PortalGuarani.com
Inicio El Portal El Paraguay Contáctos Seguinos: Facebook - PortalGuarani Twitter - PortalGuarani Twitter - PortalGuarani
FRANCISCO PÉREZ MARICEVICH (+)

  LOS MUROS FUGITIVOS (1965 – 1980), 1983 - Poesías de FRANCISCO PÉREZ-MARICEVICH


LOS MUROS FUGITIVOS (1965 – 1980), 1983 - Poesías de FRANCISCO PÉREZ-MARICEVICH

LOS MUROS FUGITIVOS (1965 – 1980)

Poesías de FRANCISCO PÉREZ-MARICEVICH

Colección Poesía, 18

© FRANCISCO PÉREZ-MARICEVICH

ALCÁNDARA EDITORA

Edición al cuidado del autor, C. V. M. y M. A. F.

Diseño gráfico: MIGUEL ANGEL FERNÁNDEZ

Viñeta: CARLOS COLOMBINO

Tiraje de 750 ejemplares

Inscripción solicitada a la Agencia Española del ISBN

Hecho el depósito que establece la Ley 94

Se acabó de imprimir el 28 de octubre de 1983

en los talleres de Editora Litocolor

Asunción, Paraguay

 

a Leni, mi mujer;

a Raúl, Alicia, Juan Angel, hijos

 

a Carlos Villagra Marsal, poeta

 

I

 

MODERATO CANTABILE

Flor de amoroso quebranto…

Emiliano R. Fernández

 

MEMORIAL

Porque los días fueron

como copas

rebosantes de vino;

porque la luz

se hizo para darte

caminos en la noche;

porque en el alto

cielo, las estrellas

(ecos de Dios

temblando)

cantaron tu hermosura;

porque la voz del día fue elevándose

desde la misma

tierra

de tu muerte;

porque aquel viento fue

con sus semillas

sembrándome el amor

bajo la sangre;

porque fue como ola mi alegría

(y mi dolor, de pronto, mar de mármol);

porque todo fue triste

(y entonces tan alegre);

porque todo

fue dicho antes de tiempo,

antes de madurar la maravilla,

antes de la vendimia verdadera:

por eso estas palabras

(oh tristes prendas por mi mal halladas,

dulces y alegres cuando Dios quería),

estas oscuras hijas del exilio,

esta dulce antiquísima agonía...


 

CHI LO SA!

Es cosa de pensar

para qué

sueño yo con palomas

cada vez

que me converso a solas

como ahora

en el atardecer.


Por qué palomas blancas.

No lo sé.


(..Néina pykasutimí...

... Hi’änte cheve avevé...)


 

OCTUBRE

Recupérote en el lila

del jacarandá.

El día se abre en oros

y el coral

de la sangre en tu cuerpo

bullirá.

Los años nunca pasan

volviendo atrás,

como ando esta mañana

primaveral

caminando bajo el lila

del jacarandá.


(Me apalabro, sólo es eso,

por no llorar...)


 

REFLEJO

Miro correr el río.

Miro al río correr.


En el recuerdo boga

un barco de papel.


Me recorren tres rostros:

en uno arde la miel

que llevaste a la boca

en el momento aquél.

(Ya lo habrás olvidado.

Yo ¿cuándo lo olvidé?).

En el otro, sereno,

se apaga el atardecer.

Por el tercero fluye

el río...

            Vuelvo a ver

los ojos en el agua

mirándome.


Mejor es no pensar.

¿Para qué?

Retorno el alma al cuerpo

del día. Devuélvome

al afán laborioso

de desnacer.


 

UN OLOR DE MANDARINAS

Fuiste toda aquella tarde

un olor de mandarinas...


Tu recuerdo, y esta flor,

echan la misma semilla.


(Me tomaste de la mano.

Te miraste en mis pupilas.

Y en el cielo de tu cara

fue un relámpago tu risa).


Tu recuerdo, y esta flor,

dan una sombra amarilla.


(Eras fina y llameante,

dorada como una espiga.

Me encendiste el corazón.

Y me clavaste una espina:

en mi memoria mantiene

su dolor, la oculta herida).


Tu recuerdo, y esta flor,

lanzo al agua cristalina

que difunde entre las piedras

de este día,

un olor de mandarinas...


 

ALGUNA PLAYA EN BRASIL

Carolina, ¿aquélla tarde

y el amor de junto al mar?

Allá lejos, hace tiempo.

Nada empaña su cristal.


Mais voté esquecer-me ha...


Carolina, piel de cobra,

corza grácil, festival

curva de ola, ala del día

que volaba el cormorán...


(mais você esquecer-me ha...)


... En la arena, tras la roca,

sobre ti, de luz solar,

llameaba el fuego antiguo

su júbilo corporal.

