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INSTITUTO FEMENINO DE INVESTIGACIONES HISTÓRICAS

  ANUARIO DEL INSTITUTO FEMENINO DE INVESTIGACIONES HISTORICAS. VOLUMEN Nº 1


ANUARIO DEL INSTITUTO FEMENINO DE INVESTIGACIONES HISTORICAS. VOLUMEN Nº 1

ANUARIO DEL

INSTITUTO FEMENINO DE INVESTIGACIONES HISTORICAS

VOLUMEN Nº 1

ASUNCIÓN – PARAGUAY

1970 – 1971 (175 páginas)

 

 

ADVERTENCIA

EL INSTITUTO FEMENINO DE INVESTIGACIONES HISTORICAS da a publicidad su ANUARIO, Volumen 1, fruto del esfuerzo de su Comisión Directiva que trabajó afanosamente y con fe para contribuir a enriquecer el acerbo histórico del Paraguay y de América. No será el primero ni el último. Seguirá promoviendo y estimulando el desarrollo cultural de la mujer paraguaya.

Este Instituto nuclea a las egresadas de la Sección Historia de la Facultad Nacional de Filosofía y la de la Universidad Católica "Nuestra Señora de la Asunción".

Somos un grupo de mujeres devotas de la historia, la mayoría docentes universitarias y de enseñanza media, que desde la cátedra enseñamos el amor a la patria; la comprensión de nuestro pasado de glorias y su proyección en el presente y en lo porvenir.

EL INSTITUTO FEMENINO DE INVESTIGACIONES HISTÓRICAS con este ANUARIO presenta a la opinión pública una prueba de su labor académica y un aporte de la mujer paraguaya a la historiografía nacional.

Dejamos constancia que este ANUARIO, Volumen 1, debió salir en el mes de marzo de 1971, como un homenaje al Centenario de la Epopeya Nacional, razón por la cual figuran en él trabajos relativos a nuestra inmortal epopeya, pero razones de fuerza mayor no permitieron su aparición en ésa oportunidad.

 

 

INDICE

 

ADVERTENCIA

Gratitud

Comisión Directiva del Instituto

LA MUJER PARAGUAYA EN LA EPOPEYA NACIONAL”, por IDALIA FLORES G. DE ZARZA

"CUATRO PROTAGONISTAS DE CERRO CORA", por OLINDA MASSARE DE KOSTIANOVSKY

"ELIGIO AYALA" Héroe civil de la defensa del Chaco, por JULIA VELILLA L. DE ARRÉLLAGA

"LA GUERRA DEL PARAGUAY EN LA PRENSA INTERNACIONAL", por MARGARITA VELILLA TALAVERA

"EL INDIO GUARANI, COMO FACTOR HOMOGENEO EN LA INTEGRACION NACIONAL" por JULIA ELENA BIBOLINI

"HEROINAS DE LA EPOPEYA NACIONAL" por GRACIELA PALLARES DE MUSSI

"PROTOCOLO DE LA PAZ DEL CHACO", por MIRTHA LAVIGNE ELIZECHE 

"CARLOTA JOAQUINA, LAS AMBICIONES DE LA INFANTA", por ELBA BRÍTEZ DE ZAYAS

"GOBIERNO DE DON CARLOS A. LÓPEZ", SUS REALIZACIONES EN EL ORDEN EDUCATIVO, por MARÍA VICTORIA MORENO

"SEVILLA EN EL SIGLO XVI y el DESCUBRIMIENTO DE AMERICA", por BLANCA ROSA ROMERO

 

BOLETÍN INFORMATIVO Nº 6 DE LA CASA PARAGUAYA, BS. AS. IX-1971

DISCURSO DE LA PRESIDENTA DEL I.F.I.H. IDALIA FLORES G. DE ZARZA

BOLETÍN DISTRIBUIDO POR LA MUNICIPALIDAD DE BUENOS AIRES

PROGRAMA DESARROLLADO EN BUENOS AIRES, CON MOTIVO DEL HOMENAJE A ANA DÍAZ, DEL 9/14 DE OCTUBRE DE 1971

RESUMEN DE LAS PRINCIPALES ACTIVIDADES DEL INSTITUTO FEMENINO DE INVESTIGACIONES HISTÓRICAS, DURANTE LOS AÑOS 1970/71

NOTA DIRIGIDA AL HONORABLE CONGRESO NACIONAL, SOLICITANDO LA CIUDADANÍA HONORARIA DEL DR. JUAN BAUTISTA ALBERDI

MEMORÁNDUM PRESENTADO AL EXCMO. SEÑOR MINISTRO DE RELACIONES EXTERIORES DE LA RCA. DEL BRASIL, DR. MARIO GIBSON BARBOSA

 

*****************

 

SEVILLA EN EL SIGLO XVI Y EL DESCUBRIMIENTO DE AMERICA

BLANCA ROSA ROMERO M.

