LA GUERRA CIVIL DE 1904
Por SERGIO C脕CERES MERCADO
COLECCI脫N GUERRAS Y VIOLENCIA POL脥TICA EN EL PARAGUAY
N脷MERO 8
漏 El Lector (de esta edici贸n)
Director Editorial: Pablo Le贸n Buri谩n
Coordinador Editorial: Bernardo Neri Farina
Director de la Colecci贸n: Herib Caballero Campos
Dise帽o de Tapa y Diagramaci贸n: Jorge Miranda Estigarribia
Correcci贸n: Rodolfo Insaurralde
I.S.B.N. 978-99953-1-336-4
Hecho el dep贸sito que marca la Ley 1328/98
Esta edici贸n consta de 15 mil ejemplares
Asunci贸n 鈥 Paraguay
Febrero 2013聽(103 p谩ginas)
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CONTENIDO
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Pr贸logo
Introducci贸n
CAP脥TULO I
Antecedentes
El largo camino a la revoluci贸n
La prensa empieza su juego
Hombres y armas
CAP脥TULO II
Se Inician los Combates
Sajonia versus Villarrica
El Manifiesto
El servicio sanitario del Sur. Recuerdos de Urizar
Albino Jara frente a frente con su padre
Albino, el desobediente
Otro intento de paz que fracasa
Las batallas de Ojeda e Ypyt谩. La ca铆da de Encarnaci贸n.
CAP脥TULO 3
El pacto del Pilcomayo
CRONOLOG脥A
ANEXO
Impresiones sobre la guerra de 1904
ANEXO II
Debate en el Cuartel Revolucionario
BIBLIOGRAF脥A
EL AUTOR
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PR脫LOGO
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聽聽聽聽聽聽聽聽 LA GUERRA CIVIL DE 1904, es un acontecimiento hist贸rico, que marc贸 en forma indeleble a las primeras tres d茅cadas del siglo XX en el Paraguay. En este libro escrito por Sergio C谩ceres Mercado, se puede apreciar c贸mo se fue gestando la salida del gobierno del Partido Colorado luego de que el 9 de enero de 1902, un sector importante de dicha agrupaci贸n pol铆tica haya sido desplazado del poder violentamente. Ese sector el egusquicista fue el que unido a las dos facciones liberales acord贸 conformar una "Comit茅 Revolucionario" con el fin de expulsar al sector Caballerista del poder.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Diversos intereses se fueron tejiendo para lograr dicho objetivo, que concluy贸 con el estallido del movimiento armado en agosto de 1904. Es muy evidente que adem谩s de las cuestiones internas, la disputa entre el Brasil y la Argentina por ejercer su hegemon铆a en la regi贸n constitu铆a el tel贸n de fondo del conflicto.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En el primer cap铆tulo el autor va presentando los antecedentes del conflicto, c贸mo estaba configurada la situaci贸n pol铆tica a fines del siglo XIX, en un pa铆s que a煤n no se repon铆a de los terribles efectos de la Guerra contra la Triple Alianza (1864-1870) y de las constantes inestabilidades pol铆ticas del per铆odo de Postguerra expresadas en guerras civiles, asonadas, golpes de estado y magnicidios.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En el segundo cap铆tulo va desmenuzando el desarrollo del movimiento armado desde que se organiz贸 en Buenos Aires, para luego ir avanzando en su expedici贸n en el buque SAJONIA rumbo al Paraguay. Es as铆 que el lector podr谩 vislumbrar c贸mo se sucedieron los hechos durante poco m谩s de cuatro meses en que se combati贸 en el 脩eembuc煤, en la zona de Villeta, en Concepci贸n, en Itap煤a, para que finalmente el gobierno aislado y sin recursos y armas tuviera que buscar un acuerdo muy a pesar de los viejos caudillos Caballero y Escobar quienes se opon铆an a entregar el poder en tales circunstancias.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Por 煤ltimo el autor presenta qu茅 se estableci贸 en el Pacto del Pilcomayo que se firm贸 bajo los auspicios de las representaciones diplom谩ticas del Brasil y la Argentina. Es as铆 que el Pacto del Pilcomayo tiene varias significaciones, pues con el mismo no s贸lo concluy贸 la guerra civil, sino que implic贸 la salida del Partido Colorado que gobernaba el pa铆s desde su fundaci贸n -e incluso antes de su fundaci贸n-. Adem谩s el Pacto del Pilcomayo, signific贸 el traslado de la hegemon铆a en el Paraguay de R铆o de Janeiro a Buenos Aires, pues es indudable el apoyo velado que dicho gobierno dio a los insurrectos.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Tras m谩s de cien a帽os esta obra aporta una nueva lectura de un proceso que est谩 marcado por interpretaciones sectarias e interesadas por lo cual precisaba de una visi贸n m谩s amplia que ayude a comprender su desarrollo.
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Herib Caballero Campos
聽聽聽聽聽聽聽聽 Asunci贸n, febrero de 2013
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INTRODUCCI脫N
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Dado el tradicional bipartidismo que marca m谩s de un siglo de la historia pol铆tica del Paraguay, no es tarea menor narrar el conflicto civil que enfrent贸 a principios del siglo pasado a nuestras dos principales nucleaciones pol铆ticas. M谩s aun si tenemos en cuenta que tal conflagraci贸n signific贸 la ca铆da de uno de ellos luego de tres lustros de hegemon铆a para ser testigo del ascenso del otro y sufrir su dominaci贸n por siete lustros. Decimos que no es una empresa f谩cil enfrascarse en rememorar los pormenores de la Revoluci贸n de 1904, pues a pesar de transcurridos tantos a帽os, a煤n las pasiones se encienden ante tan lejanos acontecimientos.
聽聽聽聽聽聽聽聽 La anarqu铆a pol铆tica era la enfermedad que desde la posguerra del 70 corromp铆a a la sociedad paraguaya. En 1904, la Asociaci贸n Nacional Republicana -en el poder- se enfrentaba "otra vez" al opositor Partido Liberal; y enfatizamos el "otra vez" para mostrar que tal anarqu铆a se materializaba en constantes asonadas, cuartelazos, golpes parlamentarios y todas sus correspondientes conspiraciones, ya sean entre oficialistas republicanos o entre estos contra sus opositores liberales.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Por lo tanto, la revoluci贸n de agosto de 1904 era una piedra m谩s en el accidentado camino que a tientas el pa铆s transitaba en busca de su anhelada estabilidad. Se lograr谩 el cambio de color en el poder, pero la anarqu铆a no solo seguir谩, sino que, para muchos, se acentuar谩.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Pero ya lo dijimos, toda conflagraci贸n entre compatriotas enciende pasiones. La de 1904 m谩s a煤n. Los historiadores que se han encargado de transmitirnos lo ocurrido en los cuatro meses que dur贸 la contienda civil no han podido prescindir de tal sentimiento, porque incluso algunos fueron protagonistas de la misma, o porque -como ha ocurrido no solo en el caso de nuestra historia pol铆tica sino para la historia en general del Paraguay- la simpat铆a por alguna facci贸n pol铆tica o corriente ideol贸gica ha marcado sistem谩ticamente el trabajo historiogr谩fico.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Ponemos por caso de esto 煤ltimo a Gomes Freire Esteves, cuyo libro de Historia Paraguaya sigue siendo un documento de consulta obligada para los que quieran conocer este sangriento cap铆tulo de nuestra historia. En largo apartado que dedica a la Revoluci贸n, coloca su nombre cuando enumera a los j贸venes que pelearon decididamente por la causa liberal. Esta particularidad lo lleva irremediablemente a tomar partido. Alfredo Seiferheld dice al respecto:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "Para Freire Esteves la historia era tambi茅n pol铆tica, pero aquella pol铆tica entendida por 茅l en funci贸n de una tribuna para justificar el ayer pensando en el ma帽ana. Desde luego, semejante manera de proceder ha sido frecuente en nuestros historiadores, o descriptores de hechos pasados, que al hacer historia no han dejado de hacer pol铆tica, hurgando con frecuencia en los errores ajenos antes que en sus virtudes: Es decir, la historia como un recurso para acumular puntos en contra del adversario y no a su favor. La modalidad, que no pudo ser superada en muchos tiempo, hubo necesariamente de prender en esp铆ritus apasionados como el de Gomes Freire Esteves."
聽聽聽聽聽聽聽聽 Esta digresi贸n hacia Freire Esteves sirve para mostrar lo dif铆cil que es contar desapasionadamente un hecho que enfrent贸 a facciones pol铆ticas con tan graves consecuencias. Ni 茅l, ni nadie lo ha logrado, y todos ellos -sean liberales, colorados u de otra facci贸n pol铆tica- tienen a la Teor铆a de la Historia, la Hermen茅utica Filos贸fica, la Antropolog铆a y la Epistemolog铆a, para justificar tan humano comportamiento.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Si la imparcialidad -mucho menos la neutralidad- no se pueden dar absolutamente en ning煤n caso de las ciencias sociales, y menos en la historia, valgan estas l铆neas como disculpas ante lo que viene a continuaci贸n, no sin antes aclarar que el esfuerzo por la ecuanimidad y la cr铆tica han sido mayores como lo exige la metodolog铆a.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Una vez m谩s, agradezco la confianza del doctor Herib Caballero Campos al confiarme la elaboraci贸n de uno de los vol煤menes de esta prestigiosa colecci贸n que dirige.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Tambi茅n va mi gratitud a los colegas y amigos que ayudaron con datos, referencias y bibliograf铆a: Carlos P茅rez C谩ceres, Antonio Pecci, Blas Br铆tez y, por supuesto, el mismo Herib Caballero Campos.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Agradezco a Mariel su comprensi贸n de siempre, en especial cuando la escritura me obliga a apartarme de mi familia por unas horas. A Arandu por su paciencia y a Panambi por su colaboraci贸n en el tipeado del anexo.
