PortalGuarani.com
Inicio El Portal El Paraguay Contáctos Seguinos: Facebook - PortalGuarani Twitter - PortalGuarani Twitter - PortalGuarani
LITA PÉREZ CÁCERES

  EL MUÑECO DE NIEVES - Cuento de LITA PÉREZ CÁCERES


EL MUÑECO DE NIEVES - Cuento de LITA PÉREZ CÁCERES

EL MUÑECO DE NIEVES

Cuento de LITA PÉREZ CÁCERES

 


 

LITA PÉREZ CÁCERES : Nació en Asunción el 27 de octubre de 1940.
 
Desde sus primeros años vivió en Buenos Aires y en Asunción, pero en 1947 su familia decide radicarse en la capital argentina a raíz de los hechos políticos que conmovían ese año a nuestro país. Es así que la autora realizó sus estudios primarios y secundarios en Buenos Aires, y en 1965 regresó definitivamente a Paraguay.
 
Tal como le ha ocurrido a muchas escritoras paraguayas la vocación literaria de Lita Pérez Cáceres tuvo que aguardar años antes de convertirse en realidad, e inicia la publicación de sus cuentos luego de obtener un premio literario en un concurso muy importante en 1985. A partir de entonces sus relatos son difundidos a través de revistas y suplementos literarios de Asunción.
 
En 1990 Lita Pérez Cáceres gana el Premio "Challenger" organizado por la firma Ramírez Díaz de Espada para "Veuve Clicquot Ponsardin".
 
 
 

 
EL MUÑECO DE NIEVES
 

 
Ni mis tías ni mí abuela se hicieron ilusiones al ver a Nieves, la esposa de tío Luis. Él era uno de los dos sobrevivientes de todos los varones que nacieron del vientre de mi abuela Piita, el menor de todos los hermanos. Ostentaba los nombres de Claudio Luis Roberto José Antonio de Padua, era la luz de los ojos de mi abuela y el mimado de sus hermanas mayores.
 
Muy buen mozo, de sonrisa conquistadora, fue el único que sufrió a causa de la revolución del 47. El día en que la familia entera partía para el exilio en Buenos Aires, hubo un tiroteo cerca del puerto. Luis, muy niño todavía, se había escapado de la vigilancia de mi abuelo Pedro siguiendo a un gatito. El minino llegó vivo hasta la esquina del edificio con el mascarón de proa. Allí, una bala perdida terminó con una de sus siete vidas y tío Luis quedó sordo del oído izquierdo para siempre. El único testigo, el mascarón con forma de mujer, se erguía indiferente a las diferencias que un grupo de hombres trataba de dirimir a tiros.
 
La sordera no impidió a tío Luis ser un marino mercante que viajó por todo el mundo. Además muy pocos se daban cuenta del defecto ya que se ingeniaba para escuchar con el oído sano si la conversación le interesaba y si no ponía cara de póker y asentía de vez en cuando, con lo cual el interlocutor quedaba encantado con "ese muchacho que sabía conversar".
 
De uno de esos viajes volvió con Nieves. Teresita y Elena, sus noviecitas de siempre, quedaron desoladas ante algo tan definitivo como una esposa, y ambas iniciaron su carrera de beatas que llegó a su punto más alto cuando se las designó encargadas de vestir a la Virgen de la Asunción, cada 15 de agosto.
 
Nieves, según dijeron las tías Mariquita y Tránsito, las más objetivas y las menos celosas del hermano, hacía honor a su nombre con el cutis tan albo y tan terso como uno imagina que lo tendría Blancanieves. De ese personaje había heredado la blancura y la hermosura. De la madrastra, los ojos negros de mirada fiera y un carácter terrible.
 
Casi lo olvido, mi tía Nieves era mexicana, de Oaxaca, lugar tan lejano y desconocido para las mujeres de mi familia que ellas pensaron que estaba cerca del infierno.
 
La pareja vivió en la gran casona de la calle Benjamín Constant, reino de mi abuela, la matriarca viuda. No pasaron muchos días para que ellas, las tías, notaran el cambio del tío Luis, que vivía pendiente de Nieves y hacía solo lo que ella quería. No asistía más a los partidos de fútbol ni concurría a la misa de 11 de los domingos en la Catedral. Ni siquiera comía más la mazamorra que tanto le había gustado siempre y tampoco aceptaba el jarro de aloja que le servía Floria, la criada. Solo probaba los platos preparados por Nieves en la cocina, por las noches, cuando ya todas habían salido de allí. A partir de estos síntomas el diagnóstico de empayenado no tardó en llegar y en una reunión secreta, durante una siesta en que la pareja estaba ausente del caserón, se planificó el contraataque.
 