 

         Durante mi permanencia en Sevilla como becaria del Instituto de Cultura Hispánica, tuve la oportunidad de realizar investigaciones en el Archivo General de Indias, además de cursar el doctorado en Historia en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de dicha ciudad.

         El trabajo presentado ahora es el resumen de una monografía elaborada bajo la dirección del eminente americanista y Decano de la mencionada Facultad, don Francisco Morales Padrón.

         El núcleo central del tema de esta investigación es el estudio de la vida en Sevilla durante el siglo XVI y su trascendencia en la vida americana.

         El llamado Siglo de Oro Español tuvo en Sevilla su mejor representación, ya que también en esta época ella alcanzó su máximo esplendor y desarrollo.

         Circunstancia determinante de este desarrollo, fue el activo comercio de las flotas españolas con el Nuevo Mundo, a través de la metrópoli andaluza.

         Era Sevilla, sede de la Casa de la Contratación, institución de gran importancia y nexo entre la corona y las lejanas provincias de ultramar.

         El tráfico incesante con las "Indias Occidentales", motivó la prosperidad del comercio, el aumento de la población, y, por consiguiente, el desarrollo de la vida sevillana en todas sus manifestaciones.

         Vamos seguidamente a referirnos a la vida en Sevilla, en lo que a fiestas, distracciones y espectáculos se refiere.

         Podemos afirmar que en la Sevilla del siglo XVI, nobles y plebeyos, ricos y pobres, jóvenes y adultos y hasta los forasteros participaban de variadas fiestas y espectáculos organizados con bastante frecuencia y con imponente fastuosidad.

         Organizábanse algunas periódicamente; otras, en determinadas ocasiones, y otras formaban parte del diario vivir de la Sevilla de entonces.

         Es importante destacar que eran fiestas eminentemente populares, y que si algunas estuvieran organizadas por las autoridades o por algún señor importante del lugar, el pueblo participaba ampliamente en ellas.

         Bodas, bautizos, nacimientos, proclamaciones o visitas oficiales del rey o de alguna persona de la realeza, originaban en la ciudad festejos y diversiones públicas.

         A poco de comenzar el siglo, recibe Sevilla la primera visita real. Recordemos que don Fernando el Católico a la muerte de su augusta esposa doña Isabel de Castilla, contrajo nuevas nupcias con doña Germana de Foix, en el año 1506.

         El 28 de octubre de 1508, los flamantes esposos llegaron a Sevilla, donde fueron recibidos con público regocijo.

         Ortiz de Zúñiga describe este recibimiento con claros detalles y vivos coloridos. Las Milicias formaban desde la puerta de la Macarena hasta el Hospital de San Lázaro, donde se detuvo el rey antes de entrar en la ciudad. Diez mil soldados en correcta formación y un gracioso ejército infantil, vestido con galas militares, escoltaban a los reyes.

         Las fiestas en su honor duraron varios días.

      Hubo fuegos artificiales,

alanceamiento de toros y otros festejos. (1)

         Permanecieron los reyes en Sevilla hasta fines de noviembre, mes en que regresaron a Castilla.

         En 1526, la ciudad fue objetó de uno de los mayores honores que recibió en su larga y rica historia, al ser elegida por Carlos I para celebrar en ella sus esponsales.

         Las fiestas comenzaron con la llegada de la futura emperatriz, la infanta doña Isabel, hija del rey de Portugal.

         Llegó la Augusta Princesa, el 2 de marzo, oportunidad en que fue recibida con gran solemnidad. (2)

         Días después, hizo su triunfal entrada el Emperador. Venía Su Majestad vestido con sayón de terciopelo con tiras de brocado, en un rodado color de cielo portando en la mano una vara de olivo.

