LA REVOLUCI脫N COMUNERA 1721-1735
Por HERIB CABALLERO CAMPOS
COLECCI脫N GUERRAS Y VIOLENCIA POL脥TICA EN EL PARAGUAY
N脷MERO 3
漏 El Lector (de esta edici贸n)
Director Editorial: Pablo Le贸n Buri谩n
Coordinador Editorial: Bernardo Neri Farina
Director de la Colecci贸n: Herib Caballero Campos
Dise帽o de Tapa y Diagramaci贸n: Jorge Miranda Estigarribia
Correcci贸n: Rodolfo Insaurralde
I.S.B.N. 978-99953-1-330-2
Hecho el dep贸sito que marca la Ley 1328/98
Esta edici贸n consta de 15 mil ejemplares
Asunci贸n 鈥 Paraguay
Diciembre, 2012 (92 p谩ginas)
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CONTENIDO
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Contenido
Pr贸logo
Introducci贸n
Cap铆tulo I
Los motivos de la Revoluci贸n
La situaci贸n econ贸mica
El Puerto Preciso
La falta de moneda
La situaci贸n demogr谩fica
Cap铆tulo II
Un mal gobierno
Diego de los Reyes Balmaceda
Sus arbitrariedades
La represi贸n contra los Cabildantes
La denuncia del Cabildo
El juez pesquisidor
Cap铆tulo III
Estalla la Revoluci贸n
La destituci贸n de Reyes Balmaceda
El gobierno de Jos茅 de Antequera y Castro
La reacci贸n del Virrey
La Batalla de Tebicuary
Antequera rumbo al Alto Per煤
El gobierno de Mart铆n de Bar煤a
Cap铆tulo IV
La etapa "popular" de la Revoluci贸n 1731-1735
El gobierno del Cabildo
La ejecuci贸n de Antequera
La Batalla de Guayaibity
La Batalla de Tabapy
Ajusticiados y descuartizados
Conclusiones
Cronolog铆a
Bibliograf铆a
Anexos
El autor
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PR脫LOGO
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聽聽聽聽聽聽聽聽 La Revoluci贸n Comunera es uno de los hechos m谩s mentados pero menos conocidos en la historia del Paraguay, pese a que hay buenos trabajos publicados al respecto.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Este libro de Herib Caballero Campos, como parte de la Colecci贸n Guerras y violencia pol铆tica del Paraguay, es una contribuci贸n oportuna para que el com煤n de la gente comprenda mejor lo que fue realmente aquello y lo que signific贸 propiamente como proyecci贸n en el tiempo posterior.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En unas breves p谩ginas, Caballero Campos compendia el tema de manera tan sencilla pero ilustrativa, que al lector le har谩 comprender cabalmente de qu茅 se trat贸 en verdad la Revoluci贸n de los Comuneros y el protagonismo que les cupo a personalidades c茅lebres cuyo nombre est谩 en la memoria del p煤blico pero cuyo verdadero papel no es demasiado comprendido m谩s all谩 del c铆rculo de los historiadores y de los iniciados en la investigaci贸n sobre la memoria nacional.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Este es el caso, por ejemplo, de Jos茅 de Antequera y Castro, que termin贸 ejecutado despu茅s de aquella gesta que tuvo varios componentes como causa y efecto. Antequera, en su papel del juez pesquisidor enviado por la Audiencia de Charcas, hab铆a llegado a Asunci贸n el 23 de julio de 1721 para iniciar un sumario con el fin de comprobar si eran ciertos o no los cargos que le ciudadan铆a le endilgaba al gobernador Reyes de Balmaceda, acusado de mal gobierno.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El autor divide muy bien los cap铆tulos del libro, lo cual posibilita el ordenamiento del relato y la mejor comprensi贸n de los acontecimientos que ocasionaron el levantamiento comunero, el conflicto en s铆 y, luego, las consecuencias que derivaron de aquello que fue una verdadera guerra civil.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Por ejemplo, Caballero resalta en su entera dimensi贸n el rol que desplegaron los miembros de la Compa帽铆a de Jes煤s en la Revoluci贸n, que tuvo como una de las causas visibles las disputas por la posesi贸n de ind铆genas en el marco del sistema de Encomienda.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Uno de los aspectos destacados de esta obra es la aclaraci贸n que hace Herib Caballero Campos respecto a c贸mo debe ser interpretada hist贸ricamente la Revoluci贸n Comunera.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El mismo se帽ala que "partimos en esta obra del principio de que la Revoluci贸n Comunera del siglo XVIII, fue un movimiento que se rebel贸 contra el mal gobierno del representante del rey, nunca contra el rey Felipe V o la propia Monarqu铆a".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Por lo que -agrega el historiador- no se puede considerar que este movimiento revolucionario pueda ser visto como un proceso pro-independentista. "Al contrario, debe ser analizado como lo que fue, un movimiento resultado de la extrema pobreza del Paraguay, cuyos habitantes ten铆an a la tierra como 煤nico medio de lograr una mediana subsistencia para sus familias".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Aqu铆 est谩 la Revoluci贸n Comunera, en un estupendo compendio para que los seguidores de esta gran Colecci贸n comprendan acabadamente de qu茅 se trat贸 aquello.
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Bernardo Neri Farina
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INTRODUCCI脫N
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聽聽聽聽聽聽聽聽 En la historiograf铆a paraguaya se ha se帽alado como fecha de inicio de la Revoluci贸n Comunera del siglo XVIII al a帽o 1717, por ser en el cual entr贸 a gobernar don Diego de los Reyes Balmaceda. En esta obra se sigue la posici贸n de que la Revoluci贸n se inici贸 en 1721, cuando los vecinos apoyaron la destituci贸n de Reyes Balmaceda por parte del juez pesquisidor remitido por la Real Audiencia de Charcas, qui茅n ante presencia del Cabildo de Asunci贸n procedi贸 a dar cumplimiento a las disposiciones emanadas del m谩s alto Tribunal del cual depend铆a la Provincia del Paraguay a fines del siglo XVIII.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En los primeros a帽os de la Revoluci贸n, los vecinos principales de la ciudad de Asunci贸n fueron los protagonistas del proceso en el cual se rebelaron en contra de los que ellos consideraban un trato abusivo y arbitrario por parte del gobernador Reyes Balmaceda, en el af谩n del mismo de congraciarse con los jesuitas, con cuyos principales referentes a nivel del Paraguay se encontraba emparentado.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En este primer per铆odo de la Revoluci贸n que se extiende hasta 1731, la principal reivindicaci贸n fue el de los principales vecinos de Asunci贸n para tener acceso al derecho de recibir ind铆genas en Encomienda al igual que recibir tierras que en ese momento escaseaban, frente al acaparamiento de ambos recursos por parte de la Compa帽铆a de Jes煤s que sosten铆a que los ind铆genas sometidos al r茅gimen de sus reducciones ten铆a una mejor calidad de vida, pues los indios encomendados a los asuncenos eran brutalmente explotados, alejados de sus hogares para el laboreo de la yerba mate o para trasladar mercader铆as hasta la lejana Buenos Aires.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El segundo per铆odo comprendido entre 1731 y 1735 fue un per铆odo en el cual los aparceros y los arrendatarios cobran protagonismo en el proceso revolucionario y exigen con vehemencia tambi茅n el acceso a la tierra ya sea para la agricultura como para la ganader铆a.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Por 煤ltimo cabe la aclaraci贸n que partimos en esta obra del principio de que la Revoluci贸n Comunera del siglo XVIII, fue un movimiento que se rebel贸 contra el "mal gobierno" del representante del rey, nunca contra el rey Felipe V o la propia Monarqu铆a. Por lo que no consideramos que este movimiento revolucionario pueda ser visto como un proceso pro-independentista, sino al contrario debe ser analizado como lo que fue un movimiento resultado de la extrema pobreza del Paraguay, cuyos habitantes ten铆an a la tierra como 煤nico medio de lograr una mediana subsistencia para sus familias.
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CAPITULO 1
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LOS MOTIVOS DE LA REVOLUCI脫N
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聽聽聽聽聽聽聽聽 En este cap铆tulo procederemos a explicar la situaci贸n econ贸mica en la que se encontraba el Paraguay entre el siglo XVII y comienzos del siglo XVIII, de modo a que se comprenda en su real dimensi贸n las reivindicaciones de los Comuneros del Paraguay.
