PortalGuarani.com
Inicio El Portal El Paraguay Contáctos Seguinos: Facebook - PortalGuarani Twitter - PortalGuarani Twitter - PortalGuarani
LUIS G. BENÍTEZ (+)

  LECCIONES DE HISTORIA AMERICANA - Por LUIS G. BENÍTEZ


LECCIONES DE HISTORIA AMERICANA - Por LUIS G. BENÍTEZ

LECCIONES DE HISTORIA AMERICANA

LUIS G. BENÍTEZ

OBRA RECOMENDADA POR EL

MINISTERIO DE EDUCACIÓN Y CULTO

Imprenta Comuneros S.R.L.

Asunción – Paraguay

166 páginas

 

 

CAPITULO I

 

AMERICA PRE-COLOMBINA

 

            GENERALIDADES

 

            La historia de un país o de un continente es la suma de los acontecimientos ocurridos en su ámbito geográfico y protagonizados por sus habitantes, así sean dichas actuaciones de orden político, social, económico, cultural, etc. Sin embargo, no pocas veces los acontecimientos ocurren fuera de su territorio o son protagonizadas por hombres que no son de su pueblo. Así las actuaciones que culminaron con el descubrimiento, conquista y colonización, y aún otras ocurridas en la época independiente: las intervenciones europeas en Méjico, la anglo-francesa en el Río de la Plata, la agresión japonesa en Pearl Harbor (Hawai) o las investigaciones científicas de Darwin, Humboldt o Bompland, por ej.

 

            EL ÁMBITO AMERICANO

 

            Un aspecto fundamental de la historia guarda relación con el escenario geográfico. El territorio americano abarca casi de un extremo a otro de la Tierra; desde el archipiélago canadiense y Groenlandia en el Círculo Polar Ártico, hasta las islas de la extremidad austral del continente. En consecuencia, el territorio americano ocupa en medida casi proporcional los hemisferios norte y sur, división establecida por la línea del ecuador, el paralelo cero grado. Tan dilatada extensión registra todas las regiones naturales conocidas:

            - la tundra congelada y estéril que ocupa la mayor parte de Groenlandia y las islas del archipiélago canadiense.

            - la floresta, bosques del Canadá, norte de los EE. UU. de América, Méjico, A. Central, y buena parte de la A. del Sur, especialmente la región amazónica, la última gran reserva selvática en el mundo.

            -la montaña, representada por la gran cadena que parte de Alaska y siguiendo la costa occidental, se proyecta hasta la extremidad meridional del continente, con diversos nombres: Montañas Rocosas, Sierra Madre y Cordillera de los Andes. Con sus grandes mesetas o altiplanicies en Méjico, Colombia, Perú y Bolivia; y asimismo, con algunos extensos desiertos adyacentes, en el sur oeste de los EE. UU. de América, Perú y Chile.

            Otras cadenas montañosas, de menores proporciones, se extienden hacia la costa oriental: los Montes Aleganíos o Apalaches en los EE. UU. de América, la Cordillera Central en el Brasil, con ramificaciones hacia el Paraguay a través de las Cordilleras de Amambay - Mbaracayú, las Serranías de Caaguazú, etc.

            - las praderas; extendidos y fértiles campos en los EE. UU. de América, el Brasil, Paraguay, Uruguay y Argentina. Bosques y praderas constituyen el hábitat fundamental del hombre americano y su más importante fuente de recursos.

            - los ríos; que integran algunas de las cuencas hidrográficas más caudalosas del mundo: la del Misissippi-Missourí - Ohio, las del San Lorenzo y del Yukón, etc., en América del Norte, las del Amazonas, y del Río de la Plata (Paraná, Paraguay, Uruguay, Pilcomayo, etc.) y otros importantes ríos como el Magdalena, el Orinoco, el Guayas, en la América del Sur.

            Cuencas fluviales complementadas por extensas formaciones lacustres: los grandes lagos del Canadá y los EE. UU. de América, los pequeños pero hermosos de Guatemala y Honduras, el altísimo Titicaca, en la frontera peruano-boliviana, los de Ypacaraí e Ypoa, en Paraguay y los bellísimos del sur argentino: Nahuel Huapí, Argentino y otros.

            Antiguas vías de comunicaciones y fuentes de caza y pesca, hoy día los ríos y lagos americanos se constituyen en poderosas fuentes energéticas y reservorios de sistemas de distribución y regadíos, etc.

            Lógicamente, el continente americano registra también todas las características climáticas conocidas:

            - la polar; en Alaska, el archipiélago canadiense y Groenlandia.

            - la fría; de la tundra y la taiga, barridas por nevadas ventiscas en Canadá, norte de los EE. UU. de América y el extremo meridional sudamericano.

            - la templada; de las regiones intermedias, al norte y sur respectivamente, de la zona tropical; en uno y otro hemisferio.

            - la tórrida: de las regiones tropicales y sub-tropicales, cargadas de humedad.

            - la calurosa y seca de los desiertos.

 

            PERÍODOS DE LA HISTORIA AMERICANA

 

            A los efectos de su estudio y ateniéndose al proceso de su desarrollo, se acostumbra dividir la historia americana en períodos que responden a características definidas, como sigue:

            1. - Período primitivo: abarca desde la prehistoria americana y se proyecta hasta el instante en que estas tierras entran en conocimiento de los europeos. Tiene una duración de unos 10 a 15 mil años.

            2. - Período de los descubrimientos y conquistas: se inicia con los viajes de Colón y se prolonga hasta el final de la conquista. Dura en conjunto algo más de un siglo; es decir, desde fines del siglo XV hasta fines de siglo XVI y comienzos del XVII en algunos casos.

            3.- Período colonial: corresponde a la etapa de organización en el orden político-administrativo, social, económico v cultural. Dura dos siglos, desde fines de la conquista hasta la aparición de las primeras inquietudes revolucionarias.

            4. - Período revolucionario: abarca desde la aparición de los anhelos libertarios, hasta la consumación de la independencia; comprende con algunas excepciones, todo el primer cuarto del siglo XIX. Podría decirse que el período revolucionario está involucrado en el período colonial. Es verdad, pero también es cierto que reúne características tan particulares que lo distinguen con claridad de dicho período.

            5.- Período Independiente: desde la emancipación de las naciones americanas hasta nuestros días.

            La historia americana pre-colombina estuvo condicionada por un factor muy importante: el aislamiento. Durante miles de años el continente estuvo ignorado, aislado por la inmensidad del mar. Su territorio, que se extiende de polo a polo, registra todos los climas; frío, tórrido, tropical, lluvioso y seco. Su flora es riquísima a igual que su fauna; muchísimos ejemplares vegetales y animales son originarios de estas tierras.

            En ese ambiente vivió el hombre americano; aislado de los demás, desarrolló un sistema de vida, una cultura americana.

 

 

            EL POBLAMIENTO DE AMÉRICA

 

            Se puede afirmar que el primitivo habitante de América no es originario de este continente; ha venido de otras tierras:

            - del Asia vinieron hombres de origen mogoloide, que penetraron en América cruzando el estrecho de Bering.

            - otros grupos vinieron de la Polinesia a través del Océano Pacífico, llegando a la costa occidental de la América Central y de la América del Sur,

            - por último, habrían venido australianos a la extremidad austral del continente, (Tierra del Fuego).

            A la llegada de los españoles, el hombre americano tendría una antigüedad de 10 a 15 mil años. Las sucesivas oleadas inmigratorias poblaron todo el ámbito americano y se formaron pueblos, familias y tribus, con una diversidad de lenguas y costumbres. La antropología reconoce la existencia de una raza americana o cobriza. Algunos de los pueblos importantes eran:

            - Esquimales y aleutas; pueblos árticos, culturalmente muy diferenciados de todo otro pueblo americano. Tienen ciertas características comunes con pueblos del norte asiático. Aún hoy ocupan desde las islas Aleutianas hasta Groenlandia y son nómadas.

            - Atapascos, apaches, navajas e iroqueses; ocupaban desde las selvas canadienses hasta las praderas de los EE. UU. Ellos, con los Algonquinos, siux-cheyenes, arapajos y shoshones, son los pieles rojas, que ocupaban la mayor parte de las praderas norteamericanas, integrando numerosos grupos.

            - Uto-aztecas y otomí-mangues; estas grandes familias con sus numerosas tribus, ocupaban todo el sur de los Estados Unidos, Méjico y América Central y hablaban dialectos que pertenecían a una lengua común.

            - Mayas; familia que ocupaba la península de Yucatán, Guatemala, Honduras, El Salvador; llegó al más elevado grado de civilización en el Nuevo Mundo.

            - Antillanos; integrados por los siboney-tainos, lucayos y caribes; indóciles y bravos defensores de sus territorios.

            - Arawak o arauacos; esta gran familia ocupaba una inmensa región, desde las Antillas hasta el Chaco Boreal, y constituye una de las ramas lingüísticas más importantes, emparentada con la lengua guaraní.

            - Chibchas o muiscas; su centro estaba en una área que abarcaba Colombia y Ecuador, extendiéndose algunos grupos por América Central.

            - Quéchuas y aymarás; pertenecen al llamado grupo andino; los uro-aymarás son más antiguos y les cupo civilizar a los quéchuas, pero fueron sometidos por los incas.

            - Incas; a la llegada de los europeos ocupaban desde Ecuador al norte de Chile y Argentina, incluyendo a Perú y Bolivia.

            - Diaguitas o calchaquíes; ocupaban el norte argentino.

            - Tupí-Guaraníes; esta gran familia ocupaban una región muy extensa, desde la amazonia hasta las inmediaciones del Río de la Plata, y del Atlántico a los Andes. Su lengua es armoniosa y expresiva. Aunque guerreaban constantemente entre sí, en general ofrecieron escasa resistencia a los conquistadores europeos.

            Otros pueblos sudamericanos, la mayoría independientes unos de otros, en el Chaco: guaicurúes, payaguaes o agaces, mbayaes, cadigueos; guerreros temibles todos, fueron prácticamente exterminados. Hacia el Río de la Plata; timbues, querandíes, bohanes, charrúas y pampas; en la extremidad del continente los onas y en Chile los araucanos.

            En general, la organización social de los pueblos indígenas americanos era notoriamente igualitaria: la poligamia estaba generalizada. Las viviendas de los pueblos selvícolas y sedentarios eran chozas de troncos o ramas y paja. Los pueblos de las praderas utilizaban armazones de madera revestidos de pieles de búfalos o bisontes en la América del Norte; de animales menores como el jabalí, venado o felinos y los cuadrúpedos andinos, en la América del Sur.

            Su economía o medio de vida estaba condicionada por los respectivos hábitat o zonas de ocupación. Como eran casi todas nómadas estaban todavía en la época recolectora, vivían de lo que el medio les proporcionaba mediante la caza, la pesca y los frutos de las florestas. Sólo los pueblos sedentarios conocían la agricultura, con productos muy valorados: maíz, mandioca, papa, batata, calabaza, algunas legumbres, maní, aguacate, tomate, piña, cacao. Otros productos de origen americano, muy valiosos aunque no comestibles, son el caucho, el tabaco, la yerba mate, el algodón, entre otros.

            En general, los pueblos presentaban una organización política muy rudimentaria; apenas grupos tribales mandados por caciques. La guerra era muy frecuente, por disputas de territorios y otros afanes de hegemonía. Los pueblos que a la llegada de los europeos mantenían una extensa dominación; aztecas e incas, por ej. lograron la preeminencia por la fuerza de las armas.

            En cuanto a religión, todos los pueblos eran politeístas; sus dioses eran las fuerzas de la naturaleza: el Sol, la Luna, el trueno, la lluvia; animales y aún objetos.

            La artesanía indígena dio muestras de muy bonitas producciones en cerámica, tejidos, cestería, tallados y trabajos en metales: oro, plata y cobre.

 

 

 

            LAS CIVILIZACIONES SUPERIORES

 

            Los pueblos indígenas americanos, presentaron niveles de civilización muy diferenciados. Aztecas, mayas e incas fueron pueblos de grandes contrastes: de notables conocimientos y logros materiales y de bárbaras costumbres; así la práctica de sacrificios humanos por motivos religiosos, por ej.