         No podría describirse toda la magnificencia de este recibimiento; las telas y joyas con que se engalanaron los sevillanos causaron la admiración del Soberano Emperador y de los extranjeros allí presentes. (3)

         Los actos públicos con que se celebró tan fausto acontecimiento, fueron espléndidos. El Ayuntamiento se esforzó por merecer el agrado del Emperador.    Hubo fiestas en las que S.M. participaba por ser éstas muy de su agrado. En la plaza de San Francisco hubo torneos, juegos de cañas y toda clase de regocijo público. Duraron aquéllos hasta el 18 de marzo, día en que Sus Majestades partieron para Granada mandando dar sus expresivas gracias por las sinceras muestras de aprecio recibidas. (4)

         Siguiendo cronológicamente, señalemos otros acontecimientos relacionados con la Casa Real y que fueron objeto de fiestas en Sevilla, aunque no con tanta grandeza como los antes mencionados.

         En 1549 se recibió la carta del Emperador Carlos V, por la cual notificaba su abdicación al trono a favor de su hijo Felipe II. Para proclamar al nuevo rey, se levantó el pendón real, y siguieron luego varios días de recreación popular. (6)

         Magnífica fueron las fiestas que se celebraron cuando Felipe II visitó la ciudad, por única vez, en el año 1570. Espinosa de los Monteros, Guichot y Parody y Juan de Malara han descrito este acontecimiento con mucho detalle y vivo colorido.    El último de los nombrados dedicó una obra completa para expresar cuánto hizo Sevilla para honrar a tan magnífico visitante.

         Recibido el anuncio de la visita real, la ciudad, como de costumbre, se dispuso a engalanarse con entusiasmo. Las calles se llenaron de típicos arcos triunfales levantados por los mejores artífices, con emblemas y leyendas alusivas donde aparecían simbólicamente las mayores virtudes del rey.

         Nos cuenta Juan de Malara que como la ciudad había crecido tanto y tenía embellecidos las márgenes de su río con las armadas que continuamente llegaban de las Indias, se había decidido que el rey llegara por el río, para que así pudiera contemplar la hermosa ciudad. Al mismo tiempo se dispuso que entrara por la puerta de Goles, llamada desde entonces Puerta Real, pues, la de la Macarena a pesar de su antigua tradición, no era ya la más adecuada.

         Recibieron al rey, el Cabildo, los grandes de la ciudad y los jueces y oficiales de la Casa de la Contratación, a quienes acompañaban más de 150 capitanes, maestros y pilotos de la carrera a Indias.

         Permaneció el rey en Sevilla quince días, donde mucho gozó con los espectáculos públicos, toros, cañas, fuegos artificiales, salvas y otros regocijos que el Ayuntamiento ofreció a su rey, pasados los cuales emprendió el regreso a Castilla. (7)

         Otros acontecimientos notables, relacionados también con la monarquía, eran los izamientos de pendones por los reyes.

         En Sevilla, en el siglo XVI, se hicieron en honor de la reina doña Juana y su hijo Carlos, y posteriormente en el de Felipe II.  Estas ceremonias estaban revestidas de majestuosidad, y consistían en sacar el pendón Real desde la Catedral hasta el Alcázar, acompañado de gran comitiva, subiéndolo a la torre donde se hacía la proclamación. (8)

         El siglo termina con otra proclamación real: el 30 de septiembre de 1598, la ciudad de Sevilla, con gran solemnidad y público regocijo, alzó pendones por el rey Felipe III. En esta ocasión, el Alférez Real, que portaba el estandarte, acompañado de los capitulares, se dirigió a la plaza de la Feria, y de allí se encaminó en imponente marcha a la plaza de San Francisco. (9)

         También daban ocasión a grandes festejos, aunque no ya tan ligados a la casa real, las victorias de las armas españolas. En estas ocasiones se organizaban fiestas de toros, máscaras y luminarias. Fueron importantes las que se celebraron por la victoria de Lepanto. También se celebraron el triunfo del Emperador en Pavía y la prisión de Francisco I de Francia. (10)

         Es difícil desligar las fiestas de carácter religioso de las profanas, pues durante el siglo XVI y hasta mucho después, se siguieron realizando en ciertos acontecimientos religiosos, actividades profanas, tales como bailes, bufonadas, cantos.

         Es cierto que en reiteradas ocasiones las autoridades eclesiásticas intentaron suspender la antigua costumbre medioeval de realizar representaciones en los templos, colegios y conventos, pero en Sevilla, siguieron realizándose en ocasiones tales como la festividad del Santísimo Sacramento y de la Pascua de Navidad.