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聽聽聽聽聽聽聽聽 LA SITUACI脫N ECON脫MICA
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Al fracasar en encontrar minas de oro y plata en el Paraguay los colonos espa帽oles se dedicaron a la producci贸n de productos agr铆colas, primeramente vino que fue r谩pidamente sustituido por el producido en el Cuyo, luego la producci贸n azucarera cobr贸 fuerza, pero la misma entr贸 en decadencia debido a que desde la suspensi贸n el comercio entre el puerto de Buenos Aires y la Pen铆nsula, los comerciantes bonaerenses encontraron como m茅todo de aprovisionamiento del contrabando desde Portugal y espec铆ficamente desde la Colonia de Sacramento ubicada en el actual territorio del Uruguay.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Si bien es cierto que exist铆a en el Paraguay una econom铆a de subsistencia, como pod铆a progresar una provincia fronteriza, sin circulaci贸n de moneda met谩lica con lo cual nadie pod铆a ahorrar, adem谩s los productos que se importaban desde Espa帽a que llegaban eran de mala calidad y car铆simos y con la competencia en el 煤nico rubro rentable, la yerba mate, por parte de los jesuitas, con la constante movilizaci贸n de los varones, hac铆a los presidios, o en las expediciones contra los ind铆genas chaque帽os o los avances bandeirantes
聽聽聽聽聽聽聽聽 Para el historiador paraguayo Hip贸lito S谩nchez Quell, la decadencia econ贸mica de la Provincia fue la consecuencia de "... la divisi贸n de la provincia al comenzar el siglo XVII, con la consiguiente p茅rdida del litoral atl谩ntico; las incesantes luchas contra los terribles guaicur煤es al oeste y los arteros bandeirantes al este; el apoderamiento de las riquezas b谩sicas del Paraguay realizado por los jesuitas; los gobernadorcillos mediocres, venales o indolentes...". Ante tan dram谩tica situaci贸n era muy dif铆cil que alg煤n funcionario, ni siquiera los obispos tengan intenciones de asumir sus cargos en el Paraguay y si llegaban buscaban lo m谩s pronto posible salir de ella. Al respecto afirma Pedro Vives Azancot, que:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "...deb铆a ser dif铆cil convencer a ning煤n prelado para que se decidiera a quedarse en un lugar tan alejado y con la econom铆a quebrada. A fines del siglo XVII Paraguay, por ejemplo, hab铆a perdido su antigua posici贸n de exportadora de vinos, limit谩ndose a cubrir los mercados de Asunci贸n y Villa Rica. En 1664 consta ya el paso de vinos de Cuyo y la Rioja por Santa Fe con destino a Buenos Aires, en tanto Paraguay se dispon铆a resignadamente a hacer girar su econom铆a en torno a la yerba...".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Desde la llegada de los jesuitas al Paraguay en 1608, no transcurrieron muchos a帽os para que los mismos consiguieran, por razones de evangelizaci贸n, que sus ind铆genas no presten servicio personal a los encomenderos asuncenos, para lo cual los encomendaron al propio Rey. Para pagar la encomienda establecida, en moneda met谩lica, consiguieron el privilegio de exportar yerba, de esa forma se inici贸, una competencia para el 煤nico rubro rentable que les quedaba a los habitantes de la Provincia del Paraguay. Por lo que, seg煤n Efra铆m Cardozo, "La aparici贸n de los jesuitas en el mercado de la yerba fue un golpe m谩s que se descarg贸 sobre la ya abatida provincia civil del Paraguay. Los jesuitas no pagaban sisas, alcabalas ni arbitrios; para ellos no hubo puerto preciso; la mano de obra era gratuita, lo mismo que el flete". Con respecto al Puerto Preciso nos referiremos al mismo en el siguiente apartado.
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聽聽聽聽聽聽聽聽 EL PUERTO PRECISO
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聽聽聽聽聽聽聽聽 El Puerto Preciso fue un sistema de recaudaci贸n de recursos a los que fueron sometidos los productos exportados por el Paraguay. Dicho sistema fue constantemente denunciado por la Provincia del Paraguay, pero el mismo fue levantado reci茅n en 1778 con el R茅gimen de Libre Comercio.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El Puerto Preciso comenz贸 cuando en "... 1664 cuando el gobernador de Buenos Aires Mart铆nez Salazar, propuso gravar la yerba paraguaya a fin de arbitrar recursos para fortificar la ciudad amenazada por los piratas ingleses". El 4 de julio de 1681, el capit谩n Juan Pati帽o public贸 la C茅dula Real, manifestando que:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "...se public贸 una C茅dula Real de 26 de febrero del a帽o pasado de mil seiscientos y ochenta, por lo cual manda su Magestad que de la yerba (moneda usual de esta ciudad y Provincia) que bajare a la ciudad de Santa Fe de la Vera Cruz se pagase a sus Reales Cajas por cada arroba y de la que pasase a las Provincias del Tucum谩n y Per煤 se pagase a peso de ella con cuya noticia el Cabildo de esta ciudad en el acuerdo referido...".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Los arbitrios eran grav谩menes destinados a financiar y mantener las edificaciones militares en Buenos Aires y una tropa de 200 soldados en Santa Fe para que luchen contra las invasiones ind铆genas de su regi贸n. Est谩 situaci贸n hac铆a que los paraguayos financiasen con sus impuestos las crecientes necesidades de defensa de las provincias de abajo, "En 1701 se duplic贸 el impuesto para el costeamiento de otras fortificaciones y guerras, particularmente para la defensa de las ciudades de Santa Fe y Tucum谩n contra los indios abipones, de Chile contra los araucanos y de las costas del Sud contra los corsarios ingleses...".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Es decir que no importaba la situaci贸n econ贸mica ca贸tica del Paraguay, su 煤nico producto rentable deb铆a contribuir al sostenimiento de las defensas militares de otras regiones mientras sus habitantes cumpl铆an con esa defensa a "su costa y minsi贸n", esto es pagando de su propio dinero, las armas, la cabalgadura y la alimentaci贸n que deb铆a consumir mientras hac铆a la guardia en los Presidios o Fortines establecidos a lo largo del r铆o Paraguay. Dichos Presidios ten铆an por objetivo detener el ataque de los ind铆genas del Chaco que no se hab铆an sometido al poder espa帽ol y hac铆an invasiones eventuales para robar ganado y las cosechas as铆 como armas y cualquier otro elemento que les fuese 煤til.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En pocos a帽os, los efectos de esta nueva carga impositiva tuvo sus efectos negativos en la econom铆a provincial paraguaya, es as铆 que en el a帽o de 1714 el Cabildo de Asunci贸n informa " de la suma pobreza y necesidades que le ha puesto el importe de la sisa que se cobra de la yerba, moneda de su provincia, en la ciudad de Santa Fe, suplicando a su S.M., se sirva quitarla". Pero evidentemente, no hubo respuesta. Carlos Pussineri Scala, cita que el Cabildo de Asunci贸n el 16 de junio de 1732, es decir m谩s de 15 a帽os de la petici贸n anterior, afirmaba en un acuerdo capitular en plena Revoluci贸n de los Comuneros: "que por cuanto a mucho tiempo corre en la ciudad de Santa Fe de la Vera Cruz la cobranza de la sisa impuesta en los frutos y monedas de esta Provincia yerba, tabaco, az煤car, con t铆tulo o motivo de ser de su producci贸n para la defensa y reparo de dicha ciudad, cuyos efectos de m谩s de advertido tan perjudiciales....".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Debemos recordar que este pedido fue emitido dentro de la 煤ltima etapa de la Revoluci贸n Comunera, y por ende no fue nuevamente levantado tan gravoso impuesto. As铆 en 1746 el cabildo asunceno nuevamente solicit贸 la supresi贸n del Puerto Preciso, y en este contexto ya obligatorio, como consecuencia de la Revoluci贸n de los Comuneros, disposici贸n establecida por el "pacificador" Bruno Mauricio de Zavala en 1735.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Seg煤n Juan Bautista Rivarola Paoli, el pago de los arbitrios en Santa Fe fue levantado en 1718, pero "en 1726 se establec铆an nuevos arbitrios sobre las exportaciones del Paraguay a Santa Fe, para costear la defensa de dicha ciudad y de Buenos Aires....".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Una de las razones expuestas por los santafesinos es la extrema pobreza de su comarca, por eso necesitaban de la contribuci贸n de Asunci贸n. El 7 de septiembre de 1740, se ley贸 un Auto de Bruno Mauricio de Zavala que dispuso el cobro de los arbitrios determinados en la C茅dula Real de 1726. Por lo tanto un tercio de yerba deb铆a contribuir con tres reales, dos a la entrada y uno a la salida, el tabaco y el az煤car por arroba dos reales a la entrada y medio real a la salida. Con esta medida se asfixiaba y dificultaba a煤n m谩s cualquier posibilidad de progreso de la provincia del Paraguay, pero eso no signific贸 en ning煤n momento que se dejara de producir al contrario la producci贸n continuaba.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Si bien la yerba era importante como rubro de producci贸n, y de hecho era el primero por el volumen de producci贸n, el tabaco ya cobraba su importancia a comienzos del siglo XVIII, as铆 el tabaco iba de contrabando hacia Chile, donde la corona espa帽ola ya lo hab铆a estancado.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Menciona Stapff, que el tabaco era introducido desde el Tucum谩n, entonces deb铆a provenir desde Santa Fe o era enviado por comerciantes bonaerenses. De acuerdo a los registros de contratos p煤blicos, del Archivo Nacional de Asunci贸n, Rivarola Paoli afirma que "otros productos que exporta el Paraguay son el tabaco, el az煤car y la miel de ca帽a, sobre los cuales existen numerosos contratos celebrados con vecinos de Santa Fe y Buenos Aires y asentados en los protocolos de los notarios asuncenos de la segunda mitad del siglo XVII y comienzos del XVIII".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Pero no todos en la Provincia cre铆an que la yerba era positiva el padre jesuita Bartolom茅 Jim茅nez afirmaba la extracci贸n de la misma era perjudicial para los ind铆genas pues los mismos eran brutalmente explotados, al respecto escribi贸, el "...la explotaci贸n tan desmedida que se hac铆a de la yerba mate, hab铆a sido la causa de la calamitosa desaparici贸n de poblaci贸n india y el estado de postraci贸n en que se encontraba la provincia. Debido a ello se hab铆a dejado a un lado la explotaci贸n de otros productos (az煤car, tabaco, algod贸n y lienzo) que antes hab铆a supuesto a la provincia muy buenos dividendos...".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Pero son constantes las quejas, tanto de los gobernadores, el cabildo y los propios vecinos de la situaci贸n econ贸mica. Para el obispo Manuel Antonio de la Torre, luego de su visita a su jurisdicci贸n, afirmaba en su informe al Rey que el beneficio de la yerba del Paraguay "tan ponderada en muchas historias, que parece hacen competencia con el cerro de Potos铆" es sin embargo "su mayor maleficio, su dura esclavitud y su perdici贸n".
