MIRANDA, HERNÁN : “… La primera etapa de su carrera lo ha desarrollado como dibujante, para luego pasar con una paleta muy cálida y texturas al oleo, desarrollando una pintura con la temática del paisaje urbano por un breve tiempo. Obsesionado por el claroscuro de los Tenebristas su obra definitivamente se ve influenciada por el manejo de valores tonales de Rembrandt, Vermeer, Caravaggio y la composición de Sánchez Cotan y Giorgio Morandi.-
Considera que a partir de Antonio López y la Escuela de San Fernando de Madrid han replanteado el realismo Trabajando sobre el aspecto ilusionista de la imagen, con la serie “Bi Realismos”, actuando sobre el soporte integrándolo en armonía estética a la obra, con elementos simples y cotidianos, el protagonista principal de su pintura es la luz”.
Su página en Artelista: http://hernanmiranda.artelista.com
Actualmente está trabajando con la representación de EXOR GALLERIES de BOCA RATON/ FLORIDA-USA, BELLARTE GALLERIES/ Seoul Corea del Sur y BREHERET GALLERIES de Paris.
HERNAN MIRANDA, LA POESÍA DEL REALISMO ( Por ANNICK CASCIERO )
Nacido en Concepción en 1960, a la edad de siete años se trasladó con su familia a Asunción, donde asistió a talleres de dibujo. El resto de su formación lo hizo solo, estudiando a los grandes maestros de la pintura universal. Todos le enseñaron algo importante que fue incorporando a su pintura: Caravaggio (Italia, 1571-1610), el uso de la luz para hacer resaltar las figuras; Sánchez Cotán (España, 1560-1627), el equilibrio que debe establecerse entre el peso del color y la forma; Giorgio Morandi (Italia, 1907-1964), la estructura general de la obra con los objetos dispuestos horizontalmente en forma lineal dentro de una perspectiva muy fugaz. Hubo otros, como Rembrantd (Holanda, 1606-1669), Vermeer (Holanda, 1632-1675), Antonio López (España, 1936), quien lo llevó a explorar más profundamente en el "aspecto ilusionista de las imágenes", al decir de Miranda.-
Con semejante formación y maestros, no es de extrañar que las composiciones de este artista sean naturalezas muertas, pero concebidas con los ojos de un artista actual, que está siempre en la búsqueda para tratar de reinterpretar pictóricamente todo lo que le rodea, lo que constituye su propio mundo. Sus interiores sencillos, casi humildes, están descritos con una lujosa técnica que se mantiene dentro de un estricto realismo. Están poblados no de verduras o carnes, como los antiguos bodegones, sino de frutas luminosas, de lámparas a querosén, de canastos, mates, jarros, velas, molinillos de café. El artista, pues, no ha copiado a sus antiguos maestros ni representado el mundo de ellos. Ha adaptado aquel idioma a sus propias experiencias.-
Por otra parte, su formación como dibujante lo hizo ser un observador detallista y le dio una profunda comprensión del claroscuro, que fue reforzada posteriormente por sus "maestros" cuando se puso a pintar. Aquí también hay que aclarar que Miranda no trata de reproducir lo que fue el tenebrismo, pero tuvo que haber dominado esta técnica para poder aplicar su concepto, que es el de crear marcado contraste entre la parte luminosa de la obra y la que no lo es. "En mis cuadros", nos dice Miranda, "el principal protagonista es la luz. No trato de crear con ella una atmósfera determinada, sino crear contraste, saturando al máximo los tonos muy altos y los tonos muy bajos. Lo que busco realmente es que cada objeto, cada parte de mis cuadros, tenga luz propia, hasta los fondos, porque los vacíos para mí son muy importantes".-
Para esto el artista se vale de, lo que él llama, una "explosión" de luz, que es cuando los objetos se hacen brillantes, se destacan nítidos delante de un fondo muy oscuro (Mantel rojo), y una "implosión", que hace que cada objeto tenga el mismo valor tonal delante de un fondo que tiene, igualmente, el mismo valor tonal (Peras y flores).-
En cierto modo, la "atmósfera" que, como él confiesa, no trata de lograr, queda de hecho creada por sus fondos y sus vacíos que contrastan con los objetos y que tiene mucho cuidado en establecer tanto en la parte superior como en la inferior del lienzo. Ellos son los que crean el contraste entre la luz y la sombra, pero son también los grandes "silencios" que mucho expresan visualmente en el conjunto de la obra.-