         La fiesta del Corpus, que había sido instituida en el siglo XIII por el Pontífice Urbano IV, fue celebrada siempre con gran esplendor.

         Al hablar de esta festividad, nos toca recordar, además, los llamados autos sacramentales, que iniciados en el siglo XVI, llegaron a su culminación en el XVII, y con Tirso de Molina y Calderón de la Barca alcanzaron la perfección, pues tomaron su forma definitiva.

         Era costumbre en Sevilla poner al Santísimo Sacramento en medio de la Capilla Mayor de la Catedral, y una vez ubicados los miembros del Ayuntamiento y del Cabildo Eclesiástico, comenzaban las representaciones de los autos. Terminados éstos, seguían los oficios divinos (misa y sermón), al final de los cuales actuaban los danzantes, los que seguían delante del Santísimo hasta la tarde en que salía la procesión.

         En esta forma se celebraba la fiesta del Corpus en Sevilla, hasta que en 1559, Lope de Rueda presentó los dos primeros autos típicamente sacramentales: El Hijo

Pródigo y Navalcalmelo o Naval, Abigail y David. El primero escrito en verso y el segundo en prosa, estilo peculiar del eminente autor. (11)

         Como dijimos, las representaciones se realizaban también en las Pascuas de Navidad. Memorable fue el drama religioso representado en 1570 por Pascual en la

Catedral de Sevilla, cuyo título no se conoce con exactitud, pero algunos autores suponen que fue la tragedia "Absalón". (12)

         Los actos literarios se realizaban en algunos colegios y conventos. Así, durante el siglo de nuestro estudio, se realizaban con especialidad en los colegios de la Compañía de Jesús.

         Una de las farsas de más antigua tradición, conservada durante mucho tiempo, fue la llamada "Fiesta del Obispillo", que era representada el día de los Inocentes.

         Esta fiesta se trasladó luego al día de San Nicolás, y en 1563 se presentó por última vez. (13)

         Con justa razón, alguien dijo que durante el siglo XVI Sevilla fue el sitio más propicio para el desarrollo del teatro español. Su activo comercio con las provincias de ultramar hizo prosperar el comercio y la economía; aumentaron la población y la riqueza de sus habitantes, lo que posibilitó el desarrollo de las artes.

         Ahora bien, las bases del teatro español moderno se hallan en los actos litúrgicos y en cierto modo teatrales que se celebraban dentro de les templos y fuera de ellos, tal como los hemos descrito. A éstos se deben agregar los realizados en los colegios y los conventos.

         Pero con el correr de los años fueron alejándose de los templos, colegios y conventos, y pasaron a recintos, algunos improvisados, denominados "corrales de comedias", donde nació el auténtico teatro contemporáneo. (14)

         Uno de los corrales de más larga tradición en Sevilla fue el llamado "Corral de Doña Elvira". Estaba ubicado en el antiguo barrio de las juderías; hoy barrio de Santa Cruz, y allí desfilaron actores de gran fama durante todo el siglo XVI.

         En el mismo barrio, y muy cerca del corral, residía en 1592 el afamado director de comedias don Rodrigo Osario, en cuya casa habitó durante mucho tiempo el insigne representante de las letras españolas, y uno de los mayores ingenios de la literatura universal, don Miguel de Cervantes Saavedra. (15)

         Otro corral de mucho renombre fue el llamado "Corral de don Juan", situado también en el barrio Santa Cruz. Cambió varias veces de nombre, se llamó inicialmente "Corral de los Zurradores", porque tal fue la profesión de la mayoría de los vecinos. Durante el siglo XVI, se llamó de don Juan, en atención al nombre de su entonces propietario, don Juan Ponce de León, y ya en el siglo XVII se lo llamó "Corral del Marqués", por ser entonces su dueño el Marqués de Villa Manrique.

         En 1549, Lope de Rueda, al frente de una notable farándula, actuó en este corral, desde las Carnestolendas hasta pasada la octava del Corpus.

         Durante el último tercio del siglo XVI don Diego de Vera, vecino de Sevilla, tomó en arriendo la huerta y corral de la "Atarazana de los caballeros".

         Estaba éste ubicado en el terreno comprendido entre el Alcázar y la Torre de Oro, lugar donde más tarde se construyó la Casa de la Moneda.