聽聽聽聽聽聽聽聽 En conclusi贸n, la econom铆a provincial paraguaya durante la primera mitad del siglo XVIII, estaba orientada hacia la subsistencia de la poblaci贸n, la yerba primero y luego el tabaco fueron utilizados como rubros exportables, que se intercambiaban por las mercader铆as y art铆culos que se precisaban y las negociaciones se realizaba con los comerciantes bonaerenses.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Adem谩s, es fundamental resaltar que "el tabaco y la yerba eran la moneda tipo, a la cual se relacionaban los dem谩s precios de los distintos art铆culos que tambi茅n oficiaban de monedas".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Como menciona Agnes Stapff el Paraguay y Tucum谩n eran zonas subdesarrolladas en el continente sudamericano de mediados del siglo XVIII, en las que la econom铆a monetaria a煤n no hab铆a llegado y por sobre todo con una producci贸n sustentada pr谩cticamente en un solo producto rentable que debido a las gabelas y a la intermediaci贸n no representaba ganancias significativas para la provincia y sus habitantes.
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聽聽聽聽聽聽聽聽 LA FALTA DE MONEDA
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Una de las principales razones de la pobreza econ贸mica en la que estaba sumida la Provincia del Paraguay a comienzos del siglo XVIII se puede explicar en la prohibici贸n de la circulaci贸n de moneda met谩lica. Esta prohibici贸n estaba enmarcada dentro del mercantilismo, teor铆a econ贸mica que imperaba bajo los Austrias y tambi茅n bajo los primeros Borbones. "El mercantilismo significa la traslaci贸n del af谩n de lucro capitalista a la pol铆tica (...) premisa de la pol铆tica mercantilista fue el aprovechamiento del mayor n煤mero posible de fuente con posibilidad lucrativa en el propio pa铆s".
聽聽聽聽聽聽聽聽 El mercantilismo, buscaba lograr esto mediante el fomento de la industria nacional, as铆 como tambi茅n, a trav茅s de evitar que el numerario del pa铆s salga hacia otras potencias. En el caso del Paraguay, al no existir oro ni plata no circul贸 moneda sellada hasta fines del siglo XVIII.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Creemos que lo m谩s pertinente ser铆a sostener que no circul贸 masivamente pues se han encontrado en algunos documentos de la Real Hacienda constancias de algunos pagos aislados en moneda met谩lica, principalmente a partir de la segunda mitad del siglo XVIII, as铆 como la recaudaci贸n en moneda met谩lica. A partir de 1680, con el establecimiento de la Colonia do Sacramento, el contrabando con este enclave portugu茅s fue permanente. A pesar de las constantes prohibiciones, los comerciantes bonaerenses comerciaban en forma permanente con esta colonia hasta su reconquista en el a帽o 1776.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Ya en 1599, el gobernador don Francisco Beaumont y Navarra, busc贸 la introducci贸n de moneda met谩lica a la Provincia del Paraguay, "...impuso a los mercaderes que visitan la provincia, la obligaci贸n de traer dinero efectivo la tercera parte de su caudal, para con 茅l pagar el tercio de los productos que adquieran en el pa铆s..." Esto no se logr贸, y se sigui贸 con el sistema monetario provincial, posteriormente casi cien a帽os despu茅s, el gobernador Sarmiento de Figueroa dispone, el 23 de abril de 1662, que los que van a Santa Fe con hacienda "traigan en plata a esta provincia la cuarta parte de su producto". Posteriormente se intent贸 obligar nuevamente a los comerciantes negociar en plata, pero no se pudo conseguir, en primer lugar debido a la prohibici贸n que se cumpl铆a al pie de la letra en Buenos Aires y en Santa Fe, en ese sentido eran muy celosos, pues les conven铆a, mantener el sistema de pago en especies que les facilitaba conseguir yerba o tabaco m谩s baratos.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Al principio se utilizaron como moneda de la tierra anzuelos, mallas de acero, cuchillos, fanegas de ma铆z y otros productos de acuerdo a lo dispuesto por la ordenanza de Domingo Mart铆nez de Irala, al inicio de la conquista, de acuerde al cronista Juan Francisco de Aguirre, "un anzuelo de malla un maraved铆, un anzuelo de rescate cinco maraved铆ses, un escoplo diez y seis maraved铆s, un cuchillo de rescate veinte y cinco maraved铆s, una cu帽a de la marca cincuenta maraved铆s y una cu帽a de ayunque cien maraved铆s".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Con el incremento productivo la yerba mate, 茅sta se convirti贸 en la Moneda de la Tierra. Ya en 1680 "era la yerba la moneda corriente en la Provincia del Paraguay. En 1680 val铆a en Santa Fe, 8 a 10 pesos plata la arroba...". Aguirre, cita a Don Manuel de Flores, quien al referirse al Paraguay en un escrito al Marqu茅s de Valdeliria afirmaba que "viven sus naturales, como nuestros primeros padres, entre quienes el uso del oro y la plata es desconocido. La hierva y el tabaco son principalmente sus monedas de cambio; por los pa帽etes y bayetas de la tierra, que son los g茅neros que mas acomodan 谩 su pobreza....".
聽聽聽聽聽聽聽聽 En cuanto a los valores del sistema monetario exist铆an diferencias. "En el comercio se habla de pesos: del peso provincial, tambi茅n de peso hueco o peso imaginario, que se divide en ocho reales provinciales. En su relaci贸n con la moneda espa帽ola, cada peso hueco val铆a dos reales plata". Este sistema monetario surgi贸 como medida para responder al sistema comercial, cada producto pod铆a ser utilizado, desde la miel hasta acero basado en un sistema de equivalencias.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Este sistema no s贸lo se daba en el Paraguay, en la zona mexicana se utilizaba como unidad monetaria al igual que en 茅poca de los mayas granos de cacao. "En otros espacios se daba el mismo fen贸meno: productos como las hojas de coca en los Andes, los lienzos de Algod贸n o la Yerba Mate en el Paraguay y otros bienes fueron llamados tambi茅n "monedas", m谩s exactamente, "moneda de la tierra". As铆 mismo siguiendo, a Rivarola en su Historia Monetaria del Paraguay que una arroba de tabaco equival铆a a cuatro pesos corrientes de ocho reales. Una arroba de yerba mate un peso corriente de ocho reales.