El realismo de Miranda atrae de inmediato, tal vez porque todo nos recuerda lo que a diario usamos sin fijarnos mucho en ello, y sin que ninguno de estos objetos nos produzca emoción alguna. Es evidente que, como es su propósito, el artista logra un "efecto emocional" y al mismo tiempo un "efecto visual", para lo cual busca y explora el "aspecto ilusionista de las imágenes". Consiguen su propósito representando escenas que, como hemos visto, a todos nos son familiares y que nos hablan de una vida sencilla, sin lujos, donde reina un orden no buscado, pero en el que cada cosa encuentra su lugar, su propio espacio. De ahí que dejen sentir una gran calma, un gran sosiego. Ello no impide que cada escena sugiera un movimiento implícito, fácilmente imaginado, lo que, a su vez, crea misterio dentro de una trama que nunca es del todo aclarada: alguien comenzó a pelar una naranja; alguien cortó una tajada de melón; la carta que acaba de llegar fue abierta ansiosamente y vuelta a poner en su sobre roto. Todo esto es parte del "efecto emocional", pero es producto del "efecto visual".-
Nada, en las obras de Miranda, está puesto al azar, ni la estructurada arquitectura de las escenas ni la impecable técnica, ni el generoso espacio que brinda a cada cosa. Sin embargo, Miranda nos lleva a estar siempre en guardia contra posibles engaños de esa realidad. Es difícil adivinar, cuando se observa sus cuadros, si algún detalle es real o es pintado. Después de ver las cartas, cuyas pequeñas letras, prolijas, legibles, están totalmente hechas con el pincel, al ver una diminuta rama que colgaba de un cuadro, dudamos si era verdadera o representada. La tocamos y nos quedamos con ella en la mano. Entonces, cuando vimos un trozo de encaje insertado a un costado de una mesa, supusimos también que se trataba de uno real. Lo tocamos, pero el encaje quedó inmóvil. Con estos efectos de trompe l'oeil, el artista está constantemente ubicándonos en esa finísima línea que separa lo real de lo irreal. Ya no estamos imaginando una acción, un movimiento; estamos constatando la debilidad de nuestra percepción del mundo que nos rodea.-
Hasta aquí, el particular realismo de este artista nos ha invitado a pensar, a imaginar, a recrear en nosotros la "ilusión" de una determinada realidad. Sin embargo, su búsqueda lo lleva aún más lejos, a tratar de conseguir una yuxtaposición de lo que es y existe y de lo que es una apariencia. Al ver los manteles que cuelgan de algunas mesas, no dudamos en admirar la fidelidad con que el pintor reprodujo el estampado. Sin embargo, pronto el artista nos rescata de nuestro engaño y nos explica un procedimiento, o tal vez debería llamársele una "técnica", que él mismo ha denominado "bi-realismo". Consiste en usar como tela de base, en vez del lienzo tradicional, una tela gruesa estampada. "De esta manera, integro lo real con lo virtual", dice Miranda.-
El uso de esta tela en nada cambia su técnica ni lo que quiere representar, pero es aprovechada al máximo para crear los efectos que quiere lograr. A veces la deja "colgar" sin ningún otro detalle que no sea crear la ilusión de las dobleces de la tela. (Pintando naranjas). En otros cuadros, el artista recubre totalmente partes del estampado con algún color oscuro, uniforme, de manera de lograr un fondo adecuado para sus escenas. Otras veces, en ese fondo ya "pintado" ha dejado visibles algunas flores del estampado que se transforman en ramos que el artista introduce en alguna maseta o florero pintado, y sobre algún pétalo su pincel ha ubicado un insecto que descansa con gran tranquilidad (Flores).-
Lo que hace fascinante este tipo "bi-realista" de obras es que el artista nos va remitiendo constantemente de lo real, que es la tela y su estampado, a lo que es creado por él, ya que esa tela termina siendo parte importante de la composición. Aún oscureciendo con pintura el estampado de la parte superior y dejando la parte inferior con su estampado natural, se obtendría tan solo una superficie chata, plana, si el artista no hubiera ubicado ahí, donde lo oscuro se une con el estampado, uno o más objetos que de inmediato convierten a esa línea en lo que suponemos –ya que nunca son visibles ni su tabla ni sus pies– ser una mesa, que en un muy primer plano deja caer libremente la tela estampada, convertida ahora en ancho mantel. Este efecto visual se enriquece aún más cuando sobre ese "mantel" cuelga un hilo de atar o la punta de un encaje, que, a contraluz, proyectan una sombra muy sutil sobre la tela (Panes, o Lejanía).-