Carabela Carolina,

brasa-abeja de coral

duplicando en los pezones

las celdillas del panal

que doraba entre tus muslos

el destello inmemorial

-zumba el agua, vuela el día-

de tu vientre junto al mar

esa tarde coralina,

Carolina, hecha de sal,

allá lejos, hace tiempo

(mais você esquecer-me ha)

caracola Carolina

del amor de junto al mar...


 

A SOLAS

De una noche

a otra noche

la jornada

se ha dormido

fatigada,

a lo largo del alma.


Yo no profanaré

su lento sueño

con ninguna lágrima.

(No la profanes tú

con nada).


El corazón, a oscuras,

breve lámpara

caída en el camino,

ya apagada.


Que nadie la recoja

hasta mañana.


 

 

II

 

AÚN

(1966)


La esperanza es la única verdad que el hombre inventa

Leopoldo Panero


1

(ALFA VARIACIÓN PRIMERA)

Aún la piedra sola

Aún el viento herido

y la palabra en sombra


Aún la luz callada

Aún la primavera

sola en esperanza


Aún el hombre en páramos

salobres

aún en su tristeza

aún en sus prisiones


Aún la sementera

gritando en la sequía

Aún

aún la melancolía


 

lI

(BETA VARIACIÓN SEGUNDA)

Aún en la memoria

clarísimas moradas

aún temblando en ellas

la huella de los días

aquellos de altos álamos

y musicar del río

aquellos encendidos

con lámparas tiernísimas

aquellos como cestos

llenos de frutas fúlgidas

aquellos con estrellas

y cielo desplegado

aquellos diaspájaros

aquellos niñosdías

aún en la memoria

alzan sus muros blancos

sus torres agudísimas

su campanar sonando


Aún en la memoria

su huerto enamorado


 

III

(GAMMA VARIACIÓN TERCERA)

Desde la sed y el polvo

aún los pies cansados

aún entre fronteras

distintas sueño y hálito

aún el césped tímido

y tu mirar soñando

aún la tarde quieta

y el vuelo de los pájaros

aún tu pelo rubio

y tus huyentes labios

aún tu risa libre

aún tus claras manos

aún en mi esperanza

y en todo el desamparo

aún a la intemperie

el alma con su cántico

aún el corazón

el corazón y el llanto


 

IV

(DELTA VARIACIÓN CUARTA)

Aún estamos solos

entre enemigas lanzas

insectos ferocísimos

clavándosenos dentro

Aún sin más que un poco

de lumbre contra el frío

contra la sombra airada

contra lo que no es nuestro

Aún hermanos hombres

nos buscan para nada

Aún desconocidos

los unos de los otros

Aún para la muerte

crecemos en silencio

en pura lejanía

o en turbias soledades

Aún hermanos hombres

no somos lo que somos

perdidos en lo extraño

no vemos nuestros rostros

Aún hermanos hombres

aún mísero polvo.


 

V

(EPSILON VARIACIÓN QUINTA)

Aún entre penurias

la arena enardecida

Aún lo que viviendo

se vuelve llamarada

Aún lo que renace

detrás de todo olvido

Aún el rostro fúlgido

y la primera aurora

Aún hermanos hombres

la espada en la palabra

lo mismo que la vida

lo mismo que la nada


 

 

III

BIOVIAJES


Hoy es Ayer todavía

Machado


EL NIÑO

Cae, Señor, el día

-mariposa ante Ti girando leve-

mientras el corazón, lámpara estricta,

se enciende en la memoria y está ahora

viendo correr el río.


                                 El niño juega

- ¡cuán bella está la flor del camalote!-

y no existe la angustia

ni la tristeza suelta sus murciélagos.

El niño juega con el agua y canta

soñando con barquitos de colores

que bogan por el río de la tarde

-veintidós años hace, Señor mío-

el río de la tarde, en el verano.

La arena de la playa y la campana

que suena llena de alma y de alegría,

el vuelo de aquel pájaro pequeño

-¿adónde fue aquel pájaro amarillo,

aquel fugaz conejo entre las matas...?-,

y el airecillo trémulo moviendo

los cabellos del niño,

vuelven, Señor, desde tu mano clara,

vuelven, Señor, tan puros, tan sencillos

que no sé si es el niño el que en mí aún vive,

o si eres Tú, Señor, o si eres Tú

niño y río y campana y viento y ave

que en mí vuelven y son, suenan y cantan.


Cae, Señor, el día

de hoy (enero tres, sesenta y cinco),

mientras el niño juega en la memoria

y el mundo encuentra adentro su morada.


Cae, Señor, el día

-mariposa ante Tí girando leve-

vencida ya la angustia,

perdida la tristeza en sus murciélagos

mientras el niño y yo vamos a casa.


 

1942  PTO. MIHANOVICH, 1

Los enormes pies de sombra

moviéndose en la pared.


Era ya noche profunda.

Yo me escapé para ver.