 

            1.- ORGANIZACIÓN POLÍTICA

 

            Poder centralizado y absoluto, dominación impuesta por la fuerza de las armas, eran la norma.

            - entre los aztecas; de origen humilde, del grupo méxica o tenochca, se revelaron como guerreros temibles; su capital fue Tenochtitlan, en una isla del lago de Tezcoco, donde hoy está la ciudad de Méjico. Su preeminencia y dominio sobre los otros pueblos, cimentaron sobre su poderío militar. Desde muy joven preparaban a los varones para la guerra, mediante severos y constantes ejercicios. El grupo azteca ejerció una tiránica dominación sobre otros pueblos del territorio mejicano. Sin embargo, algunos grupos escaparon a esa dominación; ellos fueron los tlascaltecas y los tarascos, por ej., enemigos declarados de los aztecas y valiosos aliados de los españoles durante la conquista.

            La organización política azteca era muy centralizada, en torno de un Emperador cuya autoridad era absoluta y divina y llevaba una vida fastuosa, con innúmeros servidores. Vivían en palacios impresionantes por su grandeza y esplendor, con notables jardines botánicos y zoológicos, que causaron admiración a los conquistadores.

            Además de Tenochtitlan, otras ciudades importantes eran Teotihuacan, Tula, Cholula, por ej.

            - entre los mayas; el escenario más importante de los maya - quiché fue la península de Yucatán y la actual Guatemala; su organización política tuvo los caracteres de ciudades estados confederadas; es decir, carecían de una organización política centralizada. Es posible que esa misma circunstancia de estructuras descentralizadas, haya contribuido a la desintegración política de los mayas; el pueblo que en opinión de la crítica especializada, llegó al más elevado grado de civilización en América pre -colombina.

            Las más importantes ciudades mayas eran: Uxmal, Copán, Tikal, Chichen - Itzá y docenas más, las que al tiempo del descubrimiento del continente, se hallaban abandonadas, cubiertas de la exuberante selva tropical. Tanto, que no pocas de esas ciudades permanecieron ocultas e ignoradas por años.

            - entre los incas; éstos llegaron a una preeminente posición tras dominar a otros pueblos más antiguos; los chimús, los nazcas, los quéchuas y aymarás. Todos estos pueblos habían desarrollado la llamada civilización pre-incaica. Los incas extendieron y afirmaron su señorío en el amplio y agreste territorio que hoy constituyen Ecuador, Perú, Chile, Bolivia y el norte argentino. Establecieron su capital en Cuzco, con otras importantes ciudades como Cajamarca y Túmbez, por ej.

            La centralizada organización política tenía como figura dominante al Emperador o Inca, apoyado en el poderío y la incondicional adhesión del ejército. La movilidad y capacidad operativa del ejército estaban apoyadas en las magníficas carreteras empedradas y en las fortalezas o pucaras; aquéllas llegaban a los puntos más importantes del imperio integrando una verdadera red de comunicaciones, y éstas, también depósitos de víveres y armas, estaban establecidas en lugares estratégicos, junto a las carreteras.

 

            2.- ORGANIZACIÓN SOCIAL

 

            La desigualdad entre los diversos grupos era la norma, como asimismo el politeísmo como creencia y práctica religiosa.

            - entre los aztecas; no todos los habitantes eran iguales en derechos y obligaciones; la estructura social estaba basada en la división por categorías. Así, había una aristocracia gobernante o nobleza; una clase sacerdotal de gran influencia, porque eran los intérpretes de la divinidad; el pueblo y los esclavos, generalmente prisioneros de guerra. La organización familiar se basaba en el matrimonio, pero era practicada la poligamia. Los grupos sociales o clases denominados calpulli, constituían unidades agrarias, cuya finalidad era la producción de la tierra.

            Los aztecas fueron eminentemente politeístas y acostumbraban ofrecer a sus dioses sangrientos sacrificios humanos. El dios principal fue Quetzalcoalt, igualmente venerado por los mayas; también rendían culto a los astros y fuerzas de la naturaleza como la lluvia, el agua, el aire y el fuego. Sus dioses representaban por grotescas figuras esculpidas en piedras; así por ej., la serpiente con plumas. Para las ceremonias públicas de carácter religioso, construyeron verdaderas ciudades con impresionantes monumentos de piedra. Así Teotihuacan, con sus pirámides al Sol, a la Luna, al dios de la Guerra (Mexictli) etc. La clase sacerdotal en función de intérpretes de los dioses, era objeto de profundo respeto y acatamiento.

            - entre los mayas, la constitución social era similar a la de los aztecas. La religión maya también era politeísta y ofrecían a sus dioses sacrificios humanos, especialmente die niños.

            - entre los incas, tampoco existía igualdad social; su población estaba agrupada por categorías, al igual que aztecas y mayas. La organización familiar se basaba también en el matrimonio y practicaban igualmente la poligamia. Los núcleos o agrupaciones de familias integraban unidades agrarias denominadas ayllu, los que además de producir bienes económicos constituían eslabones de organización política.

            Los incas eran igualmente politeístas; sus dioses principales eran el Sol, la Luna y fuerzas de la naturaleza. Practicaban sacrificios humanos y de animales y mantenían sacerdotes y núbiles o vírgenes encargadas del culto en los grandes templos.

 

            3.- ECONOMÍA

 

            La agricultura era la actividad económica fundamental. La caza ocupaba un lugar muy importante, pues toda la provisión de carne de aves y cuadrúpedos provenía de esta actividad; la pesca tenía su aporte. Rudimentaria era la industria, en cuanto a transformación de bienes de consumo, pero muy interesante en cuanto a la transformación de piedras y metales, en objetos de arte y artesanía.

            - entre los aztecas, la agricultura estaba muy organizada y a cargo de unidades socio - agrarias denominadas calpulli. Sus cultivos regaban mediante acueductos, porque la mayor parte de su territorio era árido. Es típica institución azteca un sistema de notable rendimiento llamado cuatequil, que consistía en turnos obligatorios de trabajo a que estaban sometidos los vasallos y pueblos vencidos.

            Sus productos más importantes eran el maíz, el plátano o banana, la vainilla, el mamón, el tomate, porotos o frijoles, la quínua, al aguacate, el cacao para la producción del chocolate, el maguey para la producción del pulque, una bebida de uso muy generalizado, el ají; carne de aves y cuadrúpedos era proveída por la caza. Con los productos agrícolas, de la caza y la artesanía, practicaban un apreciable comercio entre los pueblos vecinos, por una extensa red vial.

            - entre los mayas estaba extendida la agricultura azteca y sus productos.

            - entre los incas fue también la agricultura la base de su economía. Para ello tuvieron que superar los inconvenientes de su agreste territorio, con verdadero ingenio que son muestras de su notable capacidad. Así, construyeron terrazas en las laderas de las montañas, regadas mediante extensos y perfectos acueductos, verdaderas maravillas de ingeniería. Los incas impusieron un sistema de turno obligatorio de trabajo, denominado mita, mediante cuyo régimen realizaron grandes obras públicas, a cargo de los pueblos sometidos. En general, las mismas especies conocidas por los aztecas, eran conocidas también por los incas, con escasa diferencia; la papa es casi exclusivamente incaica, como el cacao y el maguey son más propios de los aztecas.

            Los incas, quéchuas, aymaras y diaguitas, fueron los únicos de los primitivos pueblos americanos que utilizaron los cuadrúpedos; la alpaca, el guanaco, la llama y la vicuña, como auxiliares de su economía; para el transporte de carga, como fuente de alimento, carne y leche, cuero para vestuario y lana para tejidos.

 

            4.- CIENCIA, ARTE Y CONOCIMIENTOS

 

            Admirables eran los conocimientos científicos de que era poseedores algunos pueblos americanos, si se considera que no poseían apoyo académico e instrumental. Y espectaculares fueron sus logros artísticos y materiales, especialmente en arquitectura, escultura, relieve y artesanías en piedras y métales preciosos. Sus herramientas fueron necesariamente rudimentarios y deficientes, pues no conocían sino el bronce.

            - entre los aztecas, la habilidad y el conocimiento en todos los órdenes, fueron admirables. Sus obras arquitectónicas y de ingeniería; palacios, templos y pirámides, construidos de piedra que aún se conservan, son impresionantes por su grandeza, simetría y perfección. Los aztecas han dado muestras de armoniosos trabajos con plumas de aves, de orfebrería en metales y piedras preciosas. Hábiles en la confección de tejidos de algodón y otras fibras vegetales, usaron la cochinilla y el índigo para la extracción de tintes con que coloreaban sus telas. También sobresalieron en la fabricación de cerámica; ánforas, vasijas y urnas funerarias, notables por sus formas, dibujo y colorido, la pintura desarrollaron sobre cuero y tela, con vistoso colorido y buen gusto. La escritura azteca era ideográfica, con signos y figuras que tenían sus significados. El año azteca constaba de 365 días, divididos en 18 meses de 20 días, a los que agregaban 5 días. El mes tenía 4 semanas de 5 días. Existía además el calendario ritual, de 260 días, llamado también libro del sol. El siglo azteca tenía 52 años.

            - entre los mayas, en general desarrollaran con mayor amplitud y perfección el modelo de la civilización azteca; especialmente en escritura, matemáticas, escultura, arquitectura y astronomía. Todo ello deducido de los objetos hallados en sus admirables ciudades, despobladas y abandonadas ya al producirse el descubrimiento.

            - entre los incas, las matemáticas fueron sin duda de avanzado conocimiento y como aplicación, la ingeniería y la arquitectura, con la más perfecta y extensa red vial conocida en América; eran calzadas de piedra que aún subsisten, que intercomunicaban las regiones del dilatado imperio. También extensos y perfectos acueductos para el regadío de sus cultivos, en las terrazas formadas en las laderas de las montañas. Sus grandes palacios y fortalezas, sus ciudades de impresionantes construcciones de piedras encastradas sin argamasa, que han resistido el abandono, la intemperie y los siglos; así Machu-Pichu, Cuzco, Cajamarca. Escultura y tallado en piedras, orfebrería en metales preciosos, tejidos de lanas de vicuña, alpaca, llama y plumas, etc. y cerámica de admirable perfección simétrica, dibujo y colorido.

            No es posible hablar de una escritura de los incas; ellos usaron un sistema de cuerdas anudadas y coloreadas, el quipu, para la transmisión de noticias.

 

            LAS CIVILIZACIONES INTERMEDIAS

 

            LOS CHIBCHAS O MUISCAS

 

            Este pueblo de igualitarios grupos sociales, se extendía desde América Central hasta los llanos colombianos al este y Ecuador al sur. Sus más representativos grupos socio-políticos se encontraban en territorio hoy colombiano. Los chibchas o muiscas carecían de unidad política; así, al tiempo del descubrimiento y conquista existían tres grupos o núcleos mayores y otros menores. En el lago Guatavita se realizaba la consagración del jefe o Zipa, quien aparecía resplandeciente ante sus súbditos, cubierto con polvo de oro. Esta ceremonia semi religiosa y otra similar que se realizaba presumiblemente en el lago Titicaca, originaron la célebre leyenda de El Dorado, uno de los grandes atractivos de la conquista.

            En agricultura, base de su economía, alcanzaron considerable desarrollo y perfección, habiendo construido admirables canales para los regadíos. Sus valores fundamentales eran comunes a los de otros pueblos.

            La figura central de su religión o creencia fue Bochica; apóstol del bien, representado por el Sol, siendo su adversaria Chie, la Luna. La casta sacerdotal tenía a su cargo el mantenimiento del culto, que registraba sacrificios humanos, preferentemente de niños.

            Los chibchas estaban en una inferior escala de conocimientos y logros, con respecto a aztecas, mayas e incas. No construyeron templos ni palacios, ni utilizaron piedras en sus construcciones; sus casas fueron de madera o palma. Su alfarería era elegante de forma y rica en colorido. Sobresalieron especialmente en trabajos artesanales en oro: collares, brazaletes, aros y otras piezas de adorno y ostentación; realizaron también tallados en piedra y tejidos de vistosos coloridos.

