Biografía
MARCELINO VALIENTE (h.).
Poeta de acendrado misticismo y de calurosa religiosidad, ha poblado con dichos temas su apretado volumen "El sembrador" en 1959.
LA MENDIGA
Pobre viejecita con rostro de aurora,
sentada a la vera del sucio camino,
tendiendo su brazo con gesto que implora
la vital limosna: es ese su sino.
Entre el torbellino del viento y el polvo
tremola en su torno sus viejos harapos,
ella nada dice, ni un gesto torvo,
¡qué lección Divina tendrán esos trapos!
Pasa un automóvil lujoso a sus ojos;
las madonas pasan envueltas en pieles:
la juventud riendo, sin ver sus abrojos,
pasa, y va soñando... ¡tejiendo laureles!
En tanto del cielo los rayos solares
flagelan sus carnes, sus carnes marchitas;
y en día de invierno las ondas polares
estrujan los huesos de la ancianita.
No importa el estío, no importa el invierno,
la mendiga sigue tendiendo su brazo,
tienen sus harapos algo de lo eterno,
¡por eso en su Nombre mendiga en el raso!