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CAPITULO I
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ANTECEDENTES
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Los sucesos de 1904 se dan en el marco de una inestabilidad pol铆tica que proviene desde finalizada la Guerra contra la Triple Alianza. En este sentido, la fundaci贸n del Centro Democr谩tico y del Partido Nacional Republicano, ambos en 1887, marca el posicionamiento de grupos antag贸nicos que aceptan las reglas del juego democr谩tico impuesto por la Constituci贸n de 1870 y empiezan a pugnar por los cargos electivos en el Poder Ejecutivo y en el Poder Legislativo.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Por supuesto, no es f谩cil describir la complejidad de las relaciones pol铆tico-sociales de esa coyuntura en el que el pa铆s se debat铆a por levantar cabeza luego de la debacle de la guerra. Para facilitar las cosas, nos remitiremos al hecho de que el Partido Nacional Republicano se hace con el poder bajo la poderosa gu铆a del general Bernardino Caballero. Desde ese momento, todos los periodos presidenciales encuentran una f茅rrea oposici贸n de los liberales agrupados en el Centro Democr谩tico.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Con todo, los liberales participan en cargos de primera o segunda l铆nea en el Ejecutivo y logran, mediante el voto ciudadano, esca帽os en el Parlamento. Esto indica, por un lado, un esfuerzo de parte de los republicanos por gobernar por encima de las bander铆as pol铆ticas invitando a los opositores a sumar sus talentos en el Gobierno y, por otro, el respeto a la decisi贸n popular que se manifestaba en el sufragio para los curules parlamentarios.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Por supuesto, las desavenencias y conspiraciones eran mucho m谩s poderosas que estos amagos de madurez pol铆tica que se notaban en las acciones y m谩s aun en los discursos. La "hegemon铆a colorada" lidiar谩 con varios terremotos pol铆ticos surgidos en su propio seno y, como era de esperar, de sus adversarios liberales.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Las constantes decepciones liberales en sus intentos por acceder a la Presidencia de la Rep煤blica ir谩n convenciendo a sus l铆deres y simpatizantes de que la v铆a democr谩tica les estaba vedada y de que solo un alzamiento armado los llevar铆a al ansiado poder. Esta idea era alimentada por lo que ellos consideraban una seguidilla de trampas y desmanes perpetrados por los oficialistas contra los esfuerzos civilizados de jugar el juego democr谩tico que la Constituci贸n y las otras leyes exig铆an.
聽聽聽聽聽聽聽聽 La gota que colm贸 el vaso de los liberales -simpatizantes de Juan de la Cruz Ayala (Al贸n)- se dar铆a en una balacera entre 茅stos y los colorados, durante unas votaciones por esca帽os parlamentarios en Ybycu铆. Este hecho llevar铆a a Ayala al exilio, pero dejar铆a convencidos a sus correligionarios de que el levantamiento armado era la 煤nica salida. Se lleg贸 as铆 al fat铆dico domingo 18 de octubre de 1891.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Aquel d铆a se libr贸 una batalla en pleno centro asunceno entre las huestes liberales lideradas por el mayor Eduardo Vera y los polic铆as y militares leales al presidente Juan G. Gonz谩lez. La muerte de Vera en la refriega marc贸 el inicio del fin de los complotados, que pocas horas despu茅s fueron derrotados totalmente.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Aparte de que el 18 de octubre muestra que los liberales estaban dispuestos a todos los medios para satisfacer su vocaci贸n de poder, y que es un hito que ensancha a煤n m谩s la rivalidad entre los oficialistas republicanos y los opositores liberales, no podemos dejar de mencionar a varias figuras pol铆ticas en ambos bandos que volver谩n a ser gravitantes en los sucesos de 1904. De todas ellas, es obligatorio mencionar la consolidaci贸n como l铆der republicano del Ministro de Guerra, coronel Juan B. Egusquiza.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Su decisiva actuaci贸n en la defensa del Gobierno lo llevar谩 a su ascenso a General y a la confirmaci贸n de que la confianza depositada por el presidente Gonz谩lez al sacarlo de su destacamento en Misiones y nombrarlo Ministro fue totalmente acertada.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Egusquiza r谩pidamente se ubicar谩 como l铆der de la facci贸n republicana que se opone al grupo liderado por los generales Bernardino Caballero y Patricio Escobar. Ambos grupos pugnar谩n por el poder, lo que llevar谩 a posiciones cada vez m谩s irreconciliables dentro de la Asociaci贸n Nacional Republicana, divisi贸n que ser谩 factor gravitante para su ca铆da en 1904.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El general Egusquiza no solo lograr谩 ser Presidente de la Rep煤blica en el per铆odo 1894-1898, sino que ubicar谩 a unos de sus hombres, Emilio Aceval, para el siguiente periodo constitucional (1898-1902).
聽聽聽聽聽聽聽聽 Sin embargo, los "caballeristas" (partidarios del Gral. Caballero) estaban listos para sacarse de encima a los "egusquicistas" (partidarios de Egusquiza), lo que suceder谩 el 9 de enero de 1902. Ese d铆a, luego de que el coronel Juan A. Escurra, Ministro de Guerra, apresara a Aceval y algunos de sus leales, ocurrir谩 un tremendo tiroteo entre los parlamentarios en plena sesi贸n, lo que terminar谩 con la vida del senador Facundo Insfr谩n, uno de los candidatos colorados a la Presidencia.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El vicepresidente Carvallo culmin贸 ese periodo presidencial y el coronel Escurra result贸 ganador para el siguiente. De este modo, el partido de gobierno vuelve a tener a un partidario del general Bernardino Caballero en el poder, pero al costo de una divisi贸n que ser谩 gravitante para su ca铆da final.
聽聽聽聽聽聽聽聽 La historiadora argentina Liliana Brezzo ampl铆a la visi贸n sobre el Golpe de Estado del 9 de enero:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "La defenestraci贸n de Aceval debe leerse m谩s como el resultado de antagonismos personales que como la puja entre los egusquicistas y el caballerismo. De hecho el r茅gimen Colorado mostrar铆a, tras el golpe, algunos movimientos aperturistas, como por ejemplo la decisi贸n de llenar diversos y altos cargos de la administraci贸n con j贸venes intelectuales no necesariamente alineados al caballerismo."
聽聽聽聽聽聽聽聽 Como es sabido, los azules no se quedan atr谩s en cuanto a divisiones internas se refiere. Desde su misma fundaci贸n, el Partido Liberal naci贸 con una fisura que con los a帽os se convertir谩 en dos facciones bien reconocidas por su antagonismo en lo referente a las cuestiones internas del partido y en cuanto a su accionar como oposici贸n. Por un lado, se encontraba el bando de los "C铆vicos", encabezados por el general Benigno Ferreira, y, por otro, los "Radicales", liderados por Cecilio B谩ez y Manuel Gondra. Los dos grupos cesar谩n brevemente sus hostilidades en aras de un fin prioritario: sacar a los colorados del poder.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Tenemos as铆 al partido de oposici贸n unido en su vocaci贸n de poder y al partido oficialista dividido, donde uno de los bandos fue desplazado y se siente traicionado. Para colmo, estos 煤ltimos cuando fueron gobierno lograron un acercamiento con los liberales al darles puestos claves. As铆 que se puede decir que hab铆a una empat铆a entre los egusquicistas y los liberales.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El escenario para la revoluci贸n estaba listo.
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聽聽聽聽聽聽聽聽 EL LARGO CAMINO A LA REVOLUCI脫N
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Los historiadores liberales ven en a la Guerra Civil de 1904 el ascenso de una generaci贸n de l铆deres que quer铆an llevar las riendas de la naci贸n hacia rumbos distintos a los que hasta ese momento llevaban los gobernantes colorados. Entienden la contienda como un recambio, no solo de orientaci贸n pol铆tica sino generacional.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Un signo de la avidez con que el pueblo ped铆a l铆deres nuevos es la bienvenida multitudinaria que recibi贸 en mayo de 1902 el doctor Cecilio B谩ez proveniente de M茅xico, donde estuvo representando al pa铆s en un encuentro internacional. El intelectual y fundador del Partido Liberal se hab铆a consolidado como un pol铆tico de aguda inteligencia, y era visto como un caudillo natural por muchos paraguayos.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El historiador y pol铆tico liberal Justo Prieto juzga as铆 la figura del intelectual:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "Cecilio B谩ez fue el exponente doctrinario del movimiento. Con su verbo apasionado y l贸gico a su vez, revel贸 que en la efervescencia hab铆a un problema de cultura, al mismo tiempo que pol铆tico. Los abogados reci茅n egresados estaban frente a los viejos cuarteles sectarios, como dos mundos en pugna. Los flamantes militares reci茅n llegados del extranjero tomaron contacto con aqu茅llos en las filas de la Guardia Nacional. As铆 se produjo la revoluci贸n de 1904 que es fin y comienzo de ciclos vitales de la nacionalidad paraguaya."
聽聽聽聽聽聽聽聽 De parte de los C铆vicos liberales, resurg铆a la figura del general Benigno Ferreira, quien volvi贸 de su destierro gracias a la amnist铆a impuesta por Egusquiza hacia los que fueron protagonistas de la revoluci贸n de 1874.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Ferreira y B谩ez, c铆vico y radical respectivamente, comprendieron junto a muchos otros prominentes liberales que la uni贸n era fundamental para poder enfrentarse al Partido Colorado. Ten铆an a su favor el descontento de los republicanos egusquicistas y el rechazo al caballerismo representado por el presidente Escurra. El historiador estadounidense Harris Gaylord Warren explica:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "Escurra carec铆a de seguidores convencidos y leales porque el descontento con el caballerismo ten铆a demasiada difusi贸n y fuerza. Hasta los hijos de Caballero y Escobar aborrec铆an el fraude, la corrupci贸n, la incompetencia y la c铆nica indiferencia hacia el bienestar p煤blico, caracter铆sticas del caballerismo. La propuesta de Egusquiza hab铆a tenido buena recepci贸n, y muchos colorados se sent铆an dispuestos a cooperar con los liberales para derribar el r茅gimen."