 

            LOS GUARANÍES

 

            Estaban integrados por tribus semi-sedentarias caracterizadas por sus constantes migraciones, es decir movimientos a grandes distancias. Por eso estaban diseminados en un inmenso territorio que abarcaba desde el Caribe hasta el estuario del Río de la Plata, y desde el Atlántico hasta las estribaciones andinas en algunos casos. Mas no debe creerse que tan vasta extensión estuviera bajo su exclusivo dominio. En el mismo territorio habitaban otros pueblos nunca sometidos a los guaraníes; los ge y los mbayá, entre el Atlántico y el río Paraguay, en el actual territorio brasileño; los arawacos, entre el Caribe y el Chaco; los guaycurú en el Chaco; los payaguá a lo largo del río Paraguay, los charrúas en la banda oriental del estuario del Río de la Plata, entre otros.

            Poco o nada se sabe del origen de los guaraníes. Lo único sabido son sus migraciones constantes, lo que hizo que una extensa región estuviera poblada por grupos de la gran familia lingüística tupí-guaraní. En el Paraguay propiamente dicho, cabe citar a las siguientes parcialidades guaraníes:

            - los carios, por lo general en la banda izquierda del río Paraguay, aproximadamente desde el Jejuí hasta el Paraná.

            - los guairá, en una y otra banda del río Paraná; desde el norte de los saltos que guardan su nombre, hasta las inmediaciones de la isla Yacy-retá.

            - los itatines, en la banda izquierda del río Paraguay, al norte del río Apa.

            - los guarambaré, entre las cordilleras de Amambay-Mbaracayú y los ríos Ypané-Jejuí.

            - los chiriguanos, en al fondo del Chaco, entre el río Parapití y las estribaciones andinas; habían llegado hasta allí en sus tantas migraciones. Sus descendientes fueron encontrados allí por tropas paraguayas cuando la guerra del Chaco: La toponimía de esos lugares registran numerosas nominaciones propias de su idioma: Yrendague, Ysyporendá, Mandyjupecua, Carandayty, etc.

            - los guayakí, en los bosques del Caaguazú; una de las últimas parcialidades de auténtica estirpe guaraní, según el ilustrado etnólogo paraguayo León Cadogan.

 

            En lo político, carecían de Estado organizado; constituían un conglomerado de tribus independientes regidas por caciques y unidas solamente en casos de peligro. Para las guerras era designado un mburuvichá o jefe, un Consejo de Ancianos dictaminaba en los casos graves.

            En lo social, cabe resaltar la igualitaria posición de sus miembros, sin grupos privilegiados. Su régimen familiar se basó preferentemente en el matrimonio poligámico y con evidente preponderancia del hombre practicaban él divorcio. Mientras la mujer atendía el kokué o chacra, los quehaceres de la casa y el cuidado de los niños, el hombre atendía la caza y la pesca, el adiestramiento de los jóvenes y la defensa de la tribu. A los jóvenes se les educaba a ser sobrios, sufridos, estoicos y dóciles a los jefes o mburuvichá, y se les adiestraba en el uso de las armas de la tribu: la macana y la maza, el arco y la flecha. Los guaraníes eran excelentes nadadores y temibles guerreros. Como tales rendían culto al valor; numerosos cronistas coloniales dan fe de una práctica generalizada entre los guaraníes: sacrificaban y comían a los prisioneros enemigos que habían dado muestras de valor en los combates, en la creencia de que así se les trasmitirían sus virtudes.

            En razón de sus constantes migraciones, los guaraníes no tuvieron ciudades sino precarios rancheríos denominados tava; sus viviendas, las más de las veces colectivas, se denominaban tapyi u oga, en cuyas construcciones usaban tronco, rama o caña y paja. A modo de vestimenta usaban pequeños y rudimentarios tejidos de algodón u otras fibras, con los que se cubrían las zonas sexuales. No pocas veces andaban desnudos, según atestiguan los primeros cronistas europeos.

            Sus creencias religiosas concebían a un ser supremo, Tupá; representado al parecer por el trueno, nunca por figuras grotescas como entre los aztecas, por ej., ni por ídolos o animales. También formaba parte de su idea religiosa la existencia de un espíritu maligno, Añá. Es de destacar que los guaraníes no practicaban los bárbaros ritos de sacrificios humanos, como muchos de los grupos indígenas americanos. No obstante, practicaron la antropofagia. Es mucho pretender que, tuvieran una definida idea de un Dios único; pero en espíritu, su religión es de esencia monoteísta. Además, es notable la similitud de algunas ideas guaraníticas con la católica; así Dios-Tupá, Gloria o cielo-Ybaga, Demonio-Añá.

            La economía de los guaraníes se basó preferentemente en la caza y la pesca y en el aprovechamiento de los frutos de la rica floresta de sus dominios, lo que quiere decir que estaban aún en la etapa recolectora. No obstante, practicaban la agricultura; la que, pobre en técnica e implementos, fue sin embargo pródiga en frutos: maíz, maní, mandioca, calabaza, poroto, batata, algodón. Tal vez su único implemento haya sido el yvyra hakuá, una madera aguzada para horadar la tierra y plantar la semilla. Desde luego la flora de sus dominios fue la base o fuente de la casi totalidad de valores utilitarios; el referido yvyrá hakuá, la makana, el arco y la flecha, sus armas; el takuapí para el mimby, su instrumento musical; troncos, bejucos, lianas, ramas, para sus tapyi, etc.

            La civilización material de los guaraníes fue muy pobre; no construyeron palacios, fortalezas, pirámides, templos, carreteras, acueductos, etc. ni produjeron filigranas, tejidos primorosos, joyas y otras artesanías artísticas. Apenas si produjeron alfarería; vasijas y urnas funerarias, cestería de bejucos y fibras vegetales y tejidos rudimentarios. Carentes de calendarios, su guía fue la Luna, cuyo movimiento rotativo señaló la cronología guaraní. Así, por ej. peteí o mokoi jacy en el tiempo, significaba uno o dos meses.

            Y tuvieron pleno dominio de la flora y fauna de su territorio; conocían las propiedades alimenticias y medicinales de las plantas. En tal conocimiento cimentó su farmacopea, que legó a la ciencia moderna como aporte invalorable de su cultura. Debe saberse que en el Nuevo Mundo, ninguna como la botánica de los guaraníes ha dado nombre a tantas especies. Pero el gran legado de los guaraníes es su idioma, de armoniosa precisión y riqueza de expresión.

 

            TRASCENDENCIA DE LA CULTURA INDÍGENA

 

            Pese a la circunstancia de haber sido dominada, avasallada, a partir de la conquista y colonización, los elementos culturales indígenas se han proyectado con fuerza en todas las naciones americanas, pero especialmente en Perú, Méjico, Bolivia y Guatemala. Esos valores culturales, como sus factores negativos, se han trasmitido a través de generaciones hasta nuestros días. Por ej. las típicas expresiones artísticas de mejicanos y peruanos, constituyen exacta muestra del patrón artístico de sus antepasados. En el Paraguay, toda la farmacopea casera, usos y aplicaciones de medicina de origen vegetal y animal, en el tratamiento de muchísimas enfermedades, constituyen con el idioma, las más valoradas herencias de la civilización guaraní.

            La civilización americana, aún las consideradas superiores, eran muy inferiores a la civilización media de Europa y sus conocimientos estaban estancados. Faltaban teóricos, libros y centros de estudios, es decir apoyo académico; los conocimientos eran frutos de la tradición y de la experiencia. No conocían la pólvora, el hierro, la rueda, etc. Pero no puede negarse la perfección de sus muchísimos conocimientos y la grandeza de sus logros materiales.

 

 

 

 

ÉPOCA INDEPENDIENTE (I)

- AMÉRICA DEL NORTE, CENTRAL E INSULAR –

 

            Producida la independencia, los países americanos se abocaron a la organización nacional en todos los órdenes, pero especialmente en lo apolítico, social, económico y cultural. Y no pocas tuvieron que sobrellevar graves anarquías, guerras civiles y guerras internacionales.

            Los países que adquirieron mayor notoriedad, por la suma y calidad de los logros que se señalan fueron:

 

            1) LOS EE. UU. DE AMÉRICA

 

            LA EXPANSIÓN HACIA EL OESTE

 

            Constituyó una verdadera epopeya civil, que les permitió someter la inmensa naturaleza de serranías, bosques, praderas, ríos y desiertos, y extender las fronteras hasta el Pacífico.

            La expansión requirió el inevitable sacrificio de vidas humanas, en la lucha de la civilización contra la naturaleza, los animales salvajes e indios bravíos. Vanguardia de la expansión constituyeron los cazadores, luego los granjeros o agricultores, cazadores también por imperativo de las circunstancias. Y con ellos, los forjadores de las primeras comunidades sociales: comerciantes, médicos, abogados, sacerdotes, prestamistas y oportunistas, aventureros todos. Grupos así, heterogéneos pero emprendedores, fueron estableciendo fundaciones, ciudades importantes hoy.

            A medida que la frontera iba dilatándose hacia el oeste, los colonizadores iban abriendo rutas que cruzando la cadena de los Apalaches, por el centro y el sur, comunicaban la costa atlántica con los fértiles valles de Ohio, Indiana, Kentucky, etc., hasta el Missisippi, primero y más allá luego.

            Hacia el norte se construyó ya en 1825, el gigantesco canal Eríe que permitía una comunicación entre el Atlántico y los Grandes Lagos, con barcos de regular tonelaje y muy especialmente barcazas de transporte. Dicho Canal, une Búfalo sobre el Erie, con Albany sobre el Río Hudson; cubre una distancia de 580 kilómetros y ejerció una notable gravitación para la expansión hacia el noroeste y la aparición en consecuencia, de nuevos y vigorosos centros poblacionales en la región. De la habilitación del Canal Erie, derivó la utilización intensiva de la vía fluvial: el Hudson, el Ohio, el Mississipi y sus afluentes.

 

            ADQUISICIONES TERRITORIALES

 

            Apenas iniciada la vida independiente, los dirigentes políticos norteamericanos comenzaron a poner en práctica una política de expansión, absorción y dominación, que hizo posible la incorporación de extensos territorios, a saber:

            -la Luisiana; en una y otra banda a lo largo del Missisipi, hasta su desembocadura, adquirida de Francia en 1803.

            - la Florida; adquirida de España en 1819.

            - Texas, Nuevo Méjico, Nevada, Arizona, California, arrebatados a Méjico como consecuencia de una guerra preparada ex profeso, mediante la intervención de colonos americanos en Texas, que habían reclamado la anexión a los EE. UU. de América. La guerra duró de 1845 a 1848, y como una graciosa concesión, los EE. UU. de América pagaron como indemnización la suma de 15 millones de dólares.

            - Oregón y adyacencias, adquirido mediante un acuerdo con Gran Bretaña en 1846.

            - Alaska, adquirido de Rusia por 7.200.000 dólares, en 1867.

            - Hawái, anexado en 1893. Alaska y Hawái fueron admitidos como Estados en 1958; desde entonces, los EE. UU. de América integran 50 Estados.

            - Puerto Rico y otros territorios, anexados como consecuencia de la guerra hispanoamericana en 1898.

 

            LA GUERRA CON INGLATERRA

 

            En 1812 desembocó en guerra un largo conflicto en las relaciones entre ambos Estados. Las causas fueron varias, a saber:

            - los problemas de límites, motivados especialmente por la constante expansión norteamericana hacia la región de los Grandes Lagos, donde chocaba con las posesiones inglesas.

            - el resentimiento de los americanos contra los colonos ingleses del Canadá, a quienes acusaban de alentar la resistencia de los indígenas, mediante la provisión de armas, contra la expansión americana hacia el oeste.

            - las reiteradas violaciones de la soberanía americana por parte de la marina británica, empeñada en abordar sus unidades y efectuar reclutamientos forzosos de tripulantes.

            - la decisión americana de suspender el comercio con Inglaterra.

 

            Desatado el conflicto, la marina inglesa bloqueó importantes sectores de las costas americanas, frente a Boston y Nueva Orleans. Washington fue bombardeada y luego ocupada. Pero los ingleses fracasaron en los operativos terrestres. En 1814 el acuerdo de Gante puso término al conflicto.