聽聽聽聽聽聽聽聽 No debemos olvidar que esta situaci贸n, limitaba en forma considerable el poder adquisitivo de los comerciantes paraguayos, frente a la calidad y precio a ser pagados en Buenos Aires y Santa Fe, as铆 como los impuestos que deb铆an ser satisfechos en moneda met谩lica.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Jos茅 Cardiel al describir la situaci贸n del Paraguay en 1747, escrib铆a que "...en esta gobernaci贸n del Paraguay no corre moneda alguna, gobi茅rnase por trueque las vacas en el Paraguay valen 6 pesos y se compra con yerba, tabaco, algod贸n, miel de ca帽a, az煤car y lienzo de algod贸n...".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Esta situaci贸n, limitaba la posibilidad de comercio, con respecto a otras provincias de la regi贸n y adem谩s los impuestos a la yerba eran: "...impuestos mayores que cualquier otro producto americano, incluso el oro. Las gabelas se multiplicaron cuando la Real Hacienda descubri贸 que la Yerba, por uso extendido e indispensable, su gran volumen y bajo costo, era ideal para los desenfrenos impositivos, pues, su contrabando era pr谩cticamente imposible".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Los habitantes de la provincia, en varias ocasiones solicitaban la acu帽aci贸n de una moneda provinciana, en otras ped铆an auxilios de forma a que parte de los impuestos con los que contribu铆a la producci贸n paraguaya ya sea en Santa Fe o en Buenos Aires, retorne de forma a aliviar la situaci贸n.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Esta limitaci贸n colocaba a los comerciantes asuncenos en una situaci贸n de desventaja frente a los proveedores de Buenos Aires. Ya hemos mencionado en el sub cap铆tulo anterior, la calidad de los productos remitidos al Paraguay, o el hecho de tener que enfrentar el acuerdo entre los comerciantes santafesinos para sacar a un menor precio la yerba remitida, de forma a que los paraguayos puedan cumplir con la sisa a ser satisfecha en ese puerto.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Todos estos elementos, crearon una situaci贸n de total mendicidad, no en el sentido de desamparo ni de ausencia de alimentos, sino el hecho de no poder acceder a un nivel de vida mejor, por encima de esa econom铆a de subsistencia, que para Mora M茅rida era la situaci贸n del Paraguay en la primera mitad del siglo XVII y lo sigui贸 siendo hasta 1779, "la pobreza del pa铆s se infiere de que hasta el a帽o de 1779 no se conoc铆a la moneda. El comercio se reduc铆a a permutas, y los derechos reales del correo se cobraban en yerba, algod贸n y tabaco...". No s贸lo las tarifas de correos, sino tambi茅n los impuestos eran pagados, en productos en especie. Ahora bien en los Libros de Caja que se encuentran en el Archivo Nacional de Asunci贸n hemos constatado algunos casos de pago en plata principalmente en el rubro de alcabalas. Esto viene a indicar que si bien lo com煤n era la moneda provincial excepcionalmente algunos comerciantes o algunos reci茅n emigrados dispon铆an y comerciaban en algunas ocasiones en pesos corrientes de plata, principalmente en la segunda mitad del siglo XVIII.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Esta situaci贸n de subsistencia es grave, si bien la historiograf铆a tradicional quiso ver en esta realidad econ贸mica tan penosa, una situaci贸n de resignaci贸n cristiana, adaptaci贸n al estilo de vida guaran铆, estoicismo en el servicio al Rey, renunciando el ir al Per煤 para defender este territorio de los bandeirantes, no es este el objetivo a aclarar en este apartado ni en esta tesis, sino mencionamos esto para que se tenga en cuenta:
聽聽聽聽聽聽聽聽 1掳) No es posible que una sociedad decida permanecer en un estado de subsistencia por todo su desarrollo, cuando el resto de su regi贸n se encuentra comprendida en una econom铆a de mercado; y
聽聽聽聽聽聽聽聽 2掳) El beneficio de la Yerba era sumamente duro, tanto para el pe贸n que part铆a para los yerbales, as铆 como para el comerciante que deb铆a sostenerse varios meses, sin el movimiento de su capital.
聽聽聽聽聽聽聽聽 La econom铆a en el Paraguay se basaba en un sistema monetario establecido en especies a pesar de que formaba parte ya de un imperio colonial en el predominaba la econom铆a monetaria. Romano afirma que ambos tipos de econom铆a no son excluyentes, as铆 "...incluso en el nivel del Estado, cuya vida est谩 totalmente monetizada, hay infiltraciones de econom铆a natural, tambi茅n es verdad que hay infiltraciones m谩s o menos grandes de la econom铆a monetaria en el sector natural. Del mismo modo se constata que en el nivel del gran comercio existe la pr谩ctica del trueque...".
聽聽聽聽聽聽聽聽 En s铆ntesis, los beneficiarios de este sistema fueron los comerciantes del puerto de Buenos Aires, a pesar de la inserci贸n del Paraguay en la econom铆a monetaria a fines del siglo XVIII, afirmaba F茅lix de Azara que "...en estos 煤ltimos a帽os, en que ha salido de la nada esta provincia, se han enriquecido bastantes comerciantes paraguayos que detienen los fondos en el pa铆s, todav铆a la mayor parte del comercio los saca de Buenos Aires, cuyos comerciantes se llevan casi toda la utilidad...".
聽聽聽聽聽聽聽聽 El historiador argentino Carlos Mayo, en una conferencia ratifica la afirmaci贸n de Azara que a los pulperos de Buenos Aires, que se dedicaban a la venta al menudeo, "...la yerba dejaba un 90% de ganancia...".
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聽聽聽聽聽聽聽聽 LA SITUACI脫N DEMOGR脕FICA
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聽聽聽聽聽聽聽聽 El Paraguay a fines del siglo XVII, ten铆a una poblaci贸n de 38.666 habitantes de los cuales seg煤n el censo de Fray Faustino de las Casas, 27.806 habitantes viv铆an en los Pueblos de Indios y 10.860, viv铆an en los denominados Pueblos de Espa帽oles.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Por lo tanto la poblaci贸n en su gran mayor铆a estaba compuesta por ind铆genas, de los cuales una gran parte no estaba sometida a la Encomienda por estar viviendo en una reducci贸n jesuita. Sostiene el historiador Ignacio Telesca que entre los a帽os 1682 y 1726 la poblaci贸n ind铆gena encomendada disminuy贸 un 50% es decir de 11.253 ind铆genas a tan s贸lo 6.748. Esa disminuci贸n tan marcada se deb铆a principalmente a que para la extracci贸n de la yerba mate los asuncenos deb铆an enviar a los ind铆genas hasta los yerbales naturales del Caaguaz煤 y otras regiones distantes a 200 leguas de la ciudad, adem谩s de las condiciones de vida en el monte y el r茅gimen de trabajo de explotaci贸n al que eran sometidos los ind铆genas provocaba una elevaba tasa de mortalidad, sumada a la fuga que hac铆an hacia "las Provincias de Abajo" para verse liberados de tan lamentables condiciones de vida.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Es en dicho contexto demogr谩fico, en el cual estalla la Revoluci贸n de los Comuneros en 1721, con una escasez de mano de obra ind铆gena que fuera utilizada por los vecinos de Asunci贸n, en especial por los m谩s ricos y poderosos de la ciudad, que en su gran mayor铆a integraban el Cabildo.
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Gobernadores del Paraguay 谩ntes de la Revoluci贸n de los Comuneros聽
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CAP脥TULO III
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ESTALLA LA REVOLUCI脫N
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LA DESTITUCI脫N DE REYES BALMACEDA
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聽聽聽聽聽聽聽聽 El juez pesquisidor Jos茅 de Antequera y Castro lleg贸 a Asunci贸n el 23 de julio de 1721. Una vez en la ciudad, se dispuso a iniciar el Sumario para comprobar si eran ciertos o no los cargos contra Reyes Balmaceda.
聽聽聽聽聽聽聽聽 A fines de agosto de 1721, se iniciaron las declaraciones logrando el sector denunciante que los partidarios de Reyes Balmaceda y el mismo no se encontrasen en la ciudad de Asunci贸n, con el fin de evitar que amenacen a los testigos que declararon ante el Juez Pesquisidor.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Al respecto escribi贸 Lozano, que influenciado por los acusadores del gobernador fueron estos:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "...los que dispusieron la pesquisa a su modo, luego que el Juez empez贸 a desenvolver la tela de los cap铆tulos contra el Gobernador. Este noticiado ya de todo, por no dar lugar a sus 茅mulos, con su ausencia a que m谩s libremente le calumniasen y a que le malquistasen con el juez trat贸 de volverse cuanto antes a la Asunci贸n, pero era ya tard铆o el remedio, porque sus enemigos estaban totalmente apoderados de Antequera, en quien experiment贸 en su recibimiento ciertos desaires, que al otro d铆a de su llegada le suspendi贸 de su gobierno, y mand贸 salir desterrado a un pueblo de indios llamado San Lorenzo de los Altos, que dista diecis茅is leguas de la ciudad."