         Allí levantó Diego de Vera un teatro de madera que fue llamado de la Atarazana o del Arenal. Por lo adecuado del lugar, allí se representaron en repetidas ocasiones las obras de Lope de Vega "El arenal de Sevilla" y "La esclava de su galán".

         Otro corral de gran fama fue el de las Higueras, que estaba ubicado en el patio del mismo nombre, en el suntuoso palacio de Medina Sidonia. A iniciativa del duque fue reacondicionado en 1587. Actuaron allí las compañías de Pedro Saldaña y Antonio Villegas. Siguió funcionando hasta el primer decenio del siglo XVIII. (16)

         Una de las fiestas más típicas y de hondo arraigo en Sevilla fue y sigue siendo la de los toros. Aunque el toreo es un espectáculo propio de la Edad Media, no puede ser aún considerado como arte, pues el arte comienza, siguiendo la opinión del investigador Toro Buiza "cuando el hombre, sin más defensa que su arrojo y valentía se enfrenta con la bestia".

         El mencionado autor afirma que este arte se inicia en los mataderos de Sevilla, donde, con el objeto de seleccionar las bestias que debían ser sacrificadas para el consumo, los matadores profesionales obligadamente se enfrentaban con los toros.

         Poco a poco, en los mismos mataderos ya no sólo se enfrentaban a las bestias estos profesionales, sino también algunos jovenzuelos y vagabundos, a quienes poco o nada les importaba de sus vidas.

         Posteriormente, este espectáculo salió del recinto de los mataderos, y se convirtió en acto público de creciente gusto popular.

         El primer torero que escapó del anonimato fue Juan Guardiola, quien según un documento de 1594, había pedido una ayuda de costa al Cabildo para adquirir una nueva capa.

         Desde el siglo XVI se daban anualmente corridas de toros en la plaza de San Francisco. En la misma se organizaban, además, fiestas de toros para conmemorar ciertos acontecimientos importantes. En estas ocasiones se concentraba todo el entusiasmo y el esplendor de Sevilla. (17)

         Podemos citar otros espectáculos y diversiones que, sin tener la solemnidad de las fiestas reales y el tipismo del teatro y de los toros, contribuyeron a realzar los festejos que se realizaban en el siglo XVI.

         En la capital andaluza hubo siempre gran afición a los bailes y danzas. Hemos visto cómo acompañaban a la liturgia de ciertas festividades religiosas.

         Muchas continúan hasta nuestros días como pálido reflejo de aquellas del siglo XVI, como la danza de los niños cantorcitos, conocida con el nombre de los seises, pues, en un comienzo fueron seis los niños que primorosamente vestidos, bailaban delante del Santísimo Sacramento. Estos niños, vestidos con traje antiguo de seda azul y blanca bailaban y cantaban tocando las castañuelas en la Catedral de Sevilla, y en otras, en determinadas festividades del año

         A las representaciones teatrales también acompañaban los bailes y danzas presentados en los entreactos o al final de las mismas. Posteriormente, estos bailes se independizaron y tuvieron locales propios.

         Muchos de los arraigados en Sevilla vinieron de las Indias, y surgieron academias y escuelas en que se fijaban las reglas y se enseñaban a quienes lo deseaban.

         Entre las fiestas universitarias, podemos citar la de proclamación de catedráticos, a la que según la correspondiente toma de posesión. Estas fiestas se originaban entre profesores y alumnos. (18)

         Finalmente, las clases media y plebeya gastaban sus ratos de ocio dando largos paseos a pie y observando el desfile de la aristocracia.     Algunos lugares como la Alameda de Hércules, eran sitios clásicos dé expansión donde se reunía todo el pueblo sevillano.

         A través de este breve estudio, creemos haber dado un somero panorama del esplendor de la vida en Sevilla en el siglo XVI, y, más que nada, de la forma de sentir y de pensar del sevillano de ayer y de hoy.

 

 

BIBLIOGRAFIA

 

(1) - Ortiz de Zúñiga, Diego: Anales Eclesiásticos. Tomo III, pgs. 276/7.

(2) - Guichot y Parody, Joaquín: Historia del Excmo. Ayuntamiento, tomo I, p. 203.

(3) - Guichot y Parody, Joaquín: Ibídem, tomo II, págs. 25/7.

(4) - Guichot y Parody. Joaquín: Op. Cit. págs. 26/27.

(5) - Ortiz de Zúñiga, Diego; Op. Cit. tomo III, pág. 402.