 

            LA GUERRA CIVIL

 

            Los Estados del norte, eran eminentemente industriales, no utilizaban esclavos, sino obreros y trabajadores calificados; eran pues anti - esclavistas. En   el sur, la riqueza y la prosperidad de las colonias descansaban en la agricultura. Por convicción de sus habitantes, aristócratas, y por necesidad, el cálido clima de la región requería esclavos para el agotador trabajo agrícola, los sureños fueron esclavistas.

            Cuando el presidente Lincoln decretó la abolición de la esclavitud, los Estados sureños se separaron de la Unión y enseguida sobrevino la guerra, que duró de 1861 a 1865. La superioridad de los norteños en población y recursos materiales, se hizo sentir en la contienda. Cuando terminó la guerra con lo victoria norteña, las colonias del sur estaban agotadas, sus cultivos arrasados, sus ciudades destruidas, sus vías de comunicaciones y de transportes desarticuladas e inutilizadas.

            La esclavitud fue abolida y el gran paladín de la libertad de los esclavos, Abraham Lincoln, asesinado por un fanático esclavista, en abril de 1865. La población de color sigue soportando en el sur, injusticias, arbitrariedades y atentados; el negro es desapreciado y vejado. La idea de la discriminación racial está hondamente arraigada entre los blancos del sur. Contra esa convicción han chocado todas las tentativas de un cambio de conciencia, si bien él mismo gobierno federal ha dictado una serie de medidas en pro de una integración pacífica.

            La Nación Unificada. Terminada la guerra, dejó de existir el Norte o el Sur como sectores aislados o independientes y surgió la nación unificada como la más importante consecuencia de la guerra. Ello fue posible mediante una admírale organización política basada en la federación de Estados y la permanente práctica de la democracia. El norteamericano está muy identificado con el principio del acatamiento a la decisión de mayoría. Asimismo, el principio de autoridad regulado por la ley, es soberano.

            Las luchas cívicas que movilizan toda la ciudadanía, ofrecen el espectáculo magnífico de un civismo ejemplar. Si el elegido da muestras de incapacidad en el ejercicio del cargo, será combatido por la prensa u otros medios legales, pero rebelión contra su autoridad legítimamente constituida, ni pensarlo.

            La libertad de prensa y de creencia no tienen restricciones, salvo aquellas que imponen la seguridad nacional; sin que ello signifique el uso arbitrario de dicho argumento para restringir las libertades ciudadanas.

 

            DESARROLLO ECONÓMICO

 

            Sin desconocer las plantas industriales del norte, puede decirse que la economía norteamericana fue fundamentalmente agrícola hasta la guerra civil. Ese sangriento conflicto posibilitó transformaciones en todos los órdenes.

            La agricultura, mediante la incorporación de innúmeras máquinas: arados, cultivadoras, trilladoras, cosechadoras, desgranadoras, segadores, desmotadoras, etc., en su mayoría inventada y producida en el país. Asimismo, mediante la aplicación de la investigación científica, selección y mejoramiento de especies, abonos, fertilizantes, insecticidas, plaguicidas etc. Como en ningún otro país del mundo, los EE. UU. de América desarrollaron una agricultura científica, con inigualado resultado cualitativo y cuantitativo.

            La industria: colmo resultado de la explotación de los ingentes recursos naturales, minerales, vegetales y animales. Y asimismo como resultado de la producción científica: plásticos, sintéticos, medicinales, etc. y una variadísima producción de tecnología aplicada, que ha convertido a la industria norteamericana en la más variada y perfeccionada del mundo moderno.

            No debe desconocerse el aporte de numerosísimos investigadores e inventores: Thomás Alba Edison, Roberto Fulton, Benjamín Franklin, Jorge Westinghouse, Jorge M. Pullman, Samuel Morse, Alejandro Graham Bell, Elías Howe, Orville y Wilbur Wright. Y asimismo, de numerosos pioneros de la industria privada, que pusieron las bases a la gran industria, de inigualado desarrollo con el correr del tiempo. Ellos fueron, entre otros: J. Rockefeller en la explotación petrolífera y en la banca; J. R. Morgan y C. y W. H. Vanderbilt; en la banca y los ferrocarriles; A. Carnegie en la industria del acero; Ph. D. Armour y Swift en la industria de la carne; B. F. Goodrich en la industria del caucho; H. Ford en la industria automotriz.

            Vías y Medios de Comunicaciones. Otros de los factores determinantes del extraordinario desarrollo socio-económico y cultural de los EE. UU. de América, son sus vías y medios de comunicaciones. A las vías terrestres, los canales y vías fluviales de la primera época, se sumó rápidamente el ferrocarril, a través de una extensísima y cada vez más perfeccionada red interna que intercomunica el Atlántico con el Pacífico mediante los transcontinentales. Pero ninguna vía de comunicación tan extendida como las rutas asfaltadas; la más densa y perfeccionada red vial que se conoce.

            La facilidad del transporte marítimo, recibió un incremento excepcional con la construcción, ya en la segunda mitad del presente siglo, del canal del río San Lorenzo, la más grande obra de ingeniería del presente siglo, realizada en colaboración por los gobiernos de Canadá y EE. UU. de América, convierte a las ciudades sobre los Grandes Lagos en verdaderos puertos marítimos. La marina mercante norteamericana es de las de mayor capacidad en el mundo y sus puertos, sobre ambos océanos, son los de mayor capacidad y eficiencia.

            A todo ello hay que agregar el transporte aéreo con apoyo de infraestructura moderna, vasta y eficiente: aeropuertos, aparatos, equipos y personal técnico como en pocos otros países.

            Sus compañías aéreas: Panamerican, Branif, Trans World Airways, United, por ej., cubren todos los continentes.

 

            LA INMIGRACIÓN

 

            Como en ningún otro país de nuestro continente, se observa en los EE. UU. de América la influencia de la inmigración. Colonizado por hombres de una gran diversidad de origen y de reconocidos valores, los EE. UU. ofrecen la variedad de un verdadero mosaico humano.

            La absoluta mayoría de la corriente inmigratoria provenía de países de profunda y sólida tradición cultural. Alemania, Inglaterra, Francia, Italia, Austria. Esos atributos, complementados en el Nuevo Mundo, dieron por resultado el norteamericano; de profundas convicciones ciudadanas, de civismo ejemplar e imbuido de una noción de responsabilidad y sentido de solidaridad admirables.

            Se critica al norteamericano su afán de lucro, su sed de riquezas; pero es innegable que ese afán ha llevado a los norteamericanos, a la envidiable prosperidad y bienestar de que disfrutan. Es de destacar que su ambición de bienestar, de una vida siempre mejor, hace del norteamericano un trabajador sin prejuicios, que sabe sacar el máximo rendimiento del tiempo y de las posibilidades. Ejemplo digno de ser imitado en muchos o en todos los países de América Latina.

 

            LA POLÍTICA EXTERIOR NORTEAMERICANA

 

            La doctrina Monroe. En el Congreso de Verona (1822) las monarquías europeas, empeñadas en reivindicar sus privilegios, acordaron ayudar a España a recuperar sus ex colonias americanas. Ante semejante peligro, cuándo el proceso de la independencia en América ni siquiera había culminado, el presidente de los EE. UU. Jacobo Monroe, enunció su famosa doctrina contenida en un mensaje enviado al Congreso de su país en diciembre de 1823. El pronunciamiento advertía que en adelante, el continente americano estaba cerrado a todo propósito de Intervención o colonización europea, y que EE. UU. consideraba lesiva, a su dignidad y peligrosa para su seguridad e intereses,

intervención en cualquier punto del continente americano. A modo de reciprocidad, proclamaba la no intervención de los EE. UU. en los asuntos europeos.

            La doctrina Monroe define una filosofía política: "América para los americanos". En su oportunidad, fue de gran significación para los nuevos Estados la actitud del presidente Monroe. Con el correr del tiempo, se hizo evidente que a la intervención europea iba sucediendo la norteamericana. Puede afirmarse que en el presente, la doctrina Monroe no tiene ya vigencia.

 

            2. - CANADÁ

 

            Al tiempo de su independencia, el Canadá comprendía además de los territorios de la cuenca del río San Lorenzo y de los Grandes Lagos, otros como los de Nueva Escocia, Isla del Príncipe Eduardo, Nueva Brunswick y Vancouver. Luego fue extendiéndose la incorporación de los sgtes. territorios:

            - la Provincia de Manitoba, la Colombia Británica, el Yukón y las Provincias de Alberta y Saskatchewan. Canadá posee dos idiomas: inglés y francés.

            Acompañando a su expansión territorial, Canadá ha perfeccionado su régimen federal de gobierno, su economía y su desarrollo cultural. Su sólida economía se apoya en una agricultura y ganadería muy tecnificadas; siendo el país uno de los más grandes productores y abastecedores de cereales; especialmente trigo, cebada, centeno, avena. La industria canadiense es moderna y variada; incluyendo la producción de máquinas, equipos, energía eléctrica, plásticos y alimentos, pesquería y harina de pescado. Es además, uno de los más grandes productores de madera y sus derivados: celulosa y papel; su muy importante producción mineral: carbón, zinc, cobre, hierro, níquel, molibdeno, oro, plata, plomo e hidrocarburos: petróleo y gases.

            Sus vías de comunicaciones: carreteras, ferroviarias, fluviales, marítimas y aéreas, son modernísimas y enlazan todo el país con el exterior.

 

            3. - MÉJICO, AMÉRICA CENTRAL E INSULAR

 

            Pocos países de América latina con una historia tan azarosa como Méjico en el siglo XIX. En lo interno, el desequilibrio era causado fundamentalmente por la cuestión social. Vale decir, la masa desheredada, india y mestiza, explotada por una clase acomodada y conservadora que incluía el clero. Esta verdadera lucha de clases llena la historia mejicana del siglo XIX y se proyecta a casi todo el primer cuarto del presente siglo.

            Autor de un Plan de Reforma en beneficio de la clase desheredada que constituía la gran mayoría de la población, fue Benito Juárez, la más esclarecida figura mejicana del siglo XIX, quien falleció en 1872 en ejercicio de la Presidencia de la República. Lerdo de Tejada, sucesor de Juárez, inició grandes obras públicas: carreteras, ferrocarriles, etc., que fueron continuadas por el general Porfirio Díaz. Durante su gobierno se incrementaron la agricultura, la ganadería y la explotación minera. Sin embargo, se desatendieron la instrucción pública y los problemas sociales referidos especialmente a la tenencia de la tierra. En consecuencia, la prosperidad solo alcanzó a las clases conservadoras y privilegiadas, como antes de Juárez.

            La reacción contra el gobierno de Porfirio Díaz, desembocó en la llamada Revolución Mejicana, un gran movimiento popular contra la hegemonía de alas clases privilegiadas. El triunfo de la revolución significó la caída del gobierno y la implantación de profundas reformas sacio-económicas; reparto de tierras a los trabajadores, educación popular; programas de salubridad, etc.

            De allí arranca la gran transformación socio-económica y cultural de Méjico, que se proyecta hasta nuestros días. Méjico es uno de los países latinoamericanos de mayor desarrollo socio-económico; con una extendida agricultura y ganadería, variadísima industria y explotación minera, especialmente plata, plomo, mercurio y oro, y una extraordinaria reserva de hidrocarburos, petróleo y gases, una de las mayores del continente.

            También alcanzaron gran desarrollo programas de educación pública en todos los niveles, y promoción de centros culturales y editoriales, de arte y artesanía.

 

            LAS CUESTIONES INTERNACIONALES

 

            En el siglo pasado, Méjico sufrió graves agresiones de las cuales las más notorias fueron:

            - la instigada por colonos norteamericanos establecidos en Tejas, alentada y apoyada por el gobierno de Washington. Los Estados Unidos de América invadieron Méjico y ocuparon su capital en 1846; anarquizado y sin recursos el país, el heroísmo mejicano no bastó para frenar la superioridad norteamericana. Méjico no solamente perdió Tejas; se vió además obligado a entregar los territorios que hoy constituyen Arizona, California, Nuevo Méjico, Nevada, por los cuales recibió una indemnización de 15 millones de dólares.

