares más espontáneos y masivos que registre la memoria colectiva de nuestro país. Fuimos partícipes de la mayor fiesta de recuperación de la autoestima nacional desde el 22 de agosto de 1935, fecha del desfile de la victoria luego de la contienda chaqueña.

Cien años atrás casi no hubo festejos. Las luchas políticas intestinas habían llevado al Paraguay de 1911 a una calamitosa situación económica que no permitía pensar en celebraciones. Sin embargo, en esas condiciones desfavorables, con una educación pública paupérrima y una Universidad en pañales, surgió una pléyade increíble de pensadores, políticos, educadores y escritores que fueron capaces de producir el resurgimiento de una nación devastada por la guerra internacional aún reciente. Los cimientos del conocimiento paraguayo del siglo XX se construyeron a través de los aportes de figuras como Cecilio Báez, Juan Silvano Godoi, Manuel Gondra, Manuel Domínguez, Juan E. O'Leary, Ignacio A. Pane, Fulgencio R. Moreno, Alejandro Guanes, Ramón Indalecio Cardozo, Blas Garay, Celsa Speratti y muchos otros.

La patria abatida se levantó con el talento y el patriotismo de hombres y mujeres, cuyos nombres fueron homenajeados como héroes civiles en el segundo centenario de la Independencia. Conmemoración que, inéditamente, rescató los nombres de intelectuales, artistas y mujeres, largamente opacados por nuestra tradición militarista.

Es que el Bicentenario nos sorprendió en el que probablemente sea el periodo más promisorio de nuestra vida independiente. Con más de dos décadas de libertades públicas, el Paraguay transita una época que tiene pocos antecedentes históricos: hay cada vez más tolerancia y pluralismo, mientras que la violencia política y el autoritarismo cuentan con cada vez menos adeptos.

Queda -como hace cien años- una llaga lacerante que no hemos podido cerrar. Es la deuda social que el Estado y los gobernantes paraguayos tienen con la inmensa mayoría de excluidos y miserables. Son los compatriotas que miran estupefactos cómo uno de los países que el año pasado más creció en el mundo no logró disminuir la vergonzosa brecha de las desigualdades sociales.

El futuro juzgará a la generación del Bicentenario con esa vara inapelable. En dos décadas el Paraguay debe ser sensiblemente menos pobre y asimétrico o seremos aplazados por la historia. No es esta una cuestión de colores. Se trata de darle a la noción de patria un sentido actual. La generación del Novecientos, en la más deprimente de las condiciones, logró levantar de las cenizas al país. A nosotros nos toca un país en paz y pleno de potencialidades. Como hace cien años, hay un solo camino: la educación. Ojalá que el dato de que durante este año se editaron casi tres libros por día indique que la lección está aprendida. ¡Feliz 2012!

 

 

Fuente digital: http://blogs.ultimahora.com/

 

 

 

 

OTROS TRABAJOS DEL DOCTOR ALFREDO BOCCIA

 

 

 DICCIONARIO USUAL DEL STRONISMO

por ALFREDO BOCCIA PAZ 

 

 

CENSURA: Una de las formas de hostigamiento a la prensa que fue común durante el stronismo. Las restricciones a la libertad de expresión adoptaron distintas formas, según las épocas. (Ver recuadro: Ataques a la libertad de prensa).

Ataques a la libertad de prensa durante los últimos 20 años del stronismo

26/07/68:    Dos periodistas (Campos Cervera y García Ramírez) de "El Radical" son presos por ocho días.

23/08/68:    Secuestro de la edición de "Comunidad" y detención del propietario de la imprenta donde se imprimía.

11/11/68:    Es apresado y confinado al Chaco el secretario general de "ABC Color" Roberto Thompson.

15/07/69:    Secuestro de la edición y clausura del semanario "La Libertad", órgano del PL.

14/07/69:    Suspensión de "El Radical" hasta abril de 1970.

24/10/69:    Clausura de "Comunidad". Su edición es incautada y la imprenta allanada.

9/07/71:      No aparece "El Radical" por censura previa.

7/06/72:      No aparece "El Radical" por censura previa.

3/08/72:      Secuestro de la edición de "El Radical" por personal del Departamento de Investigaciones.

4/10/72:      Secuestro de la edición de "El Radical" por personal del Departamento de Investigaciones.