聽聽聽聽聽聽聽聽 Por su parte, Gomes Freire Esteves dice: "Los hombres del gobierno derrocado el 9 de enero, en primer t茅rmino, y luego varios contribuyentes espont谩neos, se ofrecieron al general Ferreira para financiar el movimiento".
聽聽聽聽聽聽聽聽 En secreto, se conform贸 el "Comit茅 Revolucionario". Estuvo compuesto por el general Benigno Ferreira, el doctor Cecilio B谩ez, Juan B. Gaona, Emiliano Gonz谩lez Navero, Emilio Aceval, Guillermo de los R铆os y Francisco Campos. Estos tres 煤ltimos fueron los primeros y principales contribuyentes, raz贸n por la cual De los R铆os y Campos fueron nombrados tesoreros del comit茅. Los tesoreros no tuvieron dificultad de conseguir apoyo financiero de los ricos hacendados.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Liliana Brezzo nos ayuda a comprender mejor este contexto cuando indica que:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "Otro importante factor que produjo la debilitaci贸n del r茅gimen colorado estuvo en la p茅rdida de apoyo por parte de los grupos ganaderos y exportadores -entre los que exist铆an fuertes intereses argentinos- al verse amenazados por las medidas comerciales y fiscales adoptadas por el Poder Ejecutivo, como el aumento de las tarifas aduaneras, las restricciones al libre comercio y la expropiaci贸n de la mitad de la venta libre de las exportaciones de cuero.
聽聽聽聽聽聽聽聽 A estos grupos, se sum贸 el descontento de los asalariados urbanos, en lucha por los efectos de la inflaci贸n y la p茅rdida del valor real de sus sueldos y de los peque帽os productores campesinos, cuyos ingresos en pesos paraguayos de curso legal se esfumaban en semanas."
聽聽聽聽聽聽聽聽 El 16 de marzo de 1904, representantes de las distintas facciones complotadas firman un acta en la cual constitu铆an el Comit茅 Revolucionario.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Dicha acta rezaba cuanto sigue:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "Reunidos los subscriptos, con el prop贸sito de uniformar ideas acerca de la situaci贸n pol铆tica por la cual atraviesa el pa铆s, y atentos a que esta no puede ser m谩s desconsoladora, en presencia del orden institucional completamente subvertido con procedimientos de gobierno tendientes a buscar el logro de los prop贸sitos personales del c铆rculo imperante, que anulan el voto del ciudadano y buscan debilitar la fuerza de la opini贸n con la concesi贸n pasiva de los favores oficiales a truque de complicidad en la obra so帽ada de la usurpaci贸n permanente; desatendidos por completo los problemas vitales de Gobierno, a煤n aquellos que se rozan con las relaciones internacionales del pa铆s; con una administraci贸n desordenada que favorece el peculado y desbarata la fortuna p煤blica, que pasa a improvisar la riqueza privada de los gobernantes y de sus allegados; con planes financieros francamente hostiles a las fuerzas conservadoras del pa铆s; y con leyes de impuestos que ahogan la actividad comercial e industrial; la campa帽a abandonada al arbitrio de autoridades ignorantes y voluntariosas, ha asistido al 茅xodo de su poblaci贸n civil, no quedando sino un resto m谩s paciente, en su mayor铆a sin hogar, al que la administraci贸n, a pesar de cobrar impuestos exorbitantes no le da siquiera buenas v铆as de comunicaci贸n para el f谩cil transporte de los productos agr铆colas, contando apenas con escuelas desmanteladas, donde vegeta en el m谩s lamentable abandono una poblaci贸n escolar que, bien educada, pudiera constituir ma帽ana la fuerza de expansi贸n m谩s pudorosa de la nacionalidad, y descansando todo este conjunto de anormalidades institucionales y de negaci贸n del gobierno civilizados sobre el m谩s peligroso pretorianismo, que hace arbitro de los destinos de un pueblo democr谩tico a cualquier oscuro soldadote que tiene la fortuna de conciliarse la buena voluntad del Ej茅rcito, cuyos nobles fines se ven as铆 prostituidos, los subscriptos, repetimos, han cre铆do de su deber de aunar sus esfuerzos y voluntades y buscar la cooperaci贸n del mayor n煤mero para el fin patri贸tico de hallar remedio a estos grandes males que conducen a la nacionalidad del desquicio moral y material m谩s completo".
聽聽聽聽聽聽聽聽 En tal sentido y esperando representar todos los n煤cleos de opini贸n independiente que ans铆an la regeneraci贸n de la patria por procedimientos ajustados a la constituci贸n y las leyes, y por la consagraci贸n plena a los m谩s vitales intereses de la nacionalidad resuelve:
聽聽聽聽聽聽聽聽 Constituirse, desde esta fecha en Comit茅 pol铆tico nacional que delibere y resuelva sobre la mejor manera de llegar al fin propuesto, comisionando, desde ya, a los ciudadanos Don Emilio Aceval y Don Francisco Campos para que arbitren los recursos necesarios al efecto.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Tan pronto como se tengan reunidos los recursos, o se sepa su monto 铆ntegro, este Comit茅 resolver谩 los medios conducentes para alcanzar los pr谩cticos fines que se persiguen.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El acta la firmaban Emiliano Gonz谩lez Navero por los Radicales, Benigno Ferreira por los C铆vicos, Emilio Aceval por el egusquicismo y Francisco Campos por los comerciantes."
聽聽聽聽聽聽聽聽 Paralelamente otro comit茅 fue formado en Buenos Aires. Estaba compuesto por Manuel J. Duarte, Domingo Garc铆a Torres y El铆as Garc铆a, "cuya tarea principal era la de adquirir material militar y reclutas para la expedici贸n naval que deb铆a atacar pueblos ribere帽os paraguayos". De este tr铆o, especial menci贸n merece el Teniente de Fragata Manuel J. Duarte. Este hab铆a sido educado militarmente en Argentina y ten铆a el cargo de Secretario del Arsenal de Marina de Buenos Aires. Uno de los l铆deres c铆vicos m谩s importantes de la revoluci贸n, Adolfo R. Soler, lo convenci贸 junto al general Ferreira de unirse a la causa, en una reuni贸n efectuada en Asunci贸n.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Gomes Freire Esteves conoci贸 muy bien al Teniente de Fragata, y cuenta una historia casi m铆tica sobre la iniciaci贸n liberal y revolucionaria de Duarte por parte del legendario mayor Vera:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "Meses antes de la revoluci贸n del 91, al partir en cumplimiento de su destino, recibi贸 del futuro m谩rtir del 18 de Octubre, una consigna, que se cumplir铆a con el tiempo: la de conocer al general Ferreira, para quien le entregara una carta de presentaci贸n, y la de emplear, alguna vez, todos sus conocimientos y energ铆as para libertar a su patria."
聽聽聽聽聽聽聽聽 Veremos el papel audaz que le cupo a Duarte cuando se inici贸 el enfrentamiento armado. Mientras, en Paraguay los 谩nimos se caldeaban. En 1903, y en la efervescencia contra el gobierno, j贸venes militares reci茅n formados en el extranjero son acusados de conspirar. Se trataban, entre otros, de Alejandrino Escobar y de Albino Jara. Como el primero era hijo del general Escobar, fueron liberados por intermediaci贸n de 茅ste no sin antes prometer un buen comportamiento.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Escurra y sus leales se vieron obligados a soltarlos, no sin antes incurrir en torturas para conseguir informaci贸n de los prisioneros. Estos j贸venes oficiales son los mencionados por el historiador liberal Justo Prieto como parte fundamental de la joven generaci贸n que se un铆a a los l铆deres pol铆ticos e intelectuales en la b煤squeda de nuevos rumbos pol铆ticos por la v铆a armada.
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聽聽聽聽聽聽聽聽 LA PRENSA EMPIEZA SU JUEGO
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聽聽聽聽聽聽聽聽 La prensa liberal empez贸 su trabajo guiada por la pluma letal de Cecilio B谩ez. El ataque a la pol铆tica financiera de Escurra era sistem谩tica, lo que agitaba los 谩nimos de la gente y preparaba el ambiente para la futura contienda armada. "Aunque la cr铆tica no siempre termine en revoluci贸n, esa probabilidad era un aspecto de la vida pol铆tica que ning煤n mandatario paraguayo pod铆a ignorar", indica agudamente Warren.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En muchos casos exageradas y en otras no, lo cierto es que la prensa no perdonaba nada y mostraba un pa铆s gobernado por corruptos. Se recordaban la venta de tierras p煤blicas realizadas en 1883 y 1885, el arreglo con los tenedores de bonos ingleses de 1871 y 1872, los tratados de l铆mites con Bolivia (Decoud-Quijarro, Aceval-Tamayo, Benites-Ichazo) que cedieron mucho territorio al pa铆s vecino y por eso no fueron ratificados por el Congreso Nacional.聽聽聽
聽聽聽聽聽聽聽聽 Escurra h谩bilmente dejaba pasar las malintencionadas campa帽as en su contra difundidas por LA BASTILLA, EL GRITO DEL PUEBLO, EL ENANO y EL DIARIO. Sin embargo, en julio de 1904 el ministro del interior, Eduardo Fleitas, se vio obligado a cerrar el peri贸dico EL TRIUNFO, luego de haber sido difamado gravemente.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Warren recoge informaci贸n de los reportes que los diplom谩ticos estadounidenses, brit谩nico y brasile帽o daban sobre su impresi贸n del presidente Escurra. Todos coincid铆an en la poca cultura del mandatario, as铆 como en su escaso manejo del castellano, pues era el guaran铆 su lengua madre.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El embajador brasile帽o Iteber茅 da Cunha, escribi贸 esto que recoge la investigaci贸n medulosa de Warren:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "El coronel Escurra [...] es realmente una nulidad pol铆tica, no siendo m谩s que un hombre de los cuarteles, lo cual en este pa铆s significa una persona sin conocimiento ni preparaci贸n, pues la carrera militar todav铆a se considera despreciable en el Paraguay y, para organizar el Ej茅rcito, el Gobierno est谩 obligado a incorporar a sus filas a cualquiera que pueda enrolar. A pesar de su supina ignorancia, pues su conocimiento del espa帽ol no va m谩s all谩 de lo estrictamente necesario para atender necesidades b谩sicas, el coronel Escurra mostr贸 prudencia y car谩cter considerables en los tres a帽os y medio en que administro el Ministerio de Guerra, donde m谩s de una vez presto valiosos servicios a esta legaci贸n, hacia la cual siempre ha mostrado consideraci贸n."
