El dictador Alfredo Stroessner se mantuvo en el poder durante largos 35 años mediante un pacto con el Partido Colorado y las Fuerzas Armadas, conocido como unidad granítica o trilogía del poder. En cuanto a las Fuerzas Armadas, todos los militares o aspirantes tenían que estar afiliados al Partido Colorado, que era, al mismo tiempo, partido de gobierno.
Pero no bastaba con la afiliación, además Stroessner impulsó una purga para expulsar a aquellos que no le fuesen fieles. Una vez depurados los jefes y oficiales políticamente desleales, aseguró que le apoyaran con ascensos y concesiones de puestos en instituciones del Estado, asignación de tierras fiscales, protección del contrabando y narcotráfico. El apoyo incondicional de las Fuerzas Armadas le dio a Stroessner respaldo armado y coercitivo para controlar y reprimir a la sociedad.