Como soporte de su pintura, también usa Miranda una tablilla de madera, con la que también logra defraudarnos con un magnífico hiperrealismo. Al contrario que la tela, Miranda crea las propias imperfecciones de la tabla, como si esta hubiera sido usada anteriormente para cualquier otro fin. A veces, es un círculo, como la marca que deja el fondo sucio de cualquier cacharro redondo, pero estas huellas pintadas son limpias, claramente visibles; otras veces es una línea horizontal la que hace que la tabla parezca formada por dos pedazos que sostienen papeles, sobres, cartas, como en Gritos del silencio IV. Todas estas son representaciones como vistas desde arriba, pero, además, como hace con la tela estampada, aquí también el artista va creando profundidad con un juego de luces y sombras que obtiene pintando un telón de fondo oscuro en la parte superior de la tabla, y ahí donde termina esta cobertura ubica un objeto que aparece como si estuviera posado sobre una superficie horizontal. Esta sensación se agudiza cuando, contra el borde de este supuesto mueble, aparece recostado un haz de pinceles y lápices, En Gritos del Silencio III, además, el blanco de la vela y la parte metálica de los pinceles contrastan, luminosos, contra el fondo negro. El resultado es una bella y equilibrada composición que se profundiza en leves planos.-
Fuera de sus naturalezas muertas, Miranda comienza a crear escenas cuya perfecta geometría las hace aparecer como si fueran casi abstracciones de la realidad, cuando no lo son. En Éxodo V, esta geometría está dada por la representación de un conjunto de objetos de formas geométricas, barquitos de papel, lápices y pinceles vistos en posición vertical. Lo maravilloso y, al mismo, tiempo real de esta composición es que los objetos y la silla que los sostiene en un muy primer plano tienen tanta importancia como sus sombras largas que cambian de rumbo al toparse contra cualquier saliente de algún objeto recostado detrás de la silla. Son ellos los que crean la ilusoria profundidad.-
Con todo esto, además, Miranda nos narra una historia, la suya, que es la de muchos. En un principio, sus naturalezas muertas estaban hechas de objetos simples, ubicados linealmente en forma horizontal. Luego, como ocurre en la realidad, los objetos se fueron encimando, unos delante de otros. Después, fue el alejarse definitivamente de la patria, y aparecen los embalajes, los paquetes sin abrir. Es el éxodo, y el hilo que aún ata cajas y libros comienza a adquirir una doble función. "Uno nunca se libera, nunca se desprende totalmente de su propia historia, lo que represento con un hilo que nos está siempre ligando a ese pasado. Por otro lado, utilizo mucho el hilo como un elemento plástico. Me ayuda a dar dinámica, ritmo, a la composición", confiesa el artista. Es entonces cuando aparecen sus series Migrantes, Exodo y otras. Su inserción en su nuevo ambiente queda además marcada en obras como Interval, donde las naranjas simbolizan la Florida, el candado está todavía cerrado, aunque ya se ha desempacado el pincel y la paleta. En otras obras las cartas dejan ver frases como: "Siempre lo recordamos. Esperamos verlo pronto". Ya instalado en su nuevo ambiente, sobre los muebles hay papeles, copias de su currículo, el texto de algún crítico, los candados cerrados se abren, y su nostalgia se deja sentir a través de la presencia de los encajes típicos de su país natal.-
Al estudiar estas obras más de una vez nos vino en mente el realismo mágico, aunque es muy obvio que aquí no existe ni dislocación de tiempo ni de lugar. Existe, sí, magia, porque esta pintura tiene poder de seducción, por todo lo que visualmente expresa y por todo lo que calla. Morandi decía que "nada es más abstracto, más irreal que lo que se ve". Miranda ha logrado sacar de la abstracción y de la irrealidad lo que miramos sin ver.