聽聽聽聽聽聽聽聽 El 28 de abril, EL TRIUNFO, antiguo defensor de Escurra, se suma a los ataques con un sarc谩stico poema titulado "El Coronel".
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El Coronel Presidente
Don Antonio Escurra Juan,
es un ente depravado
grand铆simo charlat谩n
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Es un tonto declarado
y cretino singular,
individuo sin conciencia
analfabeto de atar
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Los se帽ores Bayoneta
le sostienen hasta hoy
cuando el pueblo se levante,
Esc煤rrita, 隆all谩 voy!
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Desconoce el castellano
隆es claro!, nunca lo oy贸;
y no s茅 c贸mo este hombre
de Presidente subi贸.
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Warren no deja de asombrarse ante la libertad de prensa existente bajo los gobiernos colorados, pues estos comet铆an abusos en muchos otros 谩mbitos pero, en general, dejaban en paz a los diarios enemigos. La batalla se daba, por supuesto, entre medios. As铆, una vez m谩s EL TRIUNFO ataca a Ricardo Brugada, director de LA DEMOCRACIA, prediciendo su ca铆da si se derrocaba a Escurra. Efectivamente, el prestigioso diario de Brugada dej贸 de circular cuando la revoluci贸n triunf贸.
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聽聽聽聽聽聽聽聽 HOMBRES Y ARMAS
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聽聽聽聽聽聽聽聽 El gobierno de Escurra ten铆a muy buenas relaciones con Brasil. Esto molestaba de sobremanera a los argentinos. Por eso no debe extra帽ar que Manuel Duarte consiguiera el apoyo de los rioplatenses en cuanto al reclutamiento de hombres y la adquisici贸n de pertrechos militares.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Aunque Guillermo de los R铆os fue a Europa para comprar rifles y municiones, se sabe que la mayor parte de las armas proced铆a del arsenal que comandaba Duarte en Buenos Aires. Warren da una descripci贸n del arsenal con el cual contaban:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "Los suministros comprend铆an una bater铆a de seis ca帽ones Krupp, gran cantidad de granadas de artiller铆a, 2.000 rifles Remington y muchas cajas de municiones. Algunos de los 300 reclutas eran argentinos; muchos eran paraguayos y otros, soldados de fortuna."
聽聽聽聽聽聽聽聽 El historiador paraguayo Ricardo Caballero Aquino amplia:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "Hubo incluso oficiales de la Marina de Guerra Argentina. La esposa del presidente electo del pa铆s vecino, Susana Rodr铆guez Viana de Quintana, nacida en Paraguay, aport贸 para la revoluci贸n la suma de 5.000 pesos en oro."
聽聽聽聽聽聽聽聽 No hubo apresuramientos. Todos los detalles eran cuidados. La lecci贸n del 18 de octubre de 1891 hab铆a sido aprendida. "La revoluci贸n de 1904, popularmente llamada Revoluci贸n de Agosto, fue la mejor preparada de todas las revoluciones paraguayas", opina Warren.
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CAP脥TULO II
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SE INICIAN LOS COMBATES
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聽聽聽聽聽聽聽聽 SAJONIA VERSUS VILLARRICA
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聽聽聽聽聽聽聽聽 El Consejo de Agricultura e Industrias del BANCO AGR脥COLA adquiri贸 el barco mercante SAJONIA para transportar los frutos que sal铆an del pa铆s hacia Buenos Aires. El mismo estaba anclado en la capital argentina, hasta donde fue enviado el se帽or Enrique Soler para comprarlo. El gobierno paraguayo design贸 al liberal Ildefonso Benegas como capit谩n de dicho barco y este, comprometido con la causa revolucionaria, tom贸 posesi贸n del buque y lo ancl贸 en el Canal Sur de Buenos Aires para dejarlo a disposici贸n del capit谩n Manuel Duarte.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Los revolucionarios contaban as铆 con un buque que el propio gobierno del coronel Juan A. Escurra les cedi贸 inocentemente, y lo empezaron a cargar con los pertrechos de guerra.
聽聽聽聽聽聽聽聽 "El 4 de agosto, despu茅s de anochecer, una lancha del Arsenal de Marina llev贸 a Manuel Duarte, El铆as Garc铆a, Pastor Caba帽as Saguier, Manuel Caballero y varios otros m谩s al Sajonia, Duarte asumi贸 al punto el comando del barco y se dirigi贸 a La Plata, donde embarc贸 carga y pasajeros con documentos visados por el consulado paraguayo, y emprendi贸 la traves铆a por el R铆o de la Plata."
聽聽聽聽聽聽聽聽 Junto con los militares, viene en el SAJONIA Manuel Gondra, futuro l铆der indiscutido de los liberales y que a la saz贸n resid铆a en Buenos Aires cumpliendo una misi贸n oficial que le recomendar谩 el Gobierno sobre los l铆mites con Bolivia.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El 8 de agosto, el C贸nsul paraguayo destacado en Buenos Aires, Federico Alonso, inform贸 que el SAJONIA navegaba hacia Asunci贸n en vez del destino anunciado en los papeles oficiales: Montevideo. Warren supone que Alonso se dio cuenta muy tarde de que el nav铆o iba hacia otro rumbo, lo que dio una ventaja de cuatro d铆as a los complotados; aunque tambi茅n se inclina a sospechar que la demora del C贸nsul en avisar al Gobierno en Asunci贸n fue porque tambi茅n estaba con la causa revolucionaria. Sin embargo, la primera hip贸tesis es m谩s plausible, pues si Alonso era parte del complot no deb铆a haber avisado nada.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Lo cierto es que el telegrama de Alonso puso en alerta al gobierno de Escurra. En este momento entra en acci贸n uno de los cerebros del complot y mano derecha de Benigno Ferreira, don Adolfo R. Soler. Tratando de despistar al gobierno colorado, Soler niega cualquier acusaci贸n hacia el Partido Liberal y va hasta la casa de Patricio Escobar para preguntarle si tras el levantamiento que se viene estaba detr谩s 茅l, por lo que su partido protestar铆a en茅rgicamente.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El 8 de agosto, el Congreso Nacional trata el proyecto de ley que declara el estado de sitio en todo el pa铆s. Una vez m谩s Soler se presenta repugnando tal iniciativa y declarando la total inocencia de los liberales. Lo secundaban sus aliados Carlos Isasi y Manuel Ben铆tez. Ganaban as铆 preciosas horas, y los liberales empezaban a huir de Asunci贸n para reagruparse en distintos puntos del interior del pa铆s.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Cuando el SAJONIA arriba a Empedrado el 9 de agosto, un aliado, en vez de traerles soldados como estaba pactado, informa a Duarte que en Asunci贸n ya se conoc铆an las intenciones de los sublevados y que un barco gubernista ven铆a a su encuentro para combatirlos. El factor sorpresa ya no pod铆a darse, y para no desmoralizar a su tripulaci贸n, Duarte decide no contar nada. Seg煤n Rogelio Urizar, Duarte pidi贸 a Gondra dirigir las operaciones en vista de ser el m谩s importante l铆der de la tripulaci贸n, pero 茅ste se neg贸, por lo que el capit谩n tom贸 toda la responsabilidad de las maniobras.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Efectivamente, de Asunci贸n zarpa el VILLARRICA, requisado a la empresa fluvial Mihanovich, al que le dotan de dos ca帽ones Krupp y una tripulaci贸n de 150 hombres. La salida del VILLARRICA se debi贸 a la intervenci贸n del Ministro del Interior, Eduardo Fleitas, quien pidi贸 el mando de la expedici贸n. Este se opuso a la propuesta del coronel Jos茅 Celestino Meza, de enviar dos barcos para interceptar al SAJONIA. Fleitas, de aspiraciones presidenciales, quiso sacar ventaja de una posible victoria y se embarc贸 solo llevando como jefe militar a Eugenio Alejandrino Garay, uno de los j贸venes formados en Chile (y que tendr谩 una destacada actuaci贸n en la Guerra del Chaco). Fleitas calific贸 de muchachos imberbes y sin experiencia a los tripulantes del SAJONIA, por lo que aseguraba la gloria. Subestimar al enemigo fue un craso error.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Mientras ambos buques navegan para confrontarse, en Asunci贸n circula un "Manifiesto del Partido Nacional Republicano a sus correligionarios", firmado por los generales Bernardino Caballero y Patricio Escobar. En el mismo se habla de las bondades del gobierno de Escurra, entre las que destacan el haber sido ungido pac铆ficamente como gobernante leg铆timo. Tambi茅n se destaca en el manifiesto que entre los complotados no figuraba ning煤n l铆der de la Guerra contra la Triple Alianza.