            - la ejecutada por Inglaterra, Francia y España, que invadieron el país con fuerzas militares con el propósito de percibir deudas. Retirados ingleses y españoles, quedaron los franceses. Napoleón III estableció en el país una monarquía subordinada, con el respaldo de la clase conservadora mejicana. Tal fue el 2° Imperio Mejicano. Para el efecto nombró en carácter de Emperador el príncipe Maximiliano de Austria, quien llegó en 1864. El Pueblo mejicano encabezado por Benito Juárez, se alzó contra la ocupación extranjera, protagonizando otra heroica gesta por la independencia. Acosado por una incesante guerra de guerrillas, el ejército francés en que se apoyaba el Imperio fue finalmente derrotado; Maximiliano fue tomado prisionero y fusilado en 1867.

            No es mucho lo que puede decirse de los Estados centro americanos. Al desintegrarse la Confederación a partir de 1839, los 5 Estados se abocaron a su desenvolvimiento por separado. Pequeños, con escasos recursos, cayeron bajo la influencia de intereses foráneos o de expoliadoras y opresivas dictaduras. Panamá, otro Estado centro-americano, sobrellevó un grave menoscabo a su soberanía, la ocupación norteamericana de la Zona del Canal, que duró 75 años, si bien la construcción del Canal reportó innegables beneficios al país.

            Lo dicho en cuanto a la América Central, es válido para los países de la América insular.

            Haití, de aplastante pobreza, cayó bajo sucesivas dictaduras; la última de Juan Francisco Duvalier, se prolongó por casi 25 años; muerto él en 1971, le sucedió su hijo, Juan Claudio Duvalier.

            La República Dominicana estuvo dominada por más de treinta años por la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo, de cuya situación se ha liberado en los últimos años.

            Cuba, independizado de España en 1902, cayó bajo dominio norteamericano por más de 30 años y enseguida bajo la dictadura de Fulgencio Batista, por otro cuarto de siglo. A ésta puso término en 1958 la revolución organizada por Fidel Castro, que instauró una dictadura comunista, peor que la de Batista y convirtió a la isla en un satélite de Rusia. Tal situación creó una grave crisis, cuando en 1964 el gobierno de los Estados Unidos de América descubrió en la isla poderosas instalaciones de cohetes nucleares rusos. Fue cuando el entonces presidente John F. Kennedy, impuso el bloqueo militar de la isla y obligó a Rusia a retirar sus instalaciones de cohetería.

            El gobierno de Castro, que despertara tantas esperanzas, se convirtió en una tiranía mucho peor que las anteriores, cometiendo atropellos inauditos contra la vida, la dignidad, la seguridad y los bienes de las personas y promoviendo movimientos subversivos en otros países. Cuba ha sido separada de la Organización de Estados Americanos.

 

 

CAPITULO XI

EPOCA INDEPENDIENTE (II)

- BRASIL Y LA CUENCA DEL RÍO DE LA PLATA –

 

            Situación. Producida la independencia, los países del área, salvo el Paraguay, presentan un esquema común; una permanente anarquía e inestabilidad política, y la abierta penetración de los intereses del imperialismo económico inglés, traducida en grandes inversiones. Como resultado, dominan la banca, los ferrocarriles, los transportes fluviales y marítimos, los frigoríficos, las grandes empresas de importación y exportación, etc.

            El Paraguay escapa a esa situación; primero el Dr. Francia y luego don Carlos Antonio López, imponen gobiernos patriarcales dedicados a consolidar la independencia nacional y a desarrollar las potencialidades económicas del país. Así, mientras otros países del Río de la Plata se desangran en guerras intestinas, el Estado paraguayo se afirma, con la nación unida sin desgarramientos, que sólo sabe de trabajo y cada vez mejores logros socio-económicos y culturales. Los acontecimientos más trascendentales, expuestos por países son:

 

            A) EN EL BRASIL

 

            Fue establecida una monarquía constitucional con el Emperador Pedro I, rodeado de una corte constituida por nobleza foránea, llena de privilegios y mirada con resentimiento por el criollismo. No pocas cuestiones mantenían en constante inquietud al ambiente político brasileño, a saber:

            - la escasa preocupación del Emperador por el gobierno del Brasil; más era su interés por los acontecimientos de Portugal, pues era heredero de dicha Corona.

            - el estado de permanente descontento manifestado en las Provincias, a las que la Constitución de 1824 había privado de toda autonomía. Además, la desafortunada injerencia en las cuestiones del Río de la Plata, había desembocado en la guerra con la Argentina y las sucesivas derrotas de las fuerzas brasileñas.

            - la abdicación de Pedro I, en 1831, no cambió mucho la situación. En todo caso, el nuevo Emperador, Pedro II, estuvo más identificado con los intereses brasileños y tuvo mejor receptividad en los círculos políticos.

            Con Pedro II, de nuevo el Brasil intervino activamente en la política rioplatense, procurando entendimientos para derrocar al dictador argentino Juan Manuel de Rosas. Caído éste, de nuevo la injerencia brasileña en el Uruguay y su abierta amenaza militar, provocó a su vez la intervención del presidente paraguayo, general F. Solano López, que desembocó en la guerra de la Triple Alianza, 1864/1870.

            - en 1889, el generalizado descontento popular que había ganado al Ejército, determinó la caída del Imperio y la instauración de la República. Pedro II fue exiliado a Europa.

            Ya en el presente siglo, a los gobiernos civilistas sucedió la abierta injerencia de las FF.AA., que impusieron la tregua política; vale decir, la suspensión de las actividades cívicas a través de los partidos políticos. En consecuencia, prevaleció su exclusiva hegemonía a través de Presidentes militares.

            La economía brasileña, fundamentalmente agrícola-ganadera, ha evolucionado extraordinariamente al promediar el presente siglo. Fuertes inversiones financieras de origen foráneo, la gran expansión de una modernísima red vial, la incorporación al desarrollo nacional de grandes regiones, antes deshabitadas, así la erección de Brasilia, su nueva y modernísima capital, la producción de fuerza motriz mediante numerosas centrales hidroeléctricas, la explotación de materias primas y una adecuada política de promoción, han llevado a un extraordinario desarrollo industrial, que no conoce limitaciones. Desde industria pesada: automotores, tanques y equipos militares, aviones, construcciones navales y maquinarias diversas; textiles y plásticas; electrodomésticos; radios, televisores y otros equipos; productos medicinales, alimenticios, etc.

            Asimismo, ha dado inusitado impulso al desarrollo educativo en todos los niveles, a la promoción de las instituciones culturales y de manifestaciones artísticas; teatro, conciertos, artes plásticas y editoriales de grande y jerarquizada producción.

 

            B) EN LA ARGENTINA

 

            Durante la primera mitad del siglo XIX, la Argentina sufrió una permanente y sangrienta anarquía, desatada por las ambiciones caudillistas, por el afán hegemónico de Buenos Aires, resistido por las Provincias. El largo predominio del dictador Juan Manuel de Rosas, gobernador de Buenos Aires, no fue sino un episodio de esa lucha, hasta que el caudillo entrerriano general Justo José de Urquiza, con la victoria de Caseros, 3 de febrero de 1852, puso término a la hegemonía, de Rosas.

            Pero la anarquía no cesó; la causa seguía siendo la misma, los afanes hegemónicos de Buenos Aires, ahora con la conducción del grupo de Bartolomé Mitre y la consabida resistencia de las Provincias, lideradas por Urquiza. Y otra vez la lucha entre hermanos, a la que puso término la mediación paraguaya ofrecida por el presidente Carlos Antonio López, felizmente conducida por el general Francisco Solano López y culminada con el Pacto de San José de Flores, 10 de noviembre de 1859.

            La guerra de la Triple Alianza, 1864/1870, significó de hecho el término de la larga anarquía, y los gobiernos de Buenos Aires pusieron en práctica iniciativas de gran trascendencia para el futuro del país. Así la conquista del desierto, que permitió la gran expansión hacia el sur. Asimismo, importantes grupos de inmigrantes, la expansión de los ferrocarriles y el crecimiento de la banca, permitieron un notable crecimiento económico, cuyos pilares fueron la ganadería y la agricultura, especialmente la producción de cereales.

            Ya al finalizar la primera mitad del presente siglo, el gobierno del general Juan Domingo Perón sustituyó a los tradicionales gobiernos conservadores, e impuso profundas transformaciones de contenido social. En sucesivos gobiernos, con Perón ya viejo y enfermo, la conducción del país cayó en manos de oportunistas y del poder sindical, mientras los activistas del comunismo se infiltraban en todas las organizaciones. Ello desembocó en una terrible anarquía, hecha de secuestros, asesinatos y atentados de todo orden, que llenó de zozobra al país. Hasta que la enérgica determinación de las Fuerzas Armadas, desarticuló la guerrilla urbana y rural, mediante un operativo militar que insumió tiempo, medios y vidas. Normalizada la vida nacional, la Argentina no ha podido ordenar su economía, afectada por una permanente inflación; ello ha quitado capacidad competitiva a su industria. Sin embargo, ha ido recuperando su nivel de producción de cereales y carne.

            En otro orden de cosas, cabe destacar la rica tradición cultural argentina; traducida en múltiples actividades e instituciones de gran jerarquía como el Teatro Colón, otras agrupaciones artísticas, artes plásticas, editoriales, etc., una de las más calificadas de América hispana.

 

 

            C) EN EL URUGUAY

 

            Apenas lograda la independencia, los caudillos uruguayos se dividieron en grupos antagónicos. La injerencia extranjera, argentina y brasileña especialmente, jugó importante papel en la anarquía uruguaya. Ya en la segunda mitad del siglo XIX, el Presidente argentino Bartolomé Mitre, apoyó al general Venancio Flores, alzado en rebeldía contra su gobierno. Para asegurar su triunfo, Flores se alió también con los brasileños, invasores de su país. Todos unidos, la ambición del general Flores, la complicidad de Mitre y la intervención brasileña, determinaron la caída del gobierno constituido y la preeminencia de Flores.

            Para el Paraguay, aquello significaba mucho más que un simple cambio de gobierno; era la caída de un gobierno amigo y la preeminencia de un incondicional instrumento de Mitre y de los intereses brasileños. Allí, en ese rincón del Plata, se gestó la fatídica Guerra de la Triple Alianza, según se verá.

            Superada la anarquía del siglo pasado, el régimen político uruguayo, republicano unitario, fue siempre modelo de democracia y libertad en el continente. Hasta que, al promediar el presente siglo, los activistas del comunismo internacional -los tupamaros infiltrados en las organizaciones estudiantiles y sindicales, en los partidos políticos y aún en las FF. AA. y policiales, en la prensa, la banca y las esferas del gobierno, desataron una creciente anarquía mediante asaltos, secuestros, asesinatos y otros medios, que desquiciaron el régimen democrático del país. Costó mucha sangre, sacrificios y medios, repeler la agresión y reordenar la vida apolítica, social y económica del país, y ya no se ha vuelto al régimen democrático de antes.

 

            D) EN EL PARAGUAY

 

            Producida la independencia de España, el Paraguay afrontó la sistemática oposición argentina, cuyos gobiernos se negaron a reconocer la independencia paraguaya. En ese largo período -1811/1840- el Dr. José Gaspar Rodríguez de Francia, modeló con inexorable rigidez la conciencia paraguaya. Durante el predominio francista, no imperó más voluntad que la suya. Se ensayó con apreciable éxito el autoabastecimiento, mas la cultura se estancó, y aún se retrogradó al cerrarse la única institución educativa de cierta categoría, el Colegio Seminario de San Carlos. Solamente subsistieron las escuelas elementales, con escasos maestros y materiales.

            Muerto el Dr. Francia, surgió don Carlos Antonio López, Cónsul primero desde 1841 y luego Presidente constitucional desde 1844, a quien reemplazó su hijo, el general Francisco Solano López, en 1862. Con don Carlos, el Paraguay entró de lleno a convivir con las demás naciones del Continente y aún con las europeas. Con técnicos contratados en Europa, se trazaron y levantaron obras públicas de envergadura: líneas telegráficas, ferrocarril, astillero, marina mercante, plantas industriales, arsenal, fundiciones, escuelas, iglesias, edificios públicos, vías de comunicaciones. Infelizmente, tantas y tan felices realizaciones, fueran consumidas por la guerra.