(6) - Ortiz de Zúñiga, Diego: Ibídem, tomo IV, págs. 1 y 2.

(7) - Espinosa de los Monteros: Historia de las Antigüedades, libro VII,p. 92.

     - Guichot y Parody, Joaquín: Op. Cit. tomo II, págs. 72/75.

     - Malara, Juan: Recibimiento que hizo la Muy Noble y...

(8) - Montoto, Santiago: Sevilla en el Imperio, p. 270.

(9) - Guichot y Parody, Joaquín: Op. Cit. tomo II, págs. 20 y 145.

(10) - Montoto, Santiago: Op. Cit., pág. 270.

(11) - Sánchez Arjona, José: Anales del Teatro en Sevilla, págs. 1/14 y 30/39.

(12). - Montoto, Santiago: La fiesta de la Hermandad Sacramental del Salvador, págs. 129/132.

(13) - Sánchez Arjona, José: El Teatro en Sevilla, p. 15/24.

(14) - López Martínez, Celestina: Teatros y Comediantes Sevillanos, p. 18.

(16) - López Martínez, Celestino: Op. Cit. p. 24 – 58 y 65.

(17) - Toto Buiza, Luis: Sevilla en la Historia del Toreo, ps. 19-20-36 y 41.

(18) - Ortiz de Zúñiga, Diego: Ibídem, p. 320.

   

*****

 

 

NOTA DIRIGIDA POR LA PRESIDENTA DEL INSTITUTO FEMENINO DE INVESTIGACIONES HISTORICAS Y POR EL DIRECTOR DEL INSTITUTO "JUAN BAUTISTA ALBERDI" DE SAN LORENZO AL HONORABLE CONGRESO RE LA NACIÓN, SOLICITANDO LA CIUDADANIA HONORARIA DEL EMINENTE ARGENTINO DOCTOR JUAN BAUTISTA ALBERDI, DEFENSOR DEL PARAGUAY DURANTE LA GUERRA CONTRA LA TRIPLE ALIANZA, EN HORAS ANGUSTIOSAS PARA NUESTRA PATRIA.

 

NOTA PRESENTADA AL PRESIDENTE DEL HONORABLE CONGRESO NACIONAL, SOBRE LA DECLARACIÓN DE LA CIUDADANNA HONORARIA DEL DR. JUAN BAUTISTA ALBERDI

ASUNCIÓN, NOVIEMBRE DE 1971

 

SEÑOR

PRESIDENTE DEL HONORABLE CONGRESO DE LA NACIÓN

PROF. DR. JUAN RAMON CHAVES PRESENTE

Tenemos el honor de dirigirnos al Señor Presidente y por su intermedio a los demás Miembros del H. Congreso, en nombre y representación del INSTITUTO FEMENINO DE INVESTIGACIONES HISTORICAS y del INSTITUTO "DR. JUAN BAUTISTA ALBERDI" de San Lorenzo, con el objeto de solicitar que el DR. JUAN BAUTISTA ALBERDI, eminente ciudadano argentino y desinteresado defensor del Paraguay en la Guerra contra la Triple Alianza, sea declarado CIUDADANO HONORARIO DEL PARAGUAY, en reconocimiento y gratitud por los insignes méritos y servicios prestados al Paraguay en horas difíciles de nuestra historia.

Contempla este petitorio el Artículo 35 de la Constitución Nacional que reza así: "Sólo el Congreso podrá conceder la ciudadanía honoraria a los extranjeros que hubiesen prestado servicios eminentes a la República".

Como antecedente a este pedido tenemos la Ciudadanía Honoraria al preclaro ciudadano uruguayo DR. LUIS ALBERTO DE HERRERA, defensor de nuestros derechos en la contienda chaqueña del 32 al 35.  Que el Dr. Juan Bautista Alberdi obtenga esa distinción post-mortem no constituye ningún obstáculo o impedimento, para que el H. Congreso Nacional promulgue una Ley, concediendo la Ciudadanía Honoraria al ilustre y decidido publicista argentino, defensor de las causas justas y de los pueblos libres.

La personalidad del Dr. Alberdi y sus obras en favor del Paraguay son conocidas por todos los paraguayos.

Su preclaro talento y su voz de justicia se alzó con toda energía para defender al Paraguay contra los ataques de los agentes de la Triple Alianza, no pudieron acallar ni contrarrestar su voz potente y justiciera que hasta hoy tiene vigencia, porque esa voz estaba basada en la verdad, que, tarde o temprano siempre triunfa.