GROUP EXHIBITIONS/ EXPOSICIONES GRUPALES:
Magister Gallery (Asunción-Paraguay); Nuevospacio Gallery (Asunción-Paraguay); Fábrica Gallery (Asunción-Paraguay); Artesanos Gallery (Asunción-Paraguay); Viejo Galpón Gallery (Asunción); Atelier Myriam Mattos (Montevideo-Uruguay); Hall Banco do Brasil (Sta.María-Brasil); Asunción Cultural Center (Asunción-Paraguay); Moscoso Gallery (Washington DC–USA); Ana Scappini Gallery (Asunción); Stricoff Fine Art (NY–USA); Multiarte Gallery (Asunción); Cantegrill Country Club (Punta del Este-Uruguay); Galería Latina (Punta del Este – Uruguay); National Building Museum (Washington DC-USA); Arte Contemporáneo del Paraguay (Toulouse – France) ; Art Expo New York (NY-USA) ; Laval Museum (Laval-France); Old Bridge Library (New Jersey-USA); Lincoln Center (NY-USA); CCPA; Cruzada Internacional de Arte (Bogotá-Colombia); Arte Actual Gallery (Asunción-Paraguay); Hotel Olimpia (Seul-South Korea); Yongdusan Gallery (Busan-South Korea); Centro Cultural Jeonju ( Jeonju-South Korea); Hotel Seowipo (Seowipo-South Korea); Monserrat Gallery (NY–USA); Emblerart Gallery (Fort Lauderdale-USA); Collection Privee Fine Arts (Miami-USA); Lurie Fine Arts (Boca Raton – USA); miArte Gallery (Coral Gables-USA), SeJong Center (Seoúl – South Korea); Sheraton Hotel (San Juan -Puerto Rico); Caesarea Gallery (Boca Raton-USA); miArte Gallery (Coral Gables-USA); Bellarte Gallery (Seoul-South Korea); Suyu Gallery (North Miami-USA); Zahara Gallery (Coral Gables-USA); LaMer Gallery (Seoul-South Korea);Exor Galleries (Boca Raton-USA); Tower Theatre (Miami-USA).-
1998 .- Realization and installation of the painting “La Santisima Trinidad” to "Queen of Apostles Catholic Church" , Alexandria ,VA -USA
PERSONAL EXHIBITIONS/ EXIBICIONES INDIVIDUALES:
1989 * Nuevospacio Gallery (Asunción -Paraguay).-
1990 * Fábrica Gallery (Asunción -Paraguay).-
1991 * Viejo Galpón Gallery (Asunción -Paraguay).-
1992 * Fábrica Gallery; y Artesanos Gallery (Asunción -Paraguay).-
1993 * Fábrica Gallery (Asunción-Paraguay) y OEA (Washington DC – USA).-
1994 * Fábrica Gallery (Asuncion -Paraguay)
1995 * EOFULA (Washington DC – USA); y Scappini-La Marca Gallery (Asunción).-
1996 * Van Goethem Fine Art (Washington DC – USA).-
1997 * Pequeña Galería (Asunción -Paraguay).-
1998 * Pequeña Galería (Asunción -Paraguay), y Pequeña Galería (Giclees).-
1999 * Pequeña Galería (Asunción -Paraguay) y Galeríe Salucci (Paris – France).-
2000 * Citibank Cultural Center (Asunción-Paraguay).-
2001 * Gana Art Center (Seoúl – South Korea).-
2002 * Fundación Raíces (San Lorenzo-Paraguay).-
2003 * Citibank Cultural Center, (Asunción-Paraguay) y Hernán Miranda Gallery (Asunción-Paraguay).-
2004 * Jadite Gallery (NY – USA).-
2005 * OEA (Washington DC – USA) y Jadite Gallery (New York-USA).-
2006 Galería Bellarte (Seoúl – South Korea); y Seoúl Arts Center (Seoúl – South Korea).-
2007 * Paraguay Embassy (Paris–Francia); Museum of Pérouges (Ain - France); CCPA (Asuncion -Paraguay) y Galerie au Theatre d' Hesdin - (Hesdin - France).-
2008 * Regions Bank (Coral Gables-USA); Bellarte Gallery (Seoul –South Korea); Zahara Gallery (Coral Gables-USA ); OAS (Washington DC –USA); y Exor Galleries (Boca Raton –USA).-
Contacto: hernanmiranda1@hotmail.com - [ hernanmiranda1@live.com ]
MIRANDA, HERNÁN
Nació en Concepción en 1960. Dibujante y pintor hiperrealista, ganó su primera mención en un concurso organizado por Galería Magister en 1987.-
En sus comienzos pintaba caserones coloniales, edificios y últimamente se volcó decididamente a la naturaleza muerta, pintando frutas y otros elementos de uso cotidiano. Expone asiduamente en galerías de los Estados Unidos y otros países.-
(Fuente: “DICCIONARIO DE LAS ARTES VISUALES DEL PARAGUAY”, de LISANDRO CARDOZO, editado con los auspicios del FONDEC ( FONDO NACIONAL DE LA CULTURA Y LAS ARTES), Asunción-Paraguay 2005).-