聽聽聽聽聽聽聽聽 A la desembocadura del Tebicuary lleg贸 el buque GAMO, al mando de Juan Francisco Recalde, con armas para el SAJONIA. Este 煤ltimo, llegaba al fuerte de Humait谩 el 10 de agosto y sin casi encontrar resistencia. Se dan las primeras bajas gubernistas, entre ellas el Jefe de la plaza, mayor '' Petronilo Ferreira. Mientras, el VILLARRICA se hallaba en el cercano puerto de Pilar.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El enfrentamiento es inminente y numerosa poblaci贸n se ubica en las orillas para contemplar el combate. El VILLARRICA inicia los primeros tiros de ca帽贸n sin acertar a su enemigo. El SAJONIA sufre un percance con su tim贸n y pierde el rumbo por unos instantes, mientras los gubernistas segu铆an disparando sin dar en el blanco. Por ser m谩s veloz, en 20 minutos el SAJONIA se ubica a tiro de fusiler铆a y empiezan los intercambios de balas y granadas entre ambos bandos, tomando descolocado al buque gubernista.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Como el SAJONIA era r谩pido, en 13 minutos la tripulaci贸n del VILLARRICA estaba diezmada y el capit谩n Garay, herido en varias partes, ordena la rendici贸n. El ministro Fleitas se tira al r铆o nadando hacia el Chaco pero es capturado en un naranjal en camisa y calzoncillos; tambi茅n fueron apresados Juan B. Gill -cu帽ado de Fleitas- y el teniente Venancio Alfaro. Los gubernistas tuvieron un total de 28 bajas, entre las que se contaban las del diputado Abd贸n Caballero, hijo del general Bernardino Caballero; mientras que los revolucionarios tuvieron dos muertos y seis heridos. Fue la primera victoria de los liberales, a la que seguir铆an varias otras.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El capit谩n Duarte desembarca en Pilar y organiza un hospital de sangre. Entierra a los muertos en el cementerio local. Desde Corrientes (Argentina), llega inmediatamente un contingente de la Cruz Roja para atender a los heridos. El VILLARRICA es reparado por los revolucionarios y se suma al SAJONIA rumbo a Asunci贸n bajo el mando del capit谩n de fragata El铆as Ayala. Desde ese momento los buques son rebautizados como CONSTITUCI脫N y LIBERTAD, respectivamente.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Los buques van primero aguas arriba hasta la localidad argentina de Bouvier, donde se encontraba el l铆der de la revoluci贸n, general Benigno Ferreira, con varios hombres. 脡ste es informado de los primeros 茅xitos y es invitado a subir a bordo. Se ordena entonces ir rumbo a Villeta donde otro contingente importante de aliados los esperaban.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En esta ciudad se rinden sin resistencia alguna los capitanes Carlos Goibur煤 y Manuel Rojas ante las fuerzas de Carlos Luis Isasi. Entonces, varias chatas empiezan a traer tropas desde la estancia Cai-Mboca -propiedad de Pedro Caballero- hasta Villeta para convertirla en el cuartel general de la revoluci贸n. Los contingentes que llegaban fueron organizados por el capit谩n Albino Jara.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En Pilar se hab铆a organizado un gobierno provisorio con Benigno Ferreira como Presidente y Emiliano Gonz谩lez Navero como su Vicepresidente. Tal gobierno contaba entre sus integrantes a Adolfo Riquelme, Manuel Ben铆tez, Adolfo Soler, Eduardo Schaerer y el doctor Francisco Rol贸n. Empezaron a hacer circular un peri贸dico revolucionario llamado LA CONSTITUCI脫N, que se imprim铆a en cuatro p谩ginas de tres columnas. Estos intelectuales hab铆an llegado desde la capital a bordo del recientemente bautizado PATRIA, buque apresado en la rada de Asunci贸n bajo el nombre de POLLUX.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Mientras, desde Asunci贸n se dirig铆an a Misiones el doctor Carlos Luis Isasi, el doctor Higinio Arbo, el capit谩n de caballer铆a Mart铆n R. B谩ez, el estudiante Sila Godoy y otros. Su misi贸n reclutar a m谩s soldados para la causa y ocupar militarmente la regi贸n. Iban acompa帽ados de un escuadr贸n de Caballer铆a. Las fuerzas se dividieron en un grupo a cargo de Isasi y otro a cargo de B谩ez. Cuando estaban acampando en Potrero Oculto fueron atacados por los revolucionarios, muy superiores en n煤mero. B谩ez organiza la resistencia que dura varias horas, hasta que logran huir hacia el lago Ypo谩. En la retirada es herido y tomado prisionero Godoy, quien ser谩 muerto por sus captores.
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聽聽聽聽聽聽聽聽 EL MANIFIESTO
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聽聽聽聽聽聽聽聽 El 15 de agosto aparece el Manifiesto de la Revoluci贸n, redactado por el doctor Manuel Ben铆tez. Dec铆a cuanto sigue:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "Debemos una explicaci贸n al pueblo sobre las causas y los m贸viles de la resistencia armada que ha sido necesario promover en defensa de la libertad y las instituciones.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Se trata de hechos conocidos en toda la Rep煤blica y de prop贸sitos arraigados en todos los paraguayos de bien. Basta recordar el profundo malestar que desconcierta a todo el pa铆s, lo desmoraliza y humilla, y arrastra, por fin, al pueblo a la reivindicaci贸n violenta de sus derechos.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Esta declaraci贸n no hace m谩s que repetir lo que en mil ocasiones diferentes y en mil variados tonos han dicho ya todos y cada uno de los paraguayos sanos de coraz贸n. El momento hist贸rico es solemne. De un extremo a otro de la Rep煤blica se levanta un谩nime y potente la voz de la condenaci贸n para el Gobierno que rige sus destinos.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Pareciera que la fatalidad lo condujera de error en error, de precipicio en precipicio, hacia el total hundimiento en que se debate: inepto, impotente, desprestigiado. Ni cabe una reacci贸n acaso providencial, porque los ciudadanos que lo componen carecen de la preparaci贸n necesaria, no tienen ni experiencia en los negocios de Estado, ni buena voluntad, ni patriotismo, ni honradez p煤blica ni privada. Divorciados absolutamente del pa铆s, han perdido tan por completo la confianza p煤blica, con indiferencias sin cuento, concusiones sin l铆mite, rapacidades sin medida, que su permanencia al frente del gobierno es todo un peligro, toda una verg眉enza nacional, que debe ser a todo trance extirpada.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El Paraguay ha dejado de tener un gobierno regular desde los aciagos d铆as en que oscuros motines de cuartel hollaron las instituciones fundamentales, poni茅ndolas bajo el taco de una soldadesca ignorante y desenfrenada. M谩s debe decirse que ninguno ha llegado a la degradaci贸n de los actuales gobernantes. Nunca ha habido tanta relajaci贸n en las esferas superiores del Gobierno; jam谩s menos respeto a la ley y a la dignidad personal; nunca tanto desprecio al ciudadano honesto o de pensamiento; jam谩s tanto predicamento de cortesanos insignificantes; jam谩s mayor influencia de sicarios ensoberbecidos.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Es natural y l贸gico. Los gobernantes son hombres como los dem谩s y se subordinan a las leyes que rigen las asociaciones humanas. El Presidente de la Rep煤blica tiene que rodearse de ciudadanos afines, que piensan como 茅l, hablan su lenguaje, y tienen las mismas cortas miradas. Literalmente sin instrucci贸n, sin las nociones m谩s elementales a煤n para la vida ordinaria, el coronel Juan Antonio Escurra no hace m谩s que degradar la primera magistratura, que ha escalado por sorpresa, en medio del asombro general de propios y extra帽os. Fruto de una dictadura militar apenas disfrazada, representa este gobierno por s铆 solo un retroceso de cincuenta a帽os, con otros tantos de estancamiento, y arroja al pa铆s desde su inauguraci贸n, el 25 de noviembre de 1902, al estrecho sendero que conduce indefectiblemente a la revoluci贸n armada.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Excusado de seguir paso a paso al nuevo gobierno. El pa铆s ha hecho ya el proceso de la pol铆tica que han dado en llamar del coronel Escurra. Harto conoce el negro cuadro del presente y sus siniestras proyecciones sobre el porvenir.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En el orden pol铆tico, la completa subversi贸n de las instituciones. La Constituci贸n y las leyes esclavizadas al servicio del peculado m谩s vergonzoso, del inter茅s m谩s ego铆sta y bastardo.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El sistema de gobierno completamente falseado. Anulado de hecho el sufragio. El pueblo sin acceso a los comicios. El paraguayo sin m谩s derechos que aprobar y resignarse. Apenas si se interrumpe de cuando en cuando este silencio por el palmoteo ensordecedor por la prensa asalariada.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El ciudadano desafecto, perseguido, espiado hasta en su casa. El gobierno quiere sorprender hasta las confidencias de familia. Todos los medios de los tiranos, d茅biles y cobardes.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Puerta franca, garantida con todos los recursos del poder, a los advenedizos, a los que no tienen ubicaci贸n social, intelectual, ni pol铆tica, faltos de toda noci贸n, a aquellos que forman la masa de la poblaci贸n flotante que se adhiere a los gobiernos corrompidos en las 茅pocas de decadencia. Al coronel Escurra le cupo la triste suerte de llamar de los bajos fondos de la sociedad a muchos de sus colaboradores, los unos simplemente oscuros, ignorantes, sin m谩s m茅ritos que vergonzosas coyunturas; los m谩s de malos antecedentes, envilecidos en larga vida de abyecci贸n, residuos despreciados de gobiernos anteriores. Son los mejores agentes de la concupiscencia m谩s desenfrenada que jam谩s ha azotado a la Rep煤blica.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Es acaso innecesario agregar que de estos elementos son reclutados hasta聽聽聽聽聽聽 los candidatos a senador y diputado. Es as铆 que se ha formado despu茅s de las 煤ltimas elecciones, una mayor铆a f茅rreamente regimentada en el seno de la representaci贸n nacional. Nunca ha sido m谩s profanado el recinto de las leyes. Nada es digno de respeto para la mayor铆a, ni siquiera la buena forma que en ocasiones vela las mayores iniquidades. La representaci贸n nacional convertida en mercado. No hay ejemplo de tanta degradaci贸n, de tanto envilecimiento en la accidentada historia del Paraguay.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Suprimida de hecho las c谩maras, queda el P.E. [Poder Ejecutivo] sin fiscalizaci贸n, sin contrapeso, due帽o de oprimir, atropellar, despotizar, disponer a su antojo, asignando precio a lo propio, a lo ajeno, hasta la justicia. Y todo lo hizo, de todo abus贸 y el pueblo lo sabe, conoce a sus autores y el pueblo no puede tolerarlo ya.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Inicuas leyes administrativas y financieras han dado al traste con lo poco que se ha salvado de naufragios anteriores. Agredido el comercio honrado ha recibido fuerte quebranto en sus intereses. Y frente a estas hondas perturbaciones se suceden los contratos leoninos al lado del descuartizamiento de la Caja de Conversi贸n, la muerte del Banco Agr铆cola, todo el desquicio que trae consigo el furioso marco personal.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En menos de un a帽o se suprime la administraci贸n de la deuda p煤blica, se crea la Caja de Conversi贸n, se crea tambi茅n la secci贸n comercial, se hunden ambas instituciones, luego se transforma la Caja de Conversi贸n, se suprime la secci贸n comercial, se mata el BANCO AGR脥COLA y se crea un BANCO DE ESTADO. 驴Qui茅n puede tener confianza en la seriedad de semejante gobierno? 驴No es esto jugar con todo el pa铆s?
