ELECCIONES EN MEDIO DE LA PODREDUMBRE POLÍTICA

Por ANDRÉS COLMÁN GUTIÉRREZ

Twitter: @andrescolman

Hay quienes sostienen que el vendaval de audios de conversaciones telefónicas filtradas por la prensa esta semana no es ninguna sorpresa. ¿Acaso no saben que en el Paraguay la Justicia es corrupta hasta el caracú y es manejada por la mafia política?

Sí, claro. Pero no es lo mismo tener una idea genérica que poder comprobar puntualmente, con voces reconocibles y tan evidentes, cómo se manejan los hilos del poder mafioso por parte de quienes han sido elegidos para decidir los destinos del país. Y sí, al menos para mí es una sorpresa escuchar en los audios a personas de quienes aún esperaba actitudes de principios diferentes traficando influencias y programando almuerzos con los viejos bandidos.

Hay quienes dicen, también, que la aparición de los centenares de audios en vísperas de elecciones constituye una maniobra política para desprestigiar al sector oficialista. Claro que sí. Es obvio que se trata de un trabajo de espionaje de sus adversarios políticos, pero eso no le quita valor a la información que estos audios proveen. Revelan de manera contundente lo podrido que está todo.

Ya nadie puede estar seguro ni confiar en el Poder Judicial, ni en la mayoría de los legisladores, ni en las autoridades del Ejecutivo que postulan al impune senador Óscar González Daher como el tercero en su lista oficial para el Senado. Ni en el candidato presidencial que lo defiende públicamente como el "árbol que da frutos".

Hay quienes buscan desviar la atención, echando la culpa sobre los periodistas que se prestan al juego de publicar grabaciones de conversaciones telefónicas privadas obtenidas ilegalmente, olvidando que los principios universales de ética periodística establecen que el interés público siempre debe primar sobre lo privado. Si el contenido de los audios interesa a la sociedad (y en este caso, vaya que sí) es un deber moral de cualquier informador sacarlos a luz, aún a riesgo de ser querellado o encarcelado. Eso pasó con los Papeles del Pentágono, Watergate, WikiLeaks y los Panamá Papers, y en casos locales como el "dulce de mamón con palito" y el programa de tevé El Ojo. Ahora también.

Hay quienes creen que todo el escándalo desatado no tendrá ninguna incidencia en los resultados de las elecciones internas de este domingo. Suponen que estamos tan anestesiados, que ya nada nos conmueve. O como diría un irónico amigo humorista: "indígnese, escandalícese y acuda el domingo a votar por su corrupto preferido".

Puede que sí, puede que no. Desde los días del Marzo Paraguayo y de #UNAnotecalles he aprendido también a no perder las esperanzas en nuestra gente, especialmente en los jóvenes. Puede que ocurra esta vez, puede que sea la próxima o más adelante, pero en algún momento nos sacudiremos la indiferencia y saldremos a cambiar nuestro destino.

Fuente:  ULTIMA HORA (ONLINE)

Sección OPINIÓN

Sábado, 16 de Diciembre de 2017, 02:00

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