1972:No aparece ese año "El Pueblo" por negarse a aceptar la censura previa.

7/12/74:      Es apresado por varios meses Roberto Thompson, secretario de "ABC Color".

27/12/74:    Es apresado Antonio Pecci, columnista del semanario de la CEP, "Sendero", hasta febrero de 1975.

8/06/75:      Es detenido Miguel Ángel Martínez Yaryes, director de "El Radical", procesado por calumnia y difamación.

7/08/75:      Es suspendida la edición de "El Radical".

12/11/75:    Se prohíbe la publicación de "El Radical". Reaparece en abril de 1976.

11/08/76:    Es de nuevo suspendido "El Radical".

07/09/76:    Es apresado Isaac Kostianovsky, fundador y director de "última Hora". Luego de un mes de detención, debe abandonar el país por orden del ministro del Interior.

10/07/77:    El Ministerio del Interior clausura "Criterio".

28/07/77:    Clausura de "El Radical".

23/08/78:    Es suspendido "El Radical" "hasta nueva orden".

18/06/79: Son suspendidos por 30 días "La Tribuna" y "Ultima Hora".

30/07/80:    Es detenido el periodista Mario Rubén Álvarez hasta el 3/08/80.

5/11/79:      Es detenido el periodista Alcibíades González Delvalle hasta el 19/12.

25/06/80:    Es de nuevo detenido Alcibíades González Delvalle, hasta el 2/09/80.

1/10/80:      Se prohíbe la circulación de "El Pueblo". Vuelve a salir en julio de 1982.

1981:Es cerrado “El Enano”, vecero de una de las fracciones del PL.

26/1 1/81:   Es detenido el periodista de "Última Hora", Félix Humberto Paiva, por una semana.

02/12/81:    Es detenido el jefe de redacción de "última Hora", Fernando Cazenave, hasta el 24/12/81.

9/07/83:      Radio Ñandutí es suspendida por 30 días.

15/07/83:    Es apresado el director de "ABC Color", Aldo Zuccolillo, por once días.

23/09/83:    Es apresado por tercera vez Alcibíades González Delvalle, esta vez hasta el 7/12.

05/11/83:    Antelco prohíbe que Humberto Rubín haga locución "por carecer de carnet".

02/01/84: Suspensión definitiva del semanario “Aquí”.

17/01/84:    Humberto Rubín sufre la primera de varias detenciones por corto tiempo que tendría en el futuro.

16/03/84:    Es apresado por segunda vez Aldo Zuccolillo, por una semana.

22/03/84:    “Abc Color” es suspendido por tiempo indeterminado.

16/07/85:    Es apresado Edwin Brítez, coordinador de "Nuestro Tiempo". Es allanada la imprenta y se secuestran los ejemplares.

10/08/85:    Radio Ñandutí es suspendida por diez días.

12/02/86:    Una disposición de Antelco prohíbe que la radio y la televisión entrevisten a políticos "irregulares" con "micrófono abierto".

2 7/04/86:   Es apresado José Luis Simón, secretario de redacción de "El Pueblo", por tres días.

29/04/86:    Violento atraco de una turba contra Radio Ñandutí. Asalto y destrozos a la planta transmisora de Radio Ñandutí.

12/05/86:    Las interferencias a la señal de Radio Ñandutí se vuelven continuas.

25/05186:   Es apresado Pedro Ferrari, locutor de Canal 13, permaneciendo incomunicado durante tres semanas.

21/12/86:    Es detenido y procesado Oscar Acosta, periodista de Radio Ñandutí.

01/07/86:    Es expulsado del país el padre Javier Arancón, director de Radio Cáritas.

14101187:  Sale del aire Radio Ñandutí.

13/09/87:    Es apresado el periodista José Luis De Tone, por cuatro días.

 

 

DIVISIONES LIBERALES: La constante en la trayectoria histórica de la oposición liberal al stronismo fueron sus divisiones en fracciones y subfracciones desde 1962 hasta 1989. Sus siglas y liderazgos fueron tantos que escapaban a la memoria de los afiliados más fieles. El gobierno no tuvo nunca mayor dificultad en propiciar dichas divisiones tentando a algún grupo con el reconocimiento oficial por parte de la Junta Electoral Central, lo que les permitía participar de las elecciones y asumir bancas en el Parlamento. En el fondo, ese era el principal motivo de las divisiones: la participación o la abstención electoral. (Ver recuadro).