A hurtadillas, paso a paso,

fui acercándome. Y miré.


El hombre estaba tendido

con un balazo en la sien.


El velón parpadeaba.

No estaba nadie con él.


¿Eso era toda la muerte?

No me pude responder.


Desde entonces a ella vuelvo

siempre una y otra vez.


Un enorme pie de sombra

sigue andando en la pared

un camino innumerable

sólo de él.


 

ROLDANA

(1945 Luque)

Roldana del tiempo, quieta,

sobre el aljibe colgada.


Alrededor, la frescura

de la frutecida parra.

En el brocal, los helechos

y un niño mirando al agua:

redonda, clara, brillante

moneda de la mañana.


Disco de cielo encendido

que la noche no te apaga,

retórname al culantrillo,

devuélveme toda el alma,

regrésame al ascua ardiente,

devuélvemela en un ala,

el ala del corazón

que desde entonas me falta.


Sobre el aljibe del tiempo

quieta roldana callada...


 

VYRO REI

San Francisco,

a esta bahía

no es posible gozármela

sin compañía.

Lo mismo que a esas calles

¿o son jardines?

precipitando flores

por las colinas...

Te dejo estas palabras.

Me llevo el día.


Cruzo hacia Sauzalito

y a Belvedere,

pero mi vista sigue

pegada al verde

de aquellos pinos altos

del Golden Gate

donde de cara al cielo

hippies se tienden

para hacer el amor como una guerra

que nunca pierden.


 

 

IV

ACTA CAPITULAR


Padre polvo que subes del alma…

César Vallejo


SOMBRAS EN LA PARED

Sobrevinieron días,

desencuentros,

anticipados pozos

de tiniebla.

Heridos vientos ululantes

amotinaron los recuerdos.

Precipitados ocasos

fríos

despertaron

viejos puñales olvidados.

Como un filo

la vida me rasgaron.


Me sentí vivir lejos

con el rostro

azotado.

Si alguien me confundiese

con un leño

calcinado,

estaría en lo cierto.

Ahora,

entonces,

siempre...


Haciendo sombras en la pared

con el dedo.


 

LABERINTO

Alucinado,

borrando la mirada en un vacío

de soledad,

                  cayéndote

gota a gota

en un lento precipicio

de voces

calcinadas hace tiempo

descubriste, cautivo,

la condena

de desandar andando un laberinto

que se encierra a sí mismo, a cada paso,

tras muros fugitivos

que juntan a su sombra sucesiva

un fatigado polvo repetido.


Restitúyete ahora a la pregunta.

Nada está respondido.

Después de todo, tú

y yo nos sucedemos en el mismo

alucinado sitio

que devuelve el final a su principio.


 

DEFINICIONES

Un día y otro día.

                            Y otro día

hacen un sólo día verdadero:

un levantado párpado

vastísimo

que al mundo abre una mirada intacta,

configurando límites

y formas,

volúmenes,

                  sucesiones,

diferencias,

símbolos convocados

en un compacto espacio

alucinado

(alucinante)

que transfigura la vigilia en sueño.


Un día. Y otro día.

Y otro

día

hacen un largo zumbo

que resuena,

liberado

              -y girando-,

del cordel impulsor.

                                Una distancia

acumulada en círculos,

                                    un tránsito

que convierte,

de paso en paso,

leve,

al que camina en el camino andado.


El tiempo es una ausencia..

Un fugitivo

transferir a esperas

imaginarios frutos

                             que se doran

más allá

-que ya es detrás-

de ahora.

El tiempo es una bruma

con una campana sorda

                                     que escuchamos

sonar en la memoria lejos.

                                         Lejos.

El tiempo es una ausencia

sucesiva

que nos transcurre y nos repite

en huellas

que huyen hacia atrás yendo adelante.

Laberinto

de polvo en un espejo,

el tiempo es un espacio

inhabitado

que deshabita en la memoria un sueño.


Un día y otro día y otro día

es siempre

un hombre huyendo

del filo de la noche,

                               a todas partes,

y acaba en una máscara

de arena

              desvaneciendo el rostro.

Y se deshace.

Un día

           tras otro día:

todo el día.


 

POEMA

Después de todo hay que vivir lo mismo.

Vivir con la palabra a medianoche,

a me diaencarnación,

a mediamuerte.


Después de todo,

hay que entregarse entero,

tan desnudo y total,

tan mansamente.

Después de todo, sí,

después de todo:

tu dulce mano arriba

como una luz

                     (sangrante,

llameante,

subiendo desde las raíces).


Después de todo, el mundo

huido de los pies,

de la cadena,

huido, al fin, terreno, deslucido,

errante, transeúnte

(como un niño llorando,

como un niño)

haciéndose palabra breve, honda,

palabra solamente apenas dicha

-vena herida invisible

desde siempre-.


