BOTÓN DE PÁNICO EN ACCIÓN
Por ILDE SILVERO
ilde@abc.com.py
Cuando ya estábamos en el punto máximo de tensión social, alguien tocó el botón de pánico y una inesperada tranquilidad serenó los espíritus de la ciudadanía. La sangre no llegó al río pero quedaron por el camino varios heridos, contusos y mucha gente desorientada. El acuerdo bilateral de Itaipú explotó pero aún quedan responsables impunes.
En la primera fase hubo una cadena de errores graves: negociaciones secretas entre altos funcionarios brasileños y paraguayos, la aceptación del acuerdo pese a la negativa del presidente y de los técnicos de la Ande, la intromisión de un muchacho desconocido que invocando el respaldo del vicepresidente Hugo Velázquez metía o sacaba artículos del acuerdo, la firma del documento en la clandestinidad renunciando a legítimos derechos paraguayos, favoreciendo a Brasil y perjudicando a la Ande y el posterior intento de justificación del presidente Marito calificando a los paraguayos de peajeros y pillos.
En la segunda fase, se activó la prevención contra desastres: la ciudadanía reaccionó airadamente contra la entrega de nuestra soberanía, hubo múltiples manifestaciones de repudio y el Congreso inició sus sesiones de rechazo al acuerdo. Acosado y acusado por todos, Marito tuvo que destituir al canciller nacional, al director de Itaipú, al presidente de la Ande y al embajador ante Brasil.
Luego viene una tercera fase muy complicada: la prensa descubre que el vicepresidente Velázquez había tenido activa participación en las negociaciones a través de un abogado amigo a quien calificó como su hombre de confianza. Aquí apareció la causa de fondo: vender la energía de la Ande a empresas privadas brasileñas representadas por el entrometido personaje.
En la cuarta escena, repentinamente el Frente Guasu y el movimiento cartista HC anuncian el juicio político a Abdo Benítez, como ya lo había exigido el PLRA que propuso destituir también a Velázquez. En Cancillería anulan el acta de la polémica. Anuncian que ya hay votos suficientes en Diputados para iniciar el juicio, pero en el Senado solo quieren destituir a Velázquez pero no a Marito. En simultáneo, informan que en Brasil detienen a Darío Messer, el hermano de alma de Cartes. El líder de Honor Colorado hace las cuentas, evalúa los pro y los contra y decide dar un paso atrás ordenando a sus parlamentarios olvidarse del juicio político.
En la quinta fase, aquietadas las aguas, Marito brinda una declaración oficial en el Palacio de López, con muchos agradecimientos a tirios y troyanos y una previsible reafirmación de que seguirá combatiendo la corrupción “caiga quien caiga”. Llamativamente, no estaban presentes su hermano Beningo López ni el vicepresidente Velázquez; sí estaban aplaudiendo algunos parlamentarios imputados por la justicia.
Y así estamos ahora; no sabemos con exactitud qué pasó, evidentemente hay culpables que no fueron sancionados, el Presidente no tuvo el coraje de dar señales siquiera de la responsabilidad del Vicepresidente, hubo un intento de traición a la patria que sigue impune y parece que nos quedamos con cierto favor a pagar a Jair Bolsonaro. Es lo que hay.
Fuente: ABC Color
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Sección OPINIÓN
Domingo, 04 de Agosto de 2019
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