LUNA ASUNCENA Luna asuncena, dulce testigo de mis amores,
tus resplandores fueron amigos de aquel querer,
hoy que las nubes cubrieron todos mis esplendores
mi vida sigue sin más fulgores, sin luz, sin fe.
Cuando al ocaso se asoma bella tu paz luciente
mi alma destella con el recuerdo de mi Asunción
que en mi pasado abrieron días de amor riente
y sus dulzores atesoraba mi corazón.
Luna asuncena, radiante reina del vasto cielo
como una ofrenda esta nostalgia te brindo a ti,
cual tibio rezo que se hace un verso de mis anhelos
de que ella vuelva bajo tu lumbre juntito a mí.