Después de todo, oh Tú,

irrespondiente, altísimo,

sigue la voz temblando,

sigue y sigue

-silencio incorporado, encorpecido-

del alma transviviéndose a sí misma.


 

NADIE

Breve

remolino de polvo:

gira,

se eleva veloz

y cae

-minúsculo relámpago de tierra

sin aire.


No preguntes su nombre.

No era nadie.


 

TEMA ANTROPOLÓGICO

El hombre es lo que un día se nos muere,

se nos achica y queda como un trapo,

lo que nos deja y huye,

lo que duele detrás de toda mínima memoria,

detrás de toda orilla balbuciente,

de toda torcedura,

de toda oscura y leve luz borrada

rehuida y perseguida tras los sueños.


El hombre es lo que un día se nos vuelve

puñal filoso y súbito,

aquél que nos hundimos en la sangre

rasgando, hundiendo, hiriendo la esperanza,

aquél que nos mutila y nos exilia

más allá de la sombra y de su fuego

(de su tremenda y dulce llamarada),

aquél que nos lamenta y que nos alza

por encima de todo triste llanto,

aquél que cada día nos va haciendo

hermano vitalicio de la muerte.


El hombre es ese extraño, ese asesino,

ese acechante odioso y melancólico;

esa rueda sin ruta, ese camino

sin meta ni morada. Es este agobio,

este ir sin venir, esta conciencia

enemiga y sarcástica, este pozo

-paso a nivel de Dios desde la espera-

este pozo de polvo rumoroso

(el polvo, el polvo, hermanos, nadie olvide,

mientras dormimos silenciosamente

tendidos en el tiempo y su inocencia).


El hombre es éste: vedlo:

hijo de Dios herido de fronteras,

umbral de sombras, légamo de sueños,

-¿o acaso leve amor despavorido?-

Y aquello que un buen día se nos muere,

se nos arruga y queda como un trapo.


 

 

V

ORDEN DEL DÍA


… estando ya mi casa sosegada

San Juan de la Cruz


EAM 1

(LA MANO)

Tu mano, como un ave clarísima, reluce

-¿estrella en celo y gozo?-

en la penumbra de este amor dorado.


La vida, sí, que fluye; el mundo, sí, fluyendo

mientras tu mano sueña,

mientras tu mano canta en el silencio.


Y tú, ya múltiple y lejana,

te vas por los espejos trashumantes,

espejos encelados,

mientras tu mano -estrella en gozo y cielo-,

tu mano, como un ave clarísima, reluce

en la penumbra de este amor que nace

cantando en el silencio.


Tu mano como un ave clarísima,

como fruta de amor en Dios dorándose...


 

EAM 2

(LA LUZ)

Luna,

encendida luna.

Y nada más:

tú y yo.


Por allá,

por aquí

-sombras,

círculo en hambre,

tiempo

como arenilla

o palabra,

tú y yo:

mundo recién nacido.


Todo comienza

y vibra

(luna,

encendida luna),

como ala purísima

de luz

-sueño de Dios

matinal-.

Todo comienza

en canto, en vuelo,

en ti

¡mundo recién nacido!

tú y yo

por allá,

por aquí...


 

LOS HIJOS: PARÉNTESIS EMOCIONAL

1

Considerando

que el hombre nació muy pequeñito...

César Vallejo

(Raúl, al nacer)


Naces. ¿Contigo

renazco yo?

Retiñe el tiempo,

relumbra Dios.

Todas las cosas

-llenas de amor-

para cantarte

se vuelven voz,

a ti que vienes

como un fulgor

hiriendo sombras,

sembrando sol,

y brilla el alma

y el corazón

mientras contigo

sonríe Dios.


2

(Alicia, primera sonrisa)

Como el oro derramado

el tiempo a tus pies se posa,

deja en tu risa una rosa

y se aleja enamorado.

Y enamorado y callado

- ¡toda el alma sonreída!-

dejo en la flor de tu vida

mi corazón deslumbrado.


3

(Juan Angel, primeros pasos)

Ríete, niño

labios de miel,

ríete siempre,

ríete bien.

Vamos ¡arriba!

Baja otra vez;

mira qué lindos

tus blancos pies.

Anda, camina:

uno, dos, tres...

Mírame, niño.

Toca mi sien.

¡Suelta la risa

de cascabel!


 

CASA CONTADA AL HIJO

Ubica bien la casa:

                             tres pilares,

un corredor al frente, dos ventanas

con rejas y dos puertas

pintadas de marrón oscuro y desteñido.

A la tarde,

el sol la ampliaba en sombra hacia la calle

de tierra roja

                    (... y polvo inquieto y múltiple

que cubría los pies de arena ardiente

en las siestas de enero y de la seca...)