Alberdi preconizó una política de paz como un medio para engrandecer a los países pequeños como el Paraguay. Fustigó la mentira, el monopolio de Buenos Aires, el imperialismo y bregó por el respeto mutuo de los pueblos americanos para establecer la armonía y la solidaridad entre los mismos. Por su defensa insobornable, firme y justiciera, el Paraguay le debe gratitud imperecedera.

 

SEÑOR PRESIDENTE:

La República del Paraguay con esta tardía distinción consagrará su gratitud al genial tucumano que en horas aciagas y sublimes de nuestra gran epopeya, con gesto heroico y tenaz hizo saber a América y a la faz del mundo las injusticias y el crimen de la guerra, comprometiendo su calidad de hombre público, comprometido su propio país en la contienda, fue tratado de traidor por sus conciudadanos por condenar la infamia de la guerra. Pero la posteridad ha reivindicado su nombre porque ha sido vengado sin ejercer venganza. El Paraguay, señor Presidente no puede estar ajeno a este movimiento de justicia y de americanismo. El Dr. Alberdi, jamás recibió prebendas ni pensiones de nuestro país, por eso creemos una expresión de gratitud y de sentimiento americanista en estos momentos en que las relaciones argentino-paraguayas se encuentran fortalecidas por hechos trascendentes y significativos como la reciente inauguración del monumento al héroe máximo de nuestra nacionalidad, el Mariscal Francisco Solano López, en la populosa ciudad argentina de Rosario Este hecho a nuestro criterio justifica por entero nuestra solicitud.

Como culminación de la celebración del Centenario de la Epopeya Nacional y la consagración de los altos valores de esa inmortal epopeya, solicitamos respetuosa mente a ese H. Congreso la promulgación de una ley declarando al Dr. Juan Bautista Alberdi, Ciudadano Honorario del Paraguay, tal como ampara el Art. N° 35 de la C. Nacional.

Dado los invalorables y eminentes méritos y servicios que el Dr. Alberdi, prestó a nuestra causa, alentamos la esperanza que nuestra solicitud tenga favorable acogida en ese alto cuerpo legislativo.

Plenamente convencidos, que la concesión de Ciudadanía Honoraria al más esclarecido publicista e infatigable defensor del Paraguay, es un acto de estricta justicia, que veríamos con agrado se cristalice con motivo de la próxima visita a nuestro país del Excmo. Señor Presidente de la República Argentina Teniente General Alejandro Agustín Lanusse. Esta importante medida como la visita de confraternidad, contribuirán a fortalecer cada vez más las fraternales relaciones que unen al Paraguay y Argentina.

En la seguridad de que nuestra petición habrá de ser acogida favorablemente, saludamos al Señor Presidente del H. Congreso, con nuestra más distinguida consideración.

IDALIA FLORES G. DE ZARZA

Presidenta del Instituto Femenino de Investigaciones Históricas

DR. MARTIN ALIVIADA

Director del Instituto "Juan Bautista Alberdi" de San Lorenzo

 

 

MEMORANDUM

ENTREGADO AL CANCILLER BRASILEÑO EXCMO. SR. DR. MARIO GIBSON BARBOSA EN FECHA 3 DE MAYO DE 1971, SOBRE LA DEVOLUCIÓN DEL "LIBRO DE ORO", OFRECIDO POR LA MUJER PARAGUAYA AL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA, MARISCAL FRANCISCO SOLANO LOPEZ EN 1867

1º.-El Instituto Femenino de Investigaciones Históricas es una entidad académica integrada por las egresadas de la Sección Historia de la Facultad de Filosofía de la Universidad Nacional y Católica "Nuestra Señora de la Asunción".

2º.-Esta institución fue fundada el 12 de junio de 1966 y tiene por finalidad fundamental estudiar y seguir investigando el pasado histórico del Paraguay y de América, estableciendo un intercambio cultural entre los pueblos del continente, limando las asperezas que pudieran entorpecer las fraternales relaciones con los mimos.

3º.-Con motivo del Centenario de la Epopeya Nacional que culminó el 1º de marzo de 1970, el Instituto Femenino de Investigaciones Históricas inició un movimiento en el sentido de gestionar del Excmo. Gobierno del Brasil que sea restituido al Paraguay el "Libro de Oro" ofrecido al Mariscal-Presidente de la República del Paraguay Francisco Solano López por la mujer paraguaya en 1867.