聽聽聽聽聽聽聽聽 Solo la inconsciencia y la debilidad del Presidente de la Rep煤blica explican tanta aberraci贸n. El Poder Ejecutivo se halla en manos de una camarilla, todo un sindicato organizado para usufructuar el poder. Es el centro de la inmensa m谩quina que se ramifica en el Congreso y los Tribunales. Est谩 compuesto de ciudadanos ignorantes, de c铆nica concupiscencia o de humillante insignificaci贸n [sic].
聽聽聽聽聽聽聽聽 En este sindicato el que explota al pa铆s desde los altos cargos p煤blicos; el que crea, transforma o suprime instituciones de cr茅dito en provecho particular; el que maneja el tesoro de la naci贸n como cosa propia; el que levanta cuantiosas fortunas a expensas de las arcas fiscales, mientras el pueblo muere de hambre, el que provoca vergonzosos esc谩ndalos p煤blicos cuando los socios no pueden ponerse de acuerdo en el reparto del bot铆n.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Es este sindicato el que subvierte las instituciones, el que regimenta C谩maras, cierra los comicios, arroja al ciudadano honrado del manejo de los negocios p煤blicos; el que oprime, veja y despotiza mientras tiene, por otro lado, en completo abandono, hasta las relaciones internaciones comprometiendo la dignidad de la naci贸n, acaso su integridad territorial, por la ineptitud y la falta de patriotismo.
聽聽聽聽聽聽聽聽 驴Cu谩l es la soluci贸n a un presente lleno de ignominias con problemas que llenan de sombras el porvenir? Agotados todos los medios pac铆ficos se impone el recurso extremo de la revoluci贸n armada. El ciudadano tiene la obligaci贸n de poner su nombre, su tranquilidad, su vida para expulsar al peque帽o c铆rculo que se ha adue帽ado del poder, por el fraude, el enga帽o y la traici贸n, en d铆a de negra memoria para las instituciones.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Desde hoy, casi toda la Rep煤blica est谩 en armas. La Revoluci贸n levanta como bandera la salvaci贸n de la Patria, en sus anchos pliegues caben todos los hombres de bien, cualquiera que sea su comuni贸n partidista.
聽聽聽聽聽聽聽聽 La Revoluci贸n no es m谩s que el representante armado del pueblo paraguayo. La obra es nacional. Lucha por todos, en bien de la libertad del pueblo oprimido, vejado, despotizado y explotado por una oligarqu铆a sin escr煤pulos ni medida.
聽聽聽聽聽聽聽聽 La Revoluci贸n lamenta la violencia, pero la juzga necesaria en los actuales momentos. Ofrece la m谩s absoluta garant铆a a los que no resistan a la reivindicaci贸n de los derechos populares y promete severa lecci贸n a los que pretendan oponerse a sus irresistibles impulsos porque tiene fuerza suficiente para amparar a los unos y combatir y vencer a los otros, hasta tener completamente asegurado el restablecimiento de las instituciones, el respeto a la persona y a la propiedad de todos los habitantes.
聽聽聽聽聽聽聽聽 La Revoluci贸n hace responsable de los da帽os que cause y de la sangre que derrame, al coronel Juan Antonio Escurra y a la camarilla que le rodea,porque ellos con su ineptitud, su concupiscencia, sus atropellos y desenfrenos, han obligado al pueblo a levantarse por su honor, su libertad y sus m谩s caros intereses.
聽聽聽聽聽聽聽聽 La Revoluci贸n hace un llamado al patriotismo de todos los hombres de buena voluntad, sin exclusi贸n de partidos o afecciones pol铆ticas, considerando que todos han de contribuir a salvar a la patria del peligro. Promete restablecer las instituciones, cumplir y hacer cumplir la Constituci贸n, los tratados internacionales y las leyes de la Rep煤blica.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Entregamos la causa de la Revoluci贸n en los brazos del pueblo, y confiamos, despu茅s de Dios, era nuestros propios esfuerzos para el triunfo de la libertad.
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Villeta, agosto 15 de 1904"
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CAP脥TULO 3
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EL PACTO DEL PILCOMAYO
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Las conversaciones entre el gobierno de Escurra y los revolucionarios se dieron bajo la observaci贸n del Embajador de Brasil, Iteber茅 da Cunha, y el de Argentina, Alejandro Guesalaga. Seg煤n Warren, cada uno de estos pa铆ses pugnaba por sacar ventaja en la guerra, antes que buscar la paz desinteresadamente. La derrota de los colorados significaba una derrota para el Brasil y una victoria para Argentina. Corr铆an fuertes rumores de una anexi贸n del Paraguay a este 煤ltimo, pero se sab铆a que esto significar铆a una guerra con el Brasil. Con este trasfondo de la pol铆tica exterior se llev贸 a cabo toda la contienda, as铆 como las negociaciones que llevar铆an al cese definitivo del fuego.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Esta es la lapidaria opini贸n de Warren:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "A nivel internacional, la revoluci贸n marc贸 el triunfo de la larga lucha de la Argentina para despojar al Brasil del dominio en los asuntos del Paraguay. Por muchos a帽os, liberales importantes hab铆an vivido en la Argentina, y deb铆a esperarse su adhesi贸n a la Argentina. Todos los principales l铆deres liberales eran fuertemente pro argentinos, y ciudadanos argentinos ocupaban altos cargos en servicios del Gobierno. Un aumento de la influencia argentina, seg煤n el c贸nsul brit谩nico, ser铆a positivo para el Paraguay, como lo ser铆a 鈥榰n nuevo Gobierno inspirado por ideas m谩s modernas de civilizaci贸n y progreso鈥. Por razones no del todo comprensibles, el Brasil renunci贸 a su rol de 谩rbitro de los destinos paraguayos. Econ贸micamente, el Paraguay no justificaba una guerra entre el Brasil y la Argentina, porque el pa铆s no suministraba nada de mucha importancia a ninguno de sus poderosos vecinos. Y as铆 el triunfador de la revoluci贸n de 1904 fue la Argentina y no los liberales paraguayos."
聽聽聽聽聽聽聽聽 Seg煤n el Vicec贸nsul estadounidense de ese entonces, Waldemar de Korab, el 90% de los asuncenos simpatizaba con los revolucionarios, pero el gobierno colorado segu铆a procurando ayuda; pidi贸 a Estados Unidos y a Brasil que le env铆e material militar, pero no tuvieron suerte. Tambi茅n enviaron a Buenos Aires al Ministro de Hacienda, Antonio Sosa, con setenta mil pesos oro para que compre armamento, pero dicha suma fue 铆nfima.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Los intentos prosiguieron con el Brasil, al que pidieron ayuda militar, pero volvieron a tener una negativa como respuesta. En la desesperaci贸n, el Parlamento intent贸 sancionar un proyecto de ley que convert铆a al Paraguay en un protectorado de los Estados Unidos, para as铆 conseguir ayuda de la potencia norte帽a. Pero no se logr贸 el qu贸rum establecido. De Korab transmiti贸 esta idea a Washington, pero nunca se la tom贸 en serio.