Al frente, el promontorio

vegetal

de las hojas enormes y abatidas

del guapo'y gigante

                                (... refugiado

en la gruta del tronco, embadurnados

de amarillo de mango

los labios y las manos,

Niqueleón silbando a las muchachas;

recontando su mazo de firracas,

componiendo la hondita; preparando

su armazón de pandorga; rekutundo

-lengua afuera, meciendo la cabeza-,

su redondo bolero; haciendo trompo

descantillando un trozo de guayabo...)


Al costado derecho de la casa

sitúa las ovenias, el soberbio

yvyraró y la tipa

                           (... el jazmín-mango

quemado por un rayo estaba en medio...)

Más allá el matorral

                               (... typychahü,

taperyvd, tapekué, cepacaballo,

perdudilla, artemisa, taropé...)

bordeando la calle,

con su roja verbena, su azul santalucía

y su agostopoty amarilleando

hasta lanzarse al río en lomos de la calle

(... lavanderas de piernas luminosas,

y de rostros cansados, piel morena,

"de güerta ma, che ama", "Eikuaamípiko

ña Kandepe ojehuva ko ka aru pe"...)

Y el álamo en el patio, al lado izquierdo

(... gorriones, havías, golondrinas,

guyraü, cardenales, pitogüé...)

frente a mi habitación: las noches claras

lentamente la luna subía tras de él.

Tres cocoteros más allá, y el mango

a cuya sombra tendíamos la hamaca

de mi padre, y mi hermano

hacía los deberes de la escuela

(... entre sus ramas, secreto,

un nido de canarios, dos huevitos.

Tocarlos, no: dejarlos; los pichones...

Lanzar de cuando en cuando

miradas distraídas

hacia arriba... )


Hacia el fondo, a la vera de la cerca

de takuaras, el muro de naranjos

junto al yvapurü, junto al granado

de las tórtolas.

                       Y el pozo

por aquí.

               Y "aquello lado"

el jardincito de mi madre

que regaba, solícita,

todas las tardecitas

con una regadera de latón: mi hermano y yo

alternándonos al pozo, con el balde

y la áspera piola

                            (... ¡Cómo henchíase

de su fresca y fragante humedad toda la casa.

Las dalias, los helechos, los rosales,

las sinesias y achiras verdeantes,

las margaritas blancas y los crotos.

Los caracoles de la tarde, enhiestas

las antenas, bogando...

Hacia Asunción se abría en rojo cárdeno

el cielo de la tarde

como una inmensa pulpa de sandía

o carne de mamón recién cortado.

Entonces se ahuecaba

toda la tarde en ecos, y sonaba

el cristal fugitivo del havía

o del chesyhasy, breve borrón

de humo pardo escondido en el naranjo.

Perurimá reía en nuestros labios,

tendido boca arriba, Exótica narraba;

Pychäi se iba a la ciudá de Berna

y Revieko cargaba en la carreta

una aguja, un almú

arró y cuatro galletas...)


¿Puedes imaginártela cómo era?

Toda se alzaba aquí, pequeña y grande.

De ella sólo quedan, negándose al baldío,

el álamo y el mango

y un resto absurdo de brocal, sin pozo.

Lo demás es asfalto..., ese cartel:

"Se reciben escombros".

                                       (... “El tiempo ohasáva ohóvo

                                        ñane akä omyäpatï,

                                        ñande rova omyacha'ï

                                        ha ndikatui ja joko "... )

                                                         (Diciembre, 1982)


 

 

VI

MITOLOGUEMA

[De Antoño retoño, cantata (1977)]


JUANDO KASO

-Epáyke, rabel,

oúma pytü.

-To së mbaraka,

topáy kunu'ü.

-Kuimba'e añö,

tapépe ajeity;

mandu'a pepo

che äme ijaity

ha yvytu ojaty

che ñe'ä rapo.

¡Mamove ndahái

ha ko nda pytái!

Ko'ápe ha pépe

ajetyvyro,

yvýnte omboja

che py ha che po.

¡Hi'äva voínte

hosäva yso,

tekove apére

tape amondoro!


-Ysyry reícha,

tapicha, chave.

Yvyku'i käme

ñemo'ä ku ague,

ha ahenonde'avo

mbarete anohë

jepyharahápe

ichugui ajere

ha guililimíme

apete aguahë.

¡Y satî poräko

che rapykuere,

ha anichéne ánga

iky'a jare

jepémo tujúre

ipere pere!


-Moöpa reho;

tërapa reju.


-Ha uperupimínte

añamindu'u,

mbaraka che pópe,

ha'eñöva ipu

ijehereínte

ñaimo'ä che andu.

A puraheikuévo...


- ¡Péva ke ta'u!

¡Mbaraka "de mágico"

ha'eñöva ipu!

Anïnati upéicha

resë nde japu,

che kuaa ramóko

ha che mongai'u

kavaju ratïme,

teko sayju.


