La Rosada: Fundición de hierro.
de JOSÉ ALCIDES BÁEZ.
¿Sabías que en plena selva paraguaya existió una fundición de hierro que fabricaba de todo?
Hubo un tiempo en que el Paraguay forjaba su destino con hierro.
En medio del monte, entre fuego y selva, se levantó una de las fundiciones más imponentes de Sudamérica.
Se llamaba La Rosada, y todo lo que salía de ahí llevaba el sello de un país que no se rendía.
Desde ollas hasta cañones. Desde tornillos hasta el temido “Cristiano”.
La Rosada fue el corazón industrial del Paraguay… y también un símbolo de resistencia.
Mientras el país enfrentaba la guerra más sangrienta de su historia,
La Rosada seguía produciendo.
Fuego, hierro y orgullo.
hasta el último día.
No era solo industria.
Era soberanía.
Era orgullo.
Era el corazón de hierro del Paraguay.
Hoy solo quedan ruinas,
pero su historia sigue encendida.