Nació en Málaga (España) 1756
Falleció en Lima (Perú) 1824
DE RIBERA Y ESPINOZA DE LOS MONTEROS, LÁZARO
Gobernador e Intendente de la Real Hacienda del Paraguay. Natural de Málaga, España. Descendía de una noble familia. Hijo de Pedro Antonio dé Ribera y de Francisca Cayetana Espinozá de los Monteros. Fue enviado a Chiloé en una comisión, y esta remota provincia despertó su curiosidad, redactó sus impresiones en un Discurso. Pasó luego a Lima y a la provincia de Mojos en carácter de gobernador. En 1784 integró una comisión de demarcadores de límites entre ambas coronas, en Montevideo.
Fue designado en 1795, gobernador e intendente de la Real Hacienda del Paraguay. Dejó el gobierno en 1806, cuando fue reemplazado por Bernardo de Velazco. Señala Udaondo que "jamás la provincia del Paraguay había conocido época más brillante que la de Ribera".
Casó con doña Francisca de Sarratea, de Ilustre familia en Buenos Aires.
Santiago de Liniers lo nombró ante la corte de Río de Janeiro embajador. Prosigue Udaondo señalando que "los últimos antecedentes que se tienen de este prestigioso militar e ingeniero, son los que constan en 1812, cuando solicitó su jubilación por hallarse enfermo mientras se encontraba desempeñando la Intendencia de Huancavélica.
Julio César Chaves señala que su gestión se centró en conocer muy en serio los problemas de la provincia. Levantó un censo general que arrojaba una población de 97.480 habitantes con cincuenta y tres parroquias de blancos y mestizos, catorce reducciones de indios y tres pueblos de mulatos libres, aunque según acota Luis G. Benítez, "este censo no contemplaba los diez pueblos de origen franciscano ni a San Joaquín, San Estanislao y Belén, de origen jesuítico."
"Todas las iniciativas de la ilustración aparecen en sus escritos y en primer término el endiosamiento de la persona real. "Por eso se considera a Ribera, vocero genuino del absolutismo que dominara España en el siglo XVIII. Le cupo enfrentar nuevamente la penetración portuguesa en jurisdicción española. Intentó desalojarlos de Coimbra pero fracasó. Los expedicionarios al regreso establecieron el fuerte de San José del Apa. Su guarnición fue al poco tiempo atacada y exterminada, librándose sólo el Alférez Fulgencio Yegros.
Durante el gobierno de Ribera se dio impulso a los astilleros de Angostura y Pilar para la construcción de navíos.
Es importante rescatar de este gobernador del Paraguay sus afanes educativos. Chaves invoca su pensamiento señalando que "la buena educación es absolutamente necesaria y que todos los individuos que componen una sociedad deben saber leer, escribir y contar, puesto que estos conocimientos pueden influir en el acierto de los negocios públicos y privados. Todo esto se consigue por medio de buenas escuelas de primeras letras."
En el año 1797, a raíz de un problema con los alumnos del Seminario, propuso al Rey la supresión radical de todas las escuelas para formar una sola que funcionase en Asunción bajo su dirección personal y donde grupo de niños del interior seleccionados, serían educados en los preceptos de nuestra santa religión, el amor al orden y la sumisión a las leyes. Estos jóvenes una vez instruidos harían de agentes multiplicadores en sus respectivos pueblos.
Lázaro de Ribera adoptó la Cartilla Real que había difundido en estas regiones el Arzobispo de Charcas, San Alberto. Era el modelo de catecismo con preguntas y respuestas, consagrado por la Iglesia Católica para la enseñanza de la religión, utilizado por el gobernador, para que "los niños de la provincia del Paraguay se instruyan en las primeras obligaciones de un buen Vasallo."
Casi una década había gobernado Ribera con mano firme la provincia, cuando en el año 1804 hubo una conspiración del pueblo para arrojarlo del poder por su modalidad verticalista, como típico discípulo del despotismo ilustrado.
El había denunciado la persistencia de las ideas comuneras latentes en la provincia que sobrevivían en la memoria colectiva.
Fuente: FORJADORES DEL PARAGUAY – DICCIONARIO BIOGRÁFICO. Realización y producción gráfica: ARAMÍ GRUPO EMPRESARIAL. Coordinación General: Ricardo Servín Gauto. Dirección de la obra: Oscar del Carmen Quevedo. Tel.: 595-21 373.594 – correo: arami@rieder.net.py– Asunción-Paraguay 2001 (716 páginas).