聽聽聽聽聽聽聽聽 Sigue relatando Lozano que:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "Justo era este destierro y necesario para la libertad de los testigos que se hab铆an de examinar en la pesquisa, pero los 茅mulos del gobernador le miraron como triunfo porque, les parec铆a dejarles due帽o del campo a que no tendr铆a poder para volver, y con este principio favorable a sus designios corrieron m谩s libres a su venganza, estimulando a los testigos, no sin aprobaci贸n del juez a que declarasen cuanto deseasen, fuese verdad o mentira."
聽聽聽聽聽聽聽聽 Tras tomar las declaraciones que en su gran mayor铆a confirmaban los cargos en contra del gobernador, Antequera y Castro redact贸 un Memorial en el cual se confirmaban los cargos levantados por los miembros del Cabildo Asunceno.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En virtud de sus instrucciones, Antequera se present贸 al Cabildo de Asunci贸n el 14 de septiembre de 1721 con un pliego cerrado entregado por la Audiencia que deb铆a ser abierto en caso de que se comprueben los cargos en contra de Reyes Balmaceda. El Pliego cerrado designaba como Gobernador del Paraguay al propio Jos茅 de Antequera y Castro y le autorizaba a juzgar a su antecesor por los delitos cometidos.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Seg煤n Lozano, Antequera deb铆a esperar a que Reyes Balmaceda concluya su quinquenio en 1722 para asumir como gobernador, pero que decidi贸 asumir el cargo inmediatamente para lo cual:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "convoc贸 el Cabildo a hora incompetente y en d铆a feriado, pues era domingo 14 de septiembre, que tanto deb铆a importar su recibimiento y tan grave peligro conceb铆a su ambici贸n en la tardanza que no quiso diferir esta diligencia al d铆a siguiente. Propuso a los capitulares que los delitos probados a don Diego de los Reyes le hac铆an indigno del gobierno, y sab铆a bien que a la mayor parte no desagradaba la pl谩tica, con que siendo forzoso declararle incurso en la pena de privaci贸n, era tiempo de que tuviese efecto en su misma persona la merced que le hacia la real audiencia de que le recibiesen para su gobernador y capit谩n general de la Provincia, reteniendo tambi茅n el empleo de juez pesquisidor."
聽聽聽聽聽聽聽聽 Notificado Reyes Balmaceda de la situaci贸n, se resisti贸 argumentando que una de las Leyes de Indias, prohib铆a al juez pesquisidor suceder en el gobierno de su pesquisado. Pero pese a esa resistencia jur铆dica, Reyes fue obligado a entregar el bast贸n de mando.
聽聽聽聽聽聽聽聽 As铆 que, afirma Lozano, Reyes violentamente, entreg贸 el bast贸n y se dio a prisi贸n, tray茅ndole a la ciudad y se帽al谩ndole su casa por c谩rcel, que no fue entonces poca piedad, si se atiende a lo que paso despu茅s. Pusole guardia de soldados, sin permitirle comunicaci贸n alguna fuera de sus dom茅sticos, sino la del que le se帽al贸 por su procurador, pero con poca o ninguna inteligencia en las materias. Prosigui贸 el proceso contra el pobre Reyes, que absolutamente se hallaba indefenso y sus contrarios cada vez m谩s validos y orgullosos.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Seg煤n escribi贸 Antequera, remiti贸 a Diego de Reyes Balmaceda preso a su morada en cumplimiento de las instrucciones de la propia Audiencia de Charcas.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El 15 de abril de 1722, Diego de los Reyes Balmaceda huye de su prisi贸n domiciliaria, "...resolvi贸 a disfrazarse y salir de noche como que fuese otra persona dom茅stica por entre los soldados que quiz谩 se dejaron corromper con dones para hacer la vista gorda; aunque de ello nunca se tuvo sospecha. En conclusi贸n, Reyes sin impedimento pas贸 por entre los guardas, que o no le conocieron o disimularon conocerle y encamin谩ndose a donde de antemano tenia prevenidos caballos, procur贸 con toda diligencia alejarse por caminos extraviados bien conocidos de sus gu铆as a un lugar seguro."
聽聽聽聽聽聽聽聽 Reyes Balmaceda se refugi贸 en los Pueblos de las Misiones administrados por los Jesuitas, y de all铆 pensaba trasladarse hasta Buenos Aires, con el fin de viajar a Espa帽a para exponer su caso ante el propio rey, cuando recibi贸 la provisi贸n real firmado por el Arzobispo Virrey Fray Diego de Morcillo de fecha 26 de febrero de 1722, por la cual le autorizaba a continuar su mandato hasta completar el quinquenio.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Entonces Reyes Balmaceda decidi贸 regresar al Paraguay, y en el pueblo de Candelaria se hizo reconocer como gobernador, y remiti贸 una carta al Cabildo de Asunci贸n a los efectos de que se le reconozca y se le devuelva su mando el 16 de septiembre de 1722.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Diego de los Reyes Balmaceda avanz贸 hacia el Paraguay, llegando a la Tabapy -la actual Roque Gonz谩lez- donde los Dominicos pose铆an una estancia. Hasta all铆 fue un grupo armado encabezado por Ram贸n de las Llanas junto con el Alcalde de la Santa Hermandad -la polic铆a de caminos de la 茅poca- Jos茅 de Areco.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Reyes huy贸 pues fue avisado por el cura de Yaguar贸n don Jos茅 Caballero Baz谩n que la partida de las Llanas iba para apresarlo.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Tras su huida fueron detenidos y conducidos a Asunci贸n el hijo de Reyes el di谩cono Agust铆n de los Reyes y el cura Jos茅 Caballero Baz谩n. Al respecto de esta detenci贸n, escribi贸 Antequera al Obispo Palos, que el citado Caballero fue "... uno de los que m谩s conmovieron y perturbaron esa Provincia", en otro punto dice del mismo que "fue uno de los principales motores de los alborotos, inquietudes y desasosiegos de esa Provincia, y alteraci贸n de su paz p煤blica", por lo que fue sumariado, adem谩s el Protector de naturales lo acus贸 de mala administraci贸n de los bienes del pueblo de Yaguar贸n en donde ejerci贸 como cura y administrador por cerca de diez a帽os.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Con respecto a la detenci贸n del hijo de Reyes, Antequera escribi贸 que en primer lugar la partida comandada por Areco ten铆a por prop贸sito "noticiar, como queda ha dicho a Don Diego de los reyes, el Decreto que entrase en esa Ciudad sin estrepito de armas que tra铆a consigo, ni sublevar la Provincia, se hizo preciso que acompa帽ase a ese acto judicial la escolta del capit谩n de caballos, que era entonces don Ram贸n de las Llanas, con algunos soldados de los suyos".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Sigue sosteniendo Antequera que llegados a Tabapy las carretas y dem谩s enseres que acompa帽aban a Reyes fueron confiscados y que para no dejar varado a Agust铆n de los Reyes se lo condujo a Asunci贸n. Posteriormente las carretas y dem谩s enseres confiscados fueron entregados al padre Francisco Plaza, quien era Procurador de los Pueblos de las Misiones, pues justific贸 que le pertenec铆an dichos bienes.
聽聽聽聽聽聽聽聽 De esa forma conclu铆a el primer a帽o del gobierno de Antequera y Castro.
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Fray Diego Morcillo, Virrey del Per煤
聽聽聽聽聽聽聽聽 EL GOBIERNO DE JOS脡 DE ANTEQUERA Y CASTRO
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聽聽聽聽聽聽聽聽 El gobierno de Antequera y Castro al igual que el de sus antecesores procedi贸 a repartir ind铆genas en Encomienda y a dar mercedes de tierras a sus partidarios.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En ese sentido, informa el doctor Telesca que Antequera otorg贸 un total de 15 mercedes de tierras, de las cuales trece fueron para miembros de la elite con rango militar, una para un cl茅rigo y una para el Convento de San Francisco.
聽聽聽聽聽聽聽聽 As铆 mismo se persigui贸 a los partidarios de Reyes Balmaceda, por ejemplo Jos茅 Delgado, quien fuera nombrado Teniente de Gobernador por el depuesto gobernador, fue apresado y mantenido en "un estrecho calabozo con tal aprieto que al cabo, consumido de miserias, acabo sus d铆as en prisi贸n". Seg煤n Lozano, "otros a煤n de los m谩s principales ciudadanos eran desterrados a los presidios, donde de la licencia de los soldados padec铆an".