Mariquita y Tránsito entraron al dormitorio del tío Luis y tía Nieves y buscaron prendas íntimas de los dos, gastadas y que no fueran muy sentidas si se notara su pérdida. La hija de Floria quedó de campana en la puerta de calle y desde el zaguán mi abuela también controlaba la entrada. En la cocina Tía Consunción preparaba un bebedizo para poner en el café de tío Luis, hecho con agua bendita y pétalos de las rosas y jazmines, plantas preferidas de mí abuela. El preparado estuvo listo y rezaron oraciones adecuadas aprendidas de una esclava negra de mi bisabuela y trasmitidas de generación en generación por todas las mujeres de mi familia, siempre con buenos resultados. Todas recordaban aquella vez cuando tío Perú se enamoró de la artista española y estaba decidido a ir con ella hasta Andalucía para ser su representante y su "marío". El antipayé funcionó y mi tío no viajó a España pero fue a trabajar a un obraje y no volvió por mucho tiempo. Mi abuela tenía miedo de que con tío Luis ocurriera algo parecido y estaba tan nerviosa que casi le dio tina bofetada al soldador que le gritó cuando ella estaba mirando hacia la esquina: ¡¡¡Soldadooor!!! Los tíos regresaron y merendaron en el comedor, los dos solos, en la semioscuridad de esa habitación que casi nunca se utilizaba. El cayó en un sopor del que no pudo despertar hasta el día siguiente. No salió del cuarto para nada y Nieves le llevó el almuerzo, la merienda y la cena, en bandejas cuyos platos volvieron sin tocar. Reaccionó al cabo de una semana pero nunca volvió a la normalidad. Aparentaba no escuchar nada de lo que le decían y Nieves era la interlocutora obligada. Ella le hablaba al oído y respondía como si adivinara los pocos gestos que tío Luis podía hacer. Lo vieron varios médicos que no supieron decir cuál era la causa de ese estado casi cataléptico y hablaron de spleen, de melancolía, de neurastenia pero ninguno pudo apartarlo de ese evado.
 
Tío Luis no pudo viajar nunca más y vivieron, él y Nieves, de una escuálida pensión que les daba la Marina. La casa siguió su marcha de reloj femenino, de gineceo, como decía el tío Marcial cuando llegaba de visita con su flamante esposa, tía Mariquita. La ciudad crecía en silencio, en un ominoso silencio de paz impuesta, de miedo. Se abrieron negocios en la calle Palma, las mujeres acortaron sus vestidos y alargaron sus ideas y hubo muchas que ganaron la calle para trabajar. Se animaron a cruzar el umbral que separaba a las decentes y recatadas de las osadas, de las cualquieras. La hija de Floria quien ya había muerto pidió ir a la escuela nocturna y mi abuela que ya apenas veía por las cataratas, no tuvo otro camino que darle permiso. Luego se anotó en una seccional colorada para aprender a coser pantalones y hasta llegó a casarse con un muchacho de la Chacarita, hijo de un seccionalero, que se la llevó lejos dejando a mi abuela desolada durante el tiempo en que ella tardó en regresar. Volvió a instalar su taller de pantalones en el antiguo comedor y mantuvo a mi abuela y a tía Consunción hasta que ambas murieron.
 
El tío Luis no se recuperó nunca y sobrevivió a todas sus hermanas, pero ellas ya lo habían perdido para siempre, tal como lo habían presentido desde el día que él trajo a esa mujer que lo convirtió en su muñeco.
 
 
 
 
 
Fuente:
 
 
(CUENTOS Y POEMAS PARA NIÑOS Y ADOLESCENTES)
 
 
Editado con el auspicio del FONDEC
 
QR Producciones Gráficas S.R.L.,
 
Diciembre, 2002 (210 páginas).

 

 

 

 

ENLACE INTERNO A ESPACIO DE VISITA RECOMENDADA


(Hacer click sobre la imagen)







Leyenda:
Solo en exposición en museos y galerías
Solo en exposición en la web
Colección privada o del Artista
Catalogado en artes visuales o exposiciones realizadas
Venta directa
Obra Robada




Buscador PortalGuarani.com de Artistas y Autores Paraguayos

 

 

Portal Guarani © 2024
Todos los derechos reservados, Asunción - Paraguay
CEO Eduardo Pratt, Desarollador Ing. Gustavo Lezcano, Contenidos Lic.Rosanna López Vera

Logros y Reconocimientos del Portal
- Declarado de Interés Cultural Nacional
- Declarado de Interés Cultural Municipal
- Doble Ganador del WSA