-Maränepa kóicha

nde pochy reí,

ko ha'eva ndéve

ndaha'ei ka'i.


-Ka'i ha'e ÿro,

karaja guäimi,

apere'a mocho,

guyra tapiti,

¡eguata guatána

kururu chini!

¡Mbaraka ipórava,

ha'eñöva ipu...!


-Ha upéicha ko hina,

upéicha, che irü.

Huando ko che réra...


-Ha che ko Peru.


-Huando ko che réra,

¡nápy che rendu!

ani reimo'ätei

ro mo akä yryvu.

Ndachéi, reikuaáke,

tekove japu.


-Rehechápa hína

amo takuru.


-Ahecha vaí lénto

pytü o mo pa'ü.


-Hu'äme ko'änga,

moköi ñati'ü

japajereihápe

oñombokapu.


-Igrásiarö ndéve

igrásia neku

pe eré vaekue chéve.

Reñembojaru

jepémo, anichéne

che topa, che irü.


-Ta puka mba'ena,

ta puka puku;

péina ro mbo táima

Huando, che anguyru.

Ndépa rehendúva

aipo cho Peru:

nderehe ko aréma

oiko oporandu.


- ¡Móchapa hatïva!

¡Nde, ne anome'ü...!


-Ymáma yvy'ari

reiko re tutu,

ku jerokyhape

rembarakapu.


-Ymánteko upéicha,

änga ko ipyahu

kuñáme ome'ëva

ä mitarusu.


-Upéichane hina.

Ha rire, che irü,

mba'epa ere kôicha

ñamoñepurü

nde rekove kaso

ñemomombe'u.


-Che aveíko upéva

ymámi ahendu.


-Ha añetéva míntepa

Huando, che anguyru.


-Kapi'í ñaröicha

ñe'engáu kuru

ono'ö hi'ari

ha o ño mongaru.


-Resëje tapépe

pyharepyte

topehúi apývo

re guata mbegue

nde róga rekávo

purahéi rire,

ha upévo nde réra

kuñami saite

iñeësomíme

ombopuhe'ë.

Añetépa upéva,

Huando, kuimba'e,

péicha ku oje'eva

ko tapiaite.


-Añete. Ha upévo

(pytüete niko)

kuña saipytäva,

guata pororo,

che renonderäme

che rape joko.


-Ha reñemondýine

raka'e, Huando.

Chémarö ahechámane

ku malavision

ka'ure aimeháime

ku sambo sambo.


-Mba'epo ha'eta.

Aiméme ku che,

tesa topehýire

che akä kusugue,

apytáne upépe

(tanikununë)

ku tuguy jehóicha:

avati'ygue.


-Ha upéi, kuimba'e.


-Che ra'äromína

ta che mandu'a

mba'éichapa upégui

pyhare meguä

pe hapykuerére

che mbogueroja.

Ko ipepórö guáicha

ko che mbaraka

che ati'y mi ári

chembota mbota.

Che katu jaguáicha

kuña rembiguái

ypyvorekuáre

ajeporeka.


-Iporä mba'eiko

aipo upe kuña

ajeve upevéicha

nde reroguata.


-Ha'étava ndéve

ta ke rerovia:

märo ndahechávai

nda hechái hova,

ha ndikatuimíko

ha henonde'a.

Hapykuéri mínte,

hapykuéri aha,

hi'áva vevénte,

apopë porä,

yvytu syrýipe

ovevýi joa.

Ha aje'e che äme

upémarö ma

pe kuña konïva

i poräne ha.


- ¡Maëra piko upéva

ere ndejupe

reikuaa'ÿhava

rehe, raka'e!

(Ta va mína águi

pe ndeykereve).


-Ha upévo syrýkype

tapégui o piä

ha yvyrarakäre

ajetopeta.

Tuja resatüicha

ajeitypeka

yvýre apoñÿvo...


-E’a nde kompa,

ha oiméne upevëro

repo re pu'ä,

rejetyvyróvo

nde ahy'o jeka

sapukái pukúpe...


-Asë amburea

ko ipururümbáva

che akä, che syva,

¡hi'ä che apekümeve

yvy che mona!

Apy ta ka'uicha

asarakutea,

akuchu kuchúvo

cherakuvopa,

opáva ñe'egui

hyapu purumba

ka'aguy aimehápe,

ha he'i kuña

roikérnarö upépe:

"Apema epyta,

ñaiméma che rópe,

opáma guata".

"Tovékena upéicha,

anítemo apa

aipyhy jevývo

tatarërakä",

ha'eko aipychývo

che syva ratä.


-Pytügui guasúnte

re je havira,

ha hóga poränte

ra'e upe kuña.


-Ka'aguy pa'üme

petei ñü porä:

upéva ku hóga,

hataindy, mbyja.

¡Mba'eve ndaipóri

ni poha ñanä!