聽聽聽聽聽聽聽聽 Ante las pretensiones de Reyes Balmaceda de retornar al poder, el Cabildo de Asunci贸n inst贸 al gobernador Antequera a resistir, por tal motivo tom贸 las medidas correspondientes para defender militarmente la provincia. Evidentemente que el proceso revolucionario estaba adquiriendo un nuevo cariz.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Mientras Reyes Balmaceda resid铆a en Corrientes, desde donde operaba con el fin de lograr recuperar el poder en el Paraguay, entre las medidas adoptadas fue el embargo de bienes que eran transportados hasta Asunci贸n.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Es as铆 que el gobernador Antequera y Castro orden贸 la detenci贸n de Reyes Balmaceda, el operativo comando es relatado por el capit谩n Baltasar Garc铆a Ros al Rey, en los siguientes t茅rminos:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "Sin reparar en el temerario exceso, pas贸 (Antequera) a ejecutar otro atentado no de menor consideraci贸n que los antecedentes, despachando desde la ciudad de la Asunci贸n, r铆o abajo a la de las Corrientes, que no es de su distrito, dos botes con gente y armas, comandados del referido don Ram贸n de las Llanas, y 茅stos, sin haberse dado a sentir, se ocultaron en las islas del r铆o Paran谩, que afrontan con aquella ciudad, de donde acecharon con esp铆as la posada de don Diego de los Reyes y asegurados apostaron a uno de los puertos de dicha ciudad con el mayor silencio que fue posible. Como no fueron sentidos, a deshora de la noche hicieron desembarque de m谩s de treinta soldados y ejecutaron la noche del d铆a veintiuno de agosto del a帽o pr贸ximo pasado, el hurto y robo de la persona del mencionado don Diego de los Reyes Balmaceda, y el saqueo de su casa, llev谩ndolo de la cama en pa帽os menores.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Y para conseguir su hecho y que se les abriese la puerta de la posada, usaron de otro fraude, diciendo que era correo que ven铆a del Paraguay con cartas a su Gobernador, y como esperaba las resultas del obedecimiento del despacho superior que hab铆a remitido, no dudar铆a fuese as铆, como tambi茅n porque era incre铆ble que don Jos茅 de Antequera ni otro alguno tuviesen osad铆a y atrevimiento de introducir gente y armas a horas desusadas, a profanar los fueros y privilegios de una ciudad que vive asegurada bajo de ellos robar y saquear dentro de ella vulnerando las inmunidades de que gozaba, incurriendo en enorm铆simo atentado y crimen de aleve (...) Y con tan impracticable hecho lo llevaron a la ciudad de la Asunci贸n, donde lo mantiene en la m谩s cruel prisi贸n que fuera imaginable ni cre铆ble, a no ser tan notorio en estas Provincias y constar de deposiciones de testigos oculares, teni茅ndole en un calabozo donde se prenden las gentes de la 铆nfima suerte, asegurado con grillos en un cepo y afianzado por el pecho de una pesada cadena, cerrada la puerta, privado de la comunicaci贸n y puestas guardias de sus enemigos, que fueron testigos contra este en la sumaria que don Jos茅 de Antequera le proces贸...".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Lozano describe las condiciones en las que Reyes Balmaceda estuvo preso con mayores detalles, "... un hombre de casi sesenta a帽os, sin poderse revolver en su estrecha mazmorra por lo cargado de hierros, ni alcanzar le sirviesen la bebida de la yerba del Paraguay, que quien se ha acostumbrado a ella siente m谩s su falta que la del alimento (...) llen贸se el cuerpo hasta en las mismas barbas de ciertas sabandijas que produce aquel pa铆s para ejercicio de la paciencia: ll谩mense all铆 piques, y en otras tierras c谩lidas de estas Indias niguas, que penetrando en las carnes con insufrible escozor, forman en ella bolsillas del tama帽o de un garbanzo...".
聽聽聽聽聽聽聽聽 La detenci贸n de Reyes Balmaceda se concret贸 el 21 de agosto de 1723, dicha situaci贸n provocar铆a una reacci贸n m谩s en茅rgica de las autoridades de Lima, que llevar铆a al enfrentamiento armado con los Comuneros del Paraguay.
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Gobiernos durante la Revoluci贸n Comunera
聽聽聽聽聽聽聽聽 LA REACCI脫N DEL VIRREY
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聽聽聽聽聽聽聽聽 El Virrey del Per煤, Fray Diego Morcillo, quien a su vez era Arzobispo de Lima dispuso que el teniente del Rey de la ciudad de Buenos Aires, Baltasar Garc铆a Ros se traslade hasta el Paraguay a los efectos de liberar a don Diego de los Reyes Balmaceda si consideraba conveniente reponerlo en el cargo o en su defecto asumir como gobernador e inste a Jos茅 de Antequera y Castro a que se presente ante el Virrey en Lima en un plazo no mayor a 8 meses, as铆 mismo los miembros del Cabildo que se hab铆an opuesto a reconocer la orden del Virrey de reponer a Reyes Balmaceda ser铆an penados a dos a帽os de destierro.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En cumplimiento de dicha disposici贸n se traslad贸 Garc铆a Ros, quien conoc铆a bien el Paraguay pues hab铆a ejercido como Gobernador en dicha provincia. Jur贸 su fidelidad para asumir el cargo en Buenos Aires, se traslad贸 hasta Corrientes en noviembre de 1723. Desde all铆 Garc铆a Ros escribi贸 a Antequera y al Cabildo de Asunci贸n para que le recibiesen, pero tanto el Cabildo como Antequera le solicitaron testimonios de las resoluciones del Virrey. Garc铆a Ross subi贸 hasta la desembocadura del rio Tebicuary, pero se persuadi贸 que tanto el gobernador Antequera como el Cabildo no le reconocer铆an su autoridad por lo que resolvi贸 regresar a Buenos Aires.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Baltasar Garc铆a Ros regres贸 a Buenos Aires a los efectos de conseguir los elementos necesarios para emprender una acci贸n armada contra los vecinos del Paraguay de modo a dar cumplimiento a las 贸rdenes del Virrey del Per煤. En tal sentido subi贸 por el r铆o Uruguay y desde el pueblo de Yapey煤 el 20 de junio de 1724, le escribi贸 al Padre Tom谩s Rosa, qui茅n era el Superior de las Misiones, a los efectos de que le provea 2000 ind铆genas tapes para dar cumplimiento a sus instrucciones.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Ante la expedici贸n armada de Garc铆a Ros quien organiz贸 un ej茅rcito de dos mil ind铆genas con ayuda de los Padres Jesuitas de las Misiones, el Cabildo de Asunci贸n convoca a un Cabildo Abierto es decir una reuni贸n ampliada de la que participan los vecinos m谩s importantes para adoptar la medida que corresponda ante la grave situaci贸n en la que se encontraban de mantenerse en su posici贸n o ser obligados por las armas a que se cumplan los mandatos del Virrey del Per煤.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En la resoluci贸n del Cabildo Abierto del cual participaron m谩s de cien vecinos se resolvi贸 que "No ser conveniente la reposici贸n de don Diego de los Reyes a este Gobierno, respecto de las causas que ten铆a pendientes en la Real Audiencia y de la cuenta que tenia dada este Cabildo a su Majestad y a su Alteza sobre esta materia ni que entrase al gobierno el dicho, ni otro que fuese parcial suyo, y que es no se entiendese querer mantener al que actualmente gobernaba esta Provincia, que enviando su Excelencia a un Se帽or Ministro u otro que sea independiente de estas tres Provincias, y de parcialidades, lo recibir谩n en el ejercicio de dichos cargos". Era clara la posici贸n de los vecinos asuncenos, que pretend铆an una persona imparcial a todo lo que ven铆a desarroll谩ndose desde 1721.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Ante el avance del ej茅rcito de Garc铆a Ros, el Cabildo de Asunci贸n dispuso la expulsi贸n de los Padres jesuitas de su Colegio en un plazo perentorio de 3 horas el 7 de agosto de 1724. El encargado de notificar la resoluci贸n de expulsi贸n fue el escribano Juan Ortiz de Vergara acompa帽ado de Francisco de M茅ndez Carbajal y Jos茅 de la Pe帽a conocido como el tuerto, en calidad de testigos.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Los bienes de los jesuitas quedaron bajo el cuidado del Provisor y Vicario General del obispado durante los tres a帽os y medio que estuvieron fuera de asunci贸n los miembros de la Compa帽铆a de Jes煤s. Con respecto a los sacerdotes escribi贸 "albergar贸nse aquella noche los desterrados jesuitas en una casa de campo bien inc贸moda y falta de todo, pues aun la luz anduvo tan escasa, que para rezar las v铆speras que a algunos les faltaban por no haberle dado tiempo la tropel铆a de las cosas, para pagar esa deuda, no tuvieron otra que la de una mala lamparilla de sebo, que les trajo una india compasiva (...) Al d铆a siguiente llegaron a una granja de nuestro Colegio, la cual desmantelaron sin ning煤n rubor nuestros enemigos, d谩ndola a saco y robando las cosechas de aquel a帽o, sin perdonar aun las puertas y ventanas y lo que pone horror, ni la iglesia se vio libre de la rapacidad...".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Posteriormente los padres llegaron hasta la Misiones, donde se refugiaron en los a帽os siguientes, mientras Garc铆a Ros avanzaba hacia el Paraguay.