 

            LA TRIPLE ALIANZA Y EL PARAGUAY

 

            Las causas fueron varias: a) las cuestiones de límites, que el Paraguay tenía pendientes con el Brasil y la Argentina. Con el Brasil, que pretendía la zona comprendida entre los ríos Blanco y Apa, se había firmado en 1856, el Tratado Berges-Paranhos, postergando la solución de la cuestión por 6 años. Con la Argentina, que pretendía todo el Chaco, se firmó también en 1856, el Tratado Vázquez - Guido, que también postergaba por 6 años el tratamiento del problema. A la muerte de don Carlos Antonio López en 1862, el Paraguay se encontraba de nuevo con esas graves cuestiones, hasta ententes insolubles por la obstinada pretensión de sus vecinos, sobre territorios de tradicional y legítima pertenencia paraguaya.

            b) La cuestión uruguaya. Derivada de una grave crisis interna uruguaya y la injerencia política y militar brasileña, supuestamente en defensa de sus súbditos que harían sufrido perjuicios durante la guerra civil uruguaya. El general Venancio Flores, con la ayuda del presidente Mitre se había alzado en rebeldía contra su gobierno, luego se comprometió con los brasileños, para asegurar su triunfo.

            El presidente Francisco Solano López, por algún tiempo permaneció neutral, no obstante los pedidos de ayuda del acosado gobierno blanco uruguayo. Intervino luego ofreciendo su mediación, convencido de que la absorción del Uruguay por el Brasil, iba a romper el equilibrio político del Río de la Plata. Su ofrecimiento no fue admitido por al Brasil, cuyo gobierno exigió satisfacciones perentorias al gobierno uruguayo, amenazando con intervenir por la fuerza. Ante la abierta amenaza brasileña al Uruguay, el gobierno paraguayo envió al del Brasil, la nota del 30 de agosto de 1864, por la que declaraba dicha amenaza como "atentatoria del equilibrio de los Estados del Plata; que interesa a la República del Paraguay, como garantía de su seguridad, paz y prosperidad...".

            El 12 de octubre de 1864, tropas brasileñas invadieron el Uruguay, al conocerse el acontecimiento, el gobierno paraguayo en cumplimiento de la declaración del 30 de agosto, declaró la guerra al Brasil. La intervención brasileña aceleró el triunfo del general Flores, quien asumió el gobierno uruguayo. Ello dio lugar a la formación de la Triple Alianza; Brasil, Argentina y Uruguay, contra el Paraguay.

            El Paraguay fue aniquilado por la guerra; su población diezmada, su capital y otras ciudades saqueadas, sus elementos de progreso, marina fluvial, la mejor y más moderna de Sudamérica, destruida, sus industrias y riquezas arrasadas, su territorio desmembrado, la conciencia de sus escasos sobrevivientes, pervertida y desquiciada.

            La post guerra fue de una gran transformación política; se aprobó una nueva Constitución, se fundaron los partidos políticos, y por primera vez se conocieron las actividades cívicas en el país. Pero las guerras civiles se hicieron frecuentes y la anarquía asoló el país. Así hasta la guerra del Chaco, 1932/1935, un nuevo conflicto internacional que exigió grandes sacrificios al país. Terminada la guerra, volvió de nuevo la inestabilidad política, hasta el advenimiento al poder del general Alfredo Stroessner, con el apoyo político del Partido Colorado.

            En el orden económico, la recuperación fue muy lenta. A poco de finalizar la guerra contra la Triple Alianza, el Estado se vió en la necesidad de enajenar grandes extensiones de su patrimonio territorial, lo que adquirido por capitalistas extranjeros, originó el latifundio en el país. El capital extranjero se apoderó de los servicios de transportes y comunicaciones, ferrocarril, flota mercante, etc. Y la falta de infraestructura de apoyo, red vial, energía eléctrica y recursos financieros, retrasaron por casi un siglo la recuperación nacional.

            Recién a partir de la segunda mitad del presente siglo, fueron superándose los inconvenientes apuntados, iniciándose en el país una época de auténtico progreso y desarrollo. Una gravitación muy especial han significado las construcciones de las grandes represas hidroeléctricas: Acaray, en pleno funcionamiento; la de Itaipú, en colaboración con el Brasil, y la de Yasy-retá con la Argentina. Por lo demás, una extensa red vial y un amplio programa de reforma agraria y colonización, de diversificación y modernización de la agricultura, la ganadería, y la industria, así como el incremento de la educación, constituyen las pautas de su desarrollo socio-económico.

 

 

            E) EN BOLIVIA      

 

            Desde su independencia en 1825, la historia boliviana del siglo XIX es una sucesión de caudillos militares prepotentes e ignorantes, para quienes el arte de gobernar se reducía a deshacerse de sus adversarios. La ambición caudillista y la ignorancia de la población, de absoluta mayoría indígena y pobre eran factores determinantes de la anarquía política.

            La ineptitud en función de gobierno, hizo que Bolivia sufriera también grandes frustraciones en su política exterior. La más grave de éstas fue la derivada de la Guerra del Pacífico, 1879/1881, que le ocasionó la pérdida de valiosos territorios y muy especialmente, su litoral marítimo.

            Ya en el presente siglo, otra aventura le llevó a la infortunada Guerra del Chaco, 1932/1935. Y también perdió un extensísimo y valioso territorio - el Acre - en otra de la habituales cuestiones promovidas por el Brasil a sus vecinos.

            El descubrimiento y la explotación del estaño y el petróleo, sólo produjeron beneficios a las familias Patiño y Aramayo y al capital extranjero. La gran masa campesina, indígenas y mestizos, sigue desposeída, e ignorante como antes. Los privilegiados de bienes y cultura constituyen una absoluta minoría.

 

 

 

 CAPITULO XII

 

EPOCA INDEPENDIENTE (III)

 

- EL BLOQUE DEL PACÍFICO Y LA GRAN COLOMBIA – 

 

            Situación. Como en todo el Continente, a los países del área les fue muy difícil superar los males derivados de la anarquía política, los gobiernos dictatoriales, las desigualdades sociales y la carencia de infraestructura para el desarrollo. En no pocos casos, funestas guerras internacionales dejaron graves consecuencias y hondos resentimientos. En la mayoría de los casos, casi todo el siglo XIX fue una época de organización.

 

            1. - CHILE

 

            El país más rápidamente y mejor organizado, tras superar el anárquico período de los caudillos de la independencia, incluido el prócer Bernardo de O'Higgins exiliado en 1823. En el proceso de su ordenamiento, Chile tuvo no pocas figuras civiles sobresalientes: Diego Portales, Manuel Bulnes, Manuel Montt y José Joaquín Pérez, especialmente. Y muchos intelectuales extranjeros de relieve internacional. Andrés Bello, Juan Bautista Alberdi, Domingo Faustino Sarmiento, Vicente F. López y otros, que estaban residiendo en el país, dieron un notable impulso a la cultura.

            El descubrimiento y explotación de algunos minerales: plata, salitre y cobre, la evolución de la agricultura y el comercio, la expansión hacia el sur, la construcción de ferrocarriles y otras vías de comunicaciones, los beneficios de la instrucción pública y de la inmigración, especialmente alemana, incidieron favorablemente en el desenvolvimiento del país.

            En lo internacional, la victoriosa Guerra del Pacífico, 1879/ 1883, contra Perú y Bolivia, gravitó decisiva y favorablemente sobre el desarrollo y progreso del país, pues le permitió ganar territorios ricos en minerales y guano. Ya en la segunda mitad del presente siglo, el ordenado régimen socio-político chileno fue gravemente alterado cuando una coalición de partidos políticos socialistas ganó el gobierno. El presidente Dr. Salvador Allende, instauró un régimen comunista que perturbó las instituciones tradicionales y motivó el alzamiento de las Fuerzas Armadas, que llevó a la Presidencia de la República al general Augusto Pinochet.

 

            2. - PERÚ

 

            En este país fue largo y difícil el proceso de normalización institucional tras la independencia, la sucesión de dictaduras militares fue la norma. No obstante lo señalado, cabe referirse al gobierno del mariscal Ramón Castilla: 1844/1851, como de amplios merecimientos. Saneó la hacienda pública, inició la explotación del guano, construyó en 1850 el primer ferrocarril sudamericano: Lima - El Callao, inició un vigoroso movimiento industrial y de urbanización de Lima y otras ciudades. Asimismo, dispuso el ordenamiento jurídico y administrativo del país, fue promulgado un Reglamento General de Instrucción Pública y estimuló la inmigración. Luego, no pocos fracasos en cuestiones internacionales: la integración y caída de la Confederación Peruano-boliviana, en la primera Guerra del Pacífico, 1837, y la derrota en la segunda Guerra del Pacífico, 1879/1883, agregaron su cuota de anarquía y frustraciones.

            Ya en el presente siglo, algunos gobiernos obligados por los reclamos populares, han llevado adelante programas de reforma agraria y legislación social, en procura de un equilibrio entre los intereses de la clase conservadora, minoritaria, terrateniente y privilegiada, y la clase popular, mayoritaria y desposeída. A esa orientación pertenece al gobierno del general Francisco Morales Bermúdez, a quien correspondió últimamente una decisión histórica; comicios libres que dieron por resultado la elección del Arq. Fernando Belaunde Terry para Presidente de la República.

 

La Guerra del Pacífico. Este conflicto entre Chile por una parte, Perú y Bolivia por la otra, se originó en febrero de 1879, cuando tropas chilenas ocuparon Antofagasta, entonces ciudad boliviana, para proteger los intereses de una Compañía chilena que operaba allí mediante una concesión del gobierno boliviano. El Ejército boliviano, reiteradamente derrotado, abandonó la guerra en 1880. Perú quedó solo, el Ejército chileno, victorioso en tierra y vigorosamente respaldado por la escuadra que dominaba el mar, ocupó Lima en enero de 1881. Las autoridades y fuerzas peruanas se retiraron a las sierras.

Así las cosas, el general peruano Miguel Iglesias reunió una Asamblea en Cajamarca en diciembre de 1882 que se pronunció por una paz inmediata a cualquier costo. Después de muchas tratativas, fue firmado el Tratado de Ancón, el 20 de octubre de 1883, por el que Perú cedía a Chile, definitivamente el territorio de Tarapacá, y las ciudades de Tacna y Arica, por 10 años. Ya en el presente siglo, por un Tratado de Paz y Amistad firmado en Lima en 1929, se llegó a un acuerdo, Tacna fue devuelta al Perú y Arica se incorporó definitivamente a Chile.

En definitiva, Perú perdió territorios ricos en minerales y guano, pero las consecuencias más drásticas de la guerra sufrió Bolivia, que perdió no solamente ricos territorios, sino que también quedaba convertido en país mediterráneo, encerrado en su abrupto territorio. Perdido su litoral sobre el Pacífico, Bolivia buscó una salida hacia el Atlántico por el río Paraguay. Ello trajo como consecuencia la Guerra del Chaco con el Paraguay, 1932-1935, que deparó otra frustración al país del altiplano.

 

            LA GRAN COLOMBIA

 

            Situación. Integrada en 1819 con Colombia, Venezuela y Ecuador, era una realidad imposible. Mientras vivió Bolívar, su prestigio mantuvo la unidad; muerto el libertador en 1830, se deshizo su obra. Estériles resultaron sus proclamas, recomendaciones y llamamientos. "Uníos o la anarquía os devorará", había profetizado; y como la unión era un imposible, la anarquía tendió su dominio. Meses antes que Bolívar, había fallecido Antonio José de Sucre, el Gran Mariscal de Ayacucho. El asesinato de Sucre, 1830, figura ejemplar, de límpida trayectoria, era la medida del ambiente político imperante.

 

            1. - VENEZUELA

 

            Tras la muerte de Bolívar, surgió dominante la figura del general José Antonio Páez, otro de los próceres de la independencia, valiente pero analfabeto, legendario jefe de los indómitos llaneros. Ello era el caudillismo en función de gobierno, en el que se sucedieron muchos otros, todos dictatoriales.