聽聽聽聽聽聽聽聽 A estos fracasos, se debe tener en cuenta las deserciones de prominentes figuras del Gobierno que se sumaron al bando contrario. Empezando por Manuel Dom铆nguez, Vicepresidente de la Rep煤blica, as铆 como el Presidente y jueces del Tribunal Superior de justicia, senadores y diputados, el director del Colegio Nacional, el Jefe Pol铆tico de Asunci贸n, etc. Incluso el general Patricio Escobar se retir贸 a una de sus estancias luego de que su hijo Alejandrino se sumara a los rebeldes, entre otros motivos.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Warren consigna:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "La revuelta de 1904, - 鈥榣a revoluci贸n civilizadora鈥, como la llamaron algunos periodistas-, se detuvo s煤bitamente a principios de diciembre. Juan B. Gaona, presidente del Banco Mercantil, fundado por 茅l en 1891, recaud贸 30.000 pesos oro entre los comerciantes y estancieros ricos; con ese dinero disponible para la compra de armas, Ferreira pod铆a armar muchos hombres m谩s. La ca铆da de Encarnaci贸n, la brusca negativa del Brasil de suministrarle ayuda a Escurra y el 茅xito de Gaona convencieron finalmente a los obstinados colorados de que no pod铆an triunfar. Escurra comenz贸 las negociaciones directas con los rebeldes enviando a Villeta a Rufino Maz贸, presidente de la C谩mara de Diputados, para invitar a Ferreira a una conferencia."
聽聽聽聽聽聽聽聽 Maz贸 se contacta con el capit谩n Duarte, inform谩ndole que el Gobierno pensaba rendirse, pero que ped铆a se cuidasen las garant铆as prometidas y el decoro que deben guardarse en estas ocasiones. Se acuerda entonces una reuni贸n entre los principales dirigentes de ambos bandos para el 12 de diciembre, a darse en el monitor argentino EL PLATA sobre el r铆o Pilcomayo.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Ese d铆a a la ma帽ana, EL PLATA parti贸 de Asunci贸n rumbo al Pilcomayo, llevando a bordo al presidente Escurra, acompa帽ado del doctor Emilio P茅rez y de don Cayetano Carreras, adem谩s de Cunha, Guesalaga -embajadores de Brasil y Argentina, respectivamente- y otros del cuerpo diplom谩tico. El nav铆o fue escoltado por otros argentinos y brasile帽os que se encontraban en la capital paraguaya.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En el Pilcomayo aguardaban Benigno Ferreira, el capit谩n Manuel Duarte y Adolfo Soler. Las condiciones de la rendici贸n ya hab铆an sido discutidas con antelaci贸n y solo faltaba una carta del general Caballero, que fue mandada r谩pidamente a buscar por un mensajero. Se sabe que esta carta era el compromiso de Caballero de no interponerse al acto de rendici贸n, pues desde un principio este se mostr贸 reacio. Cunha convenci贸 al viejo caudillo colorado de lo desastroso que ser铆a para Asunci贸n que se librase una batalla en sus calles, pues este era el irremediable siguiente paso en la contienda. Caballero cedi贸 finalmente.
聽聽聽聽聽聽聽聽 "Ni siquiera esta vez se ha tomado en cuenta la tradicional 鈥榩ol铆tica guaran铆鈥, una pol铆tica de desconfianza y mala fe, comprendida solamente por los paraguayos, como tan bien dijera el Vizconde de R铆o Branco, de lamentada y venerada memoria", escribi贸 en la ocasi贸n Cunha a sus superiores de Itamarat铆.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Se firm贸 as铆 el tratado que estipulaba cuanto sigue:
聽聽聽聽聽聽聽聽 1) Designaci贸n de un Presidente provisorio de la Rep煤blica por los delegados de la Revoluci贸n, recayendo ella en la persona del ciudadano Juan B. Gaona.
聽聽聽聽聽聽聽聽 2) Disoluci贸n del Ej茅rcito Oficial, conservando su rango todos los oficiales regulares. Todo el equipo militar deb铆a entregarse al nuevo gobierno.
聽聽聽聽聽聽聽聽 3) Constituci贸n del gabinete con los ministros actuales del Interior, doctor Emilio P茅rez, y de justicia con Don Cayetano Carreras, y las carteras de Guerra, Relaciones Exteriores y Hacienda con figuras a ser designadas por los revolucionarios.
聽聽聽聽聽聽聽聽 4) Nombramiento del se帽or El铆as C. Garc铆a como Jefe de Polic铆a de la Capital.
聽聽聽聽聽聽聽聽 5) Renovaci贸n de la mitad cesante de las C谩maras por elecciones libres.
聽聽聽聽聽聽聽聽 6) Pago de los gastos de la Revoluci贸n, y de las deudas del gobierno derrotado, por el nuevo gobierno.
聽聽聽聽聽聽聽聽 7) Los rangos militares concedidos por los rebeldes quedaban confirmados.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Tambi茅n se estipul贸 una cl谩usula secreta en la que los colorados se compromet铆an a no participar en las elecciones para evitar conflictos. Warren, al respecto, exclama: "隆Bonitas elecciones libres!". Escurra deb铆a quedar con solo dos batallones a su disposici贸n, y una vez ocurrido esto Cunha avisar铆a a Ferreira de que el terreno estaba libre para ingresar a Asunci贸n.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Antes, en Villeta, los l铆deres revolucionarios analizaron los t茅rminos del pacto para ver si estaban conformes. Manuel Gondra, apoyado por Albino Jara, se opone al tratado de paz y recomienda tomar Asunci贸n a la fuerza. Pero una mayor铆a liderada por Manuel Franco apoy贸 que el final de la Guerra Civil sea por medio del pacto.
聽聽聽聽聽聽聽聽 En el fondo de esta disputa empieza a resucitar la divisi贸n entre c铆vicos y radicales, que estuvo siempre latente durante toda la Guerra Civil. Los c铆vicos hab铆an liderado la revoluci贸n y se sent铆an con derecho de disponer del nuevo gobierno que se estaba gestando. Adem谩s, tem铆an que los radicales enturbiar谩n con sus actos intransigentes la costosa paz lograda. Estos, sin embargo, estaban dispuestos a disputar los puestos principales. As铆, cuando se barajaron los nombres que conformar铆an el Gabinete Presidencial, los radicales proponen el nombre de Adolfo Riquelme para el Ministerio de Guerra y Marina. El Ej茅rcito del Norte deb铆a designar al titular de tal cargo, y cuando se estaba decidiendo por El铆as Ayala, interviene el comandante Duarte -conocido por no ser ni c铆vico ni radical- proponiendo mantener la uni贸n de los revolucionarios. Tal estado solo pod铆a lograrse, seg煤n 茅l, con el general Benigno Ferreira como Ministro de Guerra y Marina. El Ejercito del Norte secunda la moci贸n.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Los radicales quedar谩n m谩s conformes cuando, Emiliano Gonz谩lez Navero y Cecilio B谩ez, son propuestos en la cartera de Hacienda y Relaciones Exteriores, respectivamente.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Una vez firmado el Pacto del Pilcomayo aquel 12 de diciembre a la noche, Escurra vuelve a Asunci贸n y prepara la entrega del Gobierno. El 18 de ese mes, el general Benigno Ferreira ingresa a Asunci贸n y al d铆a siguiente, en la sesi贸n del Parlamento Nacional, Escurra presenta su renuncia como Presidente y se nombra a Juan B. Gaona Presidente Provisional para terminar el mandado de Escurra.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Warren describe la situaci贸n en las calles de Asunci贸n:
聽聽聽聽聽聽聽聽 "Los soldados comenzaron a celebrar la paz antes de cumplirse todas las formalidades. 鈥楨s com煤n ver soldados borrachos blandiendo sus sables y disparando tiros de revolver en las calles鈥, inform贸 el vicec贸nsul americano. Pero -a帽adi贸 algo desde帽osamente- aquello pod铆a esperarse de 鈥榚l estado a煤n semi b谩rbaro de las razas indo-hisp谩nicas鈥. Ferreira lleg贸 el 18 de diciembre con la flota rebelde, pero la gran celebraci贸n de la victoria se pospuso hasta el 24 de diciembre, cuando los ej茅rcitos del Norte y del Sur, con un total de unos 6.000 hombres, entraron en la capital a las 9 de la ma帽ana. El general Ferreira, seguido de todo su Estado Mayor, cabalg贸 a la cabeza de los dos ej茅rcitos, que desfilaban a lo largo de las calles ocupadas por una alegre multitud que arrojaba flores a los vencedores."
聽聽聽聽聽聽聽聽 Pocos d铆as despu茅s de la ocupaci贸n de Asunci贸n, Albino Jara protagoniza su 煤ltima sublevaci贸n en 1904. Invocando no estar de acuerdo con lo pactado en Pilcomayo, se amotina con sus hombres invocando la autoridad de Manuel Gondra. Este 煤ltimo, consultado si era cierto que apoyaba a Jara lo neg贸 categ贸ricamente, por lo que Jara fue reducido con sus hombres y el levantamiento sofocado r谩pidamente.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Concluyeron as铆 cuatro meses de una guerra civil cruenta. Ella permiti贸 la ca铆da del hegem贸nico Partido Colorado liderado por los todopoderosos generales Caballero y Escobar. Al mismo tiempo inici贸 la hegemon铆a del Partido Liberal en el Gobierno. Este partido inmediatamente romper谩 su fr谩gil uni贸n y gobernar谩 en constante anarqu铆a, protagonizada por c铆vicos y radicales, y los resentidos colorados.
聽聽聽聽聽聽聽聽 El historiador Francisco Gaona hace un resumen de lo que considera positivo de esta guerra:
聽聽聽聽聽聽聽聽 a) Ampli贸 la base econ贸mica de la Naci贸n e impuls贸, en cierta medida, el desarrollo industrial, pero favoreciendo fundamentalmente las conveniencias del capitalismo extranjero en perjuicio del desarrollo nacional.
聽聽聽聽聽聽聽聽 b) Modific贸 la composici贸n artesanal del proletariado con la incorporaci贸n de nuevas capas sociales de trabajadores que las nuevas fuentes de la producci贸n exig铆an, tales como la elaboraci贸n del tanino, el incremento del transporte, la elaboraci贸n del az煤car, etc.; pero sin introducir cambio alguno en el tratamiento de los problemas del trabajo. Se continu贸 desconociendo o ignorando "la cuesti贸n social".