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聽聽聽聽聽聽聽聽 LA BATALLA DE TEBICUARY
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Jos茅 de Antequera y Castro convocaba a los vecinos de Asunci贸n a resistir ante el avance de las tropas de Garc铆a Ros que estaban comandadas adem谩s por los sacerdotes jesuitas Policarpo Duffo y Antonio Ribera. El ej茅rcito de Antequera se present贸 ante el de Garc铆a Ros que se encontraba acampado a la orilla del r铆o Tebicuary junto a una Laguna en una posici贸n formidable, y dif铆cil de atacar. Garc铆a Ros segu铆a remitiendo cartas al Cabildo de Asunci贸n para que depongan las armas y cumplan con las disposiciones del Virrey.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Las tropas de Asunci贸n acamparon en las tierras de Caba帽as en la jurisdicci贸n de la actual Caapuc煤.
聽聽聽聽聽聽聽聽 La primera escaramuza entre ambos ej茅rcitos se produjo el 19 de agosto en el Paso Lorenza en donde las tropas de Asunci贸n fueron resistidas por 50 ind铆genas del ej茅rcito jesuita. Al d铆a siguiente un grupo de hombres armados comandados por Ram贸n de las Llanas, pero la operaci贸n no logr贸 su objetivo.
聽聽聽聽聽聽聽聽 La Batalla del Tebicuary se libr贸 del 25 de agosto de 1724, seg煤n relata Lozano, Baltasar Garc铆a Ros:
聽聽聽聽聽聽聽聽 ... ten铆a reservadas todav铆a en un carret贸n muchas armas, sin hab茅rselas repartido, como tampoco la p贸lvora y las municiones convenientes, como quien no pensaba pelear, o como que tuviera aplazado con sus contrarios el d铆a del combate. Al contrario Antequera dispuso muy bien aquella noche su gente. Habl贸 a los cabos de su confianza para que tuviesen prontas sus milicias, reparti贸les en suficiente cantidad p贸lvora y municiones, pues seg煤n cuenta formada por ellos mismo, no habiendo tenido otra funci贸n, gastaron en esta expedici贸n treinta y seis mil balas y seis quintales de p贸lvora."
聽聽聽聽聽聽聽聽 Las tropas provinciales tomaron desprevenidos a las tropas de Garc铆a Ros, la caballer铆a logr贸 derrotar a la desordenada infanter铆a que resisti贸 con piedras, lanzas y flechas. "Como estaban a caballo los espa帽oles se acercaban para disparar sus carabinas y ahorrando caracoles hecha la descarga se retiraban a cargar de nuevo seguros de no ser acometidos por la espalda a falta de una caballer铆a que los siguiera".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Describe Lozano la batalla que en ese sentido "... iban y ven铆an casi dos mil carabineros, abrigando en el con medio de sus l铆neas a muchos indios sus amigos, especialmente del pueblo de It谩, que ven铆an por sus auxiliares tan rebeldes como los paraguayos y se empleaban en acabar de matar a los paisanos suyos".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Ante un amague de retirada las fuerzas provinciales del Paraguay arremetieron finalmente contra las tropas del Virrey del Per煤, por lo que "juzg贸 don Baltasar por consejo m谩s acertado asegurar su persona con la fuga, seg煤n le persuadieron los mismos espa帽oles de su sequito, rog谩ndole encarecidamente no se expusiese a los ultrajes...".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Garc铆a Ros huy贸 hacia San Ignacio en donde "lleg贸 a medianoche mojado y medio muerto de fr铆o", quien al d铆a siguiente sali贸 para Corrientes.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El resultado de la batalla fue trescientos ind铆genas de las Misiones muertos as铆 como dos espa帽oles y fueron hechos prisioneros 150 ind铆genas guaran铆es, del sector de los asuncenos murieron 7 espa帽oles y varios ind铆genas de servicio totalizando 26 bajas. As铆 mismo fueron apresados los jesuitas Duffo y Ribera quienes fueron remitidos como prisioneros hasta Asunci贸n donde fueron sumariados.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Posteriormente avanza el ej茅rcito comandado por Jos茅 de Antequera hasta los Pueblos de las Misiones, primero ingresa hasta Santa Mar铆a de Fe, luego a San Ignacio, posteriormente a Santa Rosa.
聽聽聽聽聽聽聽聽 As铆 mismo fue enviado a Villarrica Ram贸n de las Llanas, para detener a Teodosio Villalba, quien fue designado por Garc铆a Ros como Teniente de Gobernador en dicha ciudad. Lleg贸 de las Llanas hasta dicha ciudad y procedi贸 a prender a Villalba y condenarlo a ser arcabuceado.
聽聽聽聽聽聽聽聽 De esta manera se libr贸 la primera batalla de la Revoluci贸n de los Comuneros, en la que salieron triunfantes las tropas convocadas por el Cabildo Asunceno y el gobernador Jos茅 de Antequera y Castro.
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聽聽聽聽聽聽聽聽 ANTEQUERA RUMBO AL ALTO PER脷
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Ante el hecho de que las fuerzas que fueron enviadas por el Virrey del Per煤 fueron derrotadas, el gobierno colonial no pod铆a admitir que una Provincia desacatase y resistiese por medio de las armas el cumplimiento de una real provisi贸n. 脥nterin llegaban los informes al respecto de la batalla del 25 de agosto de 1724, el nuevo virrey del Per煤 asum铆a el cargo Jos茅 de Arm茅ndariz, Marqu茅s de Castelfuerte.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El virrey Castelfuerte orden贸 al gobernador de Buenos Aires Bruno Mauricio de Zavala se traslade hasta Asunci贸n a los efectos de pacificar la Provincia.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Zavala organiza un ej茅rcito con los ind铆genas misioneros, formando una tropa considerable de 6.000 soldados en enero de 1725. Una de las instrucciones precisas que ten铆a Zavala era la de prender a Antequera y remitirlo a Lima a los efectos de ser procesado por sus acciones en Asunci贸n.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Zavala va avanzando a Asunci贸n, y entonces Antequera deja como teniente de Gobernador a Ram贸n de las Llanas y junto con Juan de Mena, el maestre de campo Fern谩ndez de Montiel y unas cuarenta personas m谩s decide salir de la Provincia rumbo a Charcas para rendir cuenta de sus acciones ante la Real Audiencia, pues evidentemente juzg贸 in煤til resistir ante un ej茅rcito tan poderoso como el que tra铆a Zavala.
聽聽聽聽聽聽聽聽 La comitiva de Jos茅 de Antequera y Castro se traslad贸 a C贸rdoba en donde fueron acogidos en el convento franciscano de dicha ciudad. En dicha ciudad tom贸 conocimiento de la disposici贸n del marqu茅s de Castelfuerte que lo declaraba proscripto y por lo tanto tuvo que huir de inc贸gnito hacia Charcas en octubre de 1725.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Una vez presentado ante la Audiencia, fue detenido por las tropas del Virrey junto con Juan de Mena, el capit谩n Alonso Gonz谩lez de Guzm谩n, Miguel Duarte y Tom谩s de C谩rdenas. Todos los prisioneros fueron remitidos a Lima el 8 de febrero de 1726.
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聽聽聽聽聽聽聽聽 EL GOBIERNO DE MARTIN DE BAR脷A
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Una vez en Asunci贸n, Bruno Mauricio de Zavala, procedi贸 a cumplir con su cometido por lo que design贸 como gobernador y capit谩n General del Paraguay a don Mart铆n Bar煤a quien era Teniente de Gobernador en Santa Fe.
