PATA DE GALLO y EGO NON SUM DIGNUS
POESÍAS DE
ELOY FARIÑA NUÑEZ
PATA DE GALLO
Húmeda, blanda, virginal, luciente,
Está la arena, al despuntar el día,
Y en el ámbito flota todavía
Un sudario de bruma transparente.
De una higuera se lanza de repente
Un gallo en agresiva gallardía,
Y, a poco de correr por la alquería
Párase y canta con clamor potente.
Y alza luego la pata en derechura
A una polla que, rauda, se apresura
A evitar el contacto masculino.
Y la posa en la arena, muelle raso,
Donde queda la imagen de su paso
Tal como un jeroglífico divino.
De: CARAS Y CARETAS, publicado en: EL MONITOR,
Asunción. 9 de enero de 1911;
José Rodríguez Alcalá.
Antología paraguaya. Asunción. 1911,
Buzó Gómez, la. ed. y 2a. ed.
Del autor: CÁRMENES. Buenos Aires, 1922.
“EGO NON SUM DIGNUS”
Adoro la poesía, pero no soy poeta.
Siento como ninguno la inspiración secreta
Que eleva el leve vuelo del verso al infinito
Y al corazón del hombre, celestial y maldito;
Pero mi voz no llega, por inefable modo,
A las fuentes profundas del insondable Todo.
El padre Homero canta con formidable acento,
Y el Olimpo sagrado se estremece en su asiento.
Virgilio una elegía sobre un sepulcro ensaya,
Y la divina Octavia recuerda y se desmaya.
Horacio entona un Carmen de pindárico brío,
y el pueblo-rey de Roma prorrumpe en coro: "Io"
Hugo pulsa su lira multiforme y sonora,
Y sale en plena noche, triunfalmente, la Aurora.
Lelian toca su flauta de argentino sonido,
Y murmuran las fuentes del dolor y el olvido.
Yo levanto mi acento, yo lamento mi pena,
Y el alma de la especie permanece serena.
Yo alzo la voz y sangre mi corazón destila,
Y el alma de las cosas permanece tranquila.
No, no, yo no soy digno de llamarme poeta.
Dante con su Grandeza mediévica, me inquieta,
La sombra de Virgilio me anonada de espanto,
La voz de Víctor Hugo torna pueril mi canto,
Ante el verso de Goethe mi lira desfallece.
Y la flauta de plata de Lelian me entristece.
¡Si no hubieran cantado magistralmente todas
Las pasiones humanas en sus eternas odas!
¡Si el hombre fuese, al menos, totalmente diverso
Y fueran menos breves los límites del verso!
Mas todas las pasiones han sido ya cantadas.
Y todas las angustias ya fueron lamentadas.
Mi dolor no es moderno, mi herida no es reciente.
Ya Safo sufrió todo maravillosamente.
El jardín de las musas está agotado y yerto.
Se han marchado los dioses y Apolo y Pan han muerto.
Me considero indiano de coronar la frente.
Con el laurel sagrado del vate y del vidente.
Pero el poeta joven que plañe su agonía
En el hondón de mi alma, comprende la poesía,
Cuando la madre llora sobre el cuerpo del hijo,
Cuando estrecha el muriente contra sí el crucifijo,
Cuando con dulce sueño duerme el niño en la cuna.
Cuando los labios se unen a la luz de la luna,
Cuando el dolor inmenso de ser hombre me agobia.
Cuando pienso en los ojos de mi primera novia,
Cuando la enamorada sonriendo se suicida,
Cuando las almas hallan deliciosa la vida,
Cuando las voluntades luchan contra el destino,
Cuando la verdad hace con pausa su camino,
Cuando el mundo prosigue su perenne carrera,
Cuando sigue avanzando la humanidad entera
Cuando el mal en la tierra sin cesar disminuye
Y con mayor justicia todo se distribuye.
Es fuerza que enmudezca, ya que cantar no puedo
Y ya que no consigo lanzar sino un remedo
De las supremas voces del gozo y la tristeza.
De: Fariña Núñez. Obra poética.
Edit. Alcándara, Asunción. 1982
Fuente: POESÍAS DEL PARAGUAY – ANTOLOGÍA DESDE SUS ORÍGENES. Realización y producción gráfica: ARAMÍ GRUPO EMPRESARIAL, Dirección de la obra: OSCAR DEL CARMEN QUEVEDO. Recopiladores y autores: RAÚL AMARAL, MARÍA BARRETO DE RAMÍREZ, AÍDA ORTÍZ DE CORONEL, ELA RAMONA SALAZAR S., RUDI TORGA/ Tel. (595-21) 373.594/ arami@rieder.net.py – Asunción/ Paraguay. 2005. 781 pp.).
POSTALES DE NUESTRO PARAGUAY ETERNO
Enlace interno recomendado al espacio de
"IMÁGENES Y POSTALES DE PARAGUAY"
(Hacer click sobre la imagen)
Vapor San Martín - Aduana de Asunción
Paraguay (Gentileza: Jorge Rubiani)