聽聽聽聽聽聽聽聽 c) En el orden pol铆tico procur贸 por afirmar el liberalismo en el Paraguay. Represent贸, en este sentido, una etapa de superaci贸n frente al r茅gimen de la "gauchocracia colorada", con una mayor dosis de decencia pol铆tica.
聽聽聽聽聽聽聽聽 d) En el orden gremial, el artesanado fue desplazado de la conducci贸n de nuestro gremialismo por las nuevas capas de trabajadores incorporadas con la ampliaci贸n de las bases econ贸micas del pa铆s, tales como los obreros de las empresas del transporte, de los ingenios, de los centros yerbateros y tanineros y de la industria alimentaria.
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CRONOLOG脥A
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1891
El domingo 18 de octubre, el gobierno colorado de Gualberto G. Gonz谩lez es atacado por un grupo de liberales armados que avanzan sobre los principales cuarteles y la Central de Polic铆a. Son liderados por el mayor Vera, quien cae abatido. Los sublevados son derrotados y surge, entre los colorados, la figura del Ministro de Guerra, Juan B. Egusquiza.
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1894
Egusquiza asume la Presidencia de la Rep煤blica. Bajo su gobierno empieza un acercamiento a los liberales con el af谩n de promover la estabilidad pol铆tica. Los liberales "c铆vicos" colaboran en esto; uno de cuyos l铆deres principales, el general Benigno Ferreira, vuelve de Argentina luego de 20 a帽os de exilio. La facci贸n liberal contraria a la colaboraci贸n con los colorados son los "radicales". En el coloradismo, los contrarios al gobierno aperturista de los "egusquicistas" son los leales al general Bernardino Caballero, los "caballeristas".
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1898
Presidencia del colorado Emilio Aceval, de la l铆nea egusquicista.
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1902
El 9 de enero, Aceval es depuesto, golpe parlamentario mediante, por el Ministro de Guerra, Juan A. Escurra. El caballerismo vuelve al poder al poner en la Presidencia al vicepresidente H茅ctor Carvallo. El egusquicismo empieza a complotarse con los c铆vicos y radicales para echar al Partido Colorado del Gobierno. A fines de ese a帽o, Escurra es ungido Presidente del Paraguay.
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1904
Como parte del complot para derrocar a los colorados, la prensa empieza un ataque sistem谩tico contra los gobiernos colorados, con especial sa帽a al actual de Escurra.
16 de marzo:聽聽聽聽聽聽聽 Firma de un acta de compromiso entre representantes de las distintas facciones complotadas.
8 de agosto:聽聽聽聽聽聽聽聽 Zarpa de Buenos Aires rumbo a Asunci贸n el buque SAJONIA trayendo rebeldes armados. En Asunci贸n se decreta el estado de sitio por dos semanas.
9 de agosto:聽聽聽聽聽聽聽聽 Frente a las aguas de Pilar ocurre la primera victoria de los revolucionarios. El SAJONIA vence al VILLARRICA y es tomado prisionero el Ministro del Interior.
15 de agosto:聽聽聽聽聽聽 Aparece el Manifiesto de los revolucionarios.
16 de agosto:聽聽聽聽聽聽 Se instala en Pilar un gobierno provisorio al mando de Benigno Ferreira, que no reconoce al de Asunci贸n.
22 de agosto:聽聽聽聽聽聽 El Parlamento prorroga por un mes el estado de sitio.
28 de agosto:聽聽聽聽聽聽 Los revolucionarios toman Concepci贸n sin derramamiento de sangre mediante el Pacto de Zanja Le贸n.
14 de setiembre: San Antonio e Ytoror贸 son atacados por tropas rebeldes.
17 de octubre: Renuncia como Ministro de Guerra el general Escobar y es nombrado en su reemplazo el general Caballero. Emilio P茅rez asume como Ministro del Interior.
22 de octubre:聽聽聽聽聽 Se prorroga por un mes el estado de sitio.
Noviembre: Arriba a Villeta Rafael Barrett como corresponsal de EL TIEMPO, de Buenos Aires. R谩pidamente se adhiere a la causa revolucionaria. Solo escribir谩 un reporte para su peri贸dico.
Diciembre: Cae Encarnaci贸n, 煤ltimo de los bastiones gubernistas.
12 de diciembre: Firma del Pacto del Pilcomayo, por el cual los colorados se rinden.
18 de diciembre: Arribo de Benigno Ferreira a Asunci贸n.
19 de diciembre: El Parlamento acepta la renuncia de Escurra y nombre Presidente Provisorio a Juan B. Gaona.
24 de diciembre: Bullicioso desfile de la victoria, con Ferreira al frente de los Ej茅rcitos del Sur y del Norte.
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BIBLIOGRAFIA
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Barret, Rafael. 1990. Obras completas IV, RP - ICI, Asunci贸n.
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Warren, Harris Gaylord. 2008. Paraguay: revoluciones y finanzas, Servilibro, Asunci贸n.
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EL AUTOR
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聽聽聽聽聽聽聽聽 Naci贸 en Asunci贸n en 1972. Es Licenciado en Filosof铆a por la Universidad Nacional de Asunci贸n (UNA).
聽聽聽聽聽聽聽聽 Ha cursado la Maestr铆a en Historia por la misma casa de estudios, y actualmente elabora su tesis investigando el pensamiento filos贸fico e historiogr谩fico de Manuel Dom铆nguez.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Se dedica principalmente a la docencia de distintas materias filos贸ficas en la UNA y la Universidad Cat贸lica. Desde el 2008 dirige un curso de filosof铆a hispanoamericana y paraguaya en el Centro Cultural de Espa帽a "Juan de Salazar" junto al doctor Jos茅 Manuel Silvero. Ese mismo a帽o se incorpor贸 a la Direcci贸n de Investigaci贸n del Instituto Superior de Educaci贸n donde tambi茅n es docente y miembro del equipo editor de la revista cient铆fica KUAAPY AYVU.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Fue becario de la Red Macro de Universidades en la Universidad Nacional de C贸rdoba (Argentina) y becario del Seminario de Cr铆tica Cultural - Centro Cultural Juan de Salazar - Museo del Barro, a cargo de Ticio Escobar.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Fue periodista del diario Ultima Hora y actualmente es columnista en sus p谩ginas.
聽聽聽聽聽聽聽聽 Public贸 los art铆culos: "Adriano Irala Burgos", en EL PENSAMIENTO FILOS脫FICO LATINOAMERICANO, DEL CARIBE Y "LATINO" (M茅xico, 2009); "Hermen茅utica y democracia", en PENSAR EN LATINOAM脡RICA (Asunci贸n, 2006); "Dos intentos de filosof铆a de la historia paraguaya. Un an谩lisis comparado" en ESCRITURAS EN TR脕NSITO (Asunci贸n, 2008); "La historia paraguaya en cuesti贸n", revista KUAAPY AYVU (Asunci贸n, 2010); "El trabajo politol贸gico de Arditi en clave posmoderna", en PARAGUAY: IDEAS, REPRESENTACIONES E IMAGINARIOS (Asunci贸n, 2011).
聽聽聽聽聽聽聽聽 Fue consultor de la UNESCO para su programa "La ense帽anza de la Filosof铆a en el mundo" y de Helvetas Paraguay. Actualmente es Director del Centro de Investigaciones Filos贸ficas, instituci贸n para la cual compilar谩 las obras colectivas PENSAMIENTOS DEL BICENTENARIO y TEOR脥AS DE LA CULTURA.
UNA VISI脫N AMPLIA, M脕S ALL脕 DEL BIPARTIDISMO
El libro de hoy de la colecci贸n 鈥淕uerras y violencia pol铆tica en el Paraguay鈥, de ABC Color y El Lector, est谩 dedicado a la guerra civil de 1904, escrito por Sergio C谩ceres Mercado.
Tras m谩s de cien a帽os esta obra aporta una nueva lectura de un proceso que est谩 marcado por interpretaciones sectarias e interesadas, por lo cual precisaba de una visi贸n m谩s amplia que ayude a comprender su desarrollo.
En la introducci贸n de su libro, Sergio C谩ceres admite que, dado el tradicional bipartidismo que marca m谩s de un siglo de la historia pol铆tica del Paraguay, no es tarea menor narrar el conflicto civil que enfrent贸 a principios del siglo pasado a ambas principales nucleaciones pol铆ticas.
M谩s a煤n 鈥揳firma el autor鈥 si tenemos en cuenta que tal conflagraci贸n signific贸 la ca铆da de uno de ellos luego de tres lustros de hegemon铆a para ser testigo del ascenso del otro y sufrir su dominaci贸n por siete lustros.
鈥淒ecimos que no es una empresa f谩cil enfrascarse en rememorar los pormenores de la revoluci贸n de 1904, pues, a pesar de transcurridos tantos a帽os, a煤n las pasiones se encienden鈥, entiende C谩ceres.
Por otra parte, aquella guerra fratricida dio nuevos personajes al escenario pol铆tico nacional, como por ejemplo el entonces mayor Albino Jara, que llegar铆a m谩s tarde incluso a la presidencia de la Rep煤blica.
Su protagonismo era arrasador. Otros comandantes, como el capit谩n Duarte, no tendr铆an una vida pol铆tica destacada, pues eran militares institucionalistas que pelearon por convicci贸n. El general Benigno Ferreira fue el l铆der de toda la guerra en el bando revolucionario y llegar铆a a presidente poco tiempo despu茅s (lo derrocar铆a, justamente, Jara). Ten铆a la misma edad que Caballero y Escobar.
Fuente. Edici贸n Impresa del diario ABC COLOR
Publicado en fecha 10 de Febrero del 2013
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