聽聽聽聽聽聽聽聽 As铆 mismo se procedi贸 a liberar de la c谩rcel a don Diego de los Reyes Balmaceda, al respecto relata Lozano que durante una visita en su casa el Obispo junto con Bruno Mauricio de Zavala le invitaron a "pasar a Santa Fe despu茅s de reparar las fuerzas en su casa, sin permitirle demorar en la ciudad de las Corrientes, por los inconvenientes que pod铆an resultar".聽聽聽聽聽聽聽聽
聽聽聽聽聽聽聽聽 Zavala no emprendi贸 ninguna acci贸n violenta contra los Miembros de Cabildo de Asunci贸n, de hecho los capitulares escribieron una carta al rey el 7 de septiembre de 1726 en la que informaban sobre el ingreso de Zavala a la provincia para pacificarla:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "...las providencias que dio vuestro virrey Marques de Castelfuerte para la pacificaci贸n de esta Provincia han producido los efectos de paz y sosiego as铆 por el modo prudente con que procedi贸 en las ejecuciones de las ordenes dicho vuestro gobernador de Buenos Aires como por el que se halla gobernando esta provincia por despachos de dicho vuestro virrey por la independencia con que atiende y especial aplicaci贸n al beneficio de la causa p煤blica."
聽聽聽聽聽聽聽聽 En el mismo documento que consta en el Archivo General de Indias, los miembros del cabildo Asunceno informaban al rey que entre las obras que emprendi贸 Bar煤a se encontraban la reedificaci贸n de la fortaleza de San Agust铆n del Arecutacua, en la actual Emboscada as铆 como la reorganizaci贸n de las milicias a los efectos de ejercer una mejor defensa de la Provincia ante los ataques de los ind铆genas del Chaco. Entre los firmantes del memorial al rey se encontraban Antonio Ruiz de Arellano, Francisco de Rojas de Aranda, Miguel de Garay entre otros capitulares que hab铆an colaborado con Antequera en su lucha contra Reyes Balmaceda.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Bar煤a pronto se vio influenciado por los reclamos de los Comuneros, por tal motivo propuso al rey que algunos de los ind铆genas de las Misiones puedan cumplir con el servicio de encomienda a los vecinos de Asunci贸n.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Durante el gobierno de Bar煤a, seg煤n Hildegard Thomas: "la Provincia parec铆a pacificada por el espacio de 5 a帽os, este plazo debi贸 haber servido esencialmente para despertar la conciencia de la propia fuerza militar de los rangos bajos de la milicia provincial".
聽聽聽聽聽聽聽聽 El 18 de marzo de 1728 los Padres Jesuitas pudieron volver a su Colegio en la Asunci贸n, con lo cual todo parec铆a que los conflictos que hab铆an acaecido a comienzos de la d茅cada de 1720 hab铆an acabado.
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Autoridades del Cabildo Asunceno durante la Revoluci贸n Comunera

Batalla de Guayaibity

Batalla de Tabapy

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CONCLUSIONES
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Tras la represi贸n, Bruno Mauricio de Zavala dispuso el establecimiento del Puerto Preciso de Santa Fe, as铆 mismo disolvi贸 el Cabildo de Asunci贸n integr谩ndolo nuevamente. Dispuso que la Real C茅dula del 12 de septiembre de 1537, no pod铆a ser aplicada nuevamente por ser ilegal al no encontrarse en la Recopilaci贸n de las Leyes de Indias.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Tras catorce a帽os de luchas y tumultos, la vida de la Provincia del Paraguay se ver铆a sumamente afectada, en materia econ贸mica fue indudable el efecto negativo del establecimiento del Puerto Preciso en Santa Fe.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Desde el punto de vista social hubo una modificaci贸n en la poblaci贸n de la Provincia como lo se帽ala el historiador argentino Juan Carlos Garavaglia, pues en los a帽os inmediatamente posteriores a la finalizaci贸n de la Revoluci贸n, "...el 41% de los marineros de las barcas corresponde a ind铆genas de las misiones escapados de sus pueblos. Pero, si nos acercamos m谩s, la sorpresa aumenta: un n煤mero no despreciable de estos indios posee ya un apellido espa帽ol".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Esa misma idea se constata cuando Fulgencio R. Moreno afirma que en el Paraguay se produjo un incremento demogr谩fico, y que para poder observarlo:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "...cabalmente, es necesario tener en cuenta que la poblaci贸n (espa帽ola o mestizas nos referimos) no se form贸 s贸lo con el crecimiento vegetativo de su primitiva base, o de la que consideramos a principios del siglo XVII, sino tambi茅n con la incorporaci贸n constante de nuevos elementos aportados por el cruzamiento de los espa帽oles y sus hijos con las indias de sus encomiendas y de los pueblos".
聽聽聽聽聽聽聽聽 脡ste incremento poblacional apoyado con la inmigraci贸n de los ind铆genas provenientes de los pueblos de indios ya sean 茅stos de los pueblos franciscanos o principalmente de los jesu铆ticos, y el proceso de mestizajeen el que participaban, pues "el indio originario, aunque siempre renovado por motivos fiscales, es progresivamente absorbido por el mestizaje y encubre al "mestizo reciente" que m谩s tarde se integra en la sociedad blanca paraguaya". De modo a no dejar duda sobre este punto citamos a Garavaglia quien sostiene "... a medida que avanza el siglo XVIII -y que el n煤mero de indios escapados de sus pueblos aumenta en forma vertiginosa- parecer铆a percibirse a trav茅s de las fuentes una creciente alarma".
聽聽聽聽聽聽聽聽 Teniendo en cuenta el factor demogr谩fico ya sea por mestizaje se produjo un incremento de la tasa de crecimiento demogr谩fico, el establecimiento de sanciones econ贸micas al comercio que ya de por s铆 era bastante dif铆cil al ser la yerba mate el principal producto rentable con una fuerte competencia jesuita, es entendible la preocupaci贸n de las autoridades de la 茅poca en ese sentido.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Las clases sociales no ten铆an mayores diferencias en el Paraguay de fines del siglo XVIII, pues seg煤n Azara "... todos comen y visten lo mismo, suelen llamar algunos a esta provincia la tierra de los iguales (...) La pobreza del pa铆s se infiere de que hasta el a帽o de 1779 no se conoc铆a moneda". Por su parte el capit谩n Juan Francisco Aguirre en el mismo sentido sostiene que al Paraguay se le llamaba la tierra de los iguales, pues las familias ubicadas en la escala superior de la sociedad no ten铆an modo de acumular riquezas debido a la carencia de moneda met谩lica, por lo que su posici贸n se demostraba con peque帽os elementos y por sobre todo por la posesi贸n de grandes extensiones de tierra y de indios y esclavos trabajando para ellos:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "Las familias patricias se inclinan particularmente a la campa帽a; la estancia es su mayor anhelo; el caballo y el arreo su principal lucimiento. Aunque vayan descalzos no faltan espuelas de libra cada una (...) se trasciende aun entre la pobreza de sus lienzos, la nobleza de sus prosapias... ".
聽聽聽聽聽聽聽聽 En materia pol铆tica se produjo un cambio sustancial en la composici贸n de la elite capitular asuncena, los leales fueron premiados con cargos, y a partir del gobierno de Martin de Echauri se produjo el ingreso de nuevos miembros a la elite muchos de ellos provenientes de Santa Fe y de Buenos Aires.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En cuanto a lo actuado por Jos茅 de Antequera y Castro, el rey Carlos III dispuso en una revisi贸n del proceso al que fue sometido que sus actuaciones en el Paraguay durante los a帽os 1721, estaban conformes a la ley que el mismo era "un honrado y leal ministro", reivindic贸 su memoria e incluso uno de sus parientes pudo cobrar una pensi贸n a partir del 1 de abril de 1778.
聽聽聽聽聽聽聽聽 La Revoluci贸n de los Comuneros fue un proceso hist贸rico en el cual se evidenci贸 la profunda pobreza en la que viv铆an los habitantes del Paraguay en el marco de un imperio en el cual ocupaba dicho pa铆s la periferia. Los Comuneros demostraron que el acaparamiento de las tierras y de la mano de obra ind铆gena era una injusticia contra la cual se rebelaron cuando el gobernador Reyes de Balmaceda "perjudic贸" los intereses tradicionales de la elite capitular asuncena.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En ese sentido y con el transcurrir de los a帽os, sostiene Hildegard Thomas que "el com煤n fue inducido a la resistencia armada, debi贸 haberse despertado en 茅l la conciencia de su propia fuerza militar. El com煤n se levant贸 debido a una favorable constelaci贸n pol铆tica, pretendiendo participar de las decisiones del Cabildo en nombre del pueblo. A pesar de que el movimiento buscaba excluir a los grupos dominantes -regidores tradicionales y jesuitas- no estuvo orientado de manera alguna hacia una liberaci贸n del principio de dominaci贸n colonial existente".
聽聽聽聽聽聽聽聽 El triunfo de la Compa帽铆a de Jes煤s se hizo patente cuando nuevas tierras fueron ocupadas por los Misioneros en las actuales regiones del Caaguaz煤, San Pedro y Concepci贸n.
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Escudo Nobiliario de Antequera y Castro聽
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