            Merece especial mención el gobierno del general Antonio Guzmán Blanco; 1870/1877, el que aunque dictatorial también, marcó una época de progreso en todos los órdenes; embellecimiento de las ciudades, florecimiento del comercio, la agricultura y la ganadería, construcción de obres públicas, vías de comunicaciones, ferrocarriles, etc. La educación, aunque la menos atendida, también tuvo progresos.

            Ya en el presente siglo, otros gobiernos de férreas dictaduras como los de los generales Cipriano Castro y Juan Vicente Gómez, llevaron al país al extremo del abuso del poder, del despilfarro financiero y el descontento social. Para colmo de males, una expedición armada enviada por Alemania, desembarcó en territorio venezolano en procura de cobrar una deuda.

            Ya en la segunda mitad del presente siglo, el gobierno dictatorial del general Marcos Pérez Jiménez, utilizando los abundantes recursos proveídos por la explotación petrolífera, realizó numerosas obras públicas, modernizó y embelleció a Caracas y otras ciudades y dinamizó la vida económica nacional, pero acalló duramente a la oposición.    Su gobierno se prolongó hasta 1958, desde entonces, Venezuela se gobierna con regímenes democráticos.

            En las últimas décadas, a la producción petrolífera, agrícola y ganadera, se ha sumado una importante y cada vez más creciente, actividad industrial.

 

            2. - COLOMBIA

 

            Al año siguiente de la muerte de Bolívar se disolvió la Gran Colombia y en 1832 asumió la Presidencia el general Francisco de Paula Santander, otro de los próceres de la independencia.

            Una circunstancia distingue a Colombia de sus vecinos; los gobiernos no fueron solamente de caudillos militares. Muchos civiles de notoria solvencia moral prestigiaron la primera Magistratura colombiana. Y muy pronto, los dos grandes Partidos políticos, el conservador y el liberal, dominaron el panorama cívico-político con profundo antagonismo; obstáculo por mucho tiempo insalvable para forjar un verdadero gobierno nacional. Dos gobiernos de esa época merecen especial mención: los de Cipriano Mosquera, conservador, y José Hilario López, liberal.

            Ya en el siglo pasado se registró una apreciable evolución en la situación general del país. Se habilitaron medios de comunicaciones y transportes, entre ellos la navegación por el río Magdalena y el ferrocarril del Departamento del Istmo - Panamá; se incrementaron las actividades económicas en general y en especial la instrucción pública, la que merced a orientadores europeos, cobró apreciable adelanto.

            Al inicio de la segunda mitad del presente siglo, la aguda rivalidad entre los dos Partidos políticos tradicionales y la consecuente anarquía, fue el pretexto esgrimido por el general Gustavo Rojas Pinilla para deponer al gobierno civil e instaurar una férrea dictadura que fue derrocada en 1957. A la caída de Rojas Pinilla, los Partidos políticos acordaron una tregua política y la formación de un Frente Nacional. En virtud de dicho  acuerdo, ambos partidos se turnaron en la Presidencia de la República mientras el gabinete, el Parlamento y otros órganos de gobierno eran integrados en proporciones iguales.

            Pero mientras el país se aquietaba a nivel de luchas partidarias, aparecieron y se extendieron los movimientos izquierdistas, de aliento estudiantil y campesino, los que a través de operativos de guerrilla urbana y rural, perturban notoriamente el ambiente político y social del país.

            Gran productor de café, oro, esmeralda y otras piedras preciosas, en las últimas décadas también la industria ha alcanzado notable auge en Colombia, sumándose a la tradicional producción agrícola-ganadera.

 

            3. - ECUADOR

 

            En mayo de 1830, Ecuador se apartaba de la Gran Colombia, incorporándose a la turbulenta anarquía de la época. Inspirador y autor principal del movimiento separatista, fue el general Juan José Flores, venezolano de nacimiento, típico exponente del caudillo militar.

            En 1861 surgió la figura que fue toda fina época dé la historia ecuatoriana; Gabriel García Moreno, cuya voluntad imperó indiscutida, y soberana hasta su trágica muerte, en 1875. Su gobierno, sectarita y despótico, fue sin embargo de grandes progresos, extendió vías férreas y organizó la marina mercante, regularizó la deuda nacional, fomentó la realización de grandes obras públicas, como la carretera de Quito- a Guayaquil, puentes, etc. Prestó preferente atención a la instrucción pública en todos los niveles, de la que fueron los jesuitas sus virtuales directores.

 

 

CAPITULO XIII

 

ACTUALIDAD AMERICANA.

 

            América, tradicionalmente un continente sin mayores perturbaciones sociales, ya en la segunda mitad del presente siglo, se ha visto agitada por no pocos problemas sociales, de innegables proyecciones políticas. En general, las razones en que se apoyan esas inquietudes agitadoras y revolucionarias, obedecen a una muy desigual posición entre los diferentes grupos que integran la sociedad americana, cuyos orígenes se remontan al período colonial:

            - una minoría privilegiada integrada por terratenientes, industriales, financistas, ganaderos y empresarios, en cuyas manos están el control de la conducción política y el manejo de los recursos económicos de los países.

            - una mayoría de trabajadores, desposeída y desamparada; sin tierra ni recursos, sin posibilidad de acceder a los beneficios de la educación superior, por ej. En este grupo debe considerarse a una masa de millones de negros, en los EE. UU. de América, y de indígenas, mestizos y campesinos pobres en América latina.

            El problema deriva en situaciones más específicas, a saber: analfabetismo, desnutrición, desnudez, vicios y el desconocimiento de elementales nociones de higiene, con graves repercusiones sobre la salud y por ende, sobre la vida en todos sus aspectos. Agravan esa situación, los inconvenientes de la población dispersiva y la temprana deserción de las aulas de la población escolar, por imperativos económicos.         

            En tales situaciones, el problema no deja de ser grave porque a la educación compete cambiar modalidades, señalar rumbos, forjar hombres con actitudes nobles y creadoras, de pensamientos altruistas y amplio sentido de responsabilidad y patriotismo, que orienten su acción y de la colectividad, hacia una constante superación.

            Muchas de las miserias de que padecen los pueblos latinoamericanos, pudieron haber sido, superados en sus raíces de haber mediado la acción de hombres instruidos, capaces, bien intencionados, nobles y desinteresados.

            Los factores negativos señalados se inter-relacionan recíprocamente:

            - por carencia de medios y otras posibilidades, los más de los hijos de campesinos, trabajadores, negros, indígenas y mestizos, en su caso, no acceden a la educación media o técnica y mucho menos a la universitaria.

            - las consecuencias de una educación deficiente son la carencia de una ambición noble, de deseos de superación o ignorancia de los medios para lograrlo. Todo ello conduce a la postración económica, a la desnutrición, a las enfermedades, a las frustraciones. El conformismo con un ínfimo nivel de vida es la nota característica, falta e1 "espíritu de empresa" de que habla Luis Reissig. Eso mismo que distingue con relieves propios al norteamericano y que tanto contribuyó a su progreso.

            - ignorancia y pobreza de la gran mayoría de la población rural americana, hicieron que el problema de la salubridad fuera creciendo hasta alcanzar caracteres alarmantes, por el desconocimiento de elementales nociones de higiene, y una alimentación inadecuada y pobre. Todos estos factores van señalando el inevitable proceso de la desnutrición y las enfermedades, las que al agotar prematuramente al individuo van mermando su capacidad de trabajo y producción, en perjuicio de la familia y de la sociedad.

            - ignorancia y pobreza hacen que la gran mayoría del campesinado tenga sus excusados o letrinas, sin las previsiones higiénicas, posibilitando así la contaminación de las aguas.

            - la mala alimentación, determinada por la escasez o ausencia de carne, leche, huevo, etc., debilita el organismo del individuo, campo propicio para el desarrollo de la tuberculosis. Por otra parte, prácticas anti-higiénicas y vicios profundamente arraigados, ocasionan la sífilis y la anquilostomiasis, de tan funestas consecuencias. Otro terrible mal americano es el alcoholismo. La mortalidad infantil, muy elevada en gran número de países, es uno de los peores efectos de la situación señalada.

            A todos estas males, que no son todos ni mucho menos, hay que agregar las consecuencias de una vivienda estrecha y una vestimenta escasa e inadecuada, que carcome y enferma no sólo el cuerpo sino también el espíritu del individuo. Y lo más grave es que estos males se transmiten por generaciones, con sus pavorosas consecuencias.

            En el orden político, la falta de un civismo consiente y las ambiciones de poder, conducen a la improvisación de gobernantes, se llega así al caudillismo, por lo general representado por hombres sectarios, prepotentes y no pocas veces ignorantes. Muchos de esos caudillos, justo es decirlo, han realizado grandes obras materiales, pero salvo raras excepciones, han actuado con absoluta despreocupación de los valores espirituales que tienen sus conciudadanos, como hombres libres.

            Tampoco debe desconocerse otras situaciones, una de vieja extracción, los gobiernos representan a las estructuras privilegiadas y frecuentemente desembocan en férreas dictaduras, tales los casos de Porfirio Díaz, en Méjico; de Fulgencio Batista, en Cuba; de los Trujillos, en República Dominicana; de los Somoza, en Nicaragua; de Juan Vicente Gómez y Marcos Pérez Jiménez, en Venezuela; de Gustavo Rojas Pinilla, en Colombia, por no citar sino unos pocos. En el otro extremo, algunos gobiernos demagógicos, que no han hecho sino desquiciar las instituciones políticas, sociales, económicas y culturales de un país. Tales los casos de los gobiernos peronistas, en la Argentina; el de Salvador Allende, en Chile; el de Fidel Castro, en Cuba.

            A partir del último cuarto de siglo, apareció y se extendió en casi todo el continente, un grave factor de perturbación y zozobra alentado por el comunismo internacional. Tal las guerrillas urbanas y rurales, que han causado y causan hondos desequilibrios, incluso en países tradicionalmente ordenado como Uruguay, Argentina y Colombia, por ej. 

            En muchos casos, la anarquía política y social, derivada esencialmente de la acción subversiva del comunismo, motivaron la intervención de las Fuerzas Armadas para restablecer el orden y encargarse de la conducción política de los países americanos. Tales los casos de Argentina, Chile, Uruguay y Brasil. Y fuerza es reconocer que por imperativo de los gobiernos militares, esos países han retornado a la normalidad o han desarrollado extraordinariamente sus potencialidades, como en el caso de Brasil y Paraguay. Y una serie de realizaciones han posibilitado un notable grado de superación, así, la expansión de la red vial, la apertura de nuevas áreas de colonización, la construcción de plantas de producción de energía eléctrica, la instalación de industrias y consiguientemente el aprovechamiento de las materias primas.      

            La economía latinoamericana se basa preferentemente en la agricultura y la ganadería. Además, una característica tradicional y negativa, ha sido la mono producción, vale decir, una economía sostenida fundamentalmente por un renglón, principalmente en lo que a la concurrencia al mercado exterior se refiere. Así, la gran fuente para la obtención de divisas, moneda sana, se basaba en el café para Brasil, Colombia, El Salvador, Guatemala; en la minería, cobre y salitre, para Chile y estaño para Bolivia; en el petróleo para Venezuela; en cereales y carne para Argentina en carne y lana, para Uruguay; en la yerba y la madera para el Paraguay.

            Fácil es comprender el grave inconveniente que tal situación significa. Por cualquier contingencia que restrinja la demanda exterior de un determinado producto, el país respaldado por ese único producto de exportación, debe enfrentar graves desequilibrios socio-económicos y aún políticos.

            La industria está aún escasamente desarrollada en América latina, en todo caso, su gravitación en el mercado internacional es insignificante. Y no es posible alentar grandes industrias por muy poderosas razones: carencia de capitales, de materia prima abundante y de recursos técnicos, hasta de población consumidora, es decir mercado, no pocas veces. En general, las manufacturas de la industria local son de inferior calidad y de mayor costo que las importadas.

            Lógicamente, resulta difícil competir con países altamente industrializados, con capitales propios y personal técnico calificado como los EE. UU. de América, Inglaterra, Alemania, Francia, Suecia, Japón, por ej. Sin embargo, en estos últimos años, la inversión de capitales extranjeros, especialmente norteamericano, ha contribuido a desarrollar la producción económica, incluida la industria, en Améríca Latina: Brasil, Argentina, Méjico, Venezuela, Colombia, entre otros.