4º.-El "LIBRO DE ORO" ofrenda particular de la mujer paraguaya al Presidente Francisco Solano López, no puede considerarse como trofeo de guerra, ya que para la confección de dicho álbum, la mujer paraguaya se desprendió de sus joyas y alhajas en gesto heroico y noble.

5º.-El "LIBRO DE ORO" cayó en poder de las fuerzas brasileñas luego de terminar la cruel guerra de 1864-1870 y actualmente es guardado en el Museo Histórico Nacional de Río de Janeiro.

6º.-Han transcurrido más de cien años de la terminación de la cruenta guerra, tiempo suficiente para cicatrizar las heridas dejadas por esa lucha entre pueblos hermanos, que, hoy, unidos marchan hacia una meta común que es el progreso y la felicidad de América.

7º.-Estas sentimientos mueven al Instituto Femenino de Investigaciones Históricas a recurrir al ilustre Gobierno del Brasil para solicitar, como lo hace respetuosamente por intermedio de este documento, que el aludido "LIBRO DE ORO" sea devuelto al Paraguay para que la gran República del Brasil demuestre al mundo y a América su fraterno sentimiento americanista.

8º.-La devolución de esta reliquia histórica del Paraguay, patrimonio de las mujeres, que no constituye botín de guerra será una nueva prueba de solidaridad, buena voluntad, armonía y entendimiento en la empresa común de labrar la verdadera amistad de nuestros países, cuyo símbolo luce el grandioso puente sobre el caudaloso río Paraná.

9º.-La recuperación del "LIBRO DE ORO", que pro-mueve nuestro movimiento tiene dos importantes precedentes:

En 1948, el Gobierno de la hermana República del Brasil por intermedio de su Embajador en el Paraguay Sr. Dr. Don Francisco Negrao de Lima, devolvió al Paraguay dos importantes legajos de documentos referentes a nuestra gesta emancipadora de Mayo, entre los cuales se encuentra el Acta original del primer Congreso Nacional, celebrado el 17 de junio de 1811, y, además el Acto de reconocimiento de la independencia del Paraguay por el Impero del Brasil que se realizó por intermedio del ilustre Don José Antonio de Pimenta Bueno, el 14 de setiembre de 1844 Este último documento fue devuelto por el entonces Ministro de Relaciones Exteriores el Ilsmo. Sr. Dr. Don José Caros Macedo Soares, también entonces Presidente del Instituto Histórico y Geográfico Brasileño. Los testimonios aludidos formaban parte de la rica colección de documentos paraguayos denominada "Visconde de Río Branco", obrante en la Biblioteca Nacional de Río de Janeiro.

10º.-El movimiento del Instituto Femenino de Investigaciones Históricas tiene el apoyo unánime de la mujer paraguaya, movimiento que también estamos seguras, encontrará apoyo en la mujer brasileña, quien como nuestras heroicas antepasadas supo sacrificarse por defender a su patria.

11º.-La devolución del "LIBRO DE ORO" será una honra para América donde no existen odios permanente que divide a los pueblos. América es el continente de la fraternidad y de la solidaridad. Paraguay y Brasil no deben tener recuerdos que dejen entrever contiendas que han pasado y que ya no pueden servir para separarnos. Es la época que debemos buscar los vínculos que nos sirvan para seguir por la vía del progreso y juntos labrar la grandeza americana.

12°.-El Instituto Femenino de Investigaciones Históricas espera y está convencido que el Excmo. Sr. Dr. Mario Gibson Barbosa sabrá interpretar los sentimientos patrióticos que nos animan al expresar este Memorándum, teniendo en cuenta el amplio espíritu americanista, y, en consecuencia, inter-pondrá sus buenos oficios y su influencia ante el Gobierno del Brasil, para que la devolución del "LIBRO DE ORO" sea una realidad, que una vez más fortalezca los lazos de amistad y fraternidad que unen a nuestros pueblos.

Aguardamos optimistas la contestación de este documento para sellar y consolidar de una vez por siempre la concreción de nuestros ideales americanistas.

Asunción, 3 de mayo de 1971.

MARGARITA VELILLA TALAVERA - Secretaria

IDALIA FLORES G. DE ZARZA - Presidenta

 





Bibliotecas Virtuales donde se incluyó el Documento:
MUJER
MUJER PARAGUAYA



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- Doble Ganador del WSA