- ¡Mamópa isinkíta

nde platasyrä!


-"Mba'e piko kóva",

ha'e che jupe,

hi'änteva chéve

pe kuña ojere,

jahecha ikatúpa

hováre a ma'ë,

¡ha ndo jerovái

pe kucha chae!

“Mávapa nde róga,

moö piko oime,

ápeko ndaipóri,

¡ndaipóri mba'eve!".

Ha'e chupe upëro,

kuña opukaite,

ha he'ïnte chéve:

"kóva ko ha'e".


-Añetépa nde...


-Upéva he'ipávo

osëma ojere

trómpo kerambúicha

ndaijapyravéi.

Ha jererehápe

ichuguíma osë

ñaimo'äÿháva

kuña jekýikué,

ha o mbojerokýva

hetia'e tia'e

karia'y hsýiva

osëmba vaekue

ynambusevóicha

oparupiete.

¡Techaräva upéva!

kuimba'e jere

saraki ku'épe

i póncho veve.


Ku képero guáicha

upépe ko aime

aikuaa'ÿháre

mba'érepane.

Iñipÿrühápe

adipara se

ha añandúma upëro

ajeroveve

imbytépe kuéra

aguejy peve

¡Pytamba joáva

umi tekove

ndaha'ei ñandéva:

tovape meme!

Hyapu yvytúicha,

yvy apére o së

tata ojepotáva

che guero jere

ha che mongorávo

che mongorave.

Che kytïro guáicha

kyse'i raimbe,

ñemondýi hatîme

che haí paite.

Kyhyje susüme

che petepete

pyti'a pa'üme

che ñe'ä sängue,

¡ha ni upéicha vëro

che po perere

ko mbaraka sägui

katu'ÿ anohë,

che mba'eva'ÿicha

ha'eñö oipete,

i jaí ko upépe

che tarovaite

mbarakapuhápe,

¡tata apytere!


- ¡Oikuaa ypýmo

nipo raka'e

karia'y hesére

ipoho hare!

Oguerokañývo

mbaraka paje

i po hendypáma

ha hata veve.

¡Ko techaparápe

upe kuimba'e

káva raitykuápe

o suru ndaje!

¡Mba'ere rupípo

ne monda ra'e!


-Aikuaáma hína

kuimba’e upe,

ambopokokáne

atopávo ve...


- ¡Aníteike, nde!

Cháke ko nde káso

remohembyre.


-Tata rembe'ýre

opa ojeroky

che mbarakapúpe

oiméva te'y.

Ayvu, jepukápe,

o johavyry

mitä mbojarúicha

o mbokavyjy:

oïko opopóva,

oime i kupy'y

ohupi mombóva;

ápeo o tyryry,

amo ojoku'áre

ojejapichy,

ijapañüaimbáva

mborevi memby.

Sapy'änte upëro

tesakä hovy

ova sayjúpe

ha upéi pytanguy.

Ahecháma upéro

pe tatarendy

ombojepotáma

magmáva ati'y

pepóramo guáicha

ojeity jeity.

Techamo'ä ÿva

ijapyra'ÿ

ajesarekóvo

ahecha ypy

umi ojerokýva

retyma ha py

oikoe mbaitéko:

¡kavara kupy!

Ha ko'ýte upépe

kyhuje rypy

korasö sorógui

cha änga pytÿ.

"Che piko ahejáma

kóicharö upe yvy

ha ko añaretáme

aju a jereity",

che py'a ruguápe

añe'ë jaty.

Upéma che ängui

a ñe'äupi

ha Santa Mariápe

añembo'emi.

San Minguel ku oiméne

oguejy voí

hatïambáva ipópe

ijaratiri,

ajeve tahýicha

moñaikue orari.

Ahendu Alabado

che mbarakami

isägue pumíme

o mosarambi.

¡Rehechámo máicha

osë o piriri

moñäingue okapúva,

mbokavicho'i,

yvykuápe ohóvo

guererë pipi

ñakatïparópe

o mo hatatï!

¡Hyambu joa

sapukái po'i!


- ¡Lája'ÿro guáicha

ko nde káso mi

Huando karia'y

ña ne mo pirï!

¡Ja pu'äke hente

jajepomoï,

ñanderovasáta

karia'y potï!


-Anive nde aýtei,

nde Peru vaí;

äpe ko aguahëma,

änga akirirï.

Ndéma ne mba'egui

eguerohua'ï

ha aníkena oréve

re kureñanï...


-Che rekovekuéko

itanarämi,

Maërápa ahenóita.

¡Oúne che motï!

To pyta hendápe

kapi'i katï...


 

 

VII

FINAL DE COPLAS


… las venturas y las penas…

Alejandro Guanes


Con el alma a la intemperie

paso las noches en vela,

conversando con un sueño

que es el sueño de una estrella.