 

            EN EL PARAGUAY

 

            Aquí no existen problemas raciales; del negro o del indígena, pero sí el del campesinado pobre. Su precaria condición económica, gravita en todos los órdenes de su vida socio-política. Ello ha motivado ambiciosos programas de gobierno en los últimos años. Red vial, tierras, implementos agrícolas, semillas, asistencia técnica y créditos para incrementar la producción, incremento de la educación, salud pública, constituyen la síntesis de la asistencia dada al campesinado para mejorar su condición de vida.

            En el siglo pasado, la obra de gobierno de don Carlos Antonio López constituye el ejemplo de lo que puede hacer un gobernante con inquietudes de superación, con ambición de Patria. Más de 400 escuelas, otras de educación técnica y superior y numerosos jóvenes enviados a Europa para realizar estudios técnicos y superiores, dan la medida de su preocupación. Su gobierno muestra el ejemplo único en el continente, de un pueblo transformado a un grado tal de desarrollo y prosperidad, en un lapso breve para tantas realizaciones.

            Luego, la guerra contra la Triple Alianza arrasó con todo, la recuperación en el orden educativo y cultural fue sorprendentemente rápida. Colegios nacionales, Escuelas Normales, Universidad Nacional, Seminario Metropolitano, Gimnasio e Instituto Paraguayo, fueron las entidades fundamentales de esa recuperación cultural, todavía en el siglo pasado.

            El Paraguay; agrícola, ganadero y forestal por excelencia, se encuentra hoy ante las perspectivas ciertas de un futuro que ya está dando sus frutos, merced a la paz y la estabilidad política, una creciente red vial que ha permitido la incorporación a la vida activa de la nación, de extensas y ricas regiones. El funcionamiento de la Central Hidroeléctrica del Acaray y las construcciones de las represas de Itaipú y Yacyretá, aportarán todo el inmenso valor de la energía eléctrica para el desarrollo económico, social y cultural del país. Ya es evidente una serie de circunstancias nuevas y favorables:

            - las florecientes colonias establecidas en áreas territoriales - en el norte, este y sur del, país, donde hasta hace poco imperaba la selva agreste.

            - los programas de reforma agraria, mecanización, agrícola, incrementos de cultivos, mejoramiento de la ganadería y paulatina industrialización.

 

 

            EL PANAMERICANISMO

 

            Se entiende por tal, la unidad espiritual traducida en la solidaridad y cooperación de todos los pueblos americanos. Fue Simón Bolívar el inspirador y ardiente propulsor de esa unidad, buscando llevar a la práctica su pensamiento, convocó el Congreso de Panamá en 1826. Pese a los esfuerzos del Libertador, la unidad política se evidenció como un objetivo inalcanzable. Así lo demostró la fallida Confederación de la Gran Colombia.

            No obstante, el ideal de la unidad estaba latente en el espíritu americano. Con el correr de los años, esa común aspiración de fraternal entendimiento y comprensión, de solidaria unidad en el bregar constante por el bienestar general, ha hecho posible la integración de un vínculo que enlaza todas las esperanzas. Es el panamericanismo, robusta comunión de nobles ideales, que destaca a América como notable ejemplo.

            La concreción más efectiva del ideal panamericanista es la Organización de Estados Americanos, OEA. Son miembros de la Organización 27 Estados; Canadá y Jamaica no han solicitado aún su incorporación y Cuba fue excluida en 1962. La Secretaría General de la Organización reside en la Unión Panamericana, en Washington D. C., Estados Unidos de América.

           

            Los objetivos esenciales de la OEA están señalados en el art. 4° de la Carta, y son los sgtes.: a) afianzar la paz y seguridad del Continente; b) prevenir las posibles causas y dificultades y asegurar la solución pacífica de las controversias que surjan entre los Estados miembros; c) organizar la acción solidaria de éstos en caso de agresión; d) procurar la solución de los problemas políticos, jurídicos y económicos que se susciten entre ellos; e) promover por medio de la acción cooperativa, su desarrollo económico, social y cultural.

 

 

            COOPERACIÓN ENTRE LAS NACIONES

 

            Ya en el presente siglo, la cooperación entre los países americanos ha permitido cumplir una importante campaña contra numerosos aspectos deficitarios de los países del continente. Así, en el campo de la educación popular, técnica y científica, en la prevención de las enfermedades, mediante campañas sanitarias, en la divulgación de mejores métodos de cultivo y producción alimenticia, en la corrección de modalidades y costumbres que coadyuven a un mejoramiento del nivel de vida los organismos internacionales; Organización Mundial de la Salud, Unicef, Oficina Sanitaria Panamericana, Unesco, Fao, etc., prestan su invalorable asistencia para erradicar enfermedades endémicas, preservar la salud, proteger a la niñez e incrementar la producción, la educación y la cultura.

            Al margen de la cooperación y ayuda financiera y técnica desarrollada por los organismos internacionales, deben señalarse las cooperaciones entre Estados limítrofes, que han dado por resultados una más fluida y mejor intercomunicación entre los pueblos, así, cabe citar por ej., la construcción del gigantesco Canal del río San Lorenzo, entre Canadá y los EE. UU. de América; la intercomunicación vial mediante carreteras asfaltadas y puente sobre los ríos Paraná y Apa, entre Paraguay y Brasil;

la construcción de la gran represa hidroeléctrica de Itaipú, entre los mismos; la intercomunicación vial mediante puentes y carreteras asfaltadas, entre Paraguay y Argentina; la construcción de la gran represa hidroeléctrica de Yacyretá, entre los mismos; la intercomunicación vial mediante puentes y carreteras asfaltadas entre Argentina, Brasil y Uruguay; la intercomunicación vial entre Paraguay y Bolivia; Argentina y Chile, etc.

            En el Paraguay funcionó desde 1945 un Programa educativo por medio de asistencia financiera y técnica de los EE. UU. de América; intercambio de educadores, ideas y métodos de enseñanza, en cuyo cumplimiento, muchos educadores paraguayos han recibido entrenamiento en los EE. UU. Y en el país fueron construidos en colaboración y funcionan con personal docente paraguayo, los Centros Regionales de Educación de San Lorenzo Villarrica, Encarnación y Concepción entre otros.

 

 

 

BIBLIOGRAFÍA

 

L. Pericot, AMERICA INDIGENA

K. Birket-Smith, RAZAS HUMANAS

D. G. Brinton, LA RAZA AMERICANA

A. Ballesteros B., CRISTOBAL COLON Y EL DESCUBRIMIENTO DE AMERICA (2 tomos)

S. Eliot Morrison, EL ALMIRANTE DEL MAR OCEANO

J. Vicens Vives, RUMBOS OCEANICOS

A. de Solís, HISTORIA DE LA COLONIZACION ESPAÑOLA

N. González Ruiz, DOS CONQUISTADORES

U. Schmidl, VIAJE AL RIO DE LA PLATA

Ruy Díaz de Guzmán, LA ARGENTINA

J. M. Rubio, EXPLORACIONES Y CONQUISTAS EN EL RIO DE LA PLATA (Siglos XVI y XVII)

Enrique de Gandía, HISTORIA DE LA CONQUISTA DEL RIO DE LA PLATA Y EL PARAGUAY

D. Ramos Pérez, HISTORIA DE LA COLONIZACION ESPAÑOLA EN AMERICA

J. M. Ots Capdequí, EL ESTADO ESPAÑOL EN LAS INDIAS

F. Esteve, DESCUBRIMIENTO Y CONQUISTA DE CHILE

C. Alcázar, LOS VIRREYNATOS EN EL SIGLO XVIII

O. Gill Munilla, EL RIO DE LA PLATA EN LA POLITICA INTERNACIONAL

J. Vicens Vives, HISTORIA GENERAL (3 tomos)

M. Ballesteros G., HISTORIA DE AMERICA

C. Pereira, BREVE HISTORIA DE AMERICA

L. A. Sánchez, HISTORIA GENERAL DE AMERICA (2 tomos)

J. Zorrilla de San Martín, HISTORIA DE AMERICA

F. Morales Padrón, HISTORIA DE AMERICA (2 tomos)

J. Basadre, CHILE, PERU Y BOLIVIA INDEPENDIENTES

E. J. Castillero, HISTORIA DE PANAMA

E. Uzcátegui, HISTORIA DEL ECUADOR

J. Ribeíro, HISTORIA DO BRASIL

N. Nevin-H. Steel, BREVE HISTORIA DE LOS ESTADOS UNIDOS

F. Rae-T. H. Mahoney, THE UNITED STATES IN WORLD HISTORY

J. E. Adams, LA EPOPEYA DE AMERICA

D. R. Moore, HISTORIA DE LA AMERICA LATINA

E. Mc Nall Burns, CIVILIZACIONES DE OCCIDENTE

C. J. Hayes, HISTORIA POLITICA Y CULTURAL DE LA EUROPA MODERNA (2 tomos)

W. L. Langer, THE GROWTH AND CULTURE OF LATIN AMERICA

Worcester-Schaffer, AN ENCYCLOPEDIA OF WORLD HISTORY

Webster's, BIOGRAPHICAL DICTIONARY

F. R. Moreno, ESTUDIO DE LA INDEPENDENCIA DEL PARAGUAY

F. R. Moreno, LA CIUDAD DE ASUNCION

M. Domínguez, EL ALMA DE LA RAZA

J. P. Benítez, FORMACION SOCIAL DEL PUEBLO PARAGUAYO

J. P. Benítez, CARLOS ANTONIO LOPEZ

J. C. Chaves, EL SUPREMO DICTADOR

J. C. Chaves, EL PRESIDENTE LOPEZ

J. C. Chaves, PARAGUAYOS c/ SAN MARTIN

N. González, PROCESO Y FORMACION DE LA CULTURA PARAGUAYA

N. González, GEOGRAFIA DEL PARAGUAY

E. P. Devoto-E. Cardozo, URUGUAY Y PARAGUAY INDEPENDIENTES

 

 

I N D I C E

 

NOTAS

INDICACIONES DIDACTICAS

Capítulo

I          AMÉRICA PRECOLOMBINA

II         DESCUBRIMIENTO DEL NUEVO MUNDO

III       CONQUISTAS DE LOS GRANDES IMPERIOS

IV       DESCUBRIMIENTO Y CONQUISTA DEL RIO DE LA PLATA

V         ORGANIZACION POLITICA Y ADMINISTRATIVA

VI       ORGANIZACION SOCIAL Y ECONOMICA COLONIAL

VII      INDEPENDENCIA DE LAS COLONIAS INGLESAS

VIII    INDEPENDENCIA DE AMERICA LATINA: de Méjico a Brasil

IX       INDEPENDENCIA DE AMERICA LATINA: Campañas de San Martín y de Bolívar

X         EPOCA INDEPENDIENTE (I)

XI       EPOCA INDEPENDIENTE (II)

XII      EPOCA INDEPENDIENTE (III)

XIII    ACTUALIDAD AMERICANA

 

 

 

 

ENLACE INTERNO A ESPACIO DE VISITA RECOMENDADA


(Hacer click sobre la imagen)






Bibliotecas Virtuales donde se incluyó el Documento:
EDICIONES
EDICIONES COMUNEROS
HISTORIA
HISTORIA DEL PARAGUAY (LIBROS, COMPILACIONES,
REPÚBLICA
REPÚBLICA DEL PARAGUAY...



Leyenda:
Solo en exposición en museos y galerías
Solo en exposición en la web
Colección privada o del Artista
Catalogado en artes visuales o exposiciones realizadas
Venta directa
Obra Robada




Buscador PortalGuarani.com de Artistas y Autores Paraguayos

 

 

Portal Guarani © 2024
Todos los derechos reservados, Asunción - Paraguay
CEO Eduardo Pratt, Desarollador Ing. Gustavo Lezcano, Contenidos Lic.Rosanna López Vera

Logros y Reconocimientos del Portal
- Declarado de Interés Cultural Nacional
- Declarado de Interés Cultural Municipal
- Doble Ganador del WSA