Divisiones liberales:

1962: PL, Directorio Revolucionario

1963: PL (Levirales)) y PLR

1973: PLD (Enzo Doldán, no reconocido)

1975: Fulvio Celauro se une al PL (PLD-PL)

1977: Directorio unificado PL- PLR (Miguel Ángel Martínez Yaryes)

1977: PL (Fulvio Hugo Celauro, reconocido)

1977: PLR (Justo Pastor Benítez, reconocido)

1977: PL Teeté (Carlos y Fernando Levi). Desapareció.

1977: PLRA (No reconocido).

1977: PLR. División entre "benitistas" y "genioles" (reconocidos).

1978: PLR. "Directorio legítimo" (Cáceres Carísimo) se une al PL.

1978: PLU (Desprendimiento del PLR). Desapareció.

1978: PLR. Desprendimiento del sector de Servián Ovelar. Desapareció.

1979: PLR. División entre Centurión Sostoa y Acosta (reconocido).

 

 

 

GUARDIA DE SEGURIDAD: Nombre que tenía durante el stronismo la actual Agrupación Especializada, ubicada en el barrio Tacumbú, al lado del penal. Durante el gobierno de Stroessner fue el lugar donde eran "depositados" presos políticos y, se supone, fueron enterrados algunos de los desaparecidos de la era stronista. Las excavaciones realizadas en el predio luego del golpe no dieron resultados positivos.

 

GUARDIA URBANA: Fuerza parapolicial integrada por "milicianos colorados" que hacían rondas de vigilancia en distintos lugares de la capital y el interior durante los primeros años del stronismo. Existían desde la finalización de la guerra civil de 1947. La constituían grupos de diez o más personas que solicitaban documentos a los transeúntes nocturnos y, ante la menor sospecha de ser un opositor, lo apaleaban e incluso se abrogaban el derecho de mandarlo preso. El único documento seguro era la afiliación colorada. Sin ella se corría el riesgo de amanecer en una Comisaría o en una Seccional Colorada. Desaparecieron hacia 1961 cuando el régimen consideró que el país ya se había "pacificado".

 

GUIÓN ROJO: Sector interno del coloradismo existente hasta comienzos de la década del setenta. Su nombre deriva de una cinta roja que sus adherentes llevaban en la solapa. Tenían una tendencia ultranacionalista de derecha y se inspiraban en Natalicio González, quien había sido presidente de la República por algunos meses en 1948. Otros referentes de los "guiones" eran el ex presi-dente Higinio Morínigo y Felipe Molas López. Los años previos a la llegada de Alfredo Stroessner al gobierno estuvieron marcados por la lucha por el poder entre los "guiones" y sus adversarios internos colorados, los "democráticos", liderados por Federico Chaves. En esos años que siguieron a la guerra civil la ANR tenía el monopolio de la política paraguaya, pues la oposición, derrotada y en el exilio, no tenía incidencia mayor en los acontecimientos internos.

 

 

 

LEY 209: Ley promulgada el 15 de setiembre de 1970, denominada "De Defensa de la Paz Pública y Libertad de las Personas". En ella el criterio incriminatorio de conductas meramente críticas u opositoras se extiende hasta tipificar textos tan ambiguos como el del artículo 4°, en el que se castiga "al que por cualquier medio predicare públicamente el odio entre los paraguayos o la destrucción de las clases sociales". Esta ley perfeccionaba jurídicamente la persecución de toda manifestación ideológica contraria al régimen. Era la cobertura legal que justificaba el encarcelamiento de opositores bajo la acusación vaga de propiciar actividades subversivas.

 

LEY 294: Ley promulgada el 17 de octubre de 1955, llamada de "Defensa de la Democracia". Tenía disposiciones tan vagas como la formulada en su artículo 2°, que castigaba con la cárcel a quienes "difundan la doctrina comunista o cualquier otra doctrina que se proponga destruir o cambiar por la violencia la organización democrática republicana de la nación". Con un severísimo sentido anti-comunista, en realidad, esta ley maniataba todo tipo de movilización o protesta pública y otorgaba a la represión un instrumento legal de alcance casi ilimitado.

 

 

 

OPM: Siglas de la Organización Político Militar, grupo clandestino formado desde 1973 por activistas asuncenos -muchos de ellos provenientes del Movimiento Independiente universitario- y líderes campesinos de las Ligas Agrarias Cristianas, con el objetivo de resistir a la dictadura por la vía armada.

La OPM llegó a integrar una incipiente organización celular basada en una estructura similar a la de los "Montoneros" argentinos. Algunos de sus principales jefes fueron Juan Carlos Da Costa -muerto en un enfrentamiento en el barrio Herrera de Asunción en abril de 1976-, Nidia González Talavera y Diego Abente. La estructura fue desbaratada antes de que pudiera llevar a cabo ningún operativo y casi toda su plana mayor fue la primera en caer. La represivos policial -la más importante de la segunda mitad del stronismo-se cobró 18 muertos y miles de estudiantes y campesinos apresados (Ver recuadro). El golpe represivo se extendió a lo largo de 1976 al interior del país, a las organizaciones campesinas y a todo atisbo de núcleo social o político de oposición.

Muertos en la represión a la OPM

1. Martín Rolón (Valle Apuá, Lambaré).

2. Juan Carlos Da Costa (Barrio Herrera, Asunción).

3. Mario Schaerer Prono (Departamento de Investigaciones).

4. Mario Arzamendia (Departamento de Investigaciones).

5. Silvano Flores (Santa Rosa, Misiones).

6. Dionisio Rodas (Santa Rosa, Misiones).

7. Diego Rodas (Santa Rosa, Misiones).

8. Alejandro Falcón (Ñacutí, Misiones).

9. Ramón Pintos (Cárcel de Abraham Cue, San Juan Bautista).

10. Elipto López (Cárcel de Abraham Cue, San Juan Bautista).

11. Policarpo López (Cárcel de Abraham Cue, San Juan Bautista).

12. Francisco López (Cárcel de Abraham Cue, San Juan Bautista).

13. Adolfo López (Cárcel de Abraham Cue, San Juan Bautista).

14. Juan de Dios Salinas (Compañía Simbrón, Paraguarí)

15. Albino Vera (Delegación de Gobierno de Paraguarí .

16. Sixto Melgarejo (Departamento de Investigaciones).

17. Arturo Bernal (Departamento de Investigaciones).

18. Jorge Zavala (Barrio Capitalizador, Asunción).

 

 

ORDEN SUPERIOR: Ley de leyes en el Paraguay de Stroessner. Estaba por encima de la Constitución y del Poder Judicial y era de estricto cumplimiento. Cuando se argüía la "orden superior" las posibilidades de identificar su origen, de apelar su cumplimiento o de recurrir a algún juez con un hábeas corpus, se evaporaban.

 

 

(Enlace interno - Hacer click sobre la imagen)

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

GALERÍA DE MITOS Y LEYENDAS DEL PARAGUAY

(Hacer click sobre la imagen)

 

 

 

 

ENLACE INTERNO A ESPACIO DE VISITA RECOMENDADA

EL IDIOMA GUARANÍ, BIBLIOTECA VIRTUAL en PORTALGUARANI.COM

(Hacer click sobre la imagen)

 

 

 

 

ENLACE INTERNO A ESPACIO DE VISITA RECOMENDADA

(Hacer click sobre la imagen)

 



 





Bibliotecas Virtuales donde se incluyó el Documento:
DISCURSOS
DISCURSOS DE PRESIDENTES DE LA REPÚBLICA DEL
REPÚBLICA
REPÚBLICA DEL PARAGUAY



Leyenda:
Solo en exposición en museos y galerías
Solo en exposición en la web
Colección privada o del Artista
Catalogado en artes visuales o exposiciones realizadas
Venta directa
Obra Robada




Buscador PortalGuarani.com de Artistas y Autores Paraguayos

 

 

Portal Guarani © 2024
Todos los derechos reservados, Asunción - Paraguay
CEO Eduardo Pratt, Desarollador Ing. Gustavo Lezcano, Contenidos Lic.Rosanna López Vera

Logros y Reconocimientos del Portal
- Declarado de Interés Cultural Nacional
- Declarado de Interés Cultural Municipal
- Doble Ganador del WSA