Yo que digo me lo sé

lo que callo. Es un decir,

esperando que sea cierto

que uno se vive al morir.


Yo nunca tuve una casa

que pueda decirse mía,

quise habitar un amor

y el amor se fue en ceniza.


Panambí che raperäme

nunca dejes de volar,

nde pepo kuarahy’äme

quiero amar,

a una estrella extraviada

por acá.


No quiero decir tristezas.

Ellas me dicen a mí.

De modo que nunca supe

de quién era mi decir.

Que me perdone la gente:

ya estoy como para ir...


 

PURAHEI JOIVY

Ysapy purahéi

mbaraka jora'ÿ,

esapy pukavy

ha ta ja nde pohéi.

Pykuipe ha ynambu,

amambai roky ky,

ko yvu rembe'y

nendive ta hetü,

nendive, che reindy,

ko ysati ta moirü.


Ko'yte ndeykére

ko'ëmba peve,

ta iko'ë che äme,

ta i guyra ñe'ë.

Ka'aguy pepo

tove ojero'a

o mo pytumbyvo

ña ne kañÿha,

ha ne akaränguepe

che pokua pokua

¡anítei, anítei,

ani reikuaa

ro añuämba kuevo

a sysyipa ha!


Ku asaje tinï

nde resáre o va.

Tataendy mbyja

nde rova mimbi.


Kuarahy rataita

nde rete piriri

o mymyi,

              o mimbi,

che ruguy pe o roinyi,

che resa nde resa ruguamíme

o tytyi...


Nde rete resakä

kuarahy pehengue,

panambi guahëha,

mainumby pypore.

Ku nde eíra rembe

ta'umi, taipyte,

ko che pópe oguemivo

pepomi perere.


Pepomi perere,

guyrami ha'eñö

nerenoi, nereimëi,

guyrami kane'ö,

araha heruguäme

korasö jahe'o.

Nerenoi, nereimei,

haitymíme o ñeno

togueguýpe, hakäre

yvytu o myatymoi.

Nereimei, nerenoi

guyrami jahe'o.


 

 

INDICE

LOS MUROS FUGITIVOS (1965-1980)

I.- MODERATO CANTABILE : Memorial, Chi lo sà!, Octubre, Reflejo, Noche arriba, Ciertamente, Un olor de mandarinas, Alguna playa en Brasil, A solas,

Elegía por Coral,

II.- A Ú N (1966) : I (Alfa variación primera), II (Beta variación segunda), III (Gamma variación tercera), IV (Delta variación cuarta), V (Epsilon variación quinta), VI (Zeta variación sexta), VII (Eta variación séptima), VIII (Theta variación octava), IX (Iota variación novena), X (Kappa variación décima),

III.- BIOVIAJES : El niño, 1942 Pto. Mihanovich, 1943 Puerto Sastre, 1943 Puerto Sastre, Roldana (1945 Luque), Vyro rei, Tubinga 71, Düsseldorf 71, Tegu, Noticia para Eurídice,

IV.- ACTA CAPITULAR : Lugar común, Sombras en la pared, Laberinto, 63 Definiciones, Poema, Nadie, El sonido: la herida, Intemperie, Fragmento encontrado en Isaías, Los días, Sólo el hombre, Compañía, Acta capitular - Introducción, Signo, Tema antropológico,

V.- ORDEN DEL DIA : Eam 1 (La mano), Eam 2 (La luz), Los hijos: paréntesis emocional, Casa contada al hijo,

VI.- MITOLOGUEMA : Juando Káso,

VII.- FINAL DE COPLAS : Con..., Juaihu..., Todo..., Yo que..., Yo nunca..., Aquel..., Cuando..., Panambí..., No..., Purahei joivy,

 

 

 

  

 

 

 

 

ENLACE INTERNO A ESPACIO DE VISITA RECOMENDADA


(Hacer click sobre la imagen)






Bibliotecas Virtuales donde se incluyó el Documento:
EDITORA
EDITORA ALCÁNDARA
LIBROS,
LIBROS, ENSAYOS y ANTOLOGÍAS DE LITERATURA PA
IDIOMA
IDIOMA GUARANÍ - POESÍAS - MÚSICAS - ESTUDIOS...



Leyenda:
Solo en exposición en museos y galerías
Solo en exposición en la web
Colección privada o del Artista
Catalogado en artes visuales o exposiciones realizadas
Venta directa
Obra Robada




Buscador PortalGuarani.com de Artistas y Autores Paraguayos

 

 

Portal Guarani © 2024
Todos los derechos reservados, Asunción - Paraguay
CEO Eduardo Pratt, Desarollador Ing. Gustavo Lezcano, Contenidos Lic.Rosanna López Vera

Logros y Reconocimientos del Portal
- Declarado de Interés Cultural Nacional
- Declarado de Interés Cultural Municipal
